206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

72
Sobre la integración del equipo argentino. Campeonato Argentino de Ajedrez 1972. Octavo Torneo Zonal Sudame- ricano. San Pablo, 1972. Olimpíada 1972. La F.A.D.A. y el equipo nacional. Match mundial Fischer- Spassky, Reykjavik 1972. ¿Cómo se gana? Sección Problemas. Nuevo finalista argentino. ¡Reykjavik, Reykjavik! La fantasía en ajedrez. Paul Morphy, el rey del ajedrez. Tercer Memorial A. Alekhine, Moscú 1971. La transformación de ideas en los finales de estudio. NOVIEMBRE 1972 TOMO XIX N9 223 revista mensual PRECIO DE VENTA:$ 4,50

Transcript of 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

Page 1: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

Sobre la integración del equipo argentino.

Campeonato Argentino de Ajedrez 1972.

Octavo Torneo Zonal Sudame­ricano. San Pablo, 1972.

Olimpíada 1972. La F.A.D.A. y el equipo nacional.

Match mundial Fischer-Spassky, Reykjavik 1972.

¿Cómo se gana?

Sección Problemas.

Nuevo finalista argentino.

¡Reykjavik, Reykjavik!

La fantasía en ajedrez.

Paul Morphy, el rey del ajedrez.

Tercer Memorial A. Alekhine, Moscú 1971.

La transformación de ideas en los finales de estudio.

NOVIEMBRE 1972 TOMO XIX N9 223

revista mensual

PRECIO DE VENTA:$ 4,50

Page 2: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr
Page 3: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

NOVIEMBRE DE 1912 TOMO XIX NUMERO 223

AJEDREZ REVISTA MENSUAL

Asesor Técnico: NORMANDO J. IVALDI

UNA PUBLICACION DE LA EDITORIAL SOPENA ARGENTINA

Miembro de la Asociación Ar1entlDa de Editores de Revistas

Bollvar 430, 69 piso T. B. 3<1·07tl

Buenos Airea

Sobre lo Integración del Equipo Argentino En lugar aparte publicamos en este número las notas cambiadas entre

el subsecretario de deportes, señor Ernesto Cilley Hemández y el presidente de la F.A.D.A., señor Gaspar Soria, con motivo de la formación del equipo que representó a nuestro país en las Olimpíadas de Ajedrez realizadas recientemente en Yugoslavia. La lectura de ambas notas ilustrará debida­mente al lector y le permitirá formarse juicio sobre la cuestión planteada.

En el presente caso queremos considerar la enojosa situación creada con absoluta objetividad y por encima de todo personalismo.

La posición legalista de Ajedrez no es improvisada, pues tiene antece­dentes que se remontan a la primera época de la revista, diecisiete años atrás. En efecto, en septiembre de 1955, al comentar el campeonato argen­tino y la subsiguiente formación del «ranking:. de jugadores, decíamos:

cEs indudable que la facultad de excepción que se reserva la F.A.D.A. reconoce su justificativo en el interés general de que la representación de nuestro ajedrez se confíe a los mejores. Por otra parte, es evidente también que este interés deportivo no debe prevalecr hasta el punto de que resulten anulados los derechos que se conquistan sobre el terreno, y que son, en última instancia, los únicos que no pueden discutirse •.

En el número de diciembre del mismo año, en el artículo titulado: cEl campeonato y la representación argentina•, decíamos entre otras cosas:

cLos derechos que se adquieren en el tablero, es decir, participando en el campeonato, son los únicos que deben tenerse en cuenta para designar a los representantes argentinos. Esta debe ser la regla, y si se admite que pueda considerarse alguna excepción en casos muy especiales y justificados, ella será para confirmar la norma y no para negarla. El ideal deportivo es que la representación del ajedrez argentino sea lo más poderosa que se pueda; pero no debe olvidarse que la voluntad de jugar caracteriza siempre a los mejores, así como la apatía o mala disposición para la lucha, puede ser el contrapeso que anule toda superioridad •.

cHay que tener presente además -agregábamos-- que es conveniente fa­cilitar el acceso al plano superior a los nuevos valores. Justamente en este campeonato nacional ( 1955), los ajedrecistas miran con particular simpatía el comportamiento de los más jóvenes, algunos de los cuales han venido de las provincias para iniciarse en la difícil etapa del ajedrez magistral. Si el natural decaimiento de los veteranos se mira con un dejo de pena porque con ello se esfuman hazañas y años brillantes, debe tratarse de que el vacío que dejan sea ocupado por los que vienen ascendiendo con la decisión de la juventud, sin apuros pero tampoco sin demoras . .. •·

Ajedrez sigue sosteniendo la misma tesis.

Page 4: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

586 AJEDREZ NOVIEMBRE DE 1972

Campeonato Argentino de A¡edrez 1972

Retomemos la crónica del campeonato argentino del año anterior («Ajedrez», marzo 1972, página 112). En aquella oportunidad fustigamos a las autoridades competentes (incompetentes) debido a las flagrantes violaciones de reglamento cometidas. Hoy debemos tomar una ac­titud opuesta -con mucho gusto lo ha­cemos-, para elogiar a las nuevas auto­ridades de la F.A.D.A., que han sabido concretar esta prueba dentro de las as­piraciones de la mayoría de los aficio­nados (los que no gustan de «acomodos») pese a los inconvenientes que debieron soportar; los dos principales: 1) la pre­mura con que se debía actuar debido a la próxima iniciación de las Olimpíadas en Yugoslavia, y 2) el estado caótico reglamentario, administrativo y moral en que asumieron.

¿Qué significa el Campeonato Argen­tino de Ajedrez? Es ésta una pregunta que todos debemos hacernos, reconozca­mos que el ajedrez ha dejado de ser un «pasatiempo de élite»: un signo de los tiempos es que las «mejores cosas» van paulatinamente siendo accesibles para el «gran público». O sea ¿es importante o no?, y ¿para quién? ¿Es lícito que el valor que surge, después de ascender toda la escala, no pueda representar a su país por estar ocupadas ya las plazas?

¿Cómo se espera la revitalización, si no hay incentivos para la juventud? Se habla continuamente de una juventud inmersa en el vicio, el desorden, la irres­sabemos que hay otra, con otros valores: los positivos, trabajo, estudio, amor ... y

por Sergio Wavrenchuk

ponsabilidad ... protestamos formalmente -¡atención!-, en todos los órdenes los hay, que si nos referimos al ajedrez en particular es porque es nuestra función específica en la oportunidad.

¿Tenemos derecho a esperar heroici­dad? El sentido común aconseja que ha­ya un premio al final del camino; recor­demos que. . . «cuando muere la espe­ranza, muere el espíritu ... »

Un rápido pantallazo indica las nuevas condiciones: las posiciones ganadas son representativas, se han establecido pre­mios compensatorios en efectivo, viáti­cos, se ha conseguido eliminar casi to­talmente las designaciones «a dedo», etc. Si bien es cierto que hubo pequeñas irre­gularidades, no les damos mayor rele­vancia porque consideramos que fueron hechos con el buen sentido de actuar en forma positiva.

El régimen clasificatorio de acceso a los turnos finales establecía las condicio­nes que debían cumplir los aspirantes a participar en el campeonato argentino de 1972. Hablamos en tiempo pasado por­que para los años 1973, 1974 y 1975, ya se ha estructurado un reglamento con carácter experimental y uniforme, un auspicioso intento de actualización, pero esto será motivo de comentario aparte.

Las eondiciones y participantes son: a) Los cinco primeros del campeonato

argentino de 1971. Como éste fue anu­lado por la Asamblea Extraordinaria de fecha 30 de mayo, surge un problema que se subsanó según b) y d).

Page 5: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

NOVJEMBRE DE 1972 AJEDREZ 587

b) Los grandes maestros y maestros internacionales -según la F.I.D.E.-, que hayan disputado por lo menos uno de los campeonatos argentinos desde 1960. De los que se hallan en estas condicio­nes, han decidido intervenir: Samuel Schweber, Alberto Foguelman, Herman Pilnik, Héctor Rossetto, Jorge Pelikán, Ralmundo García, Jorge Rubinettl y Miguel Quinteros.

e) Los que determinen las seis zonas en que se ha dividido el país, detalle que daremos más abajo para antes mencio­nar:

d) Autorizados por resolución de fecha 72 de la Junta Directiva de la F.A.D.A 4-7-1972 de la Junta Directiva de la F.A.D.A. Y aquí está el punto candente. La anulación del anterior Campeonato Argentino podría dar lugar a intermina­bles polémicas, pues: fue anulado, pero se realizó y tuvo vigencia varios meses, esto crearía un intríngulis que sólo Da­mocles podría desatar. Entonces, la Jun­ta Directiva resolvió autorizar a Néstor Melcon (Fed. de Ajedrez de Gral. Mada­riaga), Osear Maldonado (Unión Cordo­besa de Ajedrez), y Eduardo Santero (Fed. Metropolitana), que abandonaron ese torneo en señal de protesta; y a Car­los E. Juárez, Jorge Szmetan y Roberto Debarnot (todos de la Fed. Metropolita­na), que estaban disputando el torneo zonal en Brasil en el momento de dicha invalidación.

Es necesario un párrafo para definir esta situación. ¿Cómo se debía actuar en esta emergencia? Porque es muy fácil criticar, pero no lo es tanto actuar. ¿De­bía iniciarse un interminable litigio an­tes de realizar el campeonato, para de­terminar exactamente a quienes corres­pondían derechos? ¿Debía aplicarse un criterio estricto- aunque difícilmente exacto-, en la selección, y permitir lue­go la impugnación del resultado por la ausencia de tal o cual ajedrecista, en inacabables discusiones? Nuestro crite­rio nos dicta lo siguiente: la solución, aunque irregular, es correcta desde el

punto de vista práctico, principalmente por dos razones: 1) se dio a todos la oportunidad de dirimir los derechos ta­blero por medio, que es en definitiva la verdad; 2) al estar ya reglamentados los próximos campeonatos, todos saben a qué atenerse en las próximas competencias, de manera que lo mejor que pueden ha­cer es prepararse para estar en forma para ellas. . . que los pergaminos deben desempolvarse de tanto en tanto, no sea que vaya a hacer su aparición un nuevo complejo: el de los plumeros ...

Pasemos ahora a los clasificados en los torneos zonales (punto e).

Zona l. Clasifica un jugador. Jugado en San Miguel de Tucumán

desde el 9 al 18 de junio de 1972.

Tabla de posiciones:

Herrera, Fernando (Tucumán) 3% pts. Acosta, Tomás (Salta) . . . . . . . 3% , Rodríguez, Iván (Tucumán) . . 3 , Varas, Lauro (Tucumán) . . . . 2 , Barrionuevo, Aldo (Tucumán) 1% , Aparicio, Aníbal (Salta) ....... lh ,

Se definió el primer puesto en match a dos partidas: Herrera llh, Acosta lh. Herrera no se presentó a jugar el torneo.

Zona 11. Clasifica tres jugadores. Jugado en Concordia, Entre Ríos, des­

de el 17 al 24 de junio de 1972.

Tabla de posiciones:

Casas, Fernando (Entre Ríos 7% pts. Martín, Pedro (Entre Ríos) .. 7

" Hase, Ricardo (Santa Fe) .... 6% " Luna, Julio A. (Chaco) ...... 6 " Huber, Carlos (Santa Fe) ... 5 " Zimerman, Raúl (Santa Fe) .. 4% " Rebot, Jorge A. (Entre Ríos) . 3% " Vigay, José L. (Corrientes) ... 3

Tarragona, Pedro (Entre Ríos) 1 " Vale, Gabino (Entre Ríos) ... 1 "

Los señores Tarragona y Vale fueron incluidos por haberse acordado diez par­ticipantes y estar ausentes los represen­tantes de Formosa y Misiones.

Page 6: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr
Page 7: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr
Page 8: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr
Page 9: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

NO'ItiEMBRE DE 1972 AJEDREZ 591

detenninar cuáles son los factores deter­minantes en cada momento. Esta propie­dad es privativa solamente de los gran­des del ajedrez, y aun sin la posibilidad absoluta de su dominio. En efecto, no se puede enjuiciar como inferior el plan blanco iniciado con esta jugada, no sólo porque no es demostrable sino porque ¿había algo mejor?

Si consideramos, por ejemplo, 7. C4R, las negras atacan inmediatamente el ca-ballo con 7 ...... , P4A, y se presentan tres posibilidades: a) 8. PxP a. p., CxP; 9. C(3)5C, P4D; b) 8. C6D+, AxC; 9. PxA, 0-0; 10. A4A, C3A; e) 8. C3C, C5A. Esto parecería indicar que el fac­tor importante es el C4D negro. Enton­ces ¿las blancas actuaron correctamente al eliminarlo? ¿Existe otra posibilidad? Vayamos una jugada atrás, considere­mos 6. P4A, vemos que si el caballo re­trocede a 2A o 3C no tiene luego fácil traslado, y si 6. . .... , C5A podría seguir 7. P3C, C3C; 8. P4TR; las chances pare­cen favorables, no obstante se debe aten­der todavía otros elementos posicionales, contraataque central, estructura de peo­nes, influencia de las restantes piezas, etcétera.

Lamentamos no poder resolver con cer­teza este problema, sin embargo el pro­blema existe. En este sentido el lector puede tomar parte activa.

7 •..... , PxC.

Puede verse ahora como, al desplazar­se el P3R y siendo inevitable P3D, el AD negro reasume su camino natural.

8. P4D, PxP; 9. A3D, 0-0.

Obsérvese la siguiente variante 9 ..... , A5C+; 10. R1A, P3D; 11. PxP, AxP; 12. CxP, y si ahora 0-0, son las blancas quienes tienen la mano, 13. CxC, PxC; 14. D5T.

10. 0-0, P3D!; 11. PxP, AxP; 12. CxP, D5T.

Y aquí estamos. Las blancas están obli­gadas a la desagradable P3C (si C3A si­gue D4T y A5CR).

13. P3C, D6T; 14. CxC.

Esto sólo consigue fortalecer el PD, pero esa necesario considerar la ame­naza C4R.

14 ..... , PxC; 15. D2D, A5C; 16. TR1R. A6A; 17. AlAR, D4T.

Decíamos de comparar este momento con la posición del diagrama. Vemos a las blancas con notoria merma ofensiva en la capacidad de sus alfiles, mientras las negras han mejorado ostensiblemen­te su alfil dama.

Las blancas tienen ahora la oportuni­dad de ganar un peón a costa de alejar la dama de su flanco amenazado, que es lo que hace en la partida, aceptando el desafío pues no es fácil ver cómo mejo­rarán las negras su ataque, aunque siem­pre se debe tener en cuenta el «factor olvidado». Una enseñanza de Fischer es del caso aplicar aquí. Nos referimos a la 811- partida de su match con Petrosian, jugada 26 ...... , A6A! -aconsejamos al lector revivirla («Ajedrez», diciembre de 1971, pág. 479)-, y que podríamos enun­ciar:

«Cuando los alfiles adversarios están ubicados en forma agresiva, no existien­do caballos en la defensa, deben oponer­se los propios».

En este caso la jugada sería 18. A2C. por la cual nos volcamos decididamente.

18. D3A, P3A; 19. DxPAD, TRlD; 20. D6T, TDlA; 21. T6R.

Una concepción interesante, en lugar de defender su P AD, intenta oponerse en la columna AD. En este caso tiene un inconveniente -creemos de peso-, obli­ga a mejorar una pieza adversaria; el alfil irá a ocupar una diagonal mucho más activa.

21 ...... , A4A.

Una curiosidad, obsérvese cómo los al­files negros trasladaron sus diagonales de acción: de c8-h3 y b8-h2 hacia a8-hl y a7-gl.

Page 10: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

592 AJEDREZ NOVIEMBRE DE 1972

22. T6A, D4A; 23. A3D, A5R; 24. TlAR.

Si 24. AxA sigue DxP+.

24 •..... , A:xA.

Dos razones justifican este cambio: ob­tura la diagonal de regreso de la dama, y se apropia de la columna AD con pe­ligro de penetración en séptima línea.

25. PxA, A3C; 26. TxT, TxT; 27. D5C, P4TR!!

El «factor olvidado:.. No sólo libera a la torre de la defensa de la primera lí­nea, sino que va a reemplazar al alfil de casilla blancas en su función ofensiva.

28. P4D.

Una jugada desagradable, pero era ne­cesario aminorar la presión sobre 2AR. Las debilidades que sucesivamente se van creando son consecuencia de la cons­tante iniciativa del segundo jugador.

28 •..... , P5T; 29. TlR, P6T; 30. TSR+, TxT; 31. DxT+, R2T; 32. DlR.

Las blancas deben afrontar la última dificultad, defender la primera línea y la posición de mate de su rey.

32 •.... , P4C; 33. D7R+, R3T; 34. DSA+, R4T; 35. DSR, R5C; 36. D2R+, D6A; 37. DxD+, RxD; 38. P4CD, R5R; 39. P4T, AxP; 40. AxA, R:xA; 41. P5C, R5A.

Las blancas abandonaron.

APERTURA VIENESA (Por transposición)

B. Rossetto v. F. Casas

Una posición tipo «galleta:. se produce apenas iniciada la apertura; el asunto es saber aprovechar esa situación. Rossetto lo consigue con una serie de jugadas de precisión, hasta culminar con el hermoso golpe de efecto 19. C5C!, con lo que con­sigue ventaja definitiva de posición.

l. P4R, P4R; 2. A4A, C3AR; 3. C3AD, CxP; 4. D5T, C3D; 5. A3C.

La otra alternativa es 5. DxP+, D2R; 6. DxD+, AxD; 7. A3C, C4A; 8. C3A, P3AD; 9. 0-0, P4D con juego nivelado. Rossetto elige --como es habitual en él-, la variante capaz de brindar más lucha.

5 •...•. , P3CR.

Elude la variante más aguda: 5. . ... , C3A; 6. C5C, P3CR; 7. D3A, P4A; 8. D5D, D2R; 9. CxP+, RlD; 10 CxT, P3CD.

6. DxP+, D2R; 7. P4D, C3A; 8. DxD+, AxD; 9. C5D, AlD; 10. C3AR, 0-0; 11. 0-0, R2C.

Se debía evitar la amenaza A6T com­binada con la penetración en la columna rey.

12. A4AR.

Excelente jugada de presión, anula de raíz la probable maniobra C4TD y P3AD. Desgraciadamente la situación negra no se puede resolver sacrificando un peón (el de AD), en este caso sí sería un sa­crificio, pues la mala distribución de pie­zas sería fatal. Es necesaria la postura de defender tenazmente todo el materiaL

12. . .... , C2R; 13. A5R+!

El factor ex:.. Importante jugada in­termedia que quita una casilla al rey (más adelante se apreciará la importan­cia), y anula la casilla 3AR.

13. . .... , P3AR; 14. AxC, PxA; 15. CxC, AxC; 16. mm, TlR; 17. T3R, P4CD; 18. TDlR, RlA.

PROGRESE con

el maestro internacional

ISAIAS PLECI

Clases individuales a domicilio Didáctica general

T. E. 69- 7643

Page 11: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

:r.to•.ci!.MBRE DE 1972 AJEDREZ

19. C5C!

Soberbio golpe táctico, que llega exac­tamente a tiempo para evitar la libera­ción del juego negro. Desde luego, no es difícil ahora ver la combinación, pero lo que llama la atención es la completa armonía con que se desarrolló el plan blanco.

19. . ..... , PxC; 20. T3A+, R2C; 21. T7A+, RlT.

Si R3T sería definitorio luego A8C.

22. T(l)xA, TxT; 23. TxT, P4TD; 24. P3AR.

Decisiva incursión del rey.

24 •.... , P5T; 25. A5D, TIC; 26. T8R+, R2C; 27. P3TD, P4T; 28. R2A, R2T; 29. R3R, R2C; 30. R2D, P5CD.

Tratando de aprovechar la situación del rey y el alfil en la columna dama.

31. PxP, TxP; 32. R3A, TIC; 33. A4A, TlT; 34. R4C, TIC+; 35. RxP, TxP.

Se entrega la pieza intentando la caza de peones del flanco rey, y el pasaje del PTR como contrachance.

36. A3C!, A2C; 37. TlR! Las negras abandonaron.

APERTURA INGLESA

R. Debarnot v. J. Fraile

La armonía es el factor destacable en esta partida. En la posición del diagrama se destaca esta cualidad: se nota cómo las piezas blancas tienen todas una fun­ción que coincide con el plan iniciado en la jugada nueve, destrozar el flanco dama adversario. En contraste, la dispo­sición de las piezas negras destaca su falta de unión conceptual; obsérvese có­mo el caballo tiene sus saltos copados.

Es llamativa la fluidez de las jugadas blancas a partir de 9. A3R, en busca del objetivo mencionado; es útil el estudio de la aparente simplicidad de ejecución, sobre todo compárese la posición después de 8. . .... , 0-0, y la del diagrama.

Una excelente jugada 16. P4C!, y des­pués dos más, 25. A5C! y 28. T7C!

Buena impresión causa la ejecución del final.

l. P4AD, C3AR; 2. C3AD, P4R; 3. P3CR,P4D;4.PxP,CxP;5.C3A,C3AD; 6. P3D, A2R; 7. A2C, C3C; 8. 0-0, 0-0; 9. A3R, RlT; 10. TIA, P4A; 11. C4TD, P5A; 12. ASA, CxC; 13. DxC, A5C; 14. D3T, AxA; 15. DxA, D3D; 16. P4C, CxP; 17. DxPA, DxD; 18. TxD, CxPT; 19. TlT, C5C;20.CxP. .

Page 12: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr
Page 13: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

NOVIEMBRE DE 1972 AJEDREZ 595

19. PxP, PCxP; 20. P5D, PxP; 21. C4D, P4TR; 22. D1CR, T3T; 23. D8C, T3C; 24. D8T.

Las negras abandonaron.

ATAQUE DOBLE INDIO

L. Bronstein v. R. Base

1. C3AR, C3AR; 2. P3CR, P4A; 3. A2C, C3A; 4. 0-0, P3CR; 5. P3C, A2C; 6. A2C, 0-0; 7. P4A, P3D; 8. P4D, PxP; 9. CxP, A2D; 10. C3AD, CxC; 11. DxC, C1R; 12. D2D, ASAD; 13. P4R, D4T; 14. TDlD, D4T; 15. C5D, AxC; 16. PRxA, C3A; 17. TDlR, TRlR; 18. P3TR, D4A; 19. T2R, P3CD; 20. T(l)lR, RlA; 21. P4TD, D2D; 22. P5T, P4CD; 23. PxP, DxPC; 24. T3R, TDlA; 25. T3D, T2A; 26. AlAR, D2D; 27. T(3)3R, DlA; 28. A4D, T7A; 29. DlD, T2A; 30. P4CD, P3TD; 31. P5C, PxP; 32. AxP, DxP; 33. AxT, C5C; 34. AxA+, RxA(2C); 35. D4D+, P4R; 36. PxP a. p.+, P3A; 37. DxC, DxD; 38. A7D, P4A; 39. P7R, TxA; 40. PSR=D, P5A; 41. DxT+.

Las negras abandonaron.

SISTEMA BENONI

R. Debarnot v. J. Szmetan

Una partida eminentemente táctica. Es un lujo observar la serie de clavadas que se suceden, sobre todo la maniobra 24. A3T y 25. D4A.

En la posición del diagrama puede ver­se que el bando negro tiene aparente­mente un formidable centro. Sin embar­go es notable la precisión y rapidez con que es demolido, tanto más cuanto que ningún efectivo blanco pasa de la ter­cera línea.

Una reflexión: en otros tiempos hubie­ra sido considerado «un crimen:. la «au­toconcesión:. de un peón aislado y atra­sado, débil como el de 3R. En buena hora nos congratulamos de la existencia de un núcleo joven de ajedrecistas ca­paces de sentir «falta de respeto> -en el buen sentido de la palabra-, hacia postulados, principios y dogmas caratu­lados de «eternos>. ¡Caramba! La más

primitiva lógica indica que cabe esperar la posibilidad de progreso.

Hágase cada uno la pregunta: ¿qué hemos aprendido en los últimos años? Cuando la respuesta sea riegativa es ne­cesario una revisión, pues hay algo que no funciona.

l. P4D, P4AD; 2. C3AR, PxP; 3. CxP, P4D; 4. P3CR, P4R; 5. C3C, C3AD; 6. A2C, C3A; 7. 0-0, A2R; 8. A5C, A3R; 9. P3R, C5R; 10. AxA, DxA; 11. C(l)2D, CxC; 12. DxC, TlD.

13. P4AR, P3A; 14. PxP, PxP; 15. TDlD, TlAR; 16. D2R, T2A; 17. P3A, RlA; 18. D5C, TxT+; 19. TxT+, RlC; 20. C5A, P3CD; 21. CxA, DxC; 22. P4A, P5R; 23. PxP, TxP; 24. A3T, D3D; 25. D4A, P3C; 26. DxP, R2C; 27. A2C, T4AD; 28. D4m, P4CD; 29. D6T, R3T; 30. P3TD, D3R; 31. TlR, T7A; 32. DxPC, C4R; 33. D4C.

Las negras abandonaron.

DEFENSA CARO-KANN

J. C. Base v. A. Foguelman

l. P4R, P3AD; 2. P4D, P4D; 3. PxP, PxP; 4. P4AD, C3AR; 5. C3AD, C3A; 6. A5C,D3C;7.PxP,CDxP;8.CR2R,C4A; 9. D2D, P3C; 10. C3C, A2C; 11. A5C+, RlA; 12. 0-0, CxC; 13. PTxC, A4A; 14. TRlR, P3TD; 15. A4TD, DlD; 16. TDlD, P4C; 17. A3C, P3T.

Page 14: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

596 AJEDREZ NOVIEMBRE DE 1!172

18. P6D, DxP; 19. D3R, D2A; 20. A4AR, D2C; 21. C5D, P4C; 22. C7A, PxA; 23. DxP+, RIC; 24. DxP+, R2T; 25. T7R, TDICR; 26. DxC, D5R; 27. C8R.

Las negras abandonaron

DEFENSA SICILIANA

H. Pilnik v. J. Rubinetti

l. P4R, P4AD; 2. C3AR, P3D; 3. P4D, PxP; 4. CxP, C3AR; 5. C3AD, P3TD; 6. A5CR, CD2D; 7. A4AD, P3R; 8. A3C, C4A; 9. D2R, A2R; 10. P4A, P3TR; 11. AxC, AxA; 12. 0-0-0, D2A; 13. RlC, A2D; 14. TRlR, 0-0; 15. P4C, P4CD; 16. P5C, PxP; 17. P5R, PxPR; 18. PxPR, A2R; 19. D5T, P3C; 20. D6T, TRlD.

IDIOMA RUSO

Escuela Lomonosov

Clases y Traducciones

Antonio Pilarche

Larrea 238, 99 - Capital Fe4eal T. E. tB-78%5 7 758-0831

21. C5D, PxC; 22. AxP, D3C; 23. AxP+, RxA; 24. D7T+, RlA; 25. TlA+, A4A; 26. D6T+, RIC; 27. CxA, AlA; 28. DxP, TxT+; 29. TxT, D3R; 30. TIC, C2D; 31. C4D, DxPR; 32. DxP+, A2C; 33. D6R+, DxD; 34. CxD, R2A; 35. CxA, TlCR; 36. TlD, C3A; 37. C5A, T7C; 38. P4TR, T7T; 39. P3T, R3C; 40. C7R+, R2A; 41. C5D, C5R; 42. C7A, C7D+; 43. RlA, C5A; 44. TlR.

Las negras abandonaron.

DEFENSA NIMZOINDIA

R. Debamot v. L. Bronstein

l. P4D, C3AR; 2. P4AD, P3R; 3. C3AD, A5C; 4. P3R, P4A; 5. C3A, C3A; 6. A3D, AxC+; 7. PxA, P3D; 8. P4R, P4R; 9. P5D, C2R; 10. C4T, P3TR; 11. P3C, C3C; 12. C5A, AxC; 13. PxA, ClA; 14. 0-0, C(1)2D; 15. TIC, P3CD; 16. P3A, 0-0; 17. P4TD, TlR; 18. A4R, CxA; 19. PxC, C3A; 20. D2R, D2D; 21. TlT, TRlC; 22. P4C, RlA; 23. P4T, CIC; 24. P5C, PxP; 25. PxP, P3A; 26. T2A, PxP; 27. AxP, D2AR; 28. P6A, PxP; 29. T(l)lAR, R2R; 30. D4C, TlAR; 31. TxP, CxT; 32. TxC, DxT; 33. D6R+.

Las negras abandonaron.

Page 15: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr
Page 16: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

598 AJEDREZ liOV1En4BRE DE 1972

DEFmSA SICILIA}qA

J. C. Base v. c. E. Juárez

l. P4R, P4AD; 2. P4AR, P3B; 3. C3AB, P3TD; 4. C3A, P4CD; 5. P3D, P3D; 6. P3CB, C3AB; 7. A2C, A2C; 8. 0-0, A2B; 9. D2B, 0-0; 10. P3TB, P4D; 11. P5B, CB2D; 12. P4CB, C3AD; 13. P5A, P5C; 14. CID, D2A; 15. A4A, C3C; 16. D2D, P5D; 17. P6A, AlD; 18. A6T, CxP; 19. CxC, AxA; 20. D5C, P3C; 21. BxA, TlB; 22. C2A, C4D; 23. C4B, C6B+; 24. BlC, P5A; 25. ASA, C4A; 26. TxC.

Las negras abandonaron.

DEFENSA SICILIANA

B. Pilnik v. F. Casas

l. P4R, P4AD; 2. C3AB, P3D; 3. P4D, PxP; 4. CxP, C3AB; 5. C3AD, P3TD; 6. A2B, P3B; 7. 0-0, P4CD; 8. A3A, P4B; 9. C5A, P3T; 10. C3B, CD2D; 11. P4TD, PxP; 12. CxP, A2C; 13. D3D, D2A; 14. P4CD, TIA; 15. P4A, C3C; 16. CxC, DxC; 17. TlD, P3C; 18. C4C, CxC; 19. AxC, TlD; 20. A3B, D3A; 21. P3A, D2A; 22. P5C,TlT;23.P5A,PDxP;24.P6C,DlD; 25. T7D+, B2B.

Las negras abandonaron sin proseguir (26. D6D mate).

DEFmSA NIMZOINDIA

F. Casas v. R. Debamot

l. P4D, C3AB; 2. P4AD, P3B; 3. C3AD, A5C;4.D2A,P4A;5.PxP,C3A;6.C3A, D4T; 7. A2D, DxPA; 8. P3B, P4TB; 9.

LIBRERIA CAISSA

Especialidad en libros, revistas y publicaciones ajedrecísticas.

Lavalle 1346 - oficina 8 T. E. 40 - 1327

De 15 a 19 horas

P3TD, A2B; 10. A2B, P4D; 11. PxP, PxP; 12. C4D, D4R; 13. P4A, DlC; 14. A3A, 0-0; 15. 0-0, TlD; 16. CxC, PxC; 17. C4T, A3T; 18. TRIA, ASA; 19. P4CD, TlAD; 20. A3A, P4TD; 21. TBlC, PxP; 22. AxPC, D2T; 23. AxA, DxA; 24. C6C, DxP+; 25. D2A, DxPA; 26. CxT(8T), TxC; 27. D6C, P4C; 28. DxP, TlB; 29. P3T, B2C; 30. TlD, P4T; 31. AxPD.

31 ...... , C5C!; 32. PxC, D6B+; 33. B2T, TlTB; 34. A3A, PxP+; 35. B3C, D5A+; 36 B2A, P6C+; 37. BlC, T8T+.

Las blancas abandonaron.

SUPLEMENTO N9 31

Contendrá las 435 partidas de los 26 matches mundiales jugados des­de 1886 hasta 1969.

Además, las 28 partidas de M. BotviDnlk, cuando conquistó el ce­tro mundial en 1948.

Y las partidas comentadas del reciente match Spassky-Fischer.

Page 17: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr
Page 18: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr
Page 19: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr
Page 20: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

602 AJEDREZ NOVIEMBRE DE 1972

DEFENSA FILIDOR

J.RubmeHlv.J.Enuna

La exactitud en cuanto a oportunismo de un contragolpe central ( 12. . ..... , P4D), pone de manifiesto la atención vi­gilante con que el segundo jugador des­arrolla la partida. Un golpe aparente­mente vedado, pues cuatro piezas blan­cas dominan esa casilla, es posible por razones tácticas (no se puede 13. P5R por la pérdida del peón después de la respuesta 13. . .... , A4A). A partir de ese momento los hechos suceden con ce­leridad. Un rápido apresto de ataque (17 ...... , A5R y 18 ...... , A3D), el alfil dama negro cuesta el caballo, se en­trega calidad, y finaliza la dama pene­trando en el sector real. El resultado es de dos peones por la calidad, pero cuatro contra uno en el flanco rey.

Puede verse entonces la lucha de dos torres contra alfil y torre; naturalmente, cuando los peones pasados consiguen avanzar reciden la partida, pero hay que tomar ciertos recaudos.

l. P4R, P4R; 2. C3AR, P3D; 3. P4D, C3AR; 4. C3A, CD2D; 5. A4AD, P3TR; 6. 0-0, P3A; 7. P4TD, A2R; 8. A2T, 0-0; 9. TIR, P4TD; 10. P3T, TIR; 11. C4T, PxP; 12. DxP, P4D; 13. PxP, C3C; 14. C3A, CDxPD; 15. CxC, PxC; 16. P3A, A4AR; 17. A3R, A5R; 18. C2D, A3D; 19. CxA, TxC; 20. DID, A2A; 21. AIC, D3D; 22. AxT, D7T+; 23. RIA, PxA; 24. A4D, DST+; 25. R2R, DxPC; 26. TICK, DxPT; 27. AxC, D6A+; 28. RIA, DxA; 29. D4D, DxD; 30. PxD, TID; 31. TID, P4A; 32. R2R, R2A; 33. TITR, R3A; 34. P3A, PxP+; 35. RxP, T4D; 36. T3D, A3D; 37. R3R, AlA; 38. T3A, T2D; 39. T8A, R2A; 40. T8TD, A5C; 41. TSAD, A2R; 42. R3D, A3A; 43. T4A, R3C; 44. P4C, PxP; 45. TxPC, P4T; 46. R3R, P5T; 47. R4A, AxP; 48. TxPT, A4A; 49. T4A, A2R; 50. TIT, R3A; 51. TICD, T6D; 52. T6C+, A3D+; 53. TxA+, TxT; 54. T4C, P4C+; 55. R3R, P3C; 56. T5C, P5C.

Las blancas abandonaron.

ATAQUE INDIO DE LA DAMA

J. Pellkán v. J. Enuna

l. C3AR, P4D; 2. P3CD, P3AD; 3. P3R, A5C; 4. A2C, C2D; 5. A2R, CR3A; 6. P3D,D2A;7.CD2D,P4R;8.P3TR,AxC; 9. AxA, P4TD; 10. P4CR, C4A; 11. P4m, C3R; 12. P4T, P3T; 13. A2C, A5C; 14. D3A, C2D; 15. D3C, 0-0-0; 16. 0-0-0, A3D; 17. D3A, TRIA; 18. TDIC, RlC; 19. AlA, C3C; 20. P5C, PxP; 21. PxP, D2R; 22. D5A, P3A; 23. P6C, A6T; 24. T4T, P5D; 25. A3T, AxA+; 26. RxA, D5C; 27. DxC, DxC; 28. PxP, PxP; 29. DlR, DxD; 30. TxD, TRIR; 31. TxP, C4D; 32. T(1)4R, TIT; 33. A6R, C5C; 34. TxT+, TxT; 35. P4AR, TIT; 36. T2R, R2A; 37. A4A, R3D; 38. P4D, T5T; 39. P5A, T5A; 40. T6R+, R2D; 41. T2R, T5T; 42. A6R+, R3D; 43. A7A, T4T; 44. T6R+, R2D.

45. TxPAR, PxT; 46. P7C, T4C; 47. A6C, T7C; 48. P8C=D, TxP+; 49. RIC, T7R; 50. A7A, C7T; 51. D3C, P4C; 52. A6R+.

Las negras abandonaron.

SISTEMA RETI

R. García v. J. Rubinettl

l. C3AR, P4D; 2. P4A, P5D; 3. P3R, C3AD; 4. CxP, CxC; 5. PxC, DxP; 6. C3A, P4R; 7. P3D, A4AD; 8. A3R, D3D; 9. C5C,

Page 21: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

NOVIEMBRE DE 1972 AJEDREZ 603

D2R; 10. AxA, DxA; 11. P4D, PxP; 12. DxP, DxD; 13. CxD, A2D; 14. 0-0-0, 0-0-0; 15. P5A, C3A; 16. P6A, AxP; 17. CxA, TxT+; 18. RxT,PxC;19.A6T+, RZD; 20. TlR, TlCD; 21. P3CD, CID; 22. A4A, TlR; 23. TxT, RxT; 24. RZD, R2D; 25. P3TD, P4TD; 26. P3C, R3D; 27. A2R, R4A; 28. R3D, C3A; 29. R3R, ClR; 30. R4R, C3D+; 31. R5R, C4C; 32. A3D, CxP; 33. AxP, R5C; 34. A8C.

34 •..... , C5A+; 35. PxC, P4AD; 36. AxP, P5T; 37. A6C, P6T; 38. AlC, R6C; 39. P4T, R7C; 40. A2T, RxA.

Las blancas abandonaron.

APERTURA ESCOCESA

B. Rossetto v. R. Debarnot

l. P4R, P4R; 2. C3AR, C3AD; 3. P4D, PxP; 4. CxP, A4A; 5. C3C, A5C+; 6. A2D, D2R; 7. A3D, AxA+; 8. DxA, C3A; 9. 0-0, 0-0; 10. C3A, P4TD; 11. P4TD, C5CD; 12. TRlR, CxA; 13. DxC, P3D; 14. P3T, TlR; 15. T3R, A2D; 16. T(l)lR, D4R; 17. C4D, D4AD; 18. C(4D)5C, T4R; 19. P4A, T2R; 20. D4D, DxD; 21. CxD, T(l)lR; 22. R2A, A3A; 23. CxA, PxC; 24. P3CD, RlA; 25. R3A, P4D; 26. PxP, PxP; 27. P4CR, P3A; 28. TxT, TxT; 29. T3R, TxT+; 30. RxT, R2R; 31. C2R, R3D; 32. C4D, P3C; 33. C3A, C5R; 34. C5R, P3A; 35. C3D, C6A; 36. P4T, C5R; 37. BID,

P4T; 38, P5A, PxPC; 39. ·PxPC, C6C; 40. R3R, ·C4A+; 41. R4A, CxP; 42. P7C, C3C+; 43. RxP, C2R; 44. C4A, P4A; 45. C6C, ClC; 46. R5A, P5A; 47. PxP, PxP; 48. P3A, R4D; 49. C4A+, R3D; 50. R6C, R4R; 51. R7T.

Las negras abandonaron.

DEFENSA SICILIANA

J. Mazzoleni v. J. Pelikán

l. P4R, P4AD; 2. C3AR, C3AD; 3. P4D, PxP;4.CxP,D3C;5.C3C,P3R;6.C3A, P3m; 7. A2R, C3A; 8. 0-0, A5C; 9. D3D, 0-0; 10. A5C, C4R; 11. D3C, C3C; 12. C2D, D3A; 13. mm, AxC; 14. PxA, CxP; 15. CxC, DxC; 16. A3D, D3A; 17. P4TR, P4A; 18. P5T, ClT; 19. A4AR, C2A; 20. P6T, P3CR; 21. P4A, P3D; 22. AxPA, PRxA; 23. D3AD, C4R; 24. P5A, T2A; 25. TlD, DxP; 26. DxD, PxD; 27. AxC, A3R; 28. T6D, AxP; 29. T(l)lD, TlR; 30. A7C, T(2)2R; 31. T'JD, A2A; 32. RZT, P4CD; 33. A6A, TxT; 34. TxT, T3R; 35. A7C, P4C; 36. T7A, P5AD; 37. P3AD, AlR; 38. R3C, P4T; 39. A4D, TxP; 40. T'JC+, RlA; 41. T7T, T3CR; 42. TxPTR, A3A; 43. T7AD, P5A+; 44. R4C, AxP; 45. R5T, ASR; 46. P3A, T3AD; 47. T'Jm, AxP+; 48. RxP, P5T; 49. RxP, A4D; 50. T7D, A3R; 51. T7TD, A2A.

Declarada tablas.

Aparecerá

Suplemento N9 32 XXXIX Campeonato Soviético

(Leningrado) - 1971

Contiene las 232 partidas dispu­tadas entre los 22 participantes.

Los principales puestos fueron ocupados por: Savon, Smyslov, Tal, Karpov, Balashov, Stein, Brona­tein, Polugaievsky, Taimanov, Ka­pengut, Krogius, Lein, Platonov, Geller, etc.

Page 22: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

804 A J E D RE z NOVIEMBRE DE 1972

Octavo Torneo Zonal Sudamericano

San Pablo 1972 Por Víctor Brond

Ver revista Ajedrez N9 222 de octubre 1972, páginas 530/39

DEFENSA GRttNFELD

Rubinettl v. Cáceres

1. P4D, C3AB; 2. PUD, P3CR; 3. C3AD, P4D; 3. D3C, P:d'; 5. D:d' A, A2C; 6. P4R, '0-0; '1. A2R, C(3A)2D; 8. A3R, C3C; 9. D5A, C(lC)2D; 10. D3T, C3A; 11. P3T, P3A; 12. C3A, A3R; 13. P3CD, P3TR; 14. 0-0, D2D; 15. TRlD, TRlD; 16. TDIA, DlR; 1'1. D4C, AlAD; 18. D5T, C(3C)2D; 19. P5D, P:d'; 20. PxP, P3C; 21. D3T, A2C; 22. C5CD, DlA; 23. C'IA, T(1T)lC; 24. D:d'T, C5R; 25. C4D, C3D; 26. D3T, C3A; 2'1. C6A, TlT; 28. C('IA)xT, TxC; 29. D4C, TxP; 30. ASA, C2D; 31. A4D, P4R; 32. P:d' a. p., PxP; 33. AxA.

Y las negras abandonaron.

DEFENSA SICILIANA

Sllva v. Panno

l. P4R, P4AD; 2. C3AR, C3AD; 3. P4D, PxP; 4. CxP, C3AR; 5. C3AD, P3D; 6. A5CR, P3R; 7. D2D, P3TD; 8. 0-0-0, A2D; 9. DlR, D4T; 10. P4A, A2R; 11. C3A, P4C; 12. C2D, TlAD; 13. C3C, D2A; 14. T2D, P3TR; 15. A4T, P5C; 16. CID, C:d'R; 17. DxC, AxA; 18. AxP, TIT; 19. A5C, 0-0; 20. AxA, AxA; 21. DxPC, TxP; 22. D:d', D2T; 23. C3A, T3T; 24. D5A, DlT; 25. TIA, A3A; 26. T3D, TIA; 27. D2A, AxP; 28. TIC, ASR; 29. CxA, DxC; 30. D3A, DST.

Y las blancas abandonaron.

DEFENSA INDIA DEL REY

Vázquez v. Mecking

l. C3AB, C3AB; 2. P4AD, P3CR; 3. C3A,A2C;4.P3CR,0-0;5.A2C,P3D; 6. P4D, C3A; '1. 0-0, P3TD; 8. P5D, C4TD; 9. D3D, P4A; 10. PxP a. p., CxP (3A); 11. C2D, TIC; 12. P4R, P4CD; 13. PxP, PxP; 14. csc, cm; 15. nm, A5C; 16. P3A, A3R; 1'1. TlD, ASA; 18. D3R.

18 ...... , C(3A)5C; 19. PxC, CxP; 20. D7T, TlT; 21. D7C, AxC(6C); 22. T2D, AxC; 23. PxA(3A), D4T; 241 A2C, T2T; 25. PxA, DxT+; 26. AxD, TxD; 27. T2T, C4R; 28. AlA, T(2C)lC; 29. A2CD, TIT; 30. TxT, TxT.

Y las blancas abandonaron.

Page 23: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

NOVIEMBRE DE 1972 AJEDREZ

APERTURA SOKOLSKY

Chemin v. Silva Nazzari

l. P4CD, C3AR; 2. P3R, P3CR; 3. A2C, A2C; 4. P4TR, P3D; S. PST, CxP; 6. AxA, CxA; 7. C3AR, P4R; 8. C3A, P3AD; 9. P4D, D2R; 10. PSD, C2D; 11. PxP, PxP; 12. PSC, A2C; 13. PxP, AxP; 14. CSC, AxC; lS. AxA, TlD; 16. D2D, 0-0; 17. P4R, C3R; 18. D6T, P3A; 19. A4A, T2A; 20. C4T, T2C; 21. CxP, D2A; 22. D3T, C(2D)4A; 23. C4T, RIT; 24. CSA, T3C; 2S. TID, D2CD; 26. CxP, TxC; 27. TxT, CxP; 28. T6C, PxT; 29. DxC, C3D; 30. DxC.

Y las negras abandonaron.

DEFENSA ESLAVA

Panno v. Chemin

l. P4D, P4D; 2. P4AD, P3AD; 3. C3AR, C3A; f. C3A, PxP; S. P4TD, A4A; 6. CSR, P3R; 7. P3A, ASCD; 8. CxP(4A), CID; 9. D2D, A3C; 10. P4R, C2R; 11. A2R, P4AD; 12. PxP, DxD+; 13. AxD, AxPA; 14. CSC,C3T; 1S.C(4A)6D+,R2D; 16. CxPC, P4A; 17. CxA+, CxC; 18, A3R.

Y las negras abandonaron.

DEFENSA SICILIANA

Meeking v. Juárez

l. PfR, P4AD; 2. C3AR, P3R; 3. P4D, PxP; 4. CxP, P3TD; S. A3D, C3AR; 6. 0-0, D2A; 7. TlR, P3D; 8. P4AD, C3A; 9. CxC, PxC; 10. P3CD, A2R; 11. A2C, P4R; 12. PSA, 0-0; 13. PxP, AxP; 14. D2A, C2D; lS. C3T, P4TD; 16. TDlA, A4A; 17. TRID, A2C; 18. AlA, A2R; 19. CSC, DlA; 20. C6D, AxC; 21. TxA, TIR; 22. T(lA)lD, ClA; 23. DSA, P3A; 24. A4A+, RlT; 2S. D6C, PST; 26. A7A, T2R; 27. T8D, D2A; 28. TxT, AxT; 29. T8D.

Y las negras abandonaron.

DEFENSA INDIA DEL REY

Panno v. Cámara

l. P4D, C3AR; 3. P4AD, P3CR; 3. C3AD, A2C; 4. P4R, 0-0; 5. A2R, P3D; 6. A5C.

Este orden de jugadas, que impide la movida P4R de las negras, se viene em .. pleando con frecuencia en los torneos internacionales. Si ahora 6 ...... , P4R?; 7. PxP, PxP; 8. DxD, TxD; 9. C5D.

6 •..... , P3TR.

La alternativa era 6. . .... , P4A.

7. A3R, P3C?!

La mejor lín,ea para el segundo juga-dor comienza con 7 ...... , P4A; la ju .. gada que realiza Cámara guarda ana• logía con uno de los esquemas que pue­den oponer las negras al ataque Sae­misch.

8. P3TR, CR2D.

La jugada 8. . .... , P4A se hubiera castigado con 9. P5R!, seguido eventual­mente de A3AR.

9. D2D, R2T; 10. P4CR, P4R; 11. P50, P4TD; 12. P4TR, C4A; 13. P5T, P4CR.

El esquema de las negras ha resultado pasivo; bloqueado el flanco rey, las b}an .. cas pueden dedicarse sin apremios a pre­parar la agresión del flanco dama. y a explotar la casilla 5AR.

14. C3T, C(lC)2D; lS. PSA, A3A; 18. 0-0, A2R; 17. C2A1 C2C.

Las negras se empeñan en impedir anticipadamente la ruptura P5AD.

18. TRlC, C(2D)4A; 19. P3C, A2D; 20. AID, TlR; 21. P3T AlAR; 22. P4C, C3T; 23. A4T!

Con buen sentido de la posición, las blancas realizan el típico negocio del al­fil cbueno, de las negras por el alfil «malo, propio.

23 •..... , AxA; 24. CxA, ClC; 25. C3D, C2D; 26. T2T, D3A; 27. R2C, TRIC; 28. TlAD, DID; 29. DlD, R2C; 30. A2A, R2T; 31. D2A, A2R; 32. C(3D)2C, AlA; 33. CID, A2R; 34. C3R, AlA; 3S. T(lA)lTD, D3A; 36. CSA, DID; 37. AlR DlR; 38. C3A, DID; 39. C5C, TIA; 40. DlD, T(lA)lC; 41. C3A.

Page 24: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr
Page 25: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

NOVIEMBRE DE 1972 AJEDREZ 60'1

TxT; 28. R2T, AlA; 29. D2A, TlD; 30. T2A, T6D; 31. AlA, A3T; 32. P4TD, DxPC; 33. DxD, TxD; 34. T2T, T5C; 35. P5T, PxP; 36. TxT, T5A; 37. T8T+, R2C; 38. A3R, AxP+; 39. AxA, TxA; 40. T8AD, T5A.

Y las blancas abandonaron.

DEFENSA NIMZOINDIA

Carvajal v. Riemsdyk

l. P4D, P3R; 2. P4AD, C3AR; 3. C3AD, A5C; 4. P3R, 0-0; 5. A3D, P4A; 6. P3TD, AxC+; 7. PxA, C3A; 8. C2R, P3D; 9. 0-0, P3TR; 10. P4R, P4R; 11. P5D, C4TD; 12. P4A, PxP; 13. AxP, C5C; 14. C3C, D3A; 15. P3T, C4R; 16. D2R, P3CD; 17. C5A, TlR; 18. A2T, A3T; 19. C3R, D3C; 20. AxC, PxA; 21. T3A, AlA; 22. T(1T)7AR, P3A; 23. D2AR, C2C; 24. T3C, D2A; 25. DxP, DxD; 26. TxD, T2R; 27. TxPT, A2D; 28. C5A, AxC; 29. RxA, P5R; 30. A2R, TlAR; 31. P6A, T2AD; 32. PxP, TxP; 33. TxT+, RxT; 34. T6R, T2A; 35. TxPR, C3D; 36. T6R, C4A; 37. A4C.

Y las negras abandonaron.

DEFENSA SICILIANA

Juárez v. Cáceres

l. P4R, P4AD; 2. C3AR, P3D; 3. P4D, PxP; 4. CxP, C3AR; 5. C3AD, P3TD; 6. A4AD, P3R; 7. A3C, P4CD; 8. 0-0, A2C; 9. P4A, CD2D; 10. T1R, C4A; 11. A5D, D2A; 12. P4CD, C(4A)2D; 13. A2C, A2R; 14. AxP, PxA; 15. CxPR, D3C+; 16. RlT, P4TR; 17. C5D, AxC; 18. PxA, C5C; 19. A4D, D2C; 20. D2R, C(2D)3A; 21. P3TR, C3T; 22. CxP+, RlD; 23. A6C+, RlA; 24. P4A, PxP; 25. A5T, CxP; 26. DxP+, RIC; 27. TDID, TIC; 28. TxC, TxC; 29. P5C, C4A; 30. PxP, C6C+; 31. R2T, TxP; 32. T5C, C8A+; 33. DxC, TxP+; 34. DxT, ·DxT; 35. D8C+, R2C; 36. TxA+, R3A; 37. T7AD mate.

DEFENSA SICILIANA

Paiva v. Szmetan

l. P4R, P4AD; 2. C3AR, P3R; 3. P4D, PxP; 4. CxP, P3TD; 5. C3AD, D2A; 6.

A2R, C3AR; 7. 0-0, C3A; 8. A3R, A2R; 9. P4A, P3D; 10. CxC PxC; 11. D4D, P4D; 12. P4CD, 0-0; 13. P5R, C2D; 14. C4T, P4TD; 15. P3TD, PxP; 16. PxP, A3T; 17. C6C, CxC; 18. AxA, C2D; 19. D2D, P3A; 20. PxP, AxPA; 21. P3A, P4A; 22. T21', PxP; 23. PxP, A6A; 24. D2AD, P5D; 25. A2D, D3C; 26. A3D, C3A; 27. D3C, C4D; 28. TxT, TxT; 29. AlR, C6R; 30. DIC, CxT; 31. AxP+, R1A; 32. D6C, P6D+.

Y las blancas abandonaron.

DEFENSA INDIA DEL REY

Debarnot v. Cámara

l. P4D, C3AR; 2. P4AD, P3CR; 3. P3CR, A2C; 4. A2C, 0-0; 5. C3AD, P3D; 6. C3A, C3A; 7. 0-0, P3TD; 8. P3TR, TIC; 9. A5C, P3TR; 10. A3R, A2D; 11. C5D, P3R; 12. CxC+, DxC; 13. D2D, R2T; 14. TDlA, D2R; 15. P5D, C4R; 16. CID, P4AD; 17. PxP a. p., CxP(3A); 18. P3C, P4A; 19. CxC, PxC; 20. TRID, P4D; 21. T2A, TRIA; 22. P4A, AIR; 23. PxP, PRxP; 24. A4D, AxA+; 25. DxA, P4A; 26. D2A, P5D; 27. A5D, A4C; 28. A4A, A3A; 29. A3D, AIT; 30. R2T, T3C; 31. T(lD)lAD, P4TD; 32. P4CR, PxP; 33. PxP, T3AR; 34. D4T, R2C; 35. D3C, T3R; 36. P3T, T6R; 37. D2A, P4T; 38. P5C, D3R; 39. D4T, D5C; 40. DxD, PxD; 41. RIC, TIT; 42. R2A, P6C+; 43. RlR, T8T+; 44. R2D, P7C; 45. TxP, P8C=D.

Y las blancas abandonaron.

DEFENSA INDIA DEL REY

Quinteros v. Silva

l. C3AR, C3AR; 2. P3CR, P3CR; 3. P4A, A2C; 4. P4D, 0-0; 5. A2C, P3D; 6. C3A, C3A; 7. 0-0, P3TD; 8. P3TR, C2D; 9. P4R, P4R; 10. P5D, C5D; 11. A3R, D3A; 12. P4TR, P3T; 13. C2T, D2R; 14. P5T, PxP; 15. DxP, C7A; 16. TDIA, CxA; 17. PxC, D4C; 18. DxD, PxD; 19. A3T, C3C; 20. AxA, TDxA; 21. P3C, TDxA; 21. P3C, R2T; 22. P4CR, R3C; 23. R2C, TITR; 24. C3A, T2T; 25. TITR, T(l)lTR; 26. TxT, TxT; 27. CID, C2D; 28. C2A, AlA; 29. C2D, A2R; 3·J. CIA, TIT;

Page 26: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

608 AJEDREZ NOVIEMBRE DE 1972

31. C3C, C3A; 32. C5A, AlA; 33. P4C, P3C; 34. T3A, C2D; 35. T3T, ClC; 36. C3D, P3AB; 37. T3A, C2D; 38. P4TD, R2A; 39. T3T, A2B; 40. P5T, ClC; 41. P5C,PCxP;42.PxP,CxP;43.TxP,C4A; 44. CxC, PxC; 45. T7T.

Y las negras abandonaron.

DEFENSA SICILIANA Szmetan v. Mecking

l. P4B, P4AD; 2. C3AB, P3D; 3. PID, PxP; 4. CxP, C3AB; 5. C3AD, P3TD; 6. A5CB, P3B; 7. P4A, A2B; 8. D3A, D2A; 9. 0-0-0, CD2D; 10. P4CB, P4C; 11. AxC, CxA; 12. P5C, C2D; 13. P5A, AxP+; 14. BIC, 0-0; 15. PxP, C3C; 16. A3T, A3A; 17. D3D, TlB; 18. A5A, AxC; 19. PxP+, DxP; 20. DxA, C5A; 21. TRIA, AxA; 22. TxA, D2T; Z3. D5D+, BIT; 24. T7A, D4A; 25. DxD, PxD.

26. T7A, P5C; 27. C4T, TxP; 28. CxP, T(5B)1B; 29. C3D, T5B; 30. TlR, T5T; 31. T7T, TlAD; 32. TxPT, C7D+; 33. RlA, C6A; 34. TIA, CxP; 35. TlT, P3T; 36. CxP, TxC; 37. TxC, T5AB; 38. P3C, R2T; 39. P4T, T2AD; 40. P5T, T5CD; 41. R2C, T4C; 42. P3A, T(4C)4AD; 43. T3T, P4T; 44. P4C, T4B; 45. T6CD, P3C; 46. P6T, R3T; 47. R3C, T2A; 48. P4A, T8A; 49. T3C, P5T; 50. T(3)xP+, R4T; 51; T(6C)6B, T4CB; 52. T6T+, B5C; 53. P7T.

Y las negras abandonaron. Fue ésta la única derrota del gran maestro Mecking en el certamen.

DEFENSA BENONI

Cámara v. Biemdsdyk

l. P4D, P4AD; 2. P5D, P4R; 3. P4R, P3D; 4. C3AD, C3AR; 5. C3A, A2B; 6. P3TR, 0-0; 7. P4TD, ClR; 8. P4CR, C2D; 9. C2R, P3CB; 10. A6T, C2C; 11. C3C, BIT; 12. D2D, C3A; 13. A3B, ClC; 14. P5C, P4A; 15. PxP a. p., CxP; 16. A2B, C(3A)4T; 17. CxC, CxC; 18. 0-0-0, C5A; 19. TDlC, DlB; 20. P3C, CxPT; 21. T2C, C5A; 22. T(2C)2T, P4TB; 23. C4T, AxC; 24. TxA, B2C; 25. TIC, B2T; 26. AxC, PxA; 27. AxP, PxA; 28. T5C, R3T; 29. TxP A.

Y las negras abandonaron.

RUY LOPEZ

Nazzari v. Paiva

l. P4B, P4R; 2. C3AB, C3AD; 3. A5C, P3TD; 4. A4T, A4A; 5. 0-0, P4CD; 6. A3C, P3D; 7. P3A, A3C; 8. P3TR, P4C; 9. P4D, P5CB; 10. C5C, C3T; 11. A5D, A2D; 12. PTxP, TICB; 13. C3A, CxPC; 14. C3T, D3A; 15. C2A, D3C; 16. D2B, D4T; 17. TlR, PxP; 18. PxP, CxPD; 19. C(2A)xC, AxC; 20. A3B, AxA; 21. PxA, P3AD; 22. A3C, T3C; 23. P3C, C4R.

Y las blancas abandonaron.

DEFENSA SICILIANA

Godoy v. Mecking

l. P4R, P4AD; 2. C3AB, P3D; 3. A5C+, A2D; 4. AxA+, DxA; 5. 0-0, C3AD; 6. P4D,PxP;7.CxP,C3A;8.C3AD,P3CR; 9. C3C, A2C; 10. P4A, 0-0; 11. P3TR, P4CD; 12. D3A, 'P5C; 13. C2R, TRIA; 14. A3B, P4TD; 15. C2D, ClD; 16. TRIA, TDIC; 17. TDIC, C3B; 18. P4A, PxP a.p.; 19. CxP, C4A; 20. A2A, C5T; 21. C3C, CxC; 22. PxC, D5T; 23. P5R, C4T; 24. PxP, PxP; 25. C4D, TxT; 26. TxT, DxP; 27. D7C, D5A; 28. C5C, TIA; 29. CxP, DxPAB; 30. C8A, A4R; 31. C7B+, B2C; 32. D5D, TICD; 33. TlB, AxP; 34. T4B, T8C+; 35. AlB, DxT; 36. DxD, TxA+; 37. DxT, AxD; 38. C5D, C3A.

Y las blancas abandonaron. (Continuará)

Page 27: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr
Page 28: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr
Page 29: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

NOVIEMBRE Dll 1972 AJEDREZ 611

Ruenos Aires, octubre 3 de 1972

Señor

Subsecretario de Deportes del Ministerio de Bienestar Social Don Ernesto Cilley H ernández SI D.

De nuestra mayor consideración:

Tenemos el agrado de dirigirnos al se­ñor Subsecretario, respondiendo a su nota Nro. 2595/72, por la que solicita l.os antecedentes relativos a la integración del equipo olímpico de a;edrez que está actuando en Skoplie (Macedonia).

A ese efecto informamos a Ud. que: -El Art. 38, inc. k) del Estatuto de

esta Federación establece entre los de­beres y atribuciones de la Junta Direc­tiva: cDesignar jugadores, equipos, fis­cales, árbitros y directores, ... ,. ;

-La cJunta de Presidentes• de las en­tidades afiliadas, acordó en su sesión del 29 de enero de 1972 -se llevó a conoci­miento de las afiliadas por circular de fecha 22 de febrero de 1972-, que el Campeonato Argentino individual mas­culino se hiciera con vista a la integra­ción del equipo argentino que habria de participar en la XXa. Olimpíada de Sko­plie;

-La Junta Directiva elabora la regla­mentación del Campeonato Argentino individual en sus sesiones de fechas 2 y 8 de mayo y 14 de julio de 1972. En base a la misma resulta una nómina de 33 ajedrecistas en condiciones reglamenta­rias de participar, cursándoseles invita­ción con fecha 15 de julio de 1972 donde, entre otros aspectos, se les hace saber: cEste Campeonato acuerda los siguientes derechos: 1) El campeón y el Subcam­peón podrán participar directamente en el turno final del Campeonato Argentino individual de 1973; 2•) Los cinco pri­meros jugadores clasificados obtienen el derecho de integrar el equipo argentino que nos representará en la próxima Olimpíadas a disputarse en Skoplie, en septiembre de 1972».

En la última de las citadas sesiones se resolvió también que el sexto integrante del equipo seria designado por la Junta Directiva, la que cubriría asimismo las vacantes que se produjeran en caso de desistir alguno de los cinco clasificados, pudiendo hacerlo con jugadores que hu­bieran o no participado en dicho evento.

Las invitaciones mencionadas se su­maron a gestiones personales tendientes a que la prueba selectiva resultara una masiva confrontación que diera la pauta actual de la fuerza ajedrecística de quie­nes estaban en condiciones de participar.

De los 33 jugadores que podían inter­venir, 8 declinan hacerlo: Miguel Naj­dorf, que manifiesta a la Presidencia csi no concurro a Reykjavik• a presenciar el match Spassky-Fischer (que fue lo que hizo), jugaré el Campeonato.: Osca'l' R. Panno; Julio Bolbochán; Jacobo Bol­bochán; Carlos E. Guimard; Erich Elis­kases; Raúl Sanguineti y Alejanriro No­gués. Algunos de ellos hacen saber que por razones meramente personales no participarán, y otros no contestan a 14 invitación. Por estar en inactividad, se descontaba la no participación de Julio y Jacobo Bolbochán, Carlos E. Guimard y Raúl Sanguineti.

En consecuencia, toman parte 25 juga­dores, entre los que se encuentran los grandes maestros Héctor D. Rossetto y Herman Pilnik, y los maestros interna­cionales Samuel Schweber, Miguel A. Quinteros, Alberto Foguelman, Jorge Pe­likan, Raimundo Gareía y Jorge Rubi­netti.

Concluye el Campeonato Argentino individual de 1972 ocupando los cinco primeros puestas: Héctor Decio Rossetto, Raimundo Gareía, Jaime Emma, Juan Carlos Hase y Roberto Debarnot. En la 6a./7a. colocación quedan, empatados, Herman Pilnik y Jorge Rubinetti. Con­forme a la Reglamentación, los cinco pri­meros son designados para integrar el equipo olímpico. Para cubrir la sexta plaza, la Junta Directiva, en SIL sesión del 2 de septiembre último, acordó la

Page 30: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr
Page 31: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

NoVIEMBRE DE 1972 AJEDREZ 613

luego del campeonato argentino, en in­tegrar el equipo olímpico y en partici­par en torneos internacionales y en las selecciones de la Federación Interna­cional de Ajedrez (zonal e interzonal) . Y hasta allí deben tener franca posibili­dad de llegar los que tienen talento y se dedican con intensidad, recorriendo un camino previsto y reglamentado de antemano, que permita confrontaciones y oposiciones sucesivas. La promoción de nuevos valores -preocupación gene­ral en todo deporte, indispensable hoy en nuestro ajedrez-, exige que ese ca­mino esté abierto y que la cúspide no esté ocupada por supuestos irreemplaza­bles.

En conclusión, manifestamos a Ud. que la integración del equipo se efectuó con­forme a una programación de promoción y selección, y reglamentariamente. Al­gunos pocos maestros de indudable pres­tigio tuvieron dos opciones a su alcance para poder estar en aquella representa­ción; optaron por marginarse. Creemos firmemente que los que están en Skoplie adquirieron deportivamente ese derecho 11 ese honor.

No podemos silenciar nuestra extrañe­za ante la publicidad dada a la gacetilla emanada de esa Subsecretaría, relativa al pedido de aclaraciones que nos ocupa. A ello debe añadirse el hecho de haber recibido y escuchado en su despacho -previamente a aquella publicidad-, al señor Miguel Najdorf y no haber tenido a bien invitar a los responsables de la dirección de este deporte, para que le expusieran, en acto de mutuo respeto, los antecedentes necesarios en la consi­deración de este asunto.

Manifestamos, por último, que en la próxima Asamblea General Ordinaria de esta Federación, prevista para el 29 del mes de octubre en curso, se tratará lo actuado en torno al Campeonato Argen­tino y a la integración del equipo olím­pico. Las conclusiones del alto Cuerpo, por estar integrado por delegados de las federaciones afiliadas de todo el país, las

haremos conocer oportunamente al seño7' Subsecretario.

Entendiendo haber satisfecho el pedi­do que nos ha formulado, saludamos al señor Subsecretario con las expresiones de nuestra consideración más distinguida.

Marcial Ruiz, p. secretario; Gaspar D. Soria, presidente.

La formación del equipo olímpico 1972 del ajedrez nacional ha sido condiciona­da, pues, por «Circunstancias fortuitas» y refleja «<a real expresión del potencial de la disciplina que enmarca la confron­tación», exactamente como bien cestima esta Subsecretaría de Deportes», en la memorable Nota N9 2595/72.

La situación es clara. Tan clara, que cualquier comentario no haría más que enturbiar. Y no vale la pena, apenas sa­lidos del inviemo, arruinar las prímave­rales perspectivas.

D. T.

Page 32: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr
Page 33: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

NOVIEMBRE DE 1972 AJEDREZ 61.11

dujo a complicaciones favorables para las negras. Pero ahora los caminos de los «gemelos:. se bifurcan: en este duelo Spassky adopta un plan distinto y que parece muy promisorio. Con el cambio del alfil las blancas desvencijan la fa­lange de peones en el flanco rey. Gene­ralmente, en las posiciones de este tipo el rey negro queda en el centro del ta­blero, circunstancia de por sí preñada de molestias.

10 ...... , PxA; 11. A2R, P4'l'R.

No es posible permitir la maniobra de bioqueo A2R- 5T; además, las negras de­ben recibir a la bayoneta el avance P5R jugando 12 ...... , A3T.

12. 0-0, C3A; 13. R1'1'.

Profilaxis necesaria. Las negras con frecuencia estructuran su juego sobre la explotación de la diagonal 2TD - 8CR, por lo cual las blancas retiran el rey con buena anticipación a un lugar tranquilo.

13 ...... , A2D.

Fischer efectúa los movimientos más naturales sin suponer siquiera que ade­lante lo acecha una astuta celada.

14. C1C!

La paradójica retirada del caballo ha planteado sorpresivamente a las negras la solución de un complejo problema: ¿cómo salvar la dama enredada en la tela de araña? A juzgar por el posterior juego inseguro de las negras, la réplica de las blancas tomó a Fischer evidente­mente desprevenido.

14 •..... , D5C; 15. D3R.

De manera que las blancas amenazan con la variante P3TD, D5T; 17. C3A y la trampa se cierra. Sintiendo que el sue­lo se escapa debajo de sus pies, Fischer efectúa una jugada impulsiva con la es­peranza de enredar al adversario. Como resultado, cae de la llama en las brasas. Desde luego que todavía es temprano pronunciar la sentencia definitiva de toda la estrategia de apertura de las ne­gras, pero da la impresión de que Spass­ky ha logrado ganar la disputa teórica en forma convincente. Ahora tiene la palabra Fischer. O éste logra rehabilitar toda la variante por parte de las negras o tendrá que separarse de su «Obra, predilecta.

15 ...... , P4D; 16. PxP, C2R; 17. P4A.

Destacando de la manera más simple toda la absursidad de la idea de las ne­gras. La posición del rey padece de una debilidad sin esperanzas y las blancas no tienen más que prepararse para in­fligir el golpe decisivo.

17 ...... , C4A; 18. D3D, P5'1'.

Si 18. . .... , PxP, entonces 19. C3A!, DxP; 20. D2D!, con fortísimo ataque. A Fischer le queda la esperanza de una eventual chance: 19 ....... , C6C+; 20. PxC, PxP+; 21. RlC, A4A+. Pero las pequeñas estocadas de las negras son rechazadas por las blancas sin dificultad. Claro está que una defensa satisfactoria para las negras es difícil de encontrar. A pesar de todo correspondía probar 18 ...... , TlA.

Page 34: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr
Page 35: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

NOVIEMBRE DE 1972 AJEDREZ 617

(Soluciones en la página 652)

N9 1 - Juegan las blancas y ganan N9 3 - Juegan las blancas y ganan

NI' 2 - Juegan las blancas y canan N9 4 - Juegan las blancas y ganan

Page 36: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

DEL CAMPEONATO ARGENTINO 1972

El gran maestro Héctor D. Rossetto, ganador del campeonato Argentino de A;edrez 1972

Los maestros Alberto Foguelman y Jaime Emma

Page 37: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

DEL CAMPEONATO ARGENTINO 1972

Los maestros Roberto Debarnot

(izquierda) y Jiri Pelikán,

sentados, observa el gran

maestro Rossetto

Los maestros Raimundo García (izquierda) ti Jorge Szmetan

Los maestros luan Carlos Hase y Horacio García

Page 38: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr
Page 39: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

NOVIEMBRE DE 1972 AJEDREZ 621

(Viene de la página 616)

l ...... , P3R; 2. CR3A, P4D; 3. P4D, CR3A; 4. C3A, A2R; 5. A5C, P3TR; 6. A4T, 0-0; 7. P3R, CD2D.

Renunciando al sistema Bondarevsky-Makagonov (7 ...... , P3CD) que trajo amargura a las negras en la sexta par­tida del match, Spassky emplea una va­riante actualmente poco frecuente del Gambito Dama y que lleva en la teoría la denominación de «fianchetto amplia­do». En su tiempo lo empleaban a me­nudo Alekhine y Capablanca.

8. TIA, P3A; 9. A3D, PxP; 10. AxP, P4CD; 11. A3D, P3T.

Las negras desean poner en práctica la idea característica de la Defensa Me-rano: 12 ...... , P4AD y después 13 ..... , A2C, con buenas posibilidades en el flan­co dama. ¿Qué plan es el más racional para las blancas? Recurriremos a los ma­nuales. Estos recomiendan varias conti­nuaciones equivalentes: 12. 0-0, 12. A1C y el movimiento efectuado por Fischer. La ofensiva más enérgica a primera vis­ta, 12. P4R, fue refutada en la partida Euwe v. Alekhine (match 1935): 12 ..... , CxP!; 13. AxC, AxA; 14. AxP, T2T; 15. 0-0, C3C!

12. P4T, PxP.

Recomendado por Capablanca.

13. CxP, D4T+; 14. C2D, A5C; 15. C3A, P4A.

Esta larga variante es bien conocida en la teoría ajedrecística; las posibilida­des de las partes son consideradas igua­les.

16. C3C.

Distinto desarrollo tuvo la partida Fine v. Belavenetz (Moscú, 1937): 16. C4A, D2A; 17. A3C, D2C; 18. 0-0, PxP; 19. PxP, TlD; 20. C4T.

16 •..... , DlD.

Es posible 16 ....... , D3C; 17. PxP, AxP; 18. CxA, DxC; 19. A3C, A2C; 20.

0-0, y las blancas sólo tienen una su­perioridad microscópica (Sthalberg con­tra Capablanca, Margate, 1936).

17. 0-0, PxP; 18. CxP, A2C.

19. A4R! Las blancas aprovechan el momento

oportuno: después de 19 ...... , AxA; 20. CxA, la clavada del caballo y la debili­dad del punto 3AD son molestas para las negras. Su respuesta es prácticamente obligada.

19 •..... , DlC; 20. A3C. La prematura pretensión de las blan­

cas de explotar con ganancia de tiempo la diagonal 2TR - 8CD no causa mayores molestias a las negras sino, por el con­trario, les ayuda a comunicar sus torres. Lo correcto era inmediatamente 20. C6A, AxC; 21. AxA, T2T, y ahora ya lama­niobra 22. A3C gana considerablemente en fuerza: 22 ...... , D3C (mejor es 22 ...... , DlD); 23. C4T, D4T; 24. D4D. En caso de 20. . .... , D3D, las blancas pueden elegir entre 21. C7R+, DxC; 22. AxA, T2T; 23. A3A y 21. DxD!, AxD; 22. TR1b!, con ventaja.

20 ...... , D2T; 21. C6A, AxC; 22. AxA, TDIA.

Las blancas, es verdad, han obtenido la deseada pareja de alfiles, pero los ca­ballos negros son suficientemente fuer-tes: amenaza 23 ...... , C4A, con presión sobre las casillas 6D y 6CD. Las blancas

Page 40: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

622 AJEDREZ NOVIEMBRE DE 1972

lo evitan llevando su caballo al borde del tablero, donde éste, según se pone en claro más tarde, queda inactivo. Por lo visto, correspondía optar por 23. C4R.

23. C4T, TRlD; 24. A3A, P4TD!; 25. T6A.

Resulta difícil de comprender el sen­tido de este movimiento: ¿por qué no 25. D2R?

25 •.... , TxT; 26. AxT, TlAD; 27.A3A, D3T; 28. P3T, D4C; 29. A2R, D3A; 30. A3A, D4C; 31. P3C.

Sobre la superioridad de las blancas ni se puede hablar. Las negras dominan la columna AD, en tanto que los alfiles blancos no tienen reales perspectivas.

31 ...... , A2R; 32. A2R, D5C; 33. A6T, T3A; 34. A3D, C4A; 35. D3A.

Las blancas tratan de apoderarse de la iniciativa mediante ingenios tácticos, y en cierta grado logran hacerlo debido al juego inexacto de las negras ante la expiración del tiempo reglamentario.

35 •..... , TlA.

Las negras entregan sin necesidad la columna en manos del adversario. Me-diante 35 ...... , C4D! se aseguraban una vida tranquila. También merecía la ma-yor atención 35 ...... , C(4)5R.

36. CxC, AxC; 37. TlA, TlD. Lamentablemente, no es posible res-

ponder 37 ...... , DxP? debido a 38. TxA. 38. A4A, D7D; 39. TlA, A5C. Más sólido es 39. . .... , D2D. 40. A7A, T2D.

En la sesión complementaria la lucha se prolongó por espacio de 15 movimien­tos más. Spassky dispuso activamente sus fuerzas, realizó una pequeña combina­ción, ganó un peón, pero en el tablero surgió un final con alfiles de distinto color ...

41. D6A (jugada secreta), D7A; 42. A5R, T7D; 43. D8T+, R2T; 44. AxC, PxA; 45. D3A, P4A; 46. P4C, D5R; 47. R2C, R3C; 48. TlA, A6T; 49. TlTD, A5C; 50. TlAD, A2R; 51. PxP+, PxP; 52. TlR, TxP+;

53. RxT, A5T+; 54. R2R, DxD+; 55. RxD, AxT.

Tablas. • • •

Comenta Vasily Smyslov

Con la décimotercera partida se inicia la segunda mitad del match, la etapa más importante y de mayor responsabilidad de la competencia. Los encuentros ante­riores han traído una gran diversidad de variantes de aperturas. Alrededor de dis­tintas posiciones teóricas surgieron inte­resantes disputas creativas; por ejemplo, ha sido sometido a revisión el sacrificio del peón 2CD, planteado en las partidas 711- y 1111-. Jugando con las blancas Fischer tiende más hacia l. P4AD, mientras que Spassky opta por l. P4R. Esto se explica por causas psicológicas provocadas por determinada preparación en aperturas por ambos adversarios antes del match.

131$. PARTIDA

DEFENSA ALEKHINE Spassky v. Fischer

l. P4R. Después de su afortunado ataque en

la 111!- partida el campeón del mundo se manifiesta dispuesto a repetir la violen­ta variante de la Defensa Siciliana.

l ...... , C3AR.

Fischer se aparta de las estructuras sicilianas y por primera vez en este match elige la Defensa Alekhine. Esta variante conduce generalmente a una lu­cha enjundiosa y se ha presentado antes, aunque con poca frecuencia, en el reper­torio del pretendiente.

2. P5R, C4D; 3. P4D, P3D; 4. C3AR.

El plan más agudo se vincula con la creación de un centro de peones median­te 4. P4AR. La jugada del texto es una continuación que implica menos obliga­ciones, pero también permite a las blan­cas confiar en obtener iniciativa en la apertura.

4 •..... , P3CR; 5. A4AD, C3C; 6. A3C, A2C; 7. CD2D.

Page 41: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

NOVIEMBRE DE 1972 AJEDREZ 623

No había que apurarse con el desarro­llo del caballo dama. Mejor era atenerse al esquema habitual con 7. D2R, mante­niendo una defensa sobrante de la cuña en 5R. Esto respondía plenamente a las exigencias de la posición mientras se conservaba para el caballo la posibilidad de salir a una casilla más activa.

7 •..... , 0-0; 8. P3TR.

Las blancas prestan mucha atención a la profilaxis, pero con ello se atrasan en desarrollo. Más tranquilo era responder 8. 0-0.

8 ...... , P4TD; 9. P4TD, PxP; 10. PxP, C3T; 11. 0-0, C4A; 12. D2R, DlD!

Las negras, en cierta forma impercep­tible, crearon un ataque sobre el peón TD. En la manera de juego de Fischer se nota la influencia de la filosofía aje­d!ecística de Guillermo Steinitz. Cree en el triunfo de la defensa y acepta con gusto los sacrificios. En realidad, la po­sición de las negras es suficientemente sólida y éstas pueden soportar las inco­modidades pasajeras que implica la cap­tura del peón.

13. C4R, C(3)xP; 14. AxC, CxA; 15. T1R, C3C; 16. A2D, P5T; 17. A5C.

Las blancas tienen un peón de menos. Empero, han logrado un juego más li­bre y ahora fijan la dama negra a la defensa de su peón rey.

17 •..... , P3TR; 18. A4T, A4A.

Maniobra discutible del alfil. ¿No era mejor sencillamente 18. . .... , A3R?

19. P4CR.

Seria atención merecía, asmnsmo, 19. C4D. En este caso era arriesgado 19 ..... , AxPR debido a 20. CxA, PxC; 21. C3C. Probablemente, las negras responderían 19 ...... , AxC; 20. DxA, P3AD. Enton-ces podía seguir 21. P4AR, P3R; 22. C2R, con la idea de trasladar el caballo a la casilla 3AD.

19 ...... , A3R; 20. C4D, A5A; 21. D2D, D2D; 22. TDlD, TR1R.

Por supuesto que no tenía sentido cap­turar el peón rey y entregar el propio de TR. En los primeros momentos las negras deben conducir con atención la defensa sin pensar en la actividad.

23. P4AR, A4D; 24. C5A, D1A.

Suficiente echar una breve mirada al tablero para convencerse de las conquis­tas de las blancas en espacio. Sus caba­llos se ciernen sobre la posición adversa­ria. A grandes complicaciones conducía ahora 25. P6R!, C5A; 26. D2R, CxP; 27. C5A!, con fuerte ataque.

Empero, Spassky no se decide a en­trar en la senda espinosa de las varian­tes agudas y se limita a una respuesta tranquila que permite a las negras apo­derarse de la iniciativa.

25. D3A, P3R; 26. R2T, C2D; 27. C3D, P4AD.

Mediante unas cuantas jugadas enér­gicas las negras han activado su juego. A las blancas no les queda nada mejor que pasar a un difícil final que surge en forma forzada después del traslado de su caballo a 6D.

28. C5C, D3A; 29. C6D, DxC; 30. PxD, AxD; 31. PxA, P3A.

En el final el peón de ventaja en 5TD se ha tornado en una fuerza temible. Las

Page 42: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr
Page 43: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr
Page 44: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

626 AJEDREZ NOVIEMBRE DE 1972

Fischer se aparta de la continuación 5. A5C que había empleado en encuen­tros precedentes. El desarrollo del alfil a 4AR es bien conocido en la teoría de aperturas y ha sido hallado un sólido recurso de defensa para las negras. En la presente partida Spassky logra equili­brar el juego sin mayores esfuerzos.

5 ...... , 0-0; 6. P3R, P4A; 7. PDxP, C3A; 8. PxP, PxP.

Las negras han quedado con peón ais­lado en el centro. Es una posición carac­terística para la Defensa Tarrasch que a menudo se ha presentado en la prác­tica del campeón del mundo. Según es sabido, la debilidad del peón dama puede ponerse de manifiesto en el final, mien­tras que en el medio juego el peón cen­tral a menudo asegura un buen juego de piezas.

9. A2R, AxP; 10. 0-0, A3R; 11. TIA, TIA; 12. P3TD.

La fucha presenta un tranquilo carác­ter de maniobras. Entre los objetivos de las blancas se halla el de conservar el control sobre el punto 4D con el fin de no permitir el avance P5D. No servía aquí 12. CxP, debido a 12. . .... , DxC; 13. DxD, CxD; 14. TxA, CxA; 15. PxC, C5D; 16. T5R, CxA+; 17. TxC, A5A, y las blancas pierden calidad.

12 •..... , P3TR; 13. A3C.

En posiciones similares generalmente se juega 13. C5CD con el subsiguiente traslado del caballo a 4D.

13 •..... , A3C; 14. C5R, C2R!; 15. C4T, C5R; 16. TxT, AxT; 17. C3AR, A2D; 18. A5R.

Es difícil criticar jugadas aisladas. El juego de Fischer no deja una impresión de integridad. Mejor era 18. CxA, DxC; 19. D4D, en busca de simplificaciones favorables para las blancas.

18. . .... , AxC; 19. DxA, C3AD; 20. A4AR, D3A!; 21. A5CD.

¿Es esto un descuido o Fischer ha com­prendido la dificultad de su posición y trata de pasar al final aun a costa de un peón? En caso de 21. D3C era posible 21. ..... , P5D!; 22. D5D, TlR; 23. A3D, C4A. También es dudoso 21. D2A en vis­ta de 21. ..... , P4C; 22. A3C, P4TR; y la amenaza P5T es extremadamente mo­lesta.

21 •..... , DxP; 22. AxC, C6A!

Gracias a esta jugada intermedia, las negras ganan un peón. Ahora es malo 23. A5R debido a 23 ..... , CxD; 24. AxD, PxA.

23. D4C, DxD; 24. PxD, PxA; 25. A5R, C4C; 26. TIA, TIA; 27. C4D.

27 ...... , P3A??

Lamentable descuido que implica la pérdida del peón de ventaja. Las res­puestas naturales 27 ..... , CxC o 27 ..... , AxC conservaban perspectivas favora­bles para concretar la ventaja en el final.

28. AxP.

Réplica simple, basada en la variante 28. . .... , PxA; 29. CxC, salvándose las blancas gracias a la clavada sobre la co­lumna AD. Ahora el resultado de nuli­dad se torna inevitable.

28 •..... , AxC; 29. AxA, CxA; 30. PxC, TIC; 31. RIA, TxP; 32. TxP, TxP; 33. T6T.

Page 45: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

NOVIEMBRE DE 1972 AJEDREZ 827

En el final de torres ninguna de las partes puede merecer preferencia. Aquí ya se podía acordar tablas.

33 •..... , B2A; 34. TxP+, B3A; 35. T7D, P4'.r; 36. B2B, P4C; 3'7. B3B, '.r5B+; 38. B3D, B3B; 39. T7CB, B3A; 40. '.r'7D. B3B.

Tablas.

• • •

Comenta el gran maestro

Víctor Korchnoi

Al analizar las distintas actuaciones de Spassky en el pasado, he llegado a la conclusión de que poco menos que todos los matches que ha jugado los iniciaba insuficientemente entrenado. Así sucedió también esta vez. El número de partidas más o menos serias disputadas por Spass­ky en el último medio año, según mis informaciones, se cuenta por unidades. La superioridad de juego de Fischer en el primer tercio del match fue aplastan­te. Bajo la fortísima presión del adver­sario, Spassky iba entrando en forma con penosa lentitud, sufriendo pérdidas enormes, gastando en vano las escasas creservas:. en materia de aperturas pre­paradas especialmente para el match ...

Resulta düícil establecer el momento cuándo fue que Spassky volvió en si, pere un hecho es indudable: el juego se ha emparejado finalmente. La tensión de la lucha aumentó notablemente. En el juego de Fischer han aparecido sínto­mas de cansancio y nerviosidad. Ha co­menzado a incurrir en evidentes errores en cada una de las partidas ...

151J. PAB'fiDA

DEFENSA SICILIANA

Spassky v. Fischer

l. P4B, P4AD; 2. CB3A, P3D; 3. P4D, PxP; 4. CxP, CB3A; 5. C3AD, P3'.rD; 6. A5CB, P3B; '7. P4A, A2B.

La discusión teórica respecto de los méritos y defectos de la jugada 7 ...... , D3C (7"' y u• partidas), en mi opinión, todavía no ha terminado, sino que Fis­cher la posterga para otra oportunidad.

8. D3A, D2A; 9. 0-0-0, CD2D; 10. A3D.

Otra continuación popular, con la cual ya se han jugado cientos de partidas: 10. P4CR, P4C; 11. AxC, CxA; 12. P5C, C2D; 13. P3TD, T1CD, con juego agudo. La jugada empleada por el campeón del mundo parece más importante, por pri­mera vez en este match, según mi opi­nión. Spassky juega con las blancas sin extravagancias, con seguridad y fuerza, y, como consecuencia, saca ventaja.

10 •..... , P4C; 11. '.rB1B,A2C; 12.D3C!

En la partida jugada no hace mucho entre Velimirovic v. Liuboievic siguió 12. C5D!?, CxC; 13. PxC, AxA; 14. TxP+!, y las blancas obtuvieron el triunfo en in­tenso combate. En la continuación de gambito 12. C5D no está todo claro ni mucho menos. En el torneo interzonal de Mallorca en 1970 Mecking contra Ji­ménez tomó 12. . .... , PxC, lo que po­siblemente sea mejor. El movimiento de Spassky, después del cual amenaza tanto P5R como C5D, es más fuerte, pues lleva a la ganancia de un peón.

12 •..... , 0-0-0; 13. AxC, CxA.

O 13 ...... , AxA; 14. AxPI, y la cap-tura 14 ...... , PxA pierde debido a 15. C(4)xP, 16. CxP+ y 17. P5R. Tampoco sirve 13 ...... , PxA; 14. D7C, TD1A; 15. CxPR.

14. DxP, '.rDlA; 15. D3C.

Mala seria 15. D6T a causa de 15. . ... , P5C; 16. C4T, D4T; 17. P3CD, C5C; 18. D3T, C7A.

15 •..... , P5C; 16, C4'.r.

Page 46: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr
Page 47: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr
Page 48: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

630 AJEDREZ NoVJEMBRJ: DB 1972

29. DxPT?

¡En el frenesi de la lucha Spassky se pasa de rosca! Era necesario hacer ta­blas: 29. D8R+, TlD; 30. D7A. A las negras difícilmente convendría rehusar-las mediante 29 ...... , R2T, en vista de 30. CxP, y las blancas rechazan el ataque conservando la ventaja material. Tam­poco parece tener fundamento 29. . ... , AlA; 30. C(5)4R, CxC; 31. CxC, D3C; 32. A3C, P4T (32. . .... , D5D; 33. C3A, D6D+; 34. A2A); 33. DxPT.

29 ••.... , AxC; 30. PxA, D3C+; 31. R1A?!

Más complejo les resultaría a las ne­gras llevar el ataque después de 31. Rl T, T7D; 32. TlCD (32. T2R, C5T!, ganando de inmediato), D4T; 33. D8T+, R2T; 34. T2C, P4R; 35. D6T, DxPA?; 36. D6C+, RlT; 37. C4R! o 34 ...... , D6T; 35. C3A!, y las blancas de alguna manera mantie­nen la nulidad del resultado.

31 ....... , D4T; 32. DBT+, R2T; 33. P4TD.

Jugada desesperada, pero ¿qué hacer? A 33. R2C podía seguir 33. . .... , A4D y 33. . .... , T7D, continuaciones igualmen­te desagradables para las blancas.

33 •.....• , C6D+.

También era buena 33 ..... , CxP, pero en tal situación la elección de las ju­gadas ya es cuestión de gustos.

34. AxC, TxA; 35. R2A, T4D?!

Esto todavía no deja escapar el triun­fo, pero más decisivo era 35 ..... , T8D; 36. D5R, DxPT+; 37. RlC (37. RlA, D8T+; 38. R2A, D7T+; 39. RlA, D7D+; 40. RlC, T4D), 37 ...... , T4D, con ata-que ganador. O 36. D4T, A3A, y no hay defensa satisfactoria contra 37 ....... , AxP.

36. T4R!

Spassky se defiende con ingenio; a 36 .. , ., TxC sigue 37. D4D+, seguido de

la captura del peón rey y evidente em­pate.

36 ...... , T1D.

La segunda de la serie de jugadas des­acertadas de Fischer. Como lo han se­ñalado con justicia los comentaristas, mejor era 36. .. ... , A3A. Ni 37. R3C, TxC; ni 37. T4CD,AxP+;38.R2C, T7D+; 39. RlA, T8D+; 40. R2C, A4C; 41. D7C+, R3C; ni, finalmente, 37. C3A, AxP+; 38. R2C, T8D; 39. D7C+, A2D; 40. T4D, D4C+; 41. R2T, D7R+; 42. R3T, T8T+; 43. R3C, T8C+; 44. R3T, D7C mate; sal­vaban a las blancas.

37. D7C, D4AR; 38. R3C, D4D+?

Era indispensable 38 ...... , RlT. En caso de 39. D5R, las negras por medio de 39 ...... , TlCR ganaban una pieza limpia, y si la torre se retiraba de 4R, el ataque de las negras seguiría desarro-llándose con éxito .. . . .39. R3T ....................... .

Por fin el rey negro ha hallado refugio.

39 •..... , D7D; 40. T4CD!, DBA+; 41. T2C.

La partida ya no se puede ganar.

41. . .... , DBT+; 42. T2T, D8A+; 43. T2C, DBT+.

Tablas. (Continuará)

¿Cómo estudiar y practicar aje­drez, a un tiempo? ¿Cómo hacer amistad con aficionados del exte­rior? ¿Cómo jugar diversos tor­neos desde el lugar más apartado?

Escriba a la

Liga Argentina de Ajedrez por Correspondencia

Congreso 1846 - Haedo - Bs. Aires

¡Z5 años de Teleajedrez!

Page 49: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

NOVIEMBRE DE 1972 AJEDREZ 631

Nuevo Finalista Argentino

El señor Oreste D. Daniele, dsstacado ajedrecista del Club Argentino Vila, de la localidad de Vila, provincia de Santa Fe, y que actualmente pertenece al Club J. R. Capablanca, de la ciudad de Ra­faela, de la misma provincia, donde en 1971 ganó el Torneo Selección organiza­do por la Federación Rafaelina de Aje­drez y luego compartió el primer puesto en el Torneo Mayor, clasificándose final­mente subcampeón de dicha Federación, nos ha enviado un interesante final que le pertenece y que, suponemos, constitu­ye su primera incursión en esta poética rama del ajedrez

Agradecemos la deferencia del señor Daniele y lo felicitamos por su feliz ini­ciativa, que por cierto, si persevera en su empeño, ha de proporcionarle más de una satisfacción.

Oreste D. Daniele (Inédito)

DEDICADO A "AJEDREZ"

Jueras las blancas 7 rauau

Por José Mugnos

A nuestro juicio, un final de partida viva admirablemente transformado en un final artístico, con todos los atributos exigibles para el arte de la composición. Por otra parte, realzan el mérito de la obra el hecho de estar basada en un te­ma con alfiles de distintos color ( «teó­ricamente:. de nulidad), el imprevisto autoencierro del alfil negro y el zug­zwang que al fin se produce, que en definitiva es la idea medular del motivo.

He aquí su instructiva solución:

l. R5A! Si l. P5CD?, R3D, y se esfumaron to­

das las «chances» de las blancas. Y si se pretende ganar mediante una trans­posición de jugadas, por ejemplo l. A3A?, podría seguir igualmente R3D; o bien, aclarando el panorama de una vez, l. ..... , AxP; 2. R5A, A7D; 3. R6C, A3T; 4. P5C, PxP; 5. A4C, R3D, etc., y tablas.

l ...... , R3D.

Para estar «a tiro» eventualmente, de apoyar la base de sus peones del flanco rey. Si, por otra parte, l. ..... , AxP; 2. R6C, A6A!; 3. A4R!!, R3D (si 3 ..... , P4A; 4. PxP, R3D; 5 .P6A!, y ganan); 4. A5A ,y ganan.

2. R6C, A3T. Contra 2 ...... , AxP; ya vimos que

las blancas tienen el recurso de A4R-5A. 3. R7A!! Si 3. A3A?, R2R!; 4. P4CR (si 4. P5T,

PxP; 5. PxP, RlA!!; 6. P6T, A6R; etc., y tablas), 4 ...... , PxP; 5. A4C, R3D; etc., y tablas.

3 ...... , R2D. Al no poder substituir al alfil en la

custodia de sus peones, el rey negro debe

Page 50: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

632 AJEDREZ NOVIEMBRE DE 1972

mantenerse dentro del cuadrado para impedir la fuga del peón torre enemigo. Si por ejemplo 3 ...... , R4R?; 4. P5T, PxP; 5. PxP, y se viene todo abajo. El último dance:) podría ser 5. . .... , P4A; pero seguiría 6. P6T (lo más seguro), A6R; 7. P5C, y ganan fácilmente.

4. A2C.

Un tiempo de espera (para desubicar al rey negro) que también puede hacerse en otras casillas de la diagonal, pero que encierra esta trampa fatal: si 4. A3A?, R3DI; 5. P5CR, PxP; 6. A4C, R4D!; y tablas. Es decir, que el alfil blanco debe estar en 3A, cuando el rey negro esté en 3D ¡y que les toque a éstas romper el equilibrio!

4 •.•... , R2A!

Precisamente para impedir A3A (la clave ganadora), porque en tal caso R3DI y las blancas tendrían la mano de jugar.

5. Rm!

Restándole a las negras la casilla vi­tal y obligándolas a buscar nuevos ho­rizontes.

5 ...... ,Rm.

Si 5 ...... , A7D; 6. A4R, AxP; 7. R7A, A6A; 8. A5A!, y ganan.

6. A6A, R2A. Si 6 ...... , A7D; 7. R7A, AxP; 8. RxP,

A6A; 9. R7A, etc., y ganan.

7. A3A!, A7D.

Si 7 ...... , RlD; 8. R7A, y, como en la variante principal.

8. R7A, A3T; 9. P5CR!, PxP; 10. A4C, R3D; 11. RSR, R4D; 12. R7D, R5A; 13. P5C!, R5C; 14. R6A, R4T; 15. R7C, P3C (obligado); 16. PxP, A2C; 17. R6A, A5D; 18. AlD, P5C; 19. AxP, RxP; 20. A7D, y ganan.

Un trabajo muy meritorio y sutil. Y si, como dicen «para muestra basta un botón» . . . no dudamos de que el señor Daniele ha de proporcionarnos nuevas satisfacciones.

* * *

Para finalizar vemos un par de ejem­plos que tratan el mismo motivo.

J. Berger

'THEORIE Y PRAXIS". 18t0

lnecan laa lllaaeu 7 caaaa

He aquí otro de esos finales cteórica­mente tablas:), que el talento e ingenio de los compositores transforma en verda­deras obras de arte.

l. R5A!

Si el rey no pasa ahora, ya no pasará más y el final sería tablas. Por ejemplo, 1. P6T?, A7A; 2. R5C, RID, y tablas ..

l ...... , R2R.

Si l. .... , P5C; 2. R6A, P6C; 3. A7D+, R2R; 4. A3T, RlD; 5. P6T, A7A; 6. P5C, y ganan.

2. R6A, RxA; 3. P6T, A7A; 4. P5C, P5C; 5. P6C, P6C; 6. P7T, P7C; 7. P8T=D+, R2R; 8. D3T+, RlR! (única); 9. P7C!, y ganan.

Más armonía y belleza con tan pocos medios, imposible.

* * * Una obra sumamente instructiva, des­

provista de artificios y que familiariza a cualquiera en la conducción de este tipo de finales. Es obvio que si el rey negro

Page 51: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr
Page 52: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr
Page 53: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr
Page 54: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

636 AJEDREZ NOVIEMBRE DE 1972 ' .

Poul Morphy, el Rey del A¡edrez

Mientras Jugaban

Durante dos largos meses todos los me­dios de información de nuestro país -diarios, revistas y radioemisoras - se ocuparon diariamente de tenemos al tan­to del desarrollo del match Spassky v. Fischer por el campeonato mundial. Fue un despliegue periodístico realmente ex­traordinario, fuera de lo común, y todo el mundo -hombres, mujeres y hasta niños, ajedrecistas o no- hablaba, opi­naba y discutía sobre sus alternativas. Infinidad de gente aprendió a mover las piezas y se agotaron todos los juegos, tableros, libros y revistas especializadas que se hallaban en venta. En una oca­sión vimos a un grupo de muchachos jó­venes, de pelo largo y pantalones va­quero, típicos de nuestra ciudad, que por lo general andan por las esquinas o los cafés, hablando sobre cualquier cosa me­nos ajedrez, reunidos en un quiosco de venta de cigarrillos, discutiendo sobre las alternativas de una de las partidas.

Esta imagen y otras tantas parecidas se repetían a diario en cualquier lugar de la ciudad. El mundillo del ajedrez es­taba en ebullición y constantemente se agregaban a él numerosos nuevos adep­tos. Los canales de televisión no que­daron al margen del movimiento e in­formaron a diario sobre lo que estaba ocurriendo en Islandia. También Robert Fischer apareció varias veces en la pan­talla chica, repitiendo «tapes:. de sus pre­sentaciones anteriores, en que lo vimos comentando diversos aspectos del juego durante su permanencia en Buenos Aires con motivo del match con Petrosian.

Por Ernesto O. Maeder

Fischer- Spassky

Una pregunta

En una de esas ocasiones el maestro internacional Miguel A. Quinteros, a quien acompañaba el locutor Leo Glei· zer, le preguntó a Fischer: c:¿Quién con­sideras que ha sido el ajedrecista más genial de todos los tiempos?:. c:Paul Mor­phy», le respondió sin vacilar. Hubiera sido interesante que en ese moment 'l también le preguntara c:¿Por qué?» Com prendemos que la charla no estaba prc. gramada para entrar en consideracionet sobre ese aspecto, sino para llegar en for­ma sencilla y atrayente a la gran masa de telespectadores, de modo que Fischer se limitó a mostrar en el tablero mural una partida de Paul Morphy.

Una joya del ajedrez

N os referimos a la que se jugó en el antepalco de la Opera de París, en oc­tubre de 1858, entre Morphy, por un lado y el duque Karl von Braunschweig, más conocido como duque de Brunswick, y el conde Isouard, por el otro, en consul­ta. Algunos autores dicen que fue du­rante la representación del «Barbero de Sevilla» y otros «Las bodas de Fígaro:. o c:Norma», lo cual, sea como fuere, le dan sabor a la anécdota. Morphy era muy aficionado al buen teatro y a la música y le hubiera gustado presenciar el es­pectáculo, pero se vio obligado a jugar ante la insistencia del duque, que fue criticado al día siguiente en los diarios, por considerar que era un verdadero sacrilegio hacer tal cosa en la Opera.

Page 55: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr
Page 56: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

638 AJEDREZ NoVIEMBRE DE 1972

aprendió así, siendo más joven aún. Su padre supo guiar inteligentemente su in­nata vocación para no interferir en el curso normal de sus estudios, al permi­tirle que solamente jugara con él o con sus parientes durante los días feriados o cuando estaba de vacaciones. Progresó rápidamente y pronto les ganaba no sólo a ellos sino a otros fuertes jugadores, causando asombro por la facilidad con que conducía sus partidas.

Paul cursó sus estudios primarios en su ciudad natal y los secundarios en Spring Hills. También aprendió a hablar el francés, el alemán y el español. A los veinte años obtuvo el título de abogado, con altas calificaciones.

Sus primeras partidas

Durante sus años juveniles, hasta 1849, sin duda jugó muchas partidas, pero so­lamente veintidós de ellas han quedado anotadas. Entre éstas, aparte de las ju­gadas con su padre y sus parientes, se conocen algunas en que sus adversarios fueron fuertes jugadores y otras en las que dio ventajas de caballo, torre, torre y caballo y hasta de dama, circunstan­cias por las cuales son de un valor rela­tivo. En esa época, según relata D. Law­son en «Chessworld>, 1964, Paul jugó alrededor de cincuenta partidas con Eu­gene Rousseau, pero sólo una de ellas, muy breve, quedó anotada a raíz de ha­bérsela enviado Ernest Morphy a Kiese­ritzky, que la publicó en 1851 en «La Régence>, de París, como «una hermosa partida que honraría a nuestros mejores aficionados>.

Una «Pinturita•

Una de las más antiguas de sus par­tidas, al menos de las conocidas, fue ju­gada en 1849, cuando tenía doce años. En esa ocasión lo «pintó> a papá Morphy, según veremos a continuación.

Pablo Porphy v. Alonzo Morphy

l. P4B, P4R; 2. C3AR, C3AD; 3. A4A, A4A; 4. P4CD, AxP; 5. P3A, AtA; 6.

P4D, PxP; '7. PxP, A3C; 8. 0-0, C4T; 9. A3D, P4D?; 10. PxP, DxP; 11. A3T, A3R; 12. C3A, D2D; 13. P5D!, AxP; 14. CxA, DxC; 15. A5C+!, DxA; 16. TlR+, C2R; 1'7. TIC, D3T; 18. TxC+, RlA; 19. D5D, D5A; 20. TxPA+, RlC; 20. T8A mate.

Paul juega con un general

También relata Dawson que en di­ciembre de 1846, el teniente general Win­field Scott se detuvo en Nueva Orleáns, en viaje ! México, para asumir allí el mando de las tropas americanas. Tenía fama de ser un buen ajedrecista y las cosas se arreglaron para enfrentarlo con el joven Paul. Era la primera vez que jugaría en público, en presencia de pro­minentes personajes y amistades del ge­neral, «Un gigante como una torre>, se­gún la crónica aparecida poco después en «The Evening Posb.

A Paul le tocaron las blancas, y a las diez jugadas, antes de que su adversario hubiera conseguido movilizar sus piezas, el chico le dio mate. En seguida jugaron otra partida, que también ganó Paul con facilidad. El general se levantó temblan­do, entre admirado y furioso a la vez, sin comprender qué había pasado. Así terminó el episodio y el modesto Paul regresó a casa, silencioso y taciturno co­mo siempre.

Por primera vez enfrenta a un maestro

Tiempo después, llegó a los Estados Unidos, procedente de Inglaterra, un re­fugiado político húngaro. Era el maestro Johann Jacob Lowenthal. Después de imponerse a Stanley y otros buenos ju­gadores neoyorquinos, logró sucesivos éxitos en Lexington, Louisville y Cinci­nati. Llegó a Nueva Orleáns el 18 de mayo de 1850 y conversando con Rous­seau y Ernest Morphy, pronto oyó men­cionar a Paul y accedió a jugar con él Sería la primera vez que tendría ocasión de medirse con un maestro; es más, un maestro que en ese entonces ya tenia fama mundial.

Page 57: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

NOVIEMBRE DE 1972 AJEDREZ 639

Jugaron tres partidas: la primera re­sultó tablas y las otras dos las ganó Mor­phy, pero según la recopilación de Ma­roczy, sólo han quedado anotadas dos. En una de ellas se planteó una defensa siciliana y en la otra, una defensa Pe­troff, ambas ganadas por Morphy. Lo­wenthal debe haber subestimado la ex­traordinaria capacidad del chico y es posible que haya jugado por debajo de su fuerza habitual, pero admitió con toda franqueza que su joven adversario po­dría medirse con los mejores jugadores de la época. Nunca se habría imaginado que ocho años más tarde, él mismo lo consideraría el maestro más grande que haya existido. Tampoco a Morphy se le habrá cruzado por la imaginación que al­gún día llegaría a disputar un match «de veras» con Lowenthal.

Una pequeña historia

Pero volvamos a una de las partidas mencionadas más arriba. Se trata de la que jugó Morphy, con blancas, contra Lowenthal, que opuso una defensa Pe­troff. Según la recopilación de Maroczy, publicada en 1924, terminó en tablas. Resultaría largo transcribirla íntegra­mente, de modo que nos limitaremos a mostrar la posición a que se llegó res­pués de la jugada 54 de las negras.

Lowenthal

Morphy

El juego prosiguió así:

55. R4A, R3A; 56. T5T?

«Con 56. P6T, ASC; 57. T7C, A6R; 58. TSR se ganaba fácilmente:., dice Maroczy en sus comentarios.

56 ...... , A8C; 57. T6T+?

«¡Una equivocación! También ahora -prosigue--, las blancas podían ganar con 57. T7T seguido de 58. P7T, etc.».

57 ...... , R2A; 58. R5C, RlC.

La partida resultó tablas, pero en rea­lidad fue ganada por Morphy. En efecto, según relata el ya mencionado D. Daw­son en «Chessworld», cuando años más tarde Morphy estuvo en Inglaterra, na­ció una gran amistad entre éste y Lo­wenthal, y hasta le dio alguna ayuda económica, aparte de su colaboración pa­ra publicar una colección de sus parti­das. Es posible que, en consideración a la sensibilidad de LOwenthal, Morphy

Disponemos de Relojes de ajedrea alemanes

• • Medidas: 22 x 12 cms.

• • Distribuidores exclusivos en

Capital 7 Gran Buenos Aires: CASA ZANZI - Sarmiento 1200 Buenos Aires - T. E. 35 - 6625

Page 58: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

640 AJEDREZ NOVIEMBRE DE 1972

accediera a publicar la partida que he­mos visto, haciéndola aparecer como ta­blas, en cuyo caso habrían jugado en su tiempo solamente dos, de las cuales Lo­wenthal habría perdido una sola. Por otra parte, si se acepta la versión de Er­nest Morphy sobre el verdadero resulta­do de la partida, el juego fue ganado en verdad por Morphy. En la posición del diagrama las blancas jugaron 55. P6T, y las negras abandonaron, según se des­prende inequívocamente de las cartas del citado Ernesto Morphy a Marache y Staunton, en 1856.

Sus partidas y un problemita

Durante su juventud, hasta llegar a los 19 años, Morphy debe haber jugado con seguridad muchas partidas, pero infor­tunadamente sólo 22, entre ellas 6, en

que dio ven­taja material, quedaron anotadas.

A los nue­ve años com­puso el senci­cillo e inge­nuo proble­ma, propio de su corta edad, que aquí ve­mos. Es el único que se conoce y fue publicado por

primera vez en Nueva York, en 1856.

El primer torneo en los Estados Unidos

Llegamos ahora a la época más inte­resante de la carrera estelar de Paul Morphy.

En el año 1857 el Club de Ajedrez de Nueva York resolvió organizar el primer torneo americano, del cual surgiría ta­bién el primer campeón nacional. Se ins­cribieron catorce de los más calificados aspirantes, Morphy inclusive, proceden­tes de diversos Estados de la Unión, así como dos maestros alemanes residentes en el país: Th. Lichtenstein y Louis

Paulsen, este último conocido por sus entonces sorprendentes exhibiciones sin ver el tablero.

El juez Meek, de Alabama, hombre de gran prestigio, asombró a los neoyorqui­nos al afirmar que había jugado con Paul y no dudaba que se adjudicaría infaliblemente el certamen.

El torneo comenzó el 6 de octubre. Una vez efectuado el sorteo por parejas, los integrantes de éstas debían jugar has­ta que uno de ellos consiguiera tres pun­tos. El perdedor quedaba eliminado y, previo nuevo sorteo, se proseguía jugan­do así hasta llegar a dos finalistas, que debían competir por el primer puesto en un match a cinco puntos. Un sistema similar al que se empleó en Londres, 1851.

En las rondas de clasificación Morphy venció a Thompson y a Meek por 3 a O y a Lichtenheim por 3 a O y 1 tablas, en tanto Paulsen conseguía los mismos re­sultados ante Calthrop, Montgomery y Raphael, de modo que los dos jóvenes maestros quedaron finalistas. Morphy te­nía entonces 23 años.

El match entre los finalistas

El sorteo por la salida favoreció a Morphy, que ganó la primera partida; la segunda resultó tablas y la tercera terminó a favor de Paulsen, igualando momentáneamente el puntaje. La cuarta finalizó empatada, pero luego Morphy se adjudicó las restantes y venció, por lo tanto, por 5 a 1 y 2 tablas.

Una de las partidas

No seguiremos adelante sin mostrar al menos una de las partidas jugadas en el torneo. Es la sexta del match final, con los comentarios del gran maestro húngaro Géza Maroczy en su ya men­cionada colección de partidas.

L. Paulsen v. P. Morphy

l. P4R, P4R; 2. C3AR, C3AD; 3. C3A, C3A; 4. A5C, A4A; 5. 0-0, 0-0; 6. CxP, TlR; 7. CxC.

Page 59: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr
Page 60: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

642 AJEDREZ NOVIEMBRE DE 1972

matar brillantemente el juego, anuncian­do mate en cuatro. Por ejemplo: 23 ... . . , A5R; 24. R1A, A4AR!; 25. D2R, A6T+; 26. RlR, T8C++:..

24. RlT, AxP; 25. DlA, AxD; 24. TxA, T7R; 27. TlT, T6T; 28. P4D, A6R.

Las blancas abandonaron. Esta partida tuvo una duración de 4

horas.

Los premios

El notable éxito de Morphy suscitó gran entusiasmo y el premio de honor le fue entregado festivamente. Consistía en un magnífico juego de plata maciza compuesto de un jarrón y una bandeja,

RELOJES

CONTROL AJEDREZ FABRICANTE:

J. J. SPITERI Av. SEGUROLA 3054

T. E. 567 - 3114

sobre la cual estaban grabadas las figu­ras de Morphy y Paulsen frente al ta­blero y la inscripción: «A Paul Morphy, ganador del G:.'an Torneo del Primer Congreso de la Asociación Americana de Ajedrez. Nueva York, 1857,.

En nombre del club, el mismo Morphy entregó a Paulsen una artística medalla de oro con la imagen de este último ju­gando a la ciega contra cinco adversa­rios. Al felicitar públicamente a su ven­cedor, Paulsen expresó que <<ni Ander­ssen ni Staunton habrían tenido chance alguna contra él y también habría ven­cido a Philidor y de Labourdonnais si vi­vieran,.

(Continuará).

Modernos relojes de ajedrez en cajas de madera de Guatambú seleccionado, con seguridad en el sistema de freno. Seguridad en los pendulitos (flechas) que caen con exactitud al marcar cada hora. Tapa corrediza con cierre hermético.

GARANTIZADOS POR DOS A:R'OS

Novedad revolucionaria en relojes de ajedrez Reloj igual al precedentemente anunciado, pero con un contador que indica

las jugadas que se van realizando. Algo excepcional para torneos, pues facilita la tarea de los jueces y evita discusiones al llegarse al control del tiempo.

Pedidos e informes: J. J. Splteri

Page 61: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

NOVIEMBRE DE 1972 AJEDREZ 643

Tercer Memorial Aleiandro Alekhine,

Moscú, 1971

QUINTA RUEDA

Smyslov . . . . . . . 1 Petroslan . . . . . . O Savon . . . . . . . . . % Stein . . . . . . . . . . % Parma . . . . . . . . . % Korchnoi . . . . . . % Olafsson ...... % Bronstein ...... % Gheorghlu ..... % Bort ..........• % Byme ......... % Karpov ....... % Balashov . . . . . . % Tal . . . . . . • . . . . . % * Spassky ....... % * Tukmakov . . . . . %

Smyslov v. Petroslan

La partida central de la quinta rueda, muy tensa y compleja por sí misma y que más se destacaba aún en el pano­rama general en que hubo algunas tablas rápidas. Petrosian escogió una variante sólida, pero pasiva, del Gambito Dama. Es interesante se:fialar que hasta el 149 movimiento este encuentro tuvo el mis­mo desarrollo que el de Alekhine v. Az­talos (Kesckemet, 1927). Alekhine con­sideraba la variante dificil para las ne­gras y, según vemos, tal apreciación se mantiene vigente después de 45 años. Con todo, no era fácil vulnerar la po­sición de las negras, pero Smyslov puso de manifiesto un juego magnifico. Cabe destacar los siguientes eslabones en el plan de las blancas: 1) 15. P5A, amena­zando eventualmente trasladar el caba­llo a 6D, lo que obligó a su adversario, después de 15. . .... , P4CD, a debilitar su peón 3AD. 2) 20. P4TR y 21. P5T, complejo plan de ataque en el flanco rey. Además, Petrosian se encontró sumamen-

te apremiado por el tiempo y, si bien la partida fue suspendida, la rindió sin re­anudar.

Parma v. Korchnoi

Korchnoi lucha en cada partida con mucha voluntad. En la variante Tarrasch de la Defensa Francesa, las blancas lo­graron pequeña superioridad, pero el maestro Korchnoi cambió violentamente el carácter de la lucha capturando con osadía el peón en el flanco dama. Parma obtuvo algunas posibilidades en el lado opuesto; Korchnoi, empero, se defendió con una buena maniobra: TlR- T3R. La partida pasó a un final de piezas meno­res, favorable para las negras, pero en la sesión complementaria terminó tablas.

Olafsson v. Bronstein

Se planteó una compleja lucha estraté­gica. Las blancas organizaron fuerte pre­sión en el flanco dama. Bronstein sacri­ficó ingeniosamente calidad. En posición poco clara y con escasez de tiempo (20 minutos para 18 movimientos), las blan­cas ofrecieron tablas.

Balashov v. Tal

En la apertura las negras no lograron explotar su momentánea superioridad en desarrollo, en tanto que las ventajas po­sicionales de las blancas (primero el ca­ballo en 5D y luego, como consecuencia, la presión sobre el peón 6D) se mantu­vieron. Posteriormente, después de una lucha interesante, Balashov organizó dos peones pasados y unidos, pero ya en las últimas jugadas reglamentarias jugó sin exactitud. Tal, aun apremiado por el

Page 62: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr
Page 63: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr
Page 64: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

646 AJEDREZ NoVIEMBRE DB 1972

enemigas. Y asf, por ejemplo, el c:bien ubicado caballo blanco en 6CR, mero tes­tigo de la lucha en el flanco rey. Suma­mente apremiadas por el reloj, las blan­cas pasaron por alto el poco complejo golpe 27 ...... , TxPR, y la caída de la flechita sancionó su derrota cuando la posición ya estaba perdida.

Tukmakov v. Gheorghiu

La violenta lucha planteada en esta partida nb tuvo una conclusión lógica y terminó con la división del punto en el mutuo sofocón de los últimos segundos del tiempo reglamentario.

Bronstein v. Lengyel

Bronstein planteó la variante del cam­bio en una Ruy López, que con frecuen­cia se ha presentado en la práctica de Fischer. En el transcurso de las compli­caciones tacticas (movimientos 289 al 329) logró pasar a un final de torres con peón de ventaja y finalmente imponerlo.

NUMERO 46

GAMBITO DAMA ACEPTADO

Petroslan v. Spassk:v

1. P4D, P4D; 2. P4AD, PxP; 3. CR3A, C3AR; 4. P3R, P3R; 5. AxP, P4A; 6. o-o, P3TD; 7. P4TD, C3A; 8. D2R, A2R; 9. T1D, PxP; 10. PxP, Q-0; 11. C3A, C4D; 12. D4R, C(3)5C; 13. C5R, T2T; 14. A3C, C3AR; 15. D4T, P3CD; 16. D3C, A2C; 17. A6T, C1R; 18. TDlA, R1T.

19. P5D, PxP; 20. A3R, T1T; 21. C4A, C3D; 22. AxP, D1C; 23. C5T, C4A; 24. DxD, TDxD; 25. CxA, TxC; 28. P5T, A4C; 27. T1C, P5D; 28. C5D, C3A; 29. A4T, T1A; 30. P4A, C(3) 2R; 31. TDlA, T(ll lCD; 32. PxA, CxC; 33. A6A, TxA; 34. PxT, C(4D) 8R; 35. P7C, CxT; 36. TxC, P3C; 37. P4CR, C2C; 38. TxP, C3R; 39. T7D.

Las negras se rindieron.

N9 4'7

DEFENSA FRANCESA

Tal v. Uhlmann

Las reflexiones sobre la primera juga­da me llevaron mucho tiempo, pero no frente al tablero. Tenía muchos deseos de sorprender con algo al gran maestro alemán, pero después de una simple transposición de jugadas en la apertura resultó evidente que era casi imposible hacerlo. Por tal motivo fue decidido fijar la elección en l. P4R cifrando los cálcu­los en el efecto psicológico de la quinta jugada de las blancas que da a la partida c:un carácter menos francés:..

l. P4R, P3R; 2. P4D, P4D; 3. C2D, P4AD; 4. CR3A, C3AD; 5. A5C.

En el último campeonato de la U.R.S.S. esta continuación (recomendada en su tiempo por A. Alekhine) fue experimen­tada dos veces: en las partidas Karasiov y Tteitlin con Vaganian. En la segunda de ellas se jugó: 5 ...... , PAxP; 6. CxP, A2D; 7. CxC, AxC; 8. AxA+, PxA; 9. P4AD, C3A?; 10. D4T, D2D; 11. P5R, con ventaja de las blancas. Igualmente des­pués de la mejor continuación (según los comentarios) 9 ....... , P5D; 10. 0-0, P4AD; 11. P4A, la posición nos resultó, durante la preparación, también de nues­tro agrado.

5 •..... , PDxP.

Uhlmann pertenece al número de aje­drecistas que no hilan muy fino y, por regla general, juegan rápido la apertura. Su reflexión por más de 20 minutos en la quinta jugada demostró que la mina psicológica había producido efecto.

6. CxP, A2D; '7. A5C!

Page 65: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr
Page 66: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr
Page 67: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

NOVIEMBRE DE 1972 AJE.lJREZ 649-

A2C; 11. A4A, A3D; 12. AxA, DxA; 13. TRlD, <r-O; 14. P4R, PxP; 15. CXP, D2A; 18. D2R, T2T; 17. TDlA, DlC; 18. P4TD, AlT; 19. P4CD, TlA; 20. P5C, T(2)2A; 21. P5R, AxA; 22. RxA, D2C+; 23. C8A, ClR; 24. DSA.

24 .••••. , CxP; 25. CxC, DxD+; .28. CxD, PxP; 27. C2T, TxT; 28. TxT, TxT; 29. CxT, PxP; 30. CID, C3D; 31. C2T, P4R; 32. C8A, P3A; 33. C3A, P«lD; 34. R3A, R2A; 35. R2R, R3R; 38. RlD, R4A; 87. P3T, P4T; 38. R2A, P5T; 39. PxP, R5A; 40. C7T, R8A; 41. C(7) xP, CxC; 42. CxC, RxP; 43. C8D, PSC; 44. C4R+, R8A; 45. C5A, P8T; 48. R3C, P5R; 47. RxP, P4A; 48. ¡pe, RGC; 49. R3A, AxP(8T); &0. RID, RxP; 51. R3R, P4C; 52. C8R, R5C; 53. C4D.

Tablas. NUMERO 53

DEFENSA TARRASCH

Steln v. Parma

l. NAD, P4AD; 2. CR3A, CD3A; 3. C3A, C3A; 4. P3CR, P3R; 5. A2C, A2R; 8. <r-0, 0-0; 7. PID, PID; 8. PDxP, AxP; 9. PxP, PxP; 10. C4TD, A2R; 11. A3R, TlR; 12. TIA, A5CR; 13. P3TR, A3R; 14. C4D, C4R; 15. P3C, D2D; 18. CxA, PxC; 17. C5A, AxC; 18. TxA, P3CD; 19. T3A, C2A; 20. D2A, TOlA; 21. TlA, C3D; 22. A4A, TxT; 23. DxT, TlAD; 24. D2C, C2A; 25. TlD, D2R; 28. P4CR, P3TR; 27. A3C, D4A; 28. TlAR, P4TD; 29. P3R, D8A; 30. D2R, C5R; 31. A2T, D3AD; 32. P4TR, C3A; 33. A4A, D7A; 34. D8T, D3A; 35. P4R, TlT; 36. PxP, PxP; 37. D3D, D3R; 38. P5C, PxP; 39. PxP, C5R; 40. A3T, D3C; 41. DxP, TlD; 42. D8R, DXD; 43. AxD, RlA; 44. A4A, TlR; 45. A3R, C(5)xPC; 46. AxP, PST; 47. A5A-j', RlC; 48. P4A, C5R; 49. TlR, PxP; 50. PxP, P4C; 51. A5D, C3A; 52. TxT+, CxT; 53. PxP, R2C; 54. AxC.

Las negras se rindieron.

NUMERO 54

DEFENSAGRUNFELD

Smyslov v. Savon

1. P4AD, CR3A; 2. C3AD, P3CR; 3. C3A, A2C; 4. P4D, P4D; 5. PxP, CxP; 8. A2D, P4AD; 7. TIA, CxC; 8. AxC, PxP; 9. CxP, 0-0; 10. P3R,D4D; 11. D3C, DxD; 12. CxD, C3A; 13. AXA, RxA; 14. A5C, A3R; 15. AxC, PxA; 16. TxP, A4D; 17. T5A, AxP; 18. TIC, A5R; 19. T5R, A8C.

Tablas.

CADAP INFORMA:

La Confederación Americana de Ajedrez Postal (CADAP)

1) Le ofrece!!!

a) Torneo Temáücos Para espe­cializarse en una linea de juego de su interés.

b) Torneos de Ascenso: Para com­peür en diversas categorías en la lucha hacia el Campeonato Mundial.

e) Torneos Individuales Latino­americanos: Para establecer el Campeón de Latinoamérica, con clasificación para participar en el Campeonato Mundial.

d) Torneos por Equipos: Para par­ticipar con su Liga Nacional en las Olimpíadas o con equipos independientes en otros Cam­peonatos por Equipos Laüno­americanos.

e) Ajedrez Postal Americano: La revista de la Confederación Americana de Ajedrez Postal, con informaciones de interés general, lineas teóricas de úl­timo momento, noticias sobre los torneos próximos a comen­zar, etc.

2) Le solicita!!!

a) Ser afiliado a la liga nacional del país de residencia (siempre en el área de Latinoamérica).

b) Dirigirse para mayor informa­ción a la Oficina de CADAP, Secretaría General, calle

Charcas 4729, Buenos Aires,

ARGENTINA

Page 68: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

650 AJEDREZ NOVIEMBRE DE 1972

La Transformación de Ideas en

los Finales de Estudio

Las ideas que se ocurren a los compo­sitores en los finales de estudio con fre­cuencia cambian aspectualmente y se transforman en producciones indepen­dientes. Este proceso es ininterrumpido y representan en sí una importante con­dición de progreso en la composición de finales. Si con ello se logra algo nuevo e interesante, que se distingue de lo precedente, entonces el trabajo del com­positor alcanza su objetivo.

El siguiente episodio, vinculado con el des..:ubrimiento de una falla en un final (predecesor), no es carente de interés.

F. Sackmann, 1910

En 1910 el compositor alemán Franz Sackmann compuso un final de estudio en el cual surge Lln interesante desenla­ce conducente a tablas posicionales. La idea del autor es como sigue:

Por el maestro G. Kasparian (Especial para Ajedrez

l. P7A, T3AD; 2. P7R, T(3T)3R; 3. C6D!, T(3R)xC+; 4. R4R, T3R+; 5. R5D, T(3A)3D+; 6. R5A. T<ablas.

Aquí la amenaza de distraer una de las torres mediante la coronación de uno de los peones fuerza tablas.

Sin embargo, en 1937 V. Chejover re­futó la idea de F. Sackmann mediante

3 •..... , T(3A)xC+; 4. R4A, R2C!, y las negras ganan.

Naturalmente, el final de F. Sackmann requería una corrección.

Y tal corrección la publicó A. Cheron en 1945, desplazando las fuerzas funda­mentales una casilla hacia la izquierda:

A. Cheron, 1945

Tablas

Page 69: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

NOVIEMBRE DE 1972 AJEDREZ 651

l. P7C, T3C; 2. P7D, T(3T)3D; 3. C6A, T(3C)xC+; 4. R4C, T3C+; 5. R5A. Ta-blas. O 3 ...... , T(3D)xC+; 4. R4D, T3D+; 5. R5A, y también tablas. Esta corrección parece bastante acertada, ya que ha sido lograda sin agregar material.

Pero tampoco aquí faltaron aconteci­mientos. Después de veinte años, V. Ve­prentsev en 1965 publicó una bonita refu­tación a la corrección de A. Cheron por medio de 3 ..... , R2T!; 4. R4A, T(3C)xC+; 5. R5C, T7A!; 6. P8C=D, T8D!!, y las negras ganan. Esta refutación fue utili­zada por otro finalista, L. Olmutski, quien creó un hermoso final ganalor.

L. Olmutski

Primer premio

«Sotsialistichna Jarkivschina», 1963

Juegan las blancas y ganan

La variante principal de este final es: l. T3T+, R5C; 2. TD3C+, R5A; 3. T(3T)3A+, R5D; 4. T3D+, R5A; 5. T(3C)A+, R5C (si 5 ...... , R4C, enton-ces 6. TSD); 6. T7A!, P8C=D; 7. T8D!!, R6T; 91 T7T+ y las blancas ganan. La segunda variante, que complementa la idea fundamental, también es interesan-te: 2 ...... , R5T; 3. T(3C)3C!, P8D=D (o P8C=D); 4. T4T+, R4C; 5. T5C+, R3A; 6. T6T+, R mueve; 7. T7C+, y ganan.

Parecería que el episodio podría fina­lizar ahí, puesto que la idea de tablas

de F. Sackmann condujo al nacimiento de una idea totalmente nueva, de un brillante final ganador, expresada en el trabajo de L. Olmutski. Pero en 1964 T. Georgiev decidió volver una vez más al final de F. Sackmann, corregirlo y di­namizar algo la introducción.

T. Gorgiev

«Shajmaty v SSSR», 1964

Tablas

l. C6A!, TxC; 2. P7R, T(3AR)3R; 3. P7C, T3T+; 4. R2C, T(3T)3C+; 5. R3A, T(3A)3R; 6. A3A+, R2T; 7. A6A!, T(3R)xA+; 8. R4R, T3R+; 9. R5A. Ta-blas. O 7 ...... , T(3C)xA+; 8. R4C, T3C+; 9. R5A. Tablas.

Dos atrayentes sacrificios, de caballo y alfil, en la misma casilla 6AR crean una interesante posición final.

¿Qué deducción surge de este episo­dio? Ante todo: la ininterrumpida bús­queda de los compositores y solucionis­tas conduce al surgimiento de nuevas ideas y descubre más ampliamente los misterios de las inagotables bellezas del arte ajedrecístico. Y eso representa la fuerza motriz en la composición de fi­nales y la base del progreso.

Traducido del ruso por

Antonio Pilarche

Page 70: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

652 AJEDREZ NOVIEMBRE DE 1972

SOLUCIONES A ¿COMO SE GANA?

(Ver página 617)

N9 l. Diemer-Vetter, Rastatt 1953. l. TxP+, RxT; 2. T3AG, ganando. Si 2 ...... , R1R; 3. D4R+, R2D; 4. D6R mate.

N9 2. R. García-Pelekan, Buenos Aires 1961. l. D2R!, A2R; 2. CxPA!, PxC; 3. TlR, 0-0; 4. DxA, P4C; 5. AxP, T2A; 6. D8D+, TIA; 7. D7R!, T2A; 8. D6D, D6A; 9. T8R+, R2C; 10. AGT+ ganando. Si a) l. ..... , AxT; 2. AxA!, DxA; 3. CxPA+ dese., etc. o b) l. ..... , PxC; 2. DxP+, R2D; 3. T4AR, T1CR; 4. T7A+, A2R; 5. TlR, T1R; 6. A4A, etc. Y a b) 2 ...... , R2A; 3. DxT, AxT; 4. D7T+, R3A; 5. D4T+, etc.

N9 3. Richter-Lachmann, Stargard 1932. l. TGA!!, D2T; 2. D7R+!, ganando. Si l. ..... , P4TR; 2. T1C+, R2T; 3. A8C+, TxA; 4. T6T mate.

N9 4. Goldsmith v. Esling (Melbourne Chess Club, 1880). l. DxC+, RxD; 2. TlD+ y a la me­jor defensa dan mate en 3.

* * *

SOLUCIONES A PROBLEMAS

(Ver página 620)

N9 l. l. A8T! N9 2. l. D3TR! N9 3. 7. C7AR. N9 4. l. A 7TR.

SOLUCIONES DE «LA FANTASIA EN AJEDREZ»

(De la página 635)

N9 l. José M. Martínez: A) l •...... , R3D;A5T,A3R;P5D,A2D;3.A4C mate. B) l •..... , P6D; RGD, AGR; A5D+, R5D; 3. C5C mate.

N9 l. B. Borwistz: l. TGCR, R juega; 2. T2C, .... , 3. T8T+, .... , 4.A3T!, .... , 5. T6T+, ..... , ó. TGD, .... , "1. R7R, .... , 8. AlA!, .... ,9.C2A!, 10. C3D mate.

No 3. D. Weiskopf: l. A3T+, ..... , 2. TlD+, ...... , 3. A4C!, ...... , f. DxC+, DxD mtte. En este problema y en el prece­dente las respuestas de las negras son forzadas.

N9 4. V. Fenoglio: l. A7T, R3R; 3. D2C, 4. RxP, ..... , 8. R8T, 9. D7C - l. 0-0 mate.

REVISTAS EXTRANJERAS

Subscripciones - Año 1973 Shajmati (en ruso), Shajmati

bulletin (en ruso), Sahovski Glas­nik (en yugoslavo), British Chess Magazine (en inglés), Chess Life and Review (en inglés), Deutsche Schachzeitung (en alemán), Euro­pe Echecs (en francés), Italia Scac­chistica (en italiano), Magyar Sak­kelet (en húngaro), etc.

Informes y consultas a

Librería Caissa

Lavalle 1346, of. 9- T. E. 40-1327

Page 71: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr
Page 72: 206510116-Ajedrez-223-Nov-1972-Ocr

NUEVA BIBLIOTECA DE AJEDREZ

Obras escritas por maestros, de gran interés para profesionales y aficionados

Ediciones cuidadas. Tamaño 24 x 18 cm. A la rústica y encuademados en cuerina, con títulos estampados en oro. Para estos últimos deben agregarse al precio $ 4

Alekhine, Alejandro - Mis Mejores Partidas (1924-1937) ............ . Capablanca, J. R. - Fundamentos del Ajedrez ....................... . Czemiak, Miguel - El Final. (Estudio Completo de la Fase Final en

Toda Partida de Ajedrez) ........................................ . Dedrle, Frantisek - Finales Artísticos ............................... . Euwe, Max- Estrategia y Táctica en Ajedrez ...................... . Femández Coria- Palau - Grandes Partidas de Emanuel Lasker .... . Femández Coria - Palau - El Genio del Ajedrez: Pablo Morphy ...... . Filldor, Francisco A. D.- Análisis del Juego de Ajedrez ............ . Fine, Rubén - Finales Básicos de Ajedrez. Tomo 1 .................. . Fine, Rubén - Finales Básicos de Ajedrez. Tomo Il ................. . Grau, Roberto - Tratado General de Ajedrez. Tomo 1, Rudimentos ... . Gran, Roberto - Tratado General de Ajedrez. Tomo Il, Estrategia ... . Grau, Roberto - Idem, ídem, Tomo 111. Conformaciones de Peones •.. Grau, Roberto- Idem, ídem, Tomo IV, Estrategia Superior ........... . Gran, Roberto - Cartilla de Ajedrez .............................. . Horowitz y Reinfeld - Cómo planear la partida de ajedrez ......... . Kasparian, G. M. - 2.500 Finales. Tomo 1 .......................... . Kasparian, G. M. - 2.500 Finales. Tomo 11 ......................... . Mugnos, José - Mis Mejores Finales ............................... . Palau, Luis - Táctica moderna y sutilezas en las aperturas ......... . Palau, Luis - Combinaciones y Celadas en las Aperturas ....•....... Palau, Luis - El Extraordinario Ajedrez de Miguel Tal ........... . Palau, Luis - Ejercicios de combinación con finales brillantes ....... . Palau, Luis- Joyas del Ajedrez. Ciento Veinte Partidas Extraordina-

rias de Grandes Maestros ........................................ . Palau, Luis - Partidas Magistrales de Roberto Grau ............... . Palau, Luis - Tratado Completo de Aperturas. Tomo 1, Juegos Regu-

lares de Peón Rey ............................................... . Palau, Luis- Idem, ídem, Tomo 11, Juegos de Peón Rey y Defensas .. Palau, Luis - Idem, ídem, Tomo 111, Juegos de Peón Dama y Cerrados Tartakower, S. G.- La Moderna Partida de Ajedrez. Tomo 1, Juegos

Abiertos .......................................................... . 'I'artakower, S. G.- Idem, ídem, Tomo 11, Juegos Semiabiertos ...... . Tartakower, S. G.- Idem, ídem, Tomo 111, Juegos Cerrados .......... . Tartakower, S. G.- Sugestiones para la Estrategia Ajedrecística ...... . Tartakower, S. G.- Ideas Modernas en las Aperturas de Ajedrez ..... .

$ 23.50 , 17.-

, 16.­, 9.50 , 9.50 , 10.50 , 7.50 , 9.­, 26.­.. 21.­.. 24.­.. 24.­.. 24.­.. 24.­.. 9.58 .. 17.50 .. 30.­.. 30.­.. 8.50 .. 14.50 .. 11.50 .. 11.50 .. 15.-

.. 16.­

.. 9.58

.. 25.­

.. 25.­

.. 25.-

.. 12.50

.. 10.50

.. 10.50

.. 6.­

.. 15.50