19 23 de jericó al gólgota. (Las letras rojas)

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www.descubrelabiblia.org Las letras rojas Lucas 19-23 De Jericó al Gólgota. Para escuchar el audio: https://m.soundcloud.com/amishav/38-lucas-19-23-de-jerico- al?in=amishav/sets/instituto-b-blico-descubre Para ver el video: http://youtu.be/MiE0lyUBR7w?list=PLWD70me4azDLWmophEgwlvTj6HYAYhN58 Autor del comentario: José A. Sánchez Vilchis Transcripción: Humberto Rendón Rojas Jerusalén Israel, Enero 17 del 2015. En ésta historia que vamos a estudiar el día de hoy, podemos tener la seguridad que para un hombre llamado Zaqueo, los muros de Jericó cayeron, nombre que en hebreo es la palabra “Tzadik” que significa “justo” hombre observante de los mandamientos de Dios y esto podría representar la antítesis respecto de la profesión a la que se dedicaba. Estamos en las letras rojas de nuestro evangelio de Lucas en el capítulo 19 y estando en la entrada de Jericó vamos a reflexionar en éstas palabras, y vamos a reflexionar en ésta intención que tuvo Yeshúa de auto invitarse a casa de un publicano llamado Zaqueo; ésta es una historia muy conocida que se llevó a cabo aquí en Jericó y que leemos a partir del versículo 1; Lucas 19.- 1 Habiendo entrado Jesús en Jericó, iba pasando por la ciudad. 2 Y sucedió que un varón llamado Zaqueo, que era jefe de los publicanos, y rico,… Los publicanos eran cobradores de impuestos, eran judíos al servicio del imperio romano y por ello eran considerados traidores para la nación ya que estaban cobrando impuestos para una nación extranjera y dice que era jefe, por consiguiente era rico ya que se llevaba una comisión de todos los cobradores de impuestos y sin duda él mismo excedía en éstos cobros de manera que era un hombre muy corrupto y de mala fama de aquella época con un nombre de justicia; Lucas 19.- 3 procuraba ver quién era Jesús; pero no podía a causa de la multitud, pues era pequeño de estatura. 4 Y corriendo delante, subió a un árbol sicómoro para verle;

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Lucas 19-23

De Jericó al Gólgota.

Para escuchar el audio: https://m.soundcloud.com/amishav/38-lucas-19-23-de-jerico-

al?in=amishav/sets/instituto-b-blico-descubre

Para ver el video:

http://youtu.be/MiE0lyUBR7w?list=PLWD70me4azDLWmophEgwlvTj6HYAYhN58

Autor del comentario: José A. Sánchez Vilchis

Transcripción: Humberto Rendón Rojas

Jerusalén Israel, Enero 17 del 2015.

En ésta historia que vamos a estudiar el día de hoy, podemos tener la seguridad que para

un hombre llamado Zaqueo, los muros de Jericó cayeron, nombre que en hebreo es la

palabra “Tzadik” que significa “justo” hombre observante de los mandamientos de Dios y

esto podría representar la antítesis respecto de la profesión a la que se dedicaba.

Estamos en las letras rojas de nuestro evangelio de Lucas en el capítulo 19 y estando en la

entrada de Jericó vamos a reflexionar en éstas palabras, y vamos a reflexionar en ésta

intención que tuvo Yeshúa de auto invitarse a casa de un publicano llamado Zaqueo; ésta

es una historia muy conocida que se llevó a cabo aquí en Jericó y que leemos a partir del

versículo 1;

Lucas 19.- 1 Habiendo entrado Jesús en Jericó, iba pasando por la ciudad. 2 Y sucedió que un varón llamado Zaqueo, que era jefe de los publicanos, y rico,… Los publicanos eran cobradores de impuestos, eran judíos al servicio del imperio romano y por ello eran considerados traidores para la nación ya que estaban cobrando impuestos para una nación extranjera y dice que era jefe, por consiguiente era rico ya que se llevaba una comisión de todos los cobradores de impuestos y sin duda él mismo excedía en éstos cobros de manera que era un hombre muy corrupto y de mala fama de aquella época con un nombre de justicia; Lucas 19.- 3 procuraba ver quién era Jesús; pero no podía a causa de la multitud, pues era pequeño de estatura. 4 Y corriendo delante, subió a un árbol sicómoro para verle;

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porque había de pasar por allí. 5 Cuando Jesús llegó a aquel lugar, mirando hacia arriba, le vio, y le dijo: Zaqueo, date prisa, desciende, porque hoy es necesario que pose yo en tu casa. 6 Entonces él descendió aprisa, y le recibió gozoso. 7 Al ver esto, todos murmuraban, diciendo que había entrado a posar con un hombre pecador. 8 Entonces Zaqueo, puesto en pie, dijo al Señor: He aquí, Señor, la mitad de mis bienes doy a los pobres; y si en algo he defraudado a alguno, se lo devuelvo cuadruplicado. 9 Jesús le dijo: Hoy ha venido la salvación a esta casa; por cuanto él también es hijo de Abraham. 10 Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido. Éstas son las letras en rojo en las que nos vamos a enfocar. Yeshúa al ver la reacción de éste hombre cuando le dice: Zaqueo, date prisa, desciende, porque hoy es necesario que pose yo en tu casa… El mensaje de amor que encontramos en éstas letras rojas que es lo que hemos venido estudiando a lo largo de los evangelios, las letras rojas en donde hemos encontrado amor, gozo, verdad, esperanza y en particular estas letras nos ayudan a entender algo a cerca de nuestro Salvador y es que él se auto invitó a la casa de Zaqueo y la pregunta que viene hacia nosotros es: ¿Por qué se auto invitó a casa de Zaqueo? Ésta es una de las ocasiones en las que él se auto invita, podríamos decir que es muy atrevido en auto invitarse a las casa de éste hombre rico y lo hace por una sencilla razón, lo hace porque él conocía el corazón de Zaqueo aún antes de nacer, incluso en su brith milá le pusieron el nombre de Zaqueo que significa Tzadik, justo, él sabía que la intención de éste hombre en su corazón, él clamaba sin duda como el apóstol Pablo escribe en su carta a los romanos en el capítulo 7, Pablo dijo que en su mente él se deleitaba en la ley de Dios, que él anhelaba servirle a Dios con su mente pero se revelaba en sus miembros otra ley que lo llevaba cautivo a la ley del pecado y de la muerte y Pablo terminó diciendo: “Miserable de mí, quién me librará de éste cuerpo de muerte…” y con la actitud de Zaqueo podemos ver que él tenía éste mismo sentir del apóstol Pablo que aunque en su corazón él anhelaba y tenía la esperanza de conocer algún día de conocer al Mesías, que algún día viniera la justicia, la libertad del imperio romano, finalmente la realidad le golpeaba muy duro y la propia realidad de su persona, de la codicia que moraba en él, sin duda lo tenía en una profesión que sí hacía mucho dinero pero quizás, Zaqueo como muchos están insatisfechos, están en una profesión que no les gusta, que no es lo que les sacia, pero a fin de cuentas se daba cuenta que todo es lo mismo, que todo estaba lleno de corrupción y simplemente seguía la corriente, pero cuando ve a un hombre que le despierta la esperanza que enciende la mecha de su esperanza, de que es posible la libertad, de que es posible la justicia, de que es posible el reinado del Dios de Abraham, Isaac y Jacob, de seguro que su corazón palpitó lleno de esperanza y a pesar de todos los obstáculos que tenía incluso físicos como su propia estatura que no le permitía acercarse a Yeshúa por

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tanta multitud que le seguía, él se las ingenió, se subió a un árbol y desde ahí estaba anhelando aunque sea ver pasar a un portador de esperanza. Todo esto les aseguro que Yeshúa lo conocía y le dijo: Zaqueo, date prisa, desciende, porque hoy es necesario que pose yo en tu casa… Etas letras rojas nos dicen que Yeshúa te busca a ti antes de que tu le busques a él, no es que Zaqueo estaba anhelando ver a Yeshúa, sino que Yeshúa estaba anhelando ver a Zaqueo, Yeshúa estaba anhelando tener comunión con Zaqueo y fue tal el impacto de Zaqueo, mucho más grande que sus expectativas ya que él lo único que quería era verlo pasar por ahí, pero imagínense ver el impacto de éste hombre cuando Yeshúa le dijo: hoy me voy a quedar en tu casa, esto lo dejó sin palabras, con tanta gracia de parte de éste hombre portador de esperanza, portador del reino y fue tal el desplante de gracia que ejerció Yeshúa en él que por supuesto le llevó al arrepentimiento. Lo que nos guía al arrepentimiento es su amor, su gracia, su compasión, su misericordia y lo más grande de todo cuando tu y yo descubrimos que él con amor eterno nos amó y nos ha estado buscando, nos ha estado anhelando y eso fue suficiente para que Zaqueo menospreciara todos los bienes que tenía y en ése momento una respuesta obvia ante la gracia y el amor inmerecido de nuestro Salvador, una respuesta obvia es: La restitución, él en ése momento se arrepintió de todo o que había hecho y estuvo dispuesto a restituir cuatro veces más, incluso por encima de la letra de la ley ya que la ley dice que tú no tienes que compensar más lo que robaste pero él fue más allá de la letras de la ley y dijo que cuatro veces más les regresaría a todos los que les robó. Al final Yeshúa simplemente confirma ése retorno, ése arrepentimiento, la teshuvá de parte de Zaqueo diciendo: Lucas 19.-…Hoy ha venido la salvación a esta casa; por cuanto él también es hijo de Abraham. 10 Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido… Los muros caen cuando tú te das cuenta que Dios te anhela, te busca, mucho antes de que tu le busques incluso, de que Dios es hallado de todos los que no le hemos buscado desde antes él ya nos escogió a nosotros y no nosotros le escogimos a él y nos ha puesto para que llevemos fruto y ése fruto permanezca. Así que concentrémonos en ésas letras rojas del día de hoy; cualquiera que seas tú, justo de entre las naciones, hoy es necesario que Yeshúa more en tu casa porque él sabe y

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conoce el anhelo de tu corazón y él sabe que en tu corazón le buscas y que las circunstancias de tu carnalidad te han impedido el conocerle, pero ahora él está dispuesto a venir a ti, de manera que si tu simplemente tienes la disposición de conocerle, ten por seguro que es porque él ya te estaba buscando desde antes. Ahora nos encontramos en el monte de los olivos desde donde se tiene una panorámica extraordinaria de Jerusalén y ésta misma vista es la que tuvo Yeshúa cuando se presentó aquí en el monte de los olivos y fue proclamado el hijo de David y en ésta sección de las letras rojas podemos ser testigos de la razón por la cual el ver éste monte del templo a Yeshúa le causó tanta tristeza, porque Yeshúa al ver éste monte sin duda teniendo el espíritu de profecía pudo ver lo que sucedería aquí en el futuro y sabía que un día en éste lugar el templo sería destruido, él ya lo había profetizado y ahora, dos mil años después podemos ver un templo de una religión diferente que se ha levantado en éste lugar y es por eso que Yeshúa dijo en el capítulo 19 versículos del 41 al 44: Lucas 19.- 41 Y cuando llegó cerca de la ciudad, al verla, lloró sobre ella, 42 diciendo: ¡Oh, si también tú conocieses, a lo menos en este tu día, lo que es para tu paz! Mas ahora está encubierto de tus ojos. 43 Porque vendrán días sobre ti, cuando tus enemigos te rodearán con vallado, y te sitiarán, y por todas partes te estrecharán, 44 y te derribarán a tierra, y a tus hijos dentro de ti, y no dejarán en ti piedra sobre piedra, por cuanto no conociste el tiempo de tu visitación. Efectivamente ahí en las ruinas de éste segundo templo todavía podemos caminar por el interior donde están todas esas ruinas y podemos ver que efectivamente las piedras, las grandes piedras de toneladas del templo fueron derribadas y efectivamente no quedó piedra sobre piedra. Yeshúa expresó estas palabras al ver a Jerusalén diciendo: ¡Oh, si también tú conocieses, a lo menos en este tu día, lo que es para tu paz! Ésta ciudad que se conoce como la ciudad de paz, Jerusalén, la ciudad de paz, la única manera en que puede tener paz es a través del Príncipe de paz, reflexionemos en éstas letras rojas y sobre todo en tiempos de guerras, de rumores de guerras, donde cada vez nos acercamos más al desenlace de la historia que según los profetas, en especial Zacarías dijo:

Zacarías 12.- 2 He aquí yo pongo a Jerusalén por copa que hará temblar a todos los pueblos de alrededor contra Judá, en el sitio contra Jerusalén. 3 Y en aquel día yo pondré a Jerusalén por piedra pesada a todos los pueblos; todos los que se la cargaren serán despedazados, bien que todas las naciones de la tierra se juntarán contra ella.

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Jerusalén será justamente la causa de los conflictos finales, así que al ver todas éstas guerras, rumores de guerras y el pensar que son las naciones unidas o que es la religión o que es el esfuerzo humano lo que a de traer ésta paz, pensemos en éstas letras en rojo y pidámosle al que hace la paz en las alturas que haga la paz para nosotros y la paz para todo Israel, pero únicamente a través del Príncipe de paz, a través de Yeshúa. Yeshúa tú dijiste que no te volveríamos a ver hasta que dijéramos: ¡Bendito el que viene en el Nombre del Señor! queremos decirte eso ahora:

Baruj Aba B’Shem Adonai

Donde quiera que estés, si es que ves el video de éste estudio, te voy a invitar a que te unas conmigo y que de los cuatro ángulos de la tierra, todos digamos:

¡Baruj Aba B’Shem Adonai, Bendito el que viene en el Nombre del Señor!

Ven Señor Yeshúa, el Espíritu y la esposa te dicen: Ven Señor Yeshúa… Amén.

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Estamos entrando a la fortaleza “Antonia”, éste era el cuartel del ejército romano en tiempos de Yeshúa, el lugar donde traían a los presos que se rebelaban en algún sentido contra el imperio romano, éste es el lugar donde trajeron al apóstol Pablo cuando en el libro de los hechos aparece predicando en el templo y algunos están a punto de lincharlo, y llega la guardia romana y se lo trajeron a ésta fortaleza llamada “Antonia”. Éste es el lugar donde trajeron a Yeshúa para ser interrogado, en éste lugar podemos ver evidencias del ejército romano, las armas que utilizaron para derribar los muros de Jerusalén al mando del General romano Tito. En éste lugar fue donde se interrogó y se azotó a Yeshúa para tratar de sacarle alguna confesión si es que verdaderamente era el rey de los judíos, si estaba planeando alguna rebelión en contra del imperio romano, es en éste lugar en donde haré lectura de las letras rojas del evangelio de Lucas en el capítulo 22 versículo 35 al 38 donde Yeshúa le dice a sus discípulos lo siguiente: Lucas 22.- 35 Y a ellos dijo: Cuando os envié sin bolsa, sin alforja, y sin calzado, ¿os faltó algo? Ellos dijeron: Nada… Previamente había enviado a algunos de los discípulos diciéndoles que no se preocuparan por su sustento, que el obrero es digno de su salario, que no llevaran dinero extra, que no llevaran ropa extra, que no se preocuparan por su sostenimiento, que el obrero era digno de su salario y los envió y no les faltó nada y aquí les está recordando la fidelidad de Dios al haberles suplido todas sus necesidades cuando los envió, sin embargo aquí les dio una instrucción diferente; Lucas 22.- 36 Y les dijo: Pues ahora, el que tiene bolsa, tómela, y también la alforja; y el que no tiene espada, venda su capa y compre una… Aquí les está dando la instrucción totalmente contraria. Les está diciendo que cuando les envió a proclamar que él era el Mesías y que dieran las buenas noticias y que en ése momento no se preocuparan por nada pero ahora las condiciones van a cambiar, Yeshúa está en la etapa final de su ministerio y ya están a punto de arrestarlo para juzgarlo como rebelde al imperio romano y clavarlo en una cruz, ya está a punto de suceder todo esto y en ése contexto les dice que ahora que las cosas van a cambiar y que le van a considerar un rebelde será entregado a los gentiles, ahora como sus discípulos ahora si les dice que tengan sustento de reserva ya que correrían la misma suerte, serían perseguidos a causa de éste mensaje, incluso les dice que tomen espada, que vendan algunas de sus pertenencias con el fin de conseguirse una espada para que puedan defenderse;

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Lucas 22.- 37 Porque os digo que es necesario que se cumpla todavía en mí aquello que está escrito: Y fue contado con los inicuos; porque lo que está escrito de mí, tiene cumplimiento… Yeshúa les está advirtiendo a sus discípulos que serían perseguidos y que estuvieran prevenidos, no iba a ser color de rosa como ellos esperaban, no iba a ser fácil e iban a tener que estar preparados para la huida, para la persecución e incluso para defenderse si fuese necesario; Lucas 22.- 38 Entonces ellos dijeron: Señor, aquí hay dos espadas. Y él les dijo: Basta. Es un poco curiosa la manera en que Yeshúa termina diciéndoles “Basta” porque ellos lo único que hacen es enseñarle dos espadas que tenían disponibles y la pregunta es ¿Porqué les dice basta si les acaba de decir que se consigan una espada? Lo que trata de erradicar en ellos es ésa expectativa que ellos ya tenían de por sí, ellos ya tenían la expectativa de tomar el control de ésta ciudad del reino de David con la espada, ésa era la manera que ellos pensaban que iban a recuperar éste territorio, ése era el estilo de todos los que se levantaban como mesías y trataban de librarse de la opresión romana, trataban de hacerlo con ejército, con fuerza y estaban habidos y listos, lo podemos ver en el huerto de Getsemaní cuando Pedro sacó una espada y le cortó la oreja a Malco, a uno de los de la guardia romana y Pedro estaba más que listo para iniciar la guerra y hacerlo como todas las naciones lo hacen, a través de guerra tratar de conquistar. La instrucción que Yeshúa les está dando es a nivel defensivo, preventivo, les está instruyendo que actúen en defensa pero no a nivel ofensivo, no se trataba de atacar porque no será con fuerza, no será con ejército ni con poder sino que va a ser a través del ejemplo que él siguió, ¿Cómo fue que Yeshúa conquistó al imperio romano? ¿Cómo fue que el imperio romano de ser el agresor y el que trató de borrar el mensaje de éste Rey de los judíos, cómo fue que éste imperio fue vencido y ahora se convierte en el principal promotor o el que más ha difundido el mensaje del Rey de los judíos a todo el mundo? No lo venció con ejército ni con armas, lo venció con humildad, lo venció con sujeción. En éste piso de la fortaleza “Antonia” se derramaron las gotas de sangre que muestran la manera de vencer al mal, vencer el mal con bien, es en éste piso que el Rey de los judíos se entregó como un cordero a éste fiero ejército y que al final terminó conquistándolo por medio de su entrega, por medio de su amor.

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Para aquellos que tienen un espíritu agresivo-ofensivo, queriendo conquistar y obtener el reino a la fuerza, la lección que recibimos de estas letras rojas es: Basta… Por supuesto que debemos estar preparados, tenemos que prevenir porque está anticipado en la profecía que vendrán tiempos de angustia para Jacob, vendrán tempos de angustia cuál nunca los ha habido ni los habrá y para eso tenemos que estar preparados pero a un nivel defensivo, a un nivel de confianza en Él pero la máxima prueba y ejemplo de cómo él conquistó a sus enemigos fue siendo manso, amando a sus enemigos y un día esos enemigos que aquí le azotaron, ahora se han encargado de difundir su mensaje a todas las naciones. Ésta es la lección que recibimos de estas letras rojas en nuestro pasaje del día de hoy… Estando en la vía dolorosa en Jerusalén vemos una calle que es el sitio que conmemora el camino de Yeshúa rumbo al monte Calvario, al Gólgota, hay una canción muy famosa que justamente se llama así, “Por la vía dolorosa” y es aquí donde daremos lectura a las letras rojas del evangelio de Lucas en el capítulo 23 a partir del versículo 26; Lucas 23.- 26 Y llevándole, tomaron a cierto Simón de Cirene, que venía del campo, y le pusieron encima la cruz para que la llevase tras Jesús. 27 Y le seguía gran multitud del pueblo, y de mujeres que lloraban y hacían lamentación por él. 28 Pero Jesús, vuelto hacia ellas, les dijo: Hijas de Jerusalén, no lloréis por mí, sino llorad por vosotras mismas y por vuestros hijos. 29 Porque he aquí vendrán días en que dirán: Bienaventuradas las estériles, y los vientres que no concibieron, y los pechos que no criaron. 30 Entonces comenzarán a decir a los montes: Caed sobre nosotros; y a los collados: Cubridnos… Esto es un anticipo profético en el que Yeshúa habla de la destrucción de la ciudad de Jerusalén, de la destrucción del templo en Jerusalén y de la gran tragedia que sufrirán las hijas de Jerusalén, todos los que moraban aquí, ya que aquí Yeshúa anticipa la destrucción de Jerusalén por parte del imperio romano y por parte de muchos otros imperios que han pasado por aquí y que han destruido una y otra vez éste lugar y ésta ciudad que estaba a hacer una ciudad de paz se ha convertido en una ciudad de aflicción, de guerras, de incomprensión de resentimiento, de idolatría que todavía prevalece hasta nuestra época. Jerusalén que estaba llamada a ser una ciudad donde el pacto se diese a conocer y es precisamente por eso que Yeshúa lamenta y le dice a estas mujeres: no lloréis por mí, sino llorad por vosotras mismas y por vuestros hijos… Habrá días de tanto dolor, muerte y destrucción que los habitantes de Jerusalén querrán que los montes les caigan encima, y Yeshúa concluye diciendo:

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Lucas 23.- 31 Porque si en el árbol verde hacen estas cosas, ¿en el seco, qué no se hará? El árbol verde es una referencia a él mismo, como un árbol que todavía está produciendo fruto, un árbol que está vivo por su obediencia a los mandamientos de su Padre y si en él que fue obediente hasta la muerte están haciendo esto, ¿qué será lo que hagan con los desobedientes? Así que ése mensaje les deja a las hijas de Jerusalén y con tristeza comprobamos que se cumplieron estas tristes palabras y que nos confirman la veracidad de la profecía de Yeshúa. Si ése castigo y ése rechazo ha causado tanto sufrimiento y si queremos ver la restauración de la que hablaron todos los profetas, pues es tiempo que volvamos al árbol verde, que volvamos a injertarnos al árbol de vida para revertir todo ése castigo y todo ése sufrimiento. Padre te rogamos que acabes de una vez con éste conflicto, que de una vez por todas tu pueblo Israel reconozca su pecado, reconozca su maldad y que se cumpla la profecía en Oseas de que te irías y volverías y en su angustia te buscarían, de una vez por todas Señor lleva a tu pueblo a que clame: Bendito el que viene en el Nombre del Señor; ven a reinar sobre Jerusalén, Yeshúa Ben David, Yeshúa hijo de David. Ahora estamos en el lugar en donde reflexionaremos las letras rojas en el penúltimo capítulo del evangelio de Lucas a partir del versículo 33; Lucas 23.- 33 Y cuando llegaron al lugar llamado de la Calavera, le crucificaron allí, y a los malhechores, uno a la derecha y otro a la izquierda… Actualmente se puede apreciar una calavera que se forma en el cerro donde fue crucificado Yeshúa y hay también un gran significado del porqué éstos dos malhechores lo que podrán estudiar con gran detalle en el nivel intermedio del instituto bíblico, en ésta sección únicamente nos concretaremos a lo que dice el versículo 34; Lucas 23.- 34 Y Jesús decía: Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen… Ésta fue la manera de Yeshúa responde a los que se burlaban de él, a los que lo desafiaban a que bajara de la cruz, ésta era la manera en que él respondía;

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Lucas 23.- Y repartieron entre sí sus vestidos, echando suertes. 35 Y el pueblo estaba mirando; y aun los gobernantes se burlaban de él, diciendo: A otros salvó; sálvese a sí mismo, si éste es el Cristo, el escogido de Dios. 36 Los soldados también le escarnecían, acercándose y presentándole vinagre, 37 y diciendo: Si tú eres el Rey de los judíos, sálvate a ti mismo. 38 Había también sobre él un título escrito con letras griegas, latinas y hebreas: ESTE ES EL REY DE LOS JUDÍOS. 39 Y uno de los malhechores que estaban colgados le injuriaba, diciendo: Si tú eres el Cristo, sálvate a ti mismo y a nosotros. 40 Respondiendo el otro, le reprendió, diciendo: ¿Ni aun temes tú a Dios, estando en la misma condenación? 41 Nosotros, a la verdad, justamente padecemos, porque recibimos lo que merecieron nuestros hechos; mas éste ningún mal hizo. 42 Y dijo a Jesús: Acuérdate de mí cuando vengas en tu reino. 43 Entonces Jesús le dijo: De cierto te digo que hoy estarás conmigo en el paraíso… ¿Qué tuvo que decir o hacer éste delincuente para recibir la promesa de la vida eterna? Simplemente reconocer que era un malhechor, reconocer que él merecía estar ahí y que el que estaba muriendo ahí era justo, eso es lo único que tuvo que reconocer y éstas letras rojas que le llenaron de esperanza no solo a él sino a todos los que hemos depositado nuestra confianza en él: De cierto te digo que hoy estarás conmigo en el paraíso… Lucas 23.- 44 Cuando era como la hora sexta, hubo tinieblas sobre toda la tierra hasta la hora novena. 45 Y el sol se oscureció, y el velo del templo se rasgó por la mitad. 46 Entonces Jesús, clamando a gran voz, dijo: Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu. Y habiendo dicho esto, expiró… Y en éste momento termina el suplicio y la historia de romance más grandiosa que jamás se haya escrito, que jamás se haya concebido, una historia en la que aquel que amó hasta el fin, entregó su vida por aquellos que le rechazaron. Así que con estas letras rojas, con ésta esperanza de que estaremos con él en el paraíso cerramos éste episodio de las letras rojas ante el monte de la Calavera. ¿Porqué morir en un monte que tiene la figura de un cráneo? Yeshúa es la cabeza de los huesos secos, Yeshúa es la cabeza de la iglesia, eso está escrito y la iglesia es los huesos secos que están entre las naciones, las tribus perdidas de Israel entre las naciones que son huesos secos y que forman un cuerpo de esqueletos y que han de volver a la vida, Bendito seas Yeshúa… Amén.