smjegupr.netsmjegupr.net/wp-content/uploads/2012/05/Cubano-Inmigraciones.pdf · 143 II~f HACIAEL...

22
143 HACIAEL GRITO DE LARES: CAFE, ESTRATIFICACION SOCIAL Y CONFLICTOS DE CLASE 1828-1868· Laird W. Bergad EI Grito de Lares se ha convertido en dato imprescin- dible en todas las investigaciones hist6ricas del Puerto Rico decimon6nico. Durante dos dfas dramliticos en septiembre de 1868, un pequeno grupo de hacendados de cafe, jorna- leros y esclavos tomaron el pueblo de Lares en las monta- nas occidentales de la Isla, declararon una republica -hecho ins6lito en la historia de Puerto Rico- y luego fueron de- rrotados por una contraofensiva espanola antes de que la revueIta pudiera extenderse a otros lugares. EI desarrollo de estos sucesos es bien conocido, y apenas existen conflic- tos de interpretaci6n sobre los mismos. En general, los his- toriadores nos han presentado la revuelta como parte de una conspiraci6n revolucionaria de alcance insular dirigida por Ram6n Emeterio Betances y un reducido nucleo de patriotas creyentes en el anticolonialismo, el abolicionismo, y la democracia poHtica. 1 En la historiograffa puertorriquena, la ideologfa polftica • Publicado originalmente en ingles bajo el titulo "Towards Puerto Rico's Grito de Lares: Coffee, Social Stratification, and Class Conflicts, 1828-1868", enHispa"ic America" His/oric'" Review 60(4), Duke Uni- versity Press, pp. 617-642. Traducido del ingles por Francisco A. Scarano. 1 Vease a lidio Cruz Mondova, Hisloria de PNerto Rico, si810 XIX, vol. 1: 1808·1868 (Rio Piedras, 1970), pp. 439-465; Jose Perez Moris, Hisloriade 14 i"SNf'f'ecci6" de La,.es (1872; reimpresi6n, RIo Piedras 1975); Manuel Mal- donado Denis, PNerlO Rico: NfIIJ i"le,.p,.elaci6" hisI6rico-soci'" (Mexico, 1969), pp. 27-49; YOlga Jimenez de Wagenheim, "Prelude to Lares: The Events Leading to Puerto Rico's Grito de Lares", Caribbea" Review 8 (enero-marzo de 1979), 39-43. Todos los c6mputos estadlsticos utilizados en este articulo derivan de un analisis computarizado de diversos conjuntos estadlsticos que elabor6 eI autor, a base de las fuentes manuscritas referen- ciadas en las not as. Este estudio pasa por alto eI significado de la ideologla y la importancia de los faetores politicos debido a que estos ya han sido dis- cutidos por los autores ya mencionados, entre otros.

Transcript of smjegupr.netsmjegupr.net/wp-content/uploads/2012/05/Cubano-Inmigraciones.pdf · 143 II~f HACIAEL...

Page 1: smjegupr.netsmjegupr.net/wp-content/uploads/2012/05/Cubano-Inmigraciones.pdf · 143 II~f HACIAEL GRITO DE LARES: CAFE, ESTRATIFICACION SOCIAL Y CONFLICTOS DE CLASE 1828-1868· Laird

143

II~f

HACIAEL GRITO DE LARES: CAFE, ESTRATIFICACION SOCIAL Y CONFLICTOS DE CLASE 1828-1868·

Laird W. Bergad

EI Grito de Lares se ha convertido en dato imprescin­dible en todas las investigaciones hist6ricas del Puerto Rico decimon6nico. Durante dos dfas dramliticos en septiembre de 1868, un pequeno grupo de hacendados de cafe, jorna­leros y esclavos tomaron el pueblo de Lares en las monta­nas occidentales de la Isla, declararon una republica -hecho ins6lito en la historia de Puerto Rico- y luego fueron de­rrotados por una contraofensiva espanola antes de que la revueIta pudiera extenderse a otros lugares. EI desarrollo de estos sucesos es bien conocido, y apenas existen conflic­tos de interpretaci6n sobre los mismos. En general, los his­toriadores nos han presentado la revuelta como parte de una conspiraci6n revolucionaria de alcance insular dirigida por Ram6n Emeterio Betances y un reducido nucleo de patriotas creyentes en el anticolonialismo, el abolicionismo, y la democracia poHtica.1

En la historiograffa puertorriquena, la ideologfa polftica

• Publicado originalmente en ingles bajo el titulo "Towards Puerto Rico's Grito de Lares: Coffee, Social Stratification, and Class Conflicts, 1828-1868", enHispa"ic America" His/oric'" Review 60(4), Duke Uni­versity Press, pp. 617-642. Traducido del ingles por Francisco A. Scarano.

1 Vease a lidio Cruz Mondova, Hisloria de PNerto Rico, si810 XIX, vol. 1: 1808·1868 (Rio Piedras, 1970), pp. 439-465;Jose Perez Moris, Hisloriade 14 i"SNf'f'ecci6" de La,.es (1872; reimpresi6n, RIo Piedras 1975); Manuel Mal­donado Denis, PNerlO Rico: NfIIJ i"le,.p,.elaci6" hisI6rico-soci'" (Mexico, 1969), pp. 27-49; YOlga Jimenez de Wagenheim, "Prelude to Lares: The Events Leading to Puerto Rico's Grito de Lares", Caribbea" Review 8 (enero-marzo de 1979), 39-43. Todos los c6mputos estadlsticos utilizados en este articulo derivan de un analisis computarizado de diversos conjuntos estadlsticos que elabor6 eI autor, a base de las fuentes manuscritas referen­ciadas en las notas. Este estudio pasa por alto eI significado de la ideologla y la importancia de los faetores politicos debido a que estos ya han sido dis­cutidos por los autores ya mencionados, entre otros.

Page 2: smjegupr.netsmjegupr.net/wp-content/uploads/2012/05/Cubano-Inmigraciones.pdf · 143 II~f HACIAEL GRITO DE LARES: CAFE, ESTRATIFICACION SOCIAL Y CONFLICTOS DE CLASE 1828-1868· Laird

145

}

,'1 ,

144 de los dirigentes urbanos que presuntamente idearon la re­vuelta, pero que no participaron en ella, figura casi exclusi­vamente como la fuerza motriz del alzamiento revolucio­nario. En esta corriente de interpretaci6n, pues, se ignora la importancia que pudo tener la estructura econ6mica y social de Lares durante el pedodo pre-revolucionario. EI hecho de que la economia local giraba alrededor de la pro­ducci6n de caf~ ha sido practicamente ignorado por los estudiosos, auo en vista de que los dirigentes del Grito eran agricultores de cafe. Los trabajadores que tomaron Lares eran recoleetores del grano, y los que fueron apresados por los revolucionarios eran los principales comerciantes cafeta­leros y prestamistas del pueblo.

En este articulo examinaremos el desarrollo de tensio­nes y conflietos en el municipio de Lares, trazando fa trayec­toria social y econ6mica del pueblo desde su fundaci6n hasta la fecha de la revueIta. Lares era una de las muchas comu­nidades de la escarpada cordillera central puertorriqueiia, que durante los aiios de 1850 y 1860 hadan la transici6n de una economia de subsistencia a -una economIa de mercado. EI crecimiento de la economia cafetalera de exportaci6n transformada la organizaci6n de la sociedad local, de una relativamente igualitaria, basada en una agricultura de sub­sistencia, a otra caraeterizada por la estratificaci6n y los conflietos de clase. EI conflieto primordial de dicha sociedad al cabo de estos cambios confrontada a los comerciantes in­migrados y los agricultores cafetaleros criollos en una lucha econ6mica entre dos sectores de la elite larei'ia, que eventual­mente culminarfa en la erupci6n insurreccionaria de sep­tiembre de 1868.

2 Ver, por ejemplo, el anfcolo de Eugenio Fernandez M~ndez, "El sig­nificado hisr6rico del Griro de Lares", Revisla del InslilNlO de CtJlllra piliif'. tomqllefla, 40 (julio-sepr. de 1968), 2-8. No se menciona el caf~ una sola vez. Ello es dpico de la mayorla de los rrabajos que rratan sobre el Grito.

Los inmigrantes y el desarrollo economico

La difusi6n de la agricultura azucarera por ellitoral puer­torriquei'io durante la primera mitad del siglo XIX alter6 profundamente la estructura econ6mica y social tradicional de la Isla. La agricultura esclavista de plantaciones sustituy6 a la economia de pequei'ios agricultores de subsistencia que habia prevalecido durante la mayor parte del pedodo colo­nial,3 Pero no obstante el crecimiento de una economia ex­portadora en las costas, el interior montai'ioso se mantuvo como una frontera subdesarrollada hasta bien entrados los ai'ios de 1840. Con el crecimiento general de la poblaci6n, la abundancia de tiercas en el interior del pais hizo de esta regi6n montanosa un lugar de asentamiento codiciado por refugiados de las costas, deseosos de establecer pequenas fincas de subsistencia ocupadas predominantemente por cultivos de primera necesidad yde cafe, este Ultimo en ocasio­nes como articulo de intercambio.4 Comenzaron a crearse municipios en la montana cada vez que se concentraba la poblaci6n suficiente para justificar un titulo de fundaci6n de pueblo. Hacia finales de los anos 1820, los barrios mon­tanosos de San Sebastian estaban suficientemente poblados como para solicitar a las autoridades de San Juan su incor­poraci6n como pueblo. En 1828 se fund6 el municipio de Lares.'

3 Ver aJuana Gil-Bermejo, Panorama hislOrico de IaagrictJtllra en PIIiIf'­to Rico (Sevilla, 1970), pp. 129·140. Para una versi6n mas sugestiva, v. Sidney W. Mintz, "Labor and Sugar in Pueno Rico and in Jamaica, 1800­1850", Comparative Stlldies in Society and History I (marzo de 1959), 273-281.

4 Parte de la colonizaci6n del interior se debi6 al desarrollo de zonas de abascecimienco de a1imentos para las costas. En 1833,GeorgeFlinterobserv6 que en Ponce se construlan caminos bacia las alturas del none con el prop6­sito especffico de explotar las regiones productoras de a1imentos. George Flinter, An 1.1&&011'110/ the Present Slate 0/ Ihe Island 0/ PIWrIO Rico (lon­don, 1834), pp. 30-31.

5 V. a G. E. Morales Munoz, Fllndacidn del pll8blo de Lares (San Juan, 1946).

Page 3: smjegupr.netsmjegupr.net/wp-content/uploads/2012/05/Cubano-Inmigraciones.pdf · 143 II~f HACIAEL GRITO DE LARES: CAFE, ESTRATIFICACION SOCIAL Y CONFLICTOS DE CLASE 1828-1868· Laird

146 147 Todos los fundadores del nuevo pueblo pertenedan a fa- .

milias criollas prominentes de San Sebastian. Sin embargo, a finales de los anos treinta y principios de los cuarenta esa elite puertorriquena comenz6 a ser desplazada de sus posi­ciones de poder e influencia local por comerciantes focaneos recien llegados.6 Estos empresarios incipientes emigraban a la altura en busca de oportunidades comerciales, a menudo en calidad de representantes de firmas comerciales costa­neras, atraidas por las oportunidades de inversi6n que alIi se presentaban. Los inmigrantes representaron un factOr determinante en la creaci6n de un primitivo sistema de

'.I mercadeo, vincu1ando a Lares con los puertOs de Mayagiiez y Aguadilla, y participarfan en la creaci6n de facilidades de crMito en los pueblos del interior montafioso. Aunque la economia local en las decadas de los cuarenta y cincuenta

mi.,1

aun giraba alrededor de la agricultura de subsistencia, algu­II nos hacendados orientados hacia el mercado dependian de ,1'1

los comerciantes de la costa, y de sus representantes, para obtener financiamiento y servicios de mercadeo.7

Pero hacia mediados del siglo, esta dependencia de los comerciantes costenos fue disminuyendo, dada la disponibi­lidad de capitales comerciales en la misma localidad. Estos capitales provenian de dos fuentes principales: en primer lugar, de un nucleo de familias mallorquinas establecidas en

!'i 6 Lares. Allo de 1836. Lista nominal de los vecinos blancos ptOpietatios

de este pueblo...• Archivo General de Puerto Rico (en adelante. AGPR). San Juan. Fondo de los Gobernadores Espai'ioles de Puerto Rico (en adelan. te, FGEPR, Censo y Riqueza 1836-1839, caja 14. En ese ai'io siete hombres figuraban como "comerciantes". De ellos. tres eran catalanes. uno mallor­quln. uno franc~. y dos criollos. Fernando Pic6 ha sei'ialado la ocurrencia del mismo proceso en Utuado, al este de Lares. Ver Pic6, Ubenad, tervj­dllmbre en el Ptwf10 Rico del tiglo XIX: lot jomaJerot IIJlIIJdeflOt e" lilt­pe"At del AIIge del CAlI (Ediciones Huracan. RIo Piedras. 1979). pp. 33-34.

7 Normalmente se requerla caf~ en pago de las deudas. Por ejemplo. en 1842 la firma comercial catalana de "Amell, Sarda y Coli". de Aguadilla. prest6 al capitan de milicias en Lares. Ram6n Cueto. 2.077 pesos para eI fomento de su reci~n fundada finca de caf~. Cueto habrls de saldar la deuda en las cosechas de 1842 Y 1843. AGPR. Fondo de Protocolos Notariales (en adelante, FPN). Otras Funcionarias. caja 1430. Lares, 1842. fols. 4-9.

Lares a principios de los 1840, las cuales figuraron, hasta fi· nales del siglo, como las principales acreedoras del pueblo yen segundo lugar, de comerciantes procedentes de la bajura, quienes comenzaron a abrir tiendas en el pueblo.

El primer mallorquin /en domiciliarse en Lares 10 fue Pablo Pol, cuyos hijos Andres y Bernabe sedan importantes figuras en el Grito de 1868. Mediante matrimonio, Poise integr6 a los Segarra, una de las familias fundadoras del pueblo, y ya en 1836 figuraba como duefio de una pequena pulperfa.8 Mientras tanto, seguian llegando otras familias mallorquinas, y ya en 1842 residian en Lares los patriarcas de las mas prominentes de elIas. En ese mismo afio, Juan Marquez y Luis Vilella crearon la firma comercial conocida como Sres. Marquez y Vilella, abriendo sus puertas en un local frente a la plaza del pueblo.9 A pesar de que en la de­cada de 1840 estas dos familias eran unos meros comercian­tes de segunda categoria, para los 1880 controlaban gran parte del comercio cafetalero local a traves de las casas de Marquez y CompaiHa y Vilella Hermanos. En la epoca que nos concierne, las casas de comercio mas importantes eran catalanas. La sociedad de "Amell, Sarda y Coll"lleg6 a Lares en 1842. "Mercadal y Orfila", comerciantes catalanes de Aguadilla, abrieron una sucurs'al en ese pueblo del interior en 1843. En 1841, el corso Pablo Antonio Luigi y el espafiol Juan Antonio Cos, este ultimo procedente de Aguadilla, iniciaron operaciones bajo el nombre de "Luigi y COS".1O

El influjo constante de inmigrantes durante los anos de 1840 contribuy6 al desarrollo de una infraestructura co­mercial en Lares, cuya existencia es posible constatar a mediados de siglo. Los inmigrantes se habian convertido para entOnces en los principales comerciantes del pueblo,

8 Lares. Ai'io de 1836. Lista nominal de los vecinos blancos propieta· rios de este pueblo...• AGPR-FGEPR, Censo y Riqueza 1836-1839, caja 14.

9 AGPR-FPN. Ottos Funcionarios, caja 1430, Lares. 1843, fols. 42·43. 10 AGPR-IlPN, Otros Funcionarios. caja 1430. Lares. 1841. fols. 30-32,

1842. fols. 4-9. 1845. fols. 13-14.

Page 4: smjegupr.netsmjegupr.net/wp-content/uploads/2012/05/Cubano-Inmigraciones.pdf · 143 II~f HACIAEL GRITO DE LARES: CAFE, ESTRATIFICACION SOCIAL Y CONFLICTOS DE CLASE 1828-1868· Laird

149 148

mientras los criollos quedaban relegados al negocio de pul­perfas en los barrios circundantes, a menudo expendiendo mercandas que las tiendas del pueblo les daban en consig­naci6n. En 1848 habfa veintid6s comerciantes en Lares cuyo capital bruto ascendfa a un total de 42,335 pesos. De esta suma, el 74.5 por ciento era controlado por inmigrantes. l1

Al iniciarse la decada de 1850, estos mercaderes, vinculados eficazmente al mercado mundial, habfan establecido el pre­requisito fundamental para la proliferaci6n de una economfa de mercado: una estructura de servicios de credito y comer­cializaci6n. Habfa comenzado, pues, la transici6n hacia la :.,

"'r economfa de mercado y hacia el monocultivo cafetalero. "I Durante las decadas de 1850 y 1860, la difusi6n gradual Ii

II del cultivo del cafe afectaba la vida de casi todos los residen­tes del municipio. 12 Mientras los terratenientes cultivaban II el cafe en fincas de variados tamanos, los campesinos desa­

'!I'II comodados· se empleaban como recolectores durante la cose­il chao Los comerciantes negociaban con cafe principalmente.

No obstante, por algunos aiios durante los 1860 tambien se Ii

cultiv6 el algod6n, debido a los altos precios para este pro­",I ducto en el mercado mundial que trajo consigo la Guerra de

Secesi6n norteamericana. 13 La vida cotidiana en Lares co­I' menzaba gradualmente a girar en torno al cicio anual de

siembra, desyerbo, cosecho y transporte del cafe hacia la III: '

I, costa. La tierra comprada a credito era amortizada con cafe. "I

Las pequenas deudas y rentas de los desacomodados se pa­gaban con trabajo en los cafetales; los adelantos de dinero y provisiones acarreaban la promesa de pago con remesas

II Pueblo de Lares... riqueza comercial, 1848, AGPR, Diputaci6n Pro­vincial, Lares, caja 1.

12 Esto 10 discutiremos en detalle en las secciones sobre la tierra y el trabajo, j,,/rfl.

• Del ingl~ "landless" (n. del t.). 13 Libro inventario perteneciente a Ia casa mercantil Marquez y CIa.,

AGPR, Libros de Contabilidad de Marquez y Compaftla (en adelante, LCMC), Alios 1864-1871. En 1864, 1865, Y1866, el algod6n fue una de las rnercandas con que mas trafic6 esta compailla. Pero para el 1870 habla casi

de cafe durante la cosecha, 0 inmediatamente desp~s de ella. 14

La dase de los comerciantes empleaba diversos mecanis­mos de especulaci6n en los mercados del credito y del cafe. A los agricultores a quienes se les adelantaban provisiones o capital de trabajo durante el aiio se les exigfa la liquida­ci6n de sus cuentas al concluir la cosecha. Por 10 general, los productores consignaban un peso 0 volumen especffico de cafe a cambio de cierta cantidad de dinero 0 del valor de las mercandas refaccionadas durante el aiio. 15 Asf, por ejemplo, cuando un comerciante Ie facilitaba seis pesos en efectivo 0 en mercandas a un productor, este se comprome­tfa a pagarle con un quintal de cafe. Tal sistema promovfa la generaci6n de ganancias de dos maneras. Primero, si el adelanto era en mercanda, el comerciante devengaba una ganancia de la diferencia entre el precio al por mayor y el precio al detal, menos los costos de transporte. Por otro lado, si el comerciante prestaba dinero, este generaba un interes de entre uno y dos por ciento mensual. 16 A esto se sumaban las ganancias resultantes de la diferencia entre el precio del cafe segun acordado al momento de tener el cre­dito, y el precio de venta en el mercado. Con frecuencia esta diferencia generaba pingiies ganancias para el comerciante. Por ejemplo, antes de la cosecha de 1867, "Fernando Pin­tueles y Compaiifa" adelant6 dinero y mercandas a los

desaparecido el comercio del algod6n. 14 Ver, por ejemplo, AGPR-FPN, Genaro L6pez, caja 1457, San Se­

bastian, 1855, fols. 126-127. En esta transacci6n Pedro Gonzalez reconocla deberle 143 pesos a Francisco Ayala. Gonzalez y su familia concertaban el pago de dicha deuda mediante la recogida de cuarenta fanegas de cafe duran· te la cosecha. Vease tambien AGPR-FPN, Otros Funeionarios, caja 1431, Lares, 1850, fol. 110, en cuya escritura Manuel Roman arrendaba a Ram6n Mendez seis cuerdas de su finea en el barrio Espino "solo si que en la cosecha de cafe Ie ayude a cojer cafe." En el LCMC 1864-187I,casi todas lasdeudas, sin importar su cuanda, eran pagaderas con cafe.

15 Ver, por ejemplo, AGPR, Libro invenrario no. 6 de laCasa Mercantil Ferrer y Cia, 1856-1858, p. 61.

16 Abunda informaci6n sobre las tasas de interes en los Iibros de cuen­

Page 5: smjegupr.netsmjegupr.net/wp-content/uploads/2012/05/Cubano-Inmigraciones.pdf · 143 II~f HACIAEL GRITO DE LARES: CAFE, ESTRATIFICACION SOCIAL Y CONFLICTOS DE CLASE 1828-1868· Laird

151 150

agricultores de Ciales, a cambio de cafe al precio de seis pesos por fanega, independientemente de cual fuera el pre­do verdadero en el momento de la remesa. En agosto de 1868 Pintueles vendi6 ese mismo cafe a 14.50 pesos el quintalY

Localmente, el sistema de precios comprendia tres ni­veles. El precio de credito, el menor de los tres, era aquel que se acreditaba a la cuenta de un agricultor endeudado al hacer sus remesas de cafe. En la mayoria de los casos este precio se fijaba mucho antes de comenzar la cosecha, to­

Ii I mando como base el nivel de precios prevaledente el aoo " anterior. Luego exisda el precio pagado a los agricultores

'", ~

que no habian contratado previamente con los mercaderes. , Este segundo precio se acercaba mas a la estructura de pre­

I!!j cios vigente en el mercado durante la cosecha. En 1867, al I'll mismo tiempo que Pintueles abonaba creditos a raz6n de ~ ,I!

III, seis pesos por fanega de cale, 10 pagaba a 7.50 pesos por I, fanega a otros agricultOres independientes. 18 Esto signifi­II

Iii caba una perdida de veinticinco por ciento para aquellos agricultOres que hablan tomado adelantos durante el aoo al precio de credito prefijado. Y por ultimo, exisda un precio de mercado que los exportadores radicados en los princi­pales puertos de la costa pagaban a los comerciantes del interior.

Otro mecanismo crediticio usado frecuentemente duran­te los aoos de 1850 y 1860 consisda en el traspaso de dtulos de propiedad de fincas a los comerciantes a cambio de capital refaccionista. Si el agricultor pagaba el prestamo a tiempo, el acreedor Ie devolvla el dtulo legalmente. 19 Y aun cuando

tas guardados en el AGPR (vease, por ejemplo, LCMC). 17 Una fanega es una medida de volumen que en Puerto Rico equivale

aproximadamente a un quintal, 0 sea, 100 libras. Ver los Libros de Conta­bilidad de la Casa F. Pinrueles (en adelante, LCCFP), Ciales, Puerto Rico, Oiario 1867-1815, transacciones de agosto a Oetubre de 1867, Yagosto de 1868. V. tambien AGPR·LCMC 1867-1868, Oiario mim. 4, pp. 4-5.

18 LCCFP, Oiario 1867-1815, apuntes de octubre lro., 1867. 19 Ver, pot ejemplo, AGPR-FPN, Genaro L6pez, caja 1459, San Se­

bastian, 1857, Ventas de Terreno con Retto. Estas c1ausulas de "retro" lie­

aquel no podia liquidar sus deudas a tiempo, resulta extraoo que los comerciantes mostraban muy poco interes en acumu­lar tierras. Las aetividades mercantiles produdan mas ga­nandas que la agricultura, y los agricultores endeudados a menudo sobrevivian tiempos dificiles refinanciando sus deudas, mientras seguian acumulando intereses.20 En los casos en que se ejecutaban las hipotecas, los acreedores mer­cantiles prefedan vender 0 arrendar las propiedades adqui­ridas, antes que dedicarIas a la siembra.21

La composici6n de la cIase de los comerciantes de Lares en las decadas de 1850 y 1860 distaba mucho de ser rigida. La extensi6n de la agricultura cafetalera creaba amplias opor­tunidades para un flujo continuo de comerciantes inmi­grados de origen espaool. Aguijoneados por el pobre estado de las comunicaciones entre el pueblo de Lares y sus mUlti­ples barrios, muchos comerciantes rivales establecian sucur­sales de sus tiendas en las principales zonas productOras.22

Sobrinos, primos y hermanos menores de los mercaderes, recien llegados a la altura, dirigian estas operaciones rurales que proveian a los agriculrores credito refacdonista, provi­siones, y facilidades de almacenaje durante la cosecha.H

i'ialaban que las tierras podian ser devueltas al propietario original, dentro de un tiempo estipulado y al mismo precio de venta.

20 Yease AGPR-FPN, Genaro L6pez, caja 1459, San Sebastian, 1857, fol. 263. EI26 de mayo de 1857, Marla Lucia L6pez grav6 16.5 cuerdas en el barrio Buenos Aires a favor de Crist6bal Ferrer, comerciante catalAn, por 200 pesos de contado pagaderos en enero de 1858. Al no ser satisfechos en­ronces, Ferrer Ie extendi6 el plazo hasta enero de 1861. Todavla en febrero de 1863 no se habla saldado la deuda, mas sin embargo, L6pez quedaba en posesi6n de las tierras. Desconocemos el desenlace ulterior de este caso.

21 V. AGPR-FPN, Genaro L6pez, caja 1469, San Sebastian, 1865, fob. 502-507. En esta escrirura Marquez y Cia. adquiere 30 cuerdas en el barrio Pezuela de un Manuel Vega, pero de inmediato se las arrienda a Jose CoiL

22 AGPR, Obras Publicll.'l, Caminos Vecinales, caja 1422, leg. 39, expo 532.

23 En 1855 Marquez y Compallla queda incorporada con Francisco, Bal­tazar, Antonio yJuan Marquez como socios generales. Cada uno contribuye 300 pesos a la corporaci6n. De inmediato arriendan por un plazo de doce alios seis cuerdas en el barrio Rio Pietro, en donde abren una sucursal del

Page 6: smjegupr.netsmjegupr.net/wp-content/uploads/2012/05/Cubano-Inmigraciones.pdf · 143 II~f HACIAEL GRITO DE LARES: CAFE, ESTRATIFICACION SOCIAL Y CONFLICTOS DE CLASE 1828-1868· Laird

II

153 Ii 152

J6venes provenientes de Soller y Palma de Mallorca, 0 de Barcelona, llegaban a Puerto Rico en calidad de dependien­tes de las firmas comerciales establecidas. Con el tiempo, tras acumular algUn capital y aprender a funcionar en la economia local, se independizaban y fundaban negocios

II' por su cuenta. A veces prosperaban aun mas que las firmas para las cuales habian trabajado, como sucedi6 con Juan Alc6ver.

Oriundo de Soller, Mallorca, Alc6ver lleg6 a Lares a finales de los 1850 para trabajar con Marquez y Compai'Ha. No se sabe con certeza si estaba emparentado con la fami­

"~ lia, aunque creemos que sf. Para 1861 poseia una pequena j'

I'I!I porci6n de las acciones generales de la compania, y poco l, despues fund6 su propio negocio, la casa de Juan Alc6ver

II: y Compania. Alc6ver mand6 entonces a buscar ados j6venes mallorquines, a su sobrino Jaime Frau y a Miguel Oliver,

1:11]

tl quienes se hicieron cargo de la compania al morir Alc6ver hi repentinamente en 1864. El testamento que redact6 poco

li!1 'I!

antes de morir fijaba su capital en 65,908 pesos netos, gran ''I' parte del cual legaba a sus padres en Mallorca.24 Oliver y

Frau eventualmente convertidan el negocio en una de las 1:11:

i' firmas mercantiles mas importantes de Lares en los aiios de 1870.

'ii, La pujante economia cafetalera atraia a estos inmigran­tes a los pueblos de la cordillera central, donde las oportu­nidades especulativas condudan hacia la acumulaci6n de capital y poder local. No obstante, las jugosas ganancias que se obtenian con tanta rapidez en las pequenas comunida­des de la altura occidental, a menudo se escapaban hacia la Peninsula 0 hacia Mallorca. No bien aseguraban sus capi­

negocio. V. AGPR-FPN, Genaro L6pez, caja 1457, San Sebastian, 1855. fol. 329.

24 Ver Pueblo de Lares. Ario de 1864 a 65. Padr6n de riqueza comer­cial.... AGPR. Fondo Municipal de Lares (en adelame, FML), caja 24 pro­visional. Ver tambien. Testamemo de Juan AIc6ver. AGPR-FPN. Genaro L6pez, caja 1468, San Sebastian. 1864, fol. 623.

tales, los inmigrantes regresaban a Europa y dejaban sus intereses puertorriquenos en manos de parientes 0 de socios de confianza. En 1856, s610 trece anos despues de su llegada a Puerto Rico, Juan Marquez vivia en Soller de Mallorca, aunque mantenia negocios en Lares y viajaba a la Isla peri6­dicamente. La firma que incorporaron los cuatro hermanos en 1853, con un capital de 1,200 pesos, valia 129,437 pesos en 1865. Sin embargo, en esta fecha ninguno de los hermanos residia permanentemente en el pueblo. Aunque continuaban como socios mercantiles, para fines de los 1860 todos ha­bian fijado sus residencias en Soller. Hombres mas j6venes, todos ellos del clan de los Marquez, administraban la casa de "Marquez y Compania".2' Segun lograban amasar for­tunas, los inmigrantes regresaban a Mallorca 0 Barcelona y dejaban sus intereses en manos de una nueva generaci6n, cuyos miembros a su vez repedan precisamente el mismo patr6n. Los dependientes mas j6venes se iban haciendo cargo de los negocios de aquellos que regresaban a la Pe­ninsula.26

Cualesquiera fuese su origen, 0 el monto de sus fortunas al llegar a la Isla, los comerciantes focaneos controlaban el comercio cafetalero en Lares para mediados de los 1860. Debajo de ellos en la jerarquia econ6mica y social estaban los grandes agricultores comerciales y los pulperos que manejaban las pequeiias tiendas del municipio. Ambos gm­pos dependian de los inmigrantes para satisfacer sus nece­sidades de financiamiento. Los pulperos eran criollos casi

25 V. AGPR-LCMC. Libro invemario 1864·1871. Tiene una relaci6n de todos los socios de la firma aI final de cada ailo.

26 Los archivos notariales de Mallorca podrlan proveer interesante in· formaci6n que complememase la de las colecciones puertorriquei'ias. Des­conocemos en gran parte las ejecutorias de los emigrados que regresaron a Mallorca. EI caso de Damian Morell, quien fuera socio general de Marquez y Compai'ifa desde mediados de los 1860 hasta su muerte en e119OO. puede ser indicativo de una tendencia general. Durante los ai'ios noventa. Morell fund6 una instituci6n bancaria en Mallorca. AGPR-FPN. Salvador Picor­nell, caja 1412, Lares. 1900. fol. 779.

Page 7: smjegupr.netsmjegupr.net/wp-content/uploads/2012/05/Cubano-Inmigraciones.pdf · 143 II~f HACIAEL GRITO DE LARES: CAFE, ESTRATIFICACION SOCIAL Y CONFLICTOS DE CLASE 1828-1868· Laird

155 154

exclusivamente, mientras que los agricultores comercian­tes eran de diversos odgenes: algunos corsos, otros vene­zolanos, muchos criollos. Entre los ultimos dos grupos se contaban los hermanos Pol, Andres y Bernabe, Manuel Ramirez, Manuel Rojas, Joaquin Parrilla, y Aurelio Men­dez, todos ellos dirigentes de la rebeli6n de 1868.

li'l

Uso de Ia tierra, tenenc;a y producc;6n

La migraci6n paulatina de las regiones costeras a las I del interior, proceso paralelo a la expansi6n del cultivo ca­

I-i'~I ';' nero por las costas de Puerto Rico, se nutri6 de la amplia disponibilidad de tierras en el interior montaiioso. Los mu­nicipios desparramados por las regiones mas altas de la cordillera central estaban cubiertos de tierras virgenes de altura.27 En 1846, segun una muestra de 5,050 residentes de Lares, s610 el 21.5 por ciento habia nacido en el municipio, y de estos la mayoda eran ninos menores de diez aiios. Mien­tras tanto, mas del 60 por ciento de la poblaci6n habia emi­grado de los pueblos que configuran un arco costanero de la altura lareiia.28

La especulaci6n con la tierra por parte de empresarios cos­teiios fue un acontecimiento significativo durante los anos de 1820 y 1830. La fertilidad de las tierras virgenes de la altura presagiaba ganancias futuras, en tanto en cuanto se desarrollasen vias infraestructurales que facilitasen las ex­portaciones. Los empresarios trataban de obtener concesio­nes de terrenos baldios y de comprar tierras virgenes a pre­cios mucho menores que en la costa.29 Estas tierras, aun las

27 En 1820, por ejemplo, hab/a 10,000 cuerdas de tierras realengas en Utuado y 4,800 en Adjumas, dos municipios fronterizos con Lares. AGPR­FGEPR, Asumos Politicos y Civiles, Censo y Riqueza, caja 13, entrada 9.

28 Censo de almas y estadlstica 1846, AGPR-FML, caja 42 provisional. Los pueblos eran A/lasco, Aguada, Hatillo, Isabela, Mayagiiez, Moea, San Sebastian, Quebradillas y Rinc6n.

29 AGPR, Obras Publicas, Propiedad Publica, caja 96, Lares.

que estaban incultas, podian servir como garanda de pres­tamos 0 como inversi6n especulativa. No es extrano, pues, que cambiasen de dueiios con frecuencia.'o

Pero antes de que los mecanismos de una economia de mercado comenzaran su notable expansi6n durante los anos de 1840, la mayoda de los agricultores de Lares eran ocupantes de terrenos realengos que se habian asentado en los barrios poco poblados aledaiios al pueblo.'! Aunque es dificil constatarlo (la mayoda de las transacciones con terrenos du­rante los anos de 1830 no fueron notarizadas>,32 parece ser que la preocupaci6n por establecer los dtulos de propiedad le­galmente registr6 un aumento hacia finales de los 1830 y co­mienzos de los 1840, proceso que coincidi6 con la enajenaci6n de los baldios del municipio. A principios de la decada de 1840, los funcionarios locales inscribieron mUltiples "ventas" que no eran otra cosa que legalizaciones de acuerdos infor­males realizados anteriormente. Esto parece coincidir con la aparici6n en el municipio de comerciantes que proveian capital de operaciones mediante garandas hipotecarias y otros documentos legales. Asi, los dtulos de propiedad sobre terrenos se convirtieron en un pre-requisito para que el credito rural pudiera proliferar. El numero de fincas titulares en Lares ascendi6 de 131 en 1836 a 390 en 1848.'3

El incremento en la expedici6n de dtulos de fincas, la llegada de los inmigrantes de la costa, y la creciente activi­dad mercantil fueron factores que se conjugaron para elevar el precio de la tierra. Entre 1835 y 1840 el precio promedio

30 Ver AGPR·FPN, Otros Funcionarios, caja 1429, 1838, fols. 3,32·33. Estas escritursa formalizan vemas especulativas de terrenos concedidos por el gobierno como bald/os.

31 V., por ejemplo, AGPR, Sala de Referencia, Lares, Libro de Aetas del Ayuntamiento 1838-1840, 26 de junio de 1839 Y7 de oetubre de 1839. En estas sesiones el ayuntamiento reconoei6 la dificultad de establecer tltulos de propiedad sobre las tierras ocupadas por centenares de familias.

32 V. AGPR·FPN, Drros Funcionarios, caja 1430, Lares, fols. 13-14. 33 Recaudaci6n del subsidio, gastos publicos y dros. de tierra... 1836,

AGPR-FML. caja 39 provisional. Pueblo de Lares. Ailo de 1848. Padron de

Page 8: smjegupr.netsmjegupr.net/wp-content/uploads/2012/05/Cubano-Inmigraciones.pdf · 143 II~f HACIAEL GRITO DE LARES: CAFE, ESTRATIFICACION SOCIAL Y CONFLICTOS DE CLASE 1828-1868· Laird

---

157 156 • de una cuerda de tierra vendida en Lares fue de unos 4.9 pe­50S. Entre 1841 y 1850 ya el precio ascendfa a 7.3 pesos.34

La estructura de tenencia legal de las tierras tambien sufri6 cambios. En 1836 habfa 20 fincas de menos de 20 cuerdas, que comprendfan e115.3 por ciento del total. Estas fincas representaban solamente el 1.7 porciento del terri­torio municipal. Dace anos despues. en 1848, el 32.6 por ciento de las fincas, 0 un total de 127, eran menores de 20 cuerdas. No obstante, estas parcelas representaban sola-mente el 4.2 por ciento del territorio lareno. Mientras tanto, al otro extremo de la escala social, la concentraci6n de tierras se agudiz6 notablemente. En 1836 las cuatro fin­

'1) jl

cas mayores de 500 cuerdas representaban e117.6 por dento 11

:'1 del total de fincas con titulo de propiedad. En cambio, lii'i ' II en 1848, ocho fincas de mas de 500 cuerdas controlaban 'IIJ '1'1 el 30.9 por dento del total de terrenos (ver Tabla I)}5 iii Independientemente de su tamano, las fincas eran extre· I'

ii:il madamente sub-explotadas durante las decadas del 1830 y Iii

1840. Las grandes haciendas 5610 cultivaban una porci6n Ii: limitada de sus tierras. La hacienda de Toribio de Santiago il!!. en Rfo Prieto, por ejemplo, comprendfa 1,000 cuerdas, sin Iii I! embargo, para el 1839, solamente nueve de elias estaban ii' cultivadas: una de cafe, seis de arroz, mafz y viandas, y dos III:' de algod6n. Para 1846, su finca habra crecido, mediante Iii I compras, a unas 2,294 cuerdas pero, salvo la extensi6n de­!t',i'

dicada a cultivo de cafe, que habra aumentado a 16 cuerdas, no hubo un aumento paralelo en la superficie dedicada a otros tipos -de siembra.36 Durante los 1840 apenas hubo

terrenos..., AGPR·FML, caja 22 provisional. 34 AGPR·FPN, Lares, Venus de Terreno. 1835·1842, 1845·1847, 1849. 35 Recaudaci6n del subsidio, gastos publicos y dros. de tierra... 1836,

AGPR-FML, caja 39 provisional. Pueblo de Lares. Afto de 1848. Padr6n de terrenos.... AGPR·FML, caja 22 prOVisional.

36 Planillas de riqueza agricola 1839, AGPR-FML, caja 25 provisional. Censo de simas y estadlstica, 1846, caja 42 provisional. Para mas informa· ci6n sobre la baja proporci6n de tierra cultivada con relaci6n al cuerdaje

co ~­>­\0 ~ co-§ vi

Z ~

< ~ ~ :i ~

-<U

e:l

Z ~ z ~ .:.:

~ ~

e ...!, ~eO\c. ~N .l!!.N as as....­...fa ~ . ~~ ~,

!3~<e,:,:. < '0§!•

-8­8 0 as';

~ S

0: ~ i~

-80; 'S ~ 5"tl .­>,~ § ~ :'::8­:§c..,9 .. .Q

~!QQ!! ~r; .- -8

i ~ S

~ .gS

i~ ~~ ~~aj c .S: c8 .!!l .2

Po< ~ ..

!­ ~.E

~ S o czu::

-8 g ~ ...

~

-8e~ ..... ~.E

~ e o czu::

~ u

-8 S NOao-O\O ~~~~~g

~.~ ~ -

-8 S 'O"''''~oo

~~~"';Ng-~~:::Nao~

r-­.....

""'~""'o-o

~~~~~g .....

ONao ..... ~ ..... N""'''' ..... "'" .....

0088+ ~";'C'";'I":'o 1"""'4~~otl"\

111'­;: -go

i..2!! ._ .5

~ ~

....,

'" 0\ ...., '0 0 \Cl~~~g-

N

~ ~ .. 8 .!! i["tlU os 0 r;e~:a _

.. ~ .. cf!as os..E 0 ~ ~ l:!';:: f-o ii: ii: ii: j

total, v6lse Planillas de riqueza agricola. 1849, AGPR·FML, caja 42 provi·

II

Page 9: smjegupr.netsmjegupr.net/wp-content/uploads/2012/05/Cubano-Inmigraciones.pdf · 143 II~f HACIAEL GRITO DE LARES: CAFE, ESTRATIFICACION SOCIAL Y CONFLICTOS DE CLASE 1828-1868· Laird

159 158 II!

grandes fincas comerciales. La mayor con orientaci6n hacia el mercado que existia en el municipio la operaba Juan Bautista Plumey, inmigrado frances. Su Hacienda La Es­

, peranza, declaraba haber cosechado 69 cuerdas de cafe, 'I,:dentro de una extensi6n total de 420 cuerdasY Esta finca, empero, no era tipica de Lares en esa epoca, pues todavia predominaba alli la sub-explotaci6n de la tierra, la produc­ci6n marginal de produetos comerciales, y el cultivo genera­lizado de prOOuetos de subsistencia en pequeDos predios. En

,i,I tales circunstancias, no era extrano hallar pequenos pro­pietarios cultivando la misma superficie que los grandes i' terratenientes.

La sub-explotaci6n de la tierra derivaba de tres factores t, il principales. Primero, la amplia disponibilidad de terre­I~ nos realengos, al menos hasta los anos cuarenta, signific6

I:i:: IiIII' una ausencia casi completa de un mercado de trabajo libre,

ii' 10 cual produda una escasez aguda de trabajadores. La Mica

'I'I,I}"Ii forma de garantizar la oferta de fuerza de trabajo para laIIII!,I!,

I' prOOucci6n de cultivos comerciales era la posesi6n de escla­:I'!'I,', vos, 10 cual requeda grandes inversiones de capital. De iii, hecho, la Esperanza, de Plumey, contaba con treintitres ~ esclavos en 1846.~8 EI segundo factor era el debil desarrollo 1,1 i,

de un mercado de cafe antes de mediados de siglo. La difusi6n I t de la cana habia arrinconado a los prOOuetores cafetaleros en I

tierras marginales de los distritos costeros. Entre 1828 y 1848, las exportaciones de cafe desde Puerto Rico se re­

, , dujeron de 111,609 a 92,130 quintales}9 La regi6n monta­nosa del interior constituia el area natural para expandir la prOOucci6n de cafe, pero la pobreza de los medios de transporte y comunicaci6n entre la altura y la bajura elevaba los costos de producci6n a niveles excesivos. Por ultimo, la ausencia de un mercado de capitales contribuy6 a que la

siona!. 37 Censo de almas y estadlstica 1846, AGPR-FML, caja 42 provisional. 38 Ibid. 39 Jorge F. Saldai'la, El call en Puerto Rico (Sanjuan, 1935), p. 6.

prOOucci6n ~gricola se mantuviera en un nivel bajo. 8610 en los aDOS 1840, con la aparici6n de los comerciantes, co­menzada a eliminarse este obstaculo a la difusi6n de la agricultura comercial en Lares.

Hasta los aDOS de 1850 la prOOucci6n cafetalera era un tipo de empresa de pequena envergadura. En 1846, el 71.0 por ciento de las 241 fincas de cafe dedicaban 2 cuerdas 0 menos a dicho cultivo. De las fineas restantes, el 24.4 por demo tenia entre 2.5 y 10 cuerdas sembradas de cafe, y tan s610 dos fincas tenian siembras mayores a las 30 cuerd,as. La extensi6n de terreno cultivada en el muncipio consistia principalmente de prOOuctos alimenticios tales como arroz, maiz, viandas y habichuelas, tOO'Os considerados como fru­

tos menores.40

La decada de 1840 fue cdtica para la sociedad rural en Lares. Ciertos cambios estructurales fundamentales fijaron las condiciones esenciales para el desarrollo agdcola. Los comerciantes inmigrados empezaron a instituir un mercado de capitales que habda de transformar la relaci6n entre la gente y la tierra. El derecho de propiedad legal, otrora sin6nimo de la mera posesi6n, comenzada a reemplazar a este ultimo durante los aDOS de 1840, y con ella, la conver­si6n de la tierra en una mercanda ayud6 a fijar las condi­ciones necesarias para el desarrollo de una amplia comercia­lizaci6n de la agricultura.

La crisis de la industria azucarera puertorriquei'ia durante los aDOS de 1840 reflejaba un aumento en la competencia internacional por los mercados azucareros.41 Entre los pro­blemas principales del azucar se contaban el alza en los costos de prOOucci6n debido a la mecanizaci6n, el avance

40 Habla 1,961 euerdas dedicadas a frutos menores, 852 a caf~, y 679 a platanos. Censo de almas yestadlstica, 1846, AGPR-FML, caja 42 provi­sional.

41 Para una diseusi6n breve de esta crisis, v~ase a Darlo de Ormaechea, "Memoria acerca de la agrieulrura, el comercio y las rentas internas de Is isla de Puerto Rico" en Cayetano Coli y Toste, Boleti" Historico de Puerto Rico (San Juan, 1913-1927), II, 226-264.

Page 10: smjegupr.netsmjegupr.net/wp-content/uploads/2012/05/Cubano-Inmigraciones.pdf · 143 II~f HACIAEL GRITO DE LARES: CAFE, ESTRATIFICACION SOCIAL Y CONFLICTOS DE CLASE 1828-1868· Laird

161 160

del aZlIcar de remolacha en los mercados mundiales, las bajas en precios y la incompatibilidad de la esclavitud con un sistema de producci6n cada vez mas industrializado. Las autoridades coloniales en San Juan, sin duda a instancias de los intereses azucareros, trataron de aliviar la escasez de trabajadores libres mediante la creaci6n juddica de un merca­do de trabajo libre. En 1849 el gobernadorJuan de la Pezuela promulg6 el Reglamento General de Jornaleros, el cual clasificaba a todos los hombres sin propiedad ni profesi6n como jornaleros y les exigia se emplearan en las fincas de los propietarios.42 Su historial de trabajo, conducta y movi­mientos por la Isla sedan anotados en libretas que los jor­naleros deb/an portar en todo momento, segUn la ley.4~

Tres tendencias iniciadas durante los aoos 1840 en Lares se intensificaron durante el regimen de la libreta. Primera­mente, la demanda de tierras aument6, pues la posesi6n de cualquier predio de terreno eximla a su dueoo de la clasifi­caci6n como jornalero.44 En segundo lugar, el precio de la tierra continu6 en espiral ascendente. De hecho, el precio promedio de una cuerda vendida en 1849, 6.66 pesos, casi se duplic6 a 12.39 pesos en 1855.45 Y finalmente, la frag­mentaci6n de la tierra y la proliferaci6n del minifundio pa­saron a ser rasgos fundamentales de la tenencia de la tierra en Lares durante los aoos de 1850 y 1860.

42 V. Labor G6mez Acevedo, Organizacion y reglamentacion del tra· bajo en el Pueno Rico del siglo XIX: propietarios y jornaJeros (Rio Piedras, 1970), y Sidney Mintz, "The Role of Forced Labour in Nineteenth-Century

, Puerro Rico", Caribbean Histof'i4/ Review, 2 (1951). EI mejor esrudio sobre el desarrollo de Ia clase de los jornaleros a nivel local es Pic6, Libenad y seN'id*mbre.

43 La ley era patentemente absurda, pues casi todos los iornaleros, y muchos hacendados, eran analfabetas. En 1870, el 93.5 por demo de toda la poblaci6n de Lares no sabia leer ni escribir. Censo de poblaci6n 1870, AGPR·FML, caia 18 provisional.

44 Entre 1845 y 1849 se formalizaron 65 compraventas de terrenos en Lares. Pero en el ailo 1851 hubo 88, mientrss que el total para los ailos 1851, 1852, 1853 Y1855 sum6 273 compraventas. AGPR-FPN, Lares, San Sebas­tilin, 1845-1855, Ventss de Terreno.

45 AGPR-FPN, Lares, 1849 y 1855, Ventss de Terreno.

De las 390 {ineas titulares que habia en 1848, 1270 e132.6 por ciento, eran menores de 20 cuerdas. Tres aoos mas tarde, las fineas con titulo de propiedad ascendian a 576, pero las de menos de 20 cuerdas se habian duplicado a 273, es decir, el 47.4 por ciento del tota1.46 Hacia 1854 la situaci6n casi se habia estabilizado. Las fincas con titulo sumaban 632, pero las menores de 20 cuerdas permanecieron en 270, casi igual que antes. Las propiedades un tanto mayores, las que comprendian entre 21 y 50 cuerdas, aumentaron de 145 a 212 entre 1851 y 1854 (ver Tabla Il}.47

La difusi6n del cultivo del cafe fue, sin duda, el factor mAs importante del desarrollo de la sociedad rurallarefta duran­te los af'ios 1850 y 1860. EI cuerdaje total de cafe aument6 en un treinta por clento entre 1846 y 1855, de unas 852 a 1,105 cuerdas, seguido por un aumento aun mayor entre los aDos 1855 y 1865, en cuyo periodo el cultivo se duplic6 a 2,203 cuerdas.48 Uno de los faetores que afect6 el cred­miento del cafe fue el alza, lenta pero constante en el pre­clo del grano.49 Por otrO lado, proliferaron por todo el mu­nicipio organizaciones muy eficientes orientadas a otorgar aMito. En 1848 el padr6n de comerciantes de Lares regis­traba 5610 veintid6s casas comerciales, pero para 1864, III

46 Pueblo de Lares. Ailo de 1848. Padr6n de terrenos..., AGPR-FML, caia 22 provisional. Pueblo de Lares. Ailo de 1851. Reparro del derecho de tierra.... AGPR-FML, caja 22 provisional.

47 Pueblo de Lares. Aflode 1851. Repartodelderechodetierra...,AGPR­FML, caja 22 provisional. Pueblo de Lares. Ailo de 1854. Derechos de tie· rra..., AGPR·PML, caia 22 provisional.

48 Censo de almas y esradlstica, 1846, AGPR-FML, caia 42 provisional. Pueblo de Lares. Aflo de 1855. Relaci6n de los frutos menares..., AGPR­FML, caja 3Q provisional. Pueblo de Lares. Ailo de 1855. Relaci6n por ba­rrios del m1mero de cuerdas cultivadas de frutos menares..., AGPR-FML, caia 39 provisional

49 EI precio del caf~ subi6 de seis pesos/quintal a mediados de los 1850 a enrre diez y doce pesos/quintal a mediados del siguiente decenio. Plani­nas de riqueza agricola, 1853. AGPR-FML, caia 25 provisional. Puebla de Lares. 1./10 de 1855. Relad6n de los frutOS menares..., AGPR-FML, caja 39 provisional. Planillas de riqueza agricola, 1868, AGPR·FML, caia 36 pro­visional.

Page 11: smjegupr.netsmjegupr.net/wp-content/uploads/2012/05/Cubano-Inmigraciones.pdf · 143 II~f HACIAEL GRITO DE LARES: CAFE, ESTRATIFICACION SOCIAL Y CONFLICTOS DE CLASE 1828-1868· Laird

163 162

~ ~ ~

00.... >t .... II' 00.... .,j

~ j Z ~

i ~ ....

II' :11 ~ 00.... "I

Iii j :1 'I

~ Q

Iii )i I!j ';1 1

<U Z ~

Z ~

Ii"il; ,.:.;.. III j

~

• ~ el~ "'!"! ~ '0~ -, ~c::uI~ "00 .... '0'08*.S!.. .... .... N ....0<"\

B "",""''00~ N..-i cx5 ..-i .... g~"'"'.... ....~ tE

~ a ONOONON ,....... ........ N .... f'f"'\o c:: NN.... '0Zo::

a 00<"\'00<"\0\0~ "..-i\ClNOO .... "'"' .... ""'0....*.~..

B ~~r-:CXl~~~ !;;::G::::: N .... 8 ....*:E 0<"\"' .... '0 .... '0~ B "~O<"\ ........ ,,o c:: N .... .... '"Zo::

0088+i ~ ~~~:So U N"'O'"N

i [3 '" ~ (; u

o:Si]\lI .- [ as 0--." e" .- Il ~ c:: CO] ­co..a",,,, [3 as u .- as as ..a 0til .5 ~ ~ ~ .: r-< U ::.':!l~~~.:l

_as .. ... .!:! 8.~ -i ~ e 8­.2~~ .. c:: ~ ·M .g: ~.~ C S eu..c:: Do ~ ~ NNDot

"il Q .!!.. .,,~a as '" A.. oo...l .-t ....u ~ ;;.-0 I

.,,~g: o<~

]:i< .... A

~ .:l '0 - u eu." '" ." 0' ­0- e .. .0 .. u-as =' ~frPo ~:"'1 . as._ ~ c:: .!:t 00 .g c:: -:.~ ~ ." e as o Do .. lCNa<N-, ri '~..!!:; ... .. ...l...f8. ~~-8 o ~ as::CPoS ~~.E f.l-<"o e •• 'as ::c '" .. uu .- =' .....!! ~

~ > 0

£~-5

tiendas y pulpeclas, muchas de ellas sucursales de firmas mayores, prestaban servicio en la regi6n.50 Ademas, el acapa­ramiento de la tierra y el aumento en su precio se sumaron al crecimiento demogd.fico y al fmperu del reglamento de jornaleros de 1849 para dar vida a un mercado de trabajo.51 Y por ultimo, los suelos vfrgenes de la momana ofredan altos rendimiemos, no empece la ausencia general de me­todos ciendficos de cultivo.52

El aumento en la producci6n cafetalera afect6 el cultivo de otros productOs. La transici6n de una economfa de sull­sistencia a una de mercado result6 en una expansi6n de los cultivos de exportaci6n a expensas de los cultivos tradicio­nales de subsistencia. Entre 1846 y 1865, la extensi6n de frutos menores (arroz, viandas, mafz y habichuelas) se re­dujo de 1,961 a 1,390 cuerdas, y como la poblaci6n habfa aumemado, ello signific6 una reducci6n per capita aun mas drastica.5~

Para mediados de los 1860, la producci6n cafetalera cons­tirufa la fuente principal de ingresos para los agriculto­res de Lares. En 1866, 490 fincas, 0 el 79.7 por ciento del total, informaban alguna producci6n de cafe, aunque 1a mayocla de los cultivos eran en pequena escala. Los produc­tores de menos de 10 quintales comprendfan el 72.9 por ciemo de todos los agricultores, pero s610 el 19.6 por demo de la producd6n total del municipio. Mientras tanto, 26 fincas, 0 el 5.3 por ciemo del total, produdan sobre 50 quin­

50 Pueblo de Lares. Reparto del subsidio... 1849, AGPR, Diputaci6n Pro­vincial, Lares, caja 1. Pueblo de Lares. Aiio de 1864 a 65. Padr6n de riqueota comercial..., AGPR-FML, caja 24 provisional.

51 V. infra., la secci6n sobre los sistemas de trabajo. 52 Para una relaci6n de los faCtores que influyen en los rendimientos ca­

fetaleros de Puerto Rico, v. R. C. Roberts, Soil Survey of puerto Rico (Washington, D.C., 1942), p. 96.

53 En este mismo per/odo el cuerdaje de caf~ creci6 de 852 a 2,203 cuer­das. La poblaci6n aument6, en tanto. de c. 5.500 en 1846 a 15,074 en 1868. Censo de almas y estadlstica, 1846, AGPR-FML. caja 42 provisional. Pue­blo de Lares. Censo de poblaci6n... 1868. AGPR-FML, (aja 39 provisional.

Page 12: smjegupr.netsmjegupr.net/wp-content/uploads/2012/05/Cubano-Inmigraciones.pdf · 143 II~f HACIAEL GRITO DE LARES: CAFE, ESTRATIFICACION SOCIAL Y CONFLICTOS DE CLASE 1828-1868· Laird

165 164

tales y eI 45. 2 por ciento de los 7,206 quintales que produjo Lares ese ano (ver Tabla 111).54 Manuel Rojas, del barrio Pezuela, el mayor de los hacendados en 1866, serla la fi­gura dirigente del Grito de Lares. Andres Pol, otro de los protagonistas principales de la revoluci6n, se contaba entre los mayores agricultores de cafe del municipio.55

EI crecimiento de la agricultura comercial entre los anos 1850 y 1860 tambien aceler6 el doble proceso de fragmen­taci6n-concentraci6n de fa tierra, y debido a los cambios

I~" , acaecidos en la distribuci6n del ingreso, agudiz6 la estra­tificaci6n social en el municipio. La continua diseminaci6n del minifundio fue una caracterlstica prominente. En 1854, las 270 fincas menores de 20 cuerdas (42.8 por ciento del total) ocupaban 7.2 por ciento de toda la tierra con titulo de propiedad. Para 1867 existian 324 fincas en esta cate­gorla (52.1 por ciento de las fincas), sin embargo la propor­ci6n en terminos de las tierras con titulo seguia estable en 7.4 por ciento. Durante el mismo periodo las propiedades mayores de 200 cuerdas aumentaron de 32 (5.1 por ciento del total), a 45 (7.2 por ciento), respectivamente. Pero la dimensi6n mas significativa resultaba ser la de su control sabre la extensi6n territorial larena, que en terminos de porcentaje pas6 de 42.9 a 55.2. En efecto, los agricultores pequenos y marginales paulatinamente subdividian sus re­cursos mientras que los propietarios mayores concentraban los suyos a expensas de los sectores medios (ver Tabla IV).56

Los precios de la tierra continuaron subiendo. Entre 1853 y 1868, el precio promedio por cuerda vendida en Lares se triplic6, de 10.32 a 37.64 pesos. EI mayor aumento ocurri6 durante los anos 1860 y, en efecto, los precios se duplicaron

~4 Relaci6n de los vecinos... que han cosechado... julio de 66 hasta juniode 67, AGPR-FML, aja 49 provisional.

~5 Ese ailo, Rojas consignaba una producci6n de 300 quintales, y Pol de 1~0. Relaci6n de los vecinos... que han cosechado... julio de 66 basta juniode 67, AGPR-FML, aja 49 provisional.

~6 Padr6n de terrenos... 1866-67, AGPR·FML, caja 24 provisional.

TABLA III: PRODUCCION DE CAFE EN LARES, 1866

QQ. de cafe

Num. de fineas

% de las fineas

Num. de QQ.

%de QQ.

1-10 11-50 51-200 201+

357 107 24 2

72.9 21.8 4.9 0.4

1,394 2,559 2,703

550

19.3 35.5 37.5 7.6

Totales 490 100.0 7,206 100.0

Fuente: "Relaci6n de los vecinos de este pueblo que han cosechado desde julio de 66 hasta junio de 67 los frutos que se mencionan con espresi6n de sus valores", AGPR-FML, caja 49 provisional. ·QQ.=quintales de 100libras.

TABLA IV: TENENCIA DE LA TIERRA EN LARES, 1867

Num. de % de las % de Ia Categorfa Cuerdas fineas fineas tierra

Minifundio 1-20 324 52.1 7.4 Fincas peq. 21-50 140 22.5 11.0 Fincas moo. 51-200 113 18.2 26.3 Fincas gran. 201-500 36 5.8 26.2 Latifundio 501 9 1.4 29.0

Totales 622 100.0 100.0

Fuente: "Padr6n de terreno correspondiente al ai'lo econ6mico de 1866-67", AGPR-FML, caja 24 provisional.

entre 1860 y 1868.57 AI comparar las cifras de distribuci6n del ingreso entre

1840 y 1867 descubrimos el desarrollo de una sociedad mar­cadamente estratificada. Para la priniera de estas fechas,

57 AGPR-FPN, Laces, 18~3·1868. Ventas de Terceno.

Page 13: smjegupr.netsmjegupr.net/wp-content/uploads/2012/05/Cubano-Inmigraciones.pdf · 143 II~f HACIAEL GRITO DE LARES: CAFE, ESTRATIFICACION SOCIAL Y CONFLICTOS DE CLASE 1828-1868· Laird

166

prevaleda una economia local basada en la agricultura de subsistencia, y por ende, unos niveles de ingreso bastame uniformes, con la mayoda de la poblad6n concemrada al­rededor de los niveles mas bajos. Sobre el 70 por demo informaban ingresos menores de 100 pesos al ano, y s610 el 1.8 por demo disfrutaba de ingresos anuales sobre los 500 pesos. Pero ya en 1867 la homogeneidad relativa de 1840 habia dado paso a agrupamientos bien definidos. EI porcemaje de agricultores que informaba ingresos infe­riores a los 100 pesos se habia reduddo a 46.4 por demo del'~ill total, miemras, por otro lado, el numero en la categorla de iii! mas de 500 pesos habia aumemado a 10.5 por demo. Como se puede apredar en la Tabla V, los seaores medios se aleja­

I~ ban bastame de los de menores ingresos, pero tambien se mamenian muy separados de la elite mas prospera.'8

"~ Los cambios en la estructura de tenenda de la tierra y i, en los patrones de distribud6n del ingreso que hemos des­

crito ponen de relieve la organizad6n jecarquica de la socie­dad que emergia en Lares emre los anos 1840 y 1868. A estas

:11

,I!"II'!

II' tendencias se sumaba la reorganizaci6n de la elite agraria del municipio. De los veimiocho mayores terrateniemes en 1848, unicameme siete se mamenian en 10 alto de la pica­

,Iii mide como propietarios en 1867.'9 No ha sido posible se­

II guide la pista a los veimiuno restames; creemos, no obstan­1:'1" te, que fueron reemplazados por un conjumo de criollos 1hi procedemes de la costa e inmigrantes extranjeros de origen ;"1,

liil diverso. Entre estos ultimos se encomraban algunos vene­zolanos, canarios y corsos.60 Ahora bien, en medio de tamos

58 Arlo de 1840. Reparto del subsidio...• AGPR-FML, caia 39 provisio­nal. Pueblo de Lares. Ai'lo de 1866-67. Padr6n generaJ de fincas rurales, AGPR-FML. caia 24 provisional.

59 Pueblo de Lares. Ai'lo de 1848. Padr6n de terrenos.... AGPR-FML. caia 22 provisional. Pueblo de Lares. Ai'lo de 1866-67. Padr6n general de fin­cas rueales, AGPR-FML, caia 24 provisional.

60 Los inmigranres prominentes indulan a Manuel Rojas (Venezuela). Buenavenrura y Jo~ Delgado (Islas Canarias). Lorenzo Ferri (C6rcega). y Juan Alc6ver (MaJlorca). Padr6n de terreno... 1866-67, AGPR-FML, caia

'" ~ a ~.f

i­ ~I~ aao ~ C

- ~ t:>­~­ ~. arA'

§ e C ...= i.:: Z

Z ~

&1

~ 3! ~I~~"':~"':")C!C!--00..,.008- ~ f! >.Sl CiIl...l ll;J'.=

~

~ 01-;;:l

B~ ~ Cg - ....• = ~

III ~ ~ eis e C "':1 '=:> Z

~

1I')~ClC?"':"1N~C! ",ao:5l~~~ao8-NN'O""O\O\""'O ~~lG~\ONOg-~~~~~:5l..,.~ ..... .... .... ""

"'~N"'''''N''''ttI '" I'o I , I I I • W0

Ii ""~~~88l-< C. ~ ,...r

- N N '" ­ ....

'0'0-0\0\0\00 ~~:::!sooog-""''''''''''0''''''00\ ......... '" rt'\ N-- '"

0888&~~J!

C C :9'S ~'i ... c.0... Ill"'""''0 :S~ ~-... ~ - 0ClC8<

oS :J... ... ej ... III ..s~ o 0';i III :lwc.C :

~..; lS. .~-III 'j;'" ..; ... 0 C ~ ... 00.. 0.. •• o 0\ .!!I

.... rt'\ >­... ... 0 tU "_ ....5 !:3 0.. ~ .. ..,. lS~~ ~ ":' 'ff.• =: 1!c....I 5l ~< ~ - ~ ~ .. ,,~ o =; c.t:: .• ~ ... l::l< go .a .... =: .5 'r: Olll<;

!l~-8 .;:: l!! ~t;:.;: :< :; III • N ~

.. "'­r: :l ... w 0" ... C .;:: ~

!l III Ill. ~~ CICI

Page 14: smjegupr.netsmjegupr.net/wp-content/uploads/2012/05/Cubano-Inmigraciones.pdf · 143 II~f HACIAEL GRITO DE LARES: CAFE, ESTRATIFICACION SOCIAL Y CONFLICTOS DE CLASE 1828-1868· Laird

169 168

cambios despuntaba una constante: la rigida divisi6n entre las elites comerciales y agrarias de Lares. En 1848, sola­mente dos de los terratenientes principales figuraban en el"'IiIii

; censo de las casas comerciales larenas de ese ana: el catalan Jose Maria Ferrer y el corso Pablo Antonio Luigi. En 1866, unicamente un comerciante, Juan AIe6ver, apareda inscrito entre los mayores terratenientes.61 As! pues, desde el inicio de la actividad mercantil en Lares, y durante las dos decadas que precedieron al Grito, persisti6 una clara separaci6n entre la riqueza agraria y la mercantil. El control de los co­merciantes sobre las fuentes de capital ocasionaba el endeu­damiento continuo de los intereses agrarios, factor que tuvo mucho peso en el desarrollo de las tensiones que desembo­caron en la rebeli6n de 1868. El nucleo dirigente de la reo vuelta se componIa de grandes y medianos terratenientes que operaban pulperIas pequenas en sus £incas. Los hom­bres que ellos capturaron alllegar al pueblo de Lares el 24 de septiembre de 1868 eran los comerciantes prominentes del pueblo.

La mana de obra

El crecimiento de la poblaci6n, en relaci6n con la tierra disponible, y la difusi6n de la agricultura comercial condi­cionaron el desarrollo de una masa trabajadora en las comu­nidades de la altura, las que habrIan de convertirse en los centros de producci6n cafetalera en Puerto Rico. A medida que aumentaban la poblaci6n y la demanda por tierras, el porcentaje de familias desacomodadas en Lares aumentaba

24 provisional. 61 Para una relaci6n de comercianres en 1848, v. Pueblo de Lares. Re.

pacto del subsidio... 1849. AGPR, Diputaci6n Provincial, Lares, caja 1. Para los terratenienres de 1848, constiltese Pueblo de Lares. Ano de 1848. Padr6n de tierra.... AGPR-FML. caia 22 provisional. Para los comercianres de los anos sesenra, ver Pueblo de Lares. Ano de 1864 a 65. Padr6n de riqueza co­mercial..., AGPR-FML, caja 24 provisional. Para los terratenienres de esta ~poca, ver Padr6n de terreno... 1866-67. AGPR-FML, caia 24 provisional.

considerablemente. Durante la decada de 1840, sin embargo, las demandas por

la mana de obra de campesinos y moradores de tierras realen­gas todavIa era mInima. Aparte de las pocas haciendas que dependIan de trabajo esclavo, la mayorIa de los agricu1tores de cafe usaban exclusivamente trabajadores libres. La fuente principal de mana de obra eran los agregados, personas que se comprometIan a realizar diversas tareas a cambio del de­recho a usufruetuar la tierra en determinadas fincas tim­lares. En 1846, las 450 familias de agregados, unas 2,395 per­sonas en total, constitufan menos de la mitad de la poblaci6n de Lares. Otras 408 familias posefan tItulos de tierras y com­ponIan una poblaci6n total de 2,699 personas. Entre las fami­lias de agregados, 84.2 por ciento disfrutaba derechos de usu­frueto sobre sus pequef'ias parcelas, de las cuales mAs del 90 por ciento eran menores de cinco cuerdas. Mas del 70 por ciento del cuerdaje total ocupado por los agregados corres­pondfa a cultivos de subsistencia, como platanos 0 frutos menores.62

Los agregados vivIan en condiciones similares a las de los moradores de tierras realengas y campesinos. No 5610 disfru­taban del usufructo de la tierra, sino que tambien participa­ban en la economIa de intercambio que se iba desarrollando en el municipio. Resulta sorprendente, ademas, que casi todos los agregados con derechos de usufructo recibiesen algun salario adicional por su trabajo en la propiedad del senor de agrego. En el barrio Espino, por ejemplo, casi todos los agregados que declaraban cultivar tierra por su cuenta reci­bfan salarios en efectivo por su trabajo. En la mayorfa de los casos, el jornal consistia de sesenta pesos al ano 0 cinco pesos mensuales, aunque existIan variaciones. El salario mensual fluctuaba entre cuatro y seis pesos. Muchos de los agregados indicaban haber trabajado a jornal solamente seis

62 Censo de almas y estadistica, 1846, AGPR-FML. caia 42 provisional No existe informaci6n similar a ~ta para los agregados en el perlodo poste­rior a 1846.

Page 15: smjegupr.netsmjegupr.net/wp-content/uploads/2012/05/Cubano-Inmigraciones.pdf · 143 II~f HACIAEL GRITO DE LARES: CAFE, ESTRATIFICACION SOCIAL Y CONFLICTOS DE CLASE 1828-1868· Laird

171 170 ,I

!'I u ocho meses durante el ano. Al parecer, los agregados no contralan obligaciones a cambio del mero derecho a residir en las fincas. Los terratenientes mas bien utilizaban el in­centivo de un pedazo de tierra para garantizar la presencia de trabajadores, pero a estos habla que pagarles un jornal viviesen 0 no en la hacienda. La "escasez" de mana de obra 10 que significaba entonces era que las condiciones de vida y trabajo de los agregados eran mas favorables en esos tiem­pos de 10 que sedan al cabo de unos procesos que fueron com­prometiendo la autonom£a e independencia que hablan disfrutado en los aiios 1840.

Entre 1850 y 1868 las condiciones materiales de las clases desposeldas en Lares se deterioraron, a la vez que aumenta­ron las presiones econ6micas y jurldicas. La ley de jorna­leros de 1849 ha sido estudiada por los historiadores del pals, pero creemos que uno de sus aspectos importantes no ha sido examinado. La ley prohibla a los propietarios con­tinuar empleando agregados en sus fincas. Los agregadosque en virtud de esta disposici6n fuesen despose£dos tenddan que convertirse en jornaleros, arrendatarios, 0 propietarios. Cada una de estas categodas habrla de ser supervisada es­trictamente por las autoridades para evitar que resurgieran los agregados, a quienes el gobierno culpaba por la escasez de brazos.63

Este ataque a la poblaci6n agregada provoc6 tres reaceio­nes en Lares. La primera foe la bUsqueda de dtulos de pro­piedad por parte de aquellos que tenlan aceeso al credito, 0

que podlan generar sufidente capital para comprar peque­nos predios, 10 que legalmente les eximida de la categorla de jornaleros. En segundo lugar, muchos agregados se con­virtieron en arrendatarios legalmente, tras presentarse en la notada local y acceder a firmar contratos de arrendamien­to con los terratenientes establecidos. Un tercer grupo de

63 Ver Pueblo de Lares, 1850. Documentos concernientes... jornale­ros, arrendatarios. propietarios... agregados, AGPR-FML, aja 49 provi­sional

agregados pas6 a constituir la C8tegoda de jornaleros 0

mozos de labor asalariados, a quienes las autoridades daban libretas para anotar en elias las condiciones de empleo, los trabajos realizados, y el comportamiento laboraI. La infle­xible formalidad de un contrato que espedficaba obligacio­nes y beneficios reemplazaba asl la informalidad y fluidez que hab£an caracterizado las relaciones entre terratenientes y desacomodados antes de 1849.

Sin duda, aql1ellos que no tenlan dtulos sobre tierras temlan ser clasificados como jornaleros. La mayoda de los agregados, al tratar de continuar llevando con los te­rratenientes las mismas relaciones que hablan llevado antes de 1849, se convirtieron en arrendatarios. De los 728 agregados solteros 0 jefes de familia sujetos en 1849 al re­glamento de jornaleros, el 69.8 por ciento habla adoptado la situaci6n de arrendatario para septiembre de 1850. Los demas se convirtieron en jornaleros.64

Los nuevos arrendatarios tenlan que pagar una renta para poder conservar esta clasificaci6n. La mayoria de sus con­tratos exig£a el pago en efeetivo, aunque ello no debe hacer pensar que existiera una economia altamente monetizada.6

'

La documentaci6n que hemos visto sugiere que aun cuando las rentas estuvieran expresadas en dinero, en realidad eran saldadas mediante jornadas de trabajo en las tierras del arrendador. Casi todas las deudas de pequei'ia cuanda registradas en los protocolos notariales de Lares entre 1850 y 1868 eran pagaderos 'en trabajo personal, casi siempre 11

raz6n de cinco pesos mensuales, aunque a menudo la tasa de conversi6n era menor.66 En esta forma, la ley formaliz6

64 Pueblo de Lares, 1850. Documentos coneernientes... jornaleros, arren· datarios, propietarios... agregados, AGPR·FML, eaja 49 provisional

65 EI 76.8 por dento de los contratos de arrendamientO suscritos en 1850 exiglan el pago en efeetivo. AGPR·FPN, QtrOS Funcionarios, aja 1431, Lares, 1850, Arrendamienros.

66 Esto era eieno tanto en los dncuentas como en los sesenras. Viase AGPR.FPN, Genaro L6pez, eaja 1457, San Sebastian, 1855, fols. 126-127, y Juicios Verbales. 1866, AGPR-FML, caja 4 provisional.

Page 16: smjegupr.netsmjegupr.net/wp-content/uploads/2012/05/Cubano-Inmigraciones.pdf · 143 II~f HACIAEL GRITO DE LARES: CAFE, ESTRATIFICACION SOCIAL Y CONFLICTOS DE CLASE 1828-1868· Laird

113

,I,

',', "

172 las obligaciones de trabajo de amiguos agregados sancio­nando ofidalmente, mediante el pago de rentas, las deudas a favor de los terrateniemes.

Los agricultores comerciales aprovecharon de inmediato la oportunidad para atar legalmente a sus arrendatarios, y los contratos correspondientes por 10 general estipulaban condiciones muy intrincadas. Jose de la Cruz, un gran terra· teniente de Moca, tenia especial afici6n por los detalles. Con frecuencia estipulaba la cantidad de tierra que habria de dedicarse a cada cultivo, e imponia requisitos de levantar verjas alrededor de predios espedficos de la tierra arrenda­daP

Pero la mano de obra sigui6 eseaseando durante los alios 1850 y, a pesar de los esfuerzos que se hadan para seguirle la pista a cada individuo en Lares, las abundantes extensio­nes de terrenos desocupados que aun exisdan a traves de la cordillera central atraian a numerosos desacomodados en busca de refugio contra la dominaci6n econ6mica de los grandes terratenientes.68 Los propietarios, en competencia por atraer los trabajadores disponibles, les ofredan incen­tivos como arrendatarios, de manera que estos se convirtie­ron en la principal fuente de mano de obra para las fineas comerciales. En 1850, Manuel Roman, uno de los mayores propietarios en el barrio Espino, Ie arrend6 diez cuerdas a Gervasio Rodriguez, uno de sus antiguos agregados. En el contrato, que no exigla pago de renta alguna, se estipula­ban dos condiciones: Primero, Roddguez habria de ayudar durante la cosecha de cafe, pero seda remunerado con el jornal prevaleciente. Segundo, se comprometfa a no tra­bajar para ningUn otro agricultor.69 La escasez de mano de

67 AGPR·PPN. Genaro L6pez. caja 1457. San Sebasrilin. 1855. fols. 251·252.

68 La Junta Clasificadora de Vagos y Amancebados denunciaba cons­tantemente como vagos a personas que hablan abandonado el pueblo sin que se conociera su paradero. Aceas de la Junta Clasificadora de Vagos y Amancebados, 1850-1868, AGPR·PML, aja 4 provisional

69 AGPR·FPN, Otros Funcionarios, caja 1431, Lares. 1850. fols. 52·53.

obra y la competencia entre terratenientes por los trabaja­dores disponibles que revela este comrato, explican los esfuerzos que hadan la mayoda de los agricultores comer­dales por garantizarse una oferta de trabajo. Por ejemplo, Juan Bautista Plumey tambien prohibla a sus arrendata­rios que trabajasen en cualquier otra finea.70

Para comienzos de la decada de 1860, no obstante, los notarios de Lares inscribieron muy pocos contratos de arrendamiento, 10 cual podda indiear que hubo ciecta taxi­tud en la implementaci6n del reglamento de iornalerosen 10 concerniente a los agregados. Las estipulaciones en re­laci6n con los mozos de labor, sin embargo, se mantenlao en efeao. Un censo de los jornaleros de Lares en 1865 mos­traba que el nlimero de mozos de labor (varones) ascendfa a 1,461.71 Las autoridades locales supervisaban y vigilaban rigurosamente a estOS trabajadores. La libreta de Jose de Dios L6pez, un jornalero de veinte aoos resideme en el barrio Pezuela, llevaba anotadas seis instancias de encar­celamiento por ofensas que indulan: embriaguez pUblica. no llevar consigo la libreta, mala condueta y violaci6n de un contrato de trabajo. La mayoria de estas sentencias conIle­vaban de quince a treinta dias en el presidio correccionaL72

La ley de 1849 arm6 a las autoridades locales con poder legal para controlar la movilidad de la poblaci6n sin tierras•. y la elite terrateniente claramente utiliz6este poder. Aparen­temente el peonaje por deudas registr6 un aIza considera­ble, especialmente durante los anos de 1860 en que la expan­si6n cafetalera acentu6 la demanda de mana de obra. Asl, cuando Jose del Rio llev6 a Rosa Vega a los tribunales en cobro de una deuda de cuarentiocho pesos, en febrero de 1866, Vega reconoci6 deberle el dinero y se comprometi6 a pagarlo con el trabajo de su hijo, Juan Chamorro, a 1'8%60

70 AGPR.FPN,Orras Funcionarios, aja 1431. Lares. 1850. fols. 39-44­71 Padr6n general de jornaleros, 1865, AGPR-FML. aja 39 provisional 72 Pueblo de Lares. 20. erimesere de 1866. Alea y baja de jornaleros.

Oct. 23. 1865. Jose Ds. L6pez. AGPR·FML. aja 23 provisional

Page 17: smjegupr.netsmjegupr.net/wp-content/uploads/2012/05/Cubano-Inmigraciones.pdf · 143 II~f HACIAEL GRITO DE LARES: CAFE, ESTRATIFICACION SOCIAL Y CONFLICTOS DE CLASE 1828-1868· Laird

174 :lli:, Ii' de .75 pesos semanales hasta que la deuda fuese saldada.

Esto representaba 64 semanas de trabajo,73 Los juicios ver­bales de Lares y los archivos notariales correspondientes a los anos 1860 contienen numerosos casas de procedimien­tos anaIogos.74

I:iiII' i

Un censo municipal de 1870 consignaba 655 propietarios, 967 peones, 2,120 jornaleros, y 5610 56 arrendatarios,75 Los peones probablemente eran similares a los agregados de antano, mientras que los jornaleros representaban un mercado de trabajo libre ya desarrollado. La mayorla de la poblaci6n larena, pues, no posela tierras.

El reglamento de jornaleros habla sido disenado para crear un mercado de trabajo libre mediante el estableci­miento de mecanismos jurldicos para el control de la mano de obra local. Sin embargo, las condiciones del mercado en sl eran las que regulaban la aplicaci6n de la ley. A prin­cipios de los 1850, cuando el cafe apenas comenzaba su ex­

iii! ,I!i pansi6n y la tierra estaba aun escasamente poblada, la III! oferta de trabajo era muy pobre. Los agregados entonces se

transformaron en arrendatarios, mas no sufrieron cambios significativos en sus antiguos privilegios. Pero a medida que se intensificaba la fuerza del mercado, especialmente al acelerarse la expansi6n cafetalera despues de 1855, las presiones sobre la poblaci6n campesina y desacomodada aumentaron, resultando en la proliferaci6n del minifundio y en la aparici6n del peonaje por deudas. Las condiciones del mercado ejerdan una funci6n crltica tanto para la pro­ducci6n cafetalera como para la mana de obra. La elite te­rrateniente utilizada las medidas jurldicas represivas in­corporadas en 1849 como instrumentos de dominaci6n 5610 cuando las condiciones materiales propiciaban su empleo,

73 Juicios Verbales, Feb. 19, 1866,Jos~ del RIo rontra Rosa Vega, AGPR­FML, caia 4 provisional.

74 Ver, por ejemplo, AGPR·FPN, Evaristo V~lez, caia 1425, Lares, 1867, fol. 58.

75 Censo de Poblaci6n, 1870, AGPR-FML, caia 39 provisional.

175

,,

pero en tales circunstancias la explotaci6n del jornalero arreciaba. No resulta extrano, pues, que en la manana del 24 de septiembre de 1868 una de las primeras ejecutorias pUblicas de los revolucionarios de Lares fuera recoger y quemar las libretas de los jornaleros,76

Estructt4f'a socia/ y conl/ictos de clase \

\ Para fines de la decada de 1860 la vida cotidiana en Lares

giraba en tOrno a la producci6n de cafe. La economla tradi­cional de subsistencia habla dado paso a la economla de ex­portaci6n concentrada en un solo producto principal. Una reorganizaci6n social habla acompanado estos cambios econ6micos. En los 1840 la estratificaci6n social habla sido mlnima debido a la ausencia de sectOres medios. La elite consistla de unos pocos comerciantes inmigrados y los pro­pietarios criollos. Por debajo de ellos, la mayorla de la po­blaci6n rural vivla del cu1tivo de pequenos predios que ge­neraban muy poco ingreso excedente. Veinte anos mas tarde ya se hablan desarrollado clases sociales bien definidas. En terminos generales la ordenaci6n social segula el esque­

ma siguiente:

Grandes comerciantes --exclusivamente inmigrantes Grandes hacendados de cafe -algunos inmigrantes, ma­

yoda de criollos Pulperos -criollos Agricultores medianos -criollos Pequenos agricultores -criollos Minifundistas -criollos Agregados, arrendatarios, medianeros -criollos Jornaleros -criollos Esclavos -criollos

Entre las elites agraria y mercantil exisda una separaci6n

76 Cru:t Monclova, Historia de PlI6rto Rico, I, 454.

Page 18: smjegupr.netsmjegupr.net/wp-content/uploads/2012/05/Cubano-Inmigraciones.pdf · 143 II~f HACIAEL GRITO DE LARES: CAFE, ESTRATIFICACION SOCIAL Y CONFLICTOS DE CLASE 1828-1868· Laird

176

casi total. A menudo los conflietos entre produetores y co­merciantes entranaban un contenido nacional, en los que por 10 general se oponfan criollos contra peninsulares. Aun­que entre los hacendados de cafe habfa algunos inmigrantes, la mayoda eran criollos. Los comerciantes inmigrados, prin­cipalmente catalanes y mallorquines, tenfan control exclusi­vo de las facilidades de crMito y mercadeo.77 Su control 50­bre el capital financiero, y el resultante endeudamiento en que los hacendados incurdan continuamente, eran fuente segura de conflictos. EI caso de Manuel Rojas, dirigente militar del Grito, ofrece un buen ejemplo.

Venezolano que inmigr6 a Puerto Rico a principio de los anos 1850, Rojas se estableci6 como pequeno comercian­te en el barrio Pezuela de Lares en 1857. All{ operaba una sucursal de la firma catalana de Aguadilla, Amell, Julia y Companfa,78 En ese mismo ano la companfa adquiri6 569 cuerdas en el barrio Mirasol tras ejecutar una hipoteca a Jose Cruz por falta de pago. Estas tierras pasaron a ser la hacienda cafetalera de Manuel Rojas en 1862, para cuya fecha ya habra 146 cuerdas sembradas de cafe, 48 de phita­nos, y 12 de cana de azucar.79 Cuando Cruz perdi6 estas tie­rras, su deuda con los comerciantes ascendfa a 9,258.65 pe­sos. Sin embargo, Rojas compr6 la finca por 23,000, todo ello a crMito. De esta cantidad, Rojas debfa abonar 4,000 pesos en 1863 y 3,800 pesos cada ano entre 1864 y 1868.80

A pesar de encontrarse fuertemente endeudado, para 1866 Rojas era el mayor productor de cafe en Lares. Entre sus mUltiples deudas se contaban, no 5610 la hipoteca princi­pal contraida con Amell, Julia y Companfa, sino tambien una segunda obligaci6n hipotecaria con Francisco Ferret y Hermano, la firma catalana que era a su vez la mayor acree­

11,

77 Pueblo de Lares 1864 a 65. Padr6n de riqueza comerciaI..., AGPR· FML, caja 24 provisional.

78 AGPR·FPN, Genaro L6pez, caja 1466, San Sebastian, 1862, fol. 441. 79 AGPR·FPN, Genaro L6pez, caja 1459, San Sebastian, 1857, fol. 365. 80 AGPR·FPN, Genaro L6pez, caja 1466, San Sebastian, 1862, fol. 441.

177 dora en Lares.81 A pesar de estas deudas tan substanciales, Rojas necesitaba aun mas capital refaccionista para operar su hacienda. Para refaccionar la cosecha de ese ano, con­trajo en mayo de 1868, una tercera hipoteca con Viv6, Men­dez y Companfa, quienes accedieron a prestarle 3,951 pesos hasta enero de 1869 para que pudiera efectuar la recolecci6n del grano. Rojas ya Ie debfa 1,551.65 pesos a dicha firma, los cuales tambien debfa satisfacer al finalizar la cosecha de 1868-1869, junto con un interes del doce por ciento anuaI.82 Asf, a pesar de su posici6n como el mayor produc­tor de cafe en Lares, Rojas se habfa sobre-extendido en su credito, era incapaz de generar suficiente capital para re­faccionar su finca, y se encontraba fuertemente endeudado con una serie de comerciantes, todos eUos notoriamente peninsulares.

Al igual que Rojas, otros Hderes prominentes del GritO parecen haber estado substancialmente endeudados con los comerciantes del pueblo. Ademas de sus intereses agra­rios, mochos de ellos operaban pulpedas en sus fincas, 10 cual anadfa una dimensi6n adicional a su conflicto con los comerciantes grandes. En primer lugar, estaban endeuda­dos como hacendados y debfan apoyarse en los comerciantes para obtener capital refaccionista asf como los servicios de almacenaje y mercadeo. Y en segundo lugar, los grandes co­merciantes abastecfan las mercandas y el capital necesario para la operaci6n de las pulpedas. Andres Pol, quien fuera un general de divisi6n durante la revuelta, posefa numero­sas pulpedas a traves del territorio lareno, asf como una hacienda de cafe.83 Pero al igual que Rojas, Pol no estaba 501­vente. En junio de 1867, Ie debfa a los comerciantes mallor­quines Juan Alc6ver y Cia. la suma de 6,036.60 pesos, deuda que habfa vencido en febrero de 1867. Alc6ver Ie habra pro­

81 AGPR·FPN, Evaristo Velez, caja 1426, Lares, 1868, fol. 329. 82 AGPR-FPN, Evaristo Velez, caja 1426, Lares, 1868, fol. 329. 83 Pueblo de Lares 1864 a 65. Padr6n de riqueza comerciaL.., AGPR­

FML, caja 24 provisional.

.i

\

Page 19: smjegupr.netsmjegupr.net/wp-content/uploads/2012/05/Cubano-Inmigraciones.pdf · 143 II~f HACIAEL GRITO DE LARES: CAFE, ESTRATIFICACION SOCIAL Y CONFLICTOS DE CLASE 1828-1868· Laird

178 179

rrogado el plazo de acuerdo con un nuevo itinerario de pa­gos que comenzada en enero de 1868 a rawn de 600 pesos al alio.l •

lii( ; Los conflictos entre comerciantes y hacendados, penin­1"" sulares y criollos, tambien entraliaban un contenido gene­il'!'" 'iii racional. Existe evidencia de que la antigua elite agraria

II'j,,; criolla que habia emigrado hacia Lares en 10$ 1830 Y 1840 I'I~ i habia incurrido en deudas considerables hacia los 1860.r!li En 1864 Toribio de Santiago, quien habia sido el mayor te­

rrateniente en Lares durante los 1830 y 1840, se vi6 obliga­do a ceder el titulo de su finca de 800 cuerdas en el barrio Rio Prieto a Juan Alc6ver, tras haberse endeudado con este por la suma de 9,037.77 pesos. En el acuerdo de traspaso, San­tiago retenia la opci6n de recobrar las tierras al saldar la deuda, mas nunca 10 hizo y perdi6 la finca. Santiago la ha­bia adquirido en 1832.1)

A pesar de los persistentes confIictos entre propieta­rios criollos y la poblaci6n desacomOOada, los jornaleros en ultima instancia cu1paban a los comerciantes por las Ii­bretas, las que ellos percibian como el origen Qe su domina­ci6n por parte de los propietarios. No obstante, ciertos fac­tores mitigaban y redudan la enemistad entre los hacen­dados y los trabajadores libres. Los miembros de la elite agra­ria residian en sus fincas y no en el pueblo. Y aunque las ha­ciendas cafetaleras eran empresas comerciales, sobrevivian

84 AGPR-FPN, Evaristo Velez, caja 1425, Lares, 1867, fol. 231. 85 AGPR-FPN, Genaro L6pez, caja 1469, San Sebastil!.n, 1865, fol. 351;

caja 1426, Evaristo Velez, fols. 201, 324. En los protocolos de Lares hay muchos ejemplos de este tipo de transacci6n. A principios de 1868, Fran­cisco Ramirez, presidence de la malograda RepUblica de Puerto Rico, obtuvo responsabilidad legal sobre unas deudas de Ramona Velez, viuda de Con­cepci6n Marla L6pez, un prominence comerciante y terrateniente de los alios cuacenta. Al momento de su muerce L6pez debla 6,595.35 pesos a Marquez y Compallla, cuya suma fuera satisfecha por el trapaso de 302 cuerdas en Lares y Adjuntas. Ademas, en saldo de una deuda por 9,400 pesos con Amell, Julia y Cia., se concedi6 una finca de 183 cuerdas en el barrio Bartolo. Ver AGPR-FPN, Evaristo Velez, caja 1426, Lares, 1868, fols. 232, 355.

en elias elementos patriarcales en 10 referente a las relacio­nes entre agricultor y pe6n. Los terratenientes criollas que residian en sus fincas no viajaban a Europa tOdos los •.nos despues de la cosecha, como era la costumbre de los comer­ciantes, ni tampoco vivian en drculos estrechos interaccio­nando exdusivamente entre ellos. Propietarios y trabaja­dores estaban en contacto, formal e informalmente, a tra­yeS de tOOo el alio, 10 que creaba una afinidad entre ellos, que si bien podia ser 5610 superficial, era algo que no existfa entre los comerciantes espaiioles y la poblaci6n trabajadora de la ruraUa. Los dirigentes de la insurrecci6n tuvieron la capacidad de sacarle provecho a esta situaci6n. Ellos didan que los peninsulares, y no los criollos, habian promulgado el reglamento de jornaleros de 1849, absolviendo asi a la elite criolla de cualquier responsabilidad en el asunto.

La expansi6n de la economia cafetalera y la disposici6n de la elite agraria a especu1ar en el mercado de cafe can­tribuyeron a elevar el nivel general de endeudamiento ~­rante la decada de 1860. Con este ingrediente se exacerba­ron aun mas las tensiones entre comerciantes y hacenda!=los. Los libros de contabilidad de Marquez y Compaliia revelan que el total de crMito extendido entre 1864 y 1868 aument6 en casi ochenta por ciento, de 70,700 a 126,572 pesos. Mar­quez clasificaba sus acreencias en tres clases: malas, dudosas y buenas. En 1865, entre las acreencias malas y dudosas s610 habia 1,464 pesos, pero para 1868 esta cantidad ascendia

a 8,361 peSOS.86 EI confliao primordial que precipitaria la rebeli6n envol-,

86 AGPR-LCMC, libro inventario perteneciente a la casa mercantil Marquez y Cia., 1864-1871. EI huracan San Narciso, de octubre de 18l:i7, tal vez haya contribuldo a elevar el nivellocal de endeudamiento, pues la tor­menta afect6 la cosecha de cafe de 1867·68. No obstante, los peores dai'los de San Narciso se concentraron en la regi6n montai\osa del esce, en las in­mediaciones de Cayey. La altura occidental debe haber sufrido algunos da­lIos, mas no de la magnitud de los ocasionados por San Ciriaco ep 1899· Vease a Luis A. Salivia, Historitl de los tempo,ales de Puerto Rico, 1.492 /I 1970 (San Juan, 1972), pp. 190-195. Cruz Monclova, Histori/l, I, 447,

Page 20: smjegupr.netsmjegupr.net/wp-content/uploads/2012/05/Cubano-Inmigraciones.pdf · 143 II~f HACIAEL GRITO DE LARES: CAFE, ESTRATIFICACION SOCIAL Y CONFLICTOS DE CLASE 1828-1868· Laird

180 181

via a los dos seaores de la elite larefia. Los produaores criollos depend{an totalmente de los comerciantes espa­noles para su capital de financiamiento y para los servicios bAsicos de comercializaci6n del cafe. A medida que la elite agraria se iba endeudando, aumentaba la acumulaci6n de capital entre los mercaderes peninsulares, y se intensifi­

. caba su control sobre la econom{a local. Debido a que las condiciones materiales relativas de gran parte de la pobla­ci6n larena se deterioraron durante los anos 1850 y 1860, los Hderes de la insurrecci6n pudieron sacar partido del des­contento general y de las presiones que afeaaban a terra­tenientes y desacomodados por igual. De las experiencias concretas de individuos conoados por todos los sectores de la comunidad local emanaban antagonismos hacia el drculo de comerciantes espanoles. La clase de comerciantes pe­ninsulares era algo mas que un s{mbolo de opresi6n local. Su conocida riqueza contrastaba con el empobrecimiento de los desacomodados y el endeudamiento de los hacendados. Por eso, al entrar al pueblo los revolucionarios arrestaron a todos los mercaderes espanoles que encontrarOn y quema­ron los libros de cuentas en donde se registraban las deudas de los terratenientes. Las libretas de jornaleros tambien fue­

opina que una de las causas de insurrecci6n fue el alza de las obligaciones fiscales del pueblo. Un examen detallado de los documentos fiscales de Lares demuestra, sin embargo, que sus responsabilidades comributivas registraron s610 un leve aumemo entre 1863 y 1868. En el primero de esros ailos, el municipio debia pagar un total de 4,464 pesos de contribuciones; para eI 1868 esra suma ascendia a 5,140, una diferencia de s610 15.2 por ciemo. Emre tamo, los gravAmenes impuestos a los cabecillas de la in· surrecci6n tampoco subieron en demasla. Por ejemplo, en 1865 Manuel Rojas debia pagar 62.50 pesos de subsidio. Tres ailos mas tarde estaba obli· gado por la suma de 77.46 pesos. que no podIa ser una carga excesiva parael mayor productor de cafe en Lares. Ver Padr6n de las riquezas y reparto del subsidio... 1863; Repatto de comribuciones... 1864 a 1865; Repatto de con· tribuciones provinciales y municipales... 1865 al 66; Pueblo de Lares. Ai\o de 1866/1867. Reparto subsidiario para el ai\o espresado; Ailo de 1867 a 1868. Reperro de la contribuci6n subsidiaria...; todos en AGPR·FML, caja 24 provisional.

ron recogidas y quemadas en ceremonia pUblica.87 Estos dos s{mbolos de la opresi6n espanola, los libros de contabilidad y las libretas de jornaleros, ejerdan sobre los revolucio­narios que tomaron por la fuerza a Lares una influencia mAs poderosa que la ideolog{a anticolonial 0 que cualquier nocion de democracia poHtica. Reflejaban, concretamente, la explo­taci6n que hab{a pasado a ser parte de la vida diaria de am­plios sectores de la sociedad larena.

ConcJusi6n

En los anos de 1860, la sociedad de Lares se caracterizaba como una organizaci6n vertical con agrupamientos socia­les muy definidos. Las presiones sobre los niveles inferio­res de la sociedad aumentaban en relaci6n directa con el crecimiento de la agricultura comercial. A expensas unos de ouos, proliferaron los minifundios y los pequenos pro­pietarios, los que subdivid{an sus recursos continuamerite. A comienzos de los 1850, cuando las exigencias de mano de obra comenzaron a sentirse, la poblaci6n desacomodada me vktima de metodos mas organizados y sistematicos de ex­plotaci6n. Una de sus manifestaciones fue la aparici6n del peonaje por deudas. Otra 10 fue el crecimiento de la pobla­ci6n jornalera, a expensas de los ouos grupos. En 1850, la proporci6n entre trabajadores con derechos de usufrueto de la tierra (agregados, arrendatarios y aparceros) y jor­naleros era de 5:2. Para 1870, la relaci6n hab{a cambiado radicalmente, 1:2.88 En el breve termino de dos decadas, a gran parte de la poblaci6n trabajadora de Lares Ie fueron

87 Perez Moris. La inrurrecci6n, pp. 144-149. 88 Ver Pueblo de Lares. Ai\o de 1850. Estado formado con arre810 a Ia

circular del superior gobierno no. 99 de 2 de septiembre corrienre. AGPR­FML, caja 49 provisional. En 1850 habia 508 arrendatarios y 216 jorna· leros. mienrras que en 1870 se comaban s610 56 arrendatarios. 967 peones, y 2,120 jornaleros. Censo de poblaci6n 1870, AGPR·FML, caja 18 pro­visional.

Page 21: smjegupr.netsmjegupr.net/wp-content/uploads/2012/05/Cubano-Inmigraciones.pdf · 143 II~f HACIAEL GRITO DE LARES: CAFE, ESTRATIFICACION SOCIAL Y CONFLICTOS DE CLASE 1828-1868· Laird

182

usurpados sus derechos sobre la tierra, mientras por otro lado se Ie someda a los mecanismos represivos de control del rrabajo instituldos por el reglamento de jornaleros de 1849.

Los sectores medios tambien experimentaron movilidad descendiente. Entre 1854 y 1867 las fincas de tamano in­termedio aun representaban alrededor de 18.5 por demo de todas las propiedades. Sin embargo, su control sobre el cuer­daje total descendi6 de 31.6 a 26.3 por ciento. La elite agra­ria, que poseia las fincas de 200 cuerdas 0 mlis, increment6 su control sobre la extensi6n agricola larena del 42.9 at 55.2 por ciento del total. La concentraci6n-fragmentaci6n de las tierras ocurri6 casi al mismo ritmo que la difusi6n de los mecanismos de Mercado a traves del municipio.89

Los mercaderes inmigrantes representaban la clase do­minante en Lares en 1868. Su control sobre los recursos. de capital y facilidades de comerdalizaci6n habia hecho que los mayores agricultores de Lares dependieran de ellos, para sus servicios blisicos. Esta fue la base del principal con­flieto en Lares en el 1860. La economia cafetalera en pro­

'·"1 ceso de expansi6n indujo a los agricultores especuladores ~' ',:"

a contraer deudas cada vez mayores para financiar mejoras en sus fincas tendientes a aumentar la producci6n. Aunque la economia creci6, los beneficios de tal crecimiento no fue­ron distribuidos equitativamente entre la elite. La elase de los comerciantes extrajo una proporci6n mayor de capital

I"l cafetalero excedente a traves de los mecanismos de mer­q II cado -intereses, hipotecas, deudas, y margenes de ganancia.

Por su parte, los hacendados nunca pudieron salvar la bre­,I cha entre endeudamiento y solvencia econ6mica, en el pe­

dodo en que precisamente los comerciantes peninsulares estaban acumulando riquezas, se retiraban a la PenInsula,

89 Las fincas de lamai'lo mediano promediaban entre 51 y 200 cuerdas. Pueblo de Lares. Ai'Io de 18'4. Derechos de tierra...• AGPR-FML, caja 22 provisional. Padr6n de rerreno... 1866-67, AGPR·FML. caja 24 provisional.

183

Y regeneraban sus filas mediante un flujo continuo mi­•.gratorio.

Pero no obstante la organizaci6n vertical de la sociedad larena, la revoluci6n coagu16 a todas las elases sociales de origen criollo en e1 municipio. Encabezando esta alianza ver­tical se encontraban los grandes terratenientes y pulperos, representados por figuras como las de Manuel Rojas, Andres Pol, Joaquin Parrilla y los hermanos Plumey, Gavino y Leopoldo. Estos dirigentes organizaron una fuerza armada de mas de 1,000 hombres, cifra impresionante en vista de que la poblaci6n de Lares en 1868 ascendia a unos 15,000.90

Los revolucionarios tenian una meta: quitar a los espai'ioles de las posiciones de poder local e insular. Elliderazgo ha­bia reducido los antagonismos municipales a un conflieto en torno a la nacionalidad. Los patriotas luchaban contra los colonialistas; los criollos contra los peninsulares. Estos conceptos eran inteligibles a la poblaci6n local, sin distin­ciones de elase. La estructura de dominad6n poUtica y econ6­mica en Lares no estaba matizada 0 aliviada por la existen­cia de una burocracia organizada que respondiera a los, in­tereses de la elite, pues el poder local no se habia institu­cionalizado. La autoridad y la riqueza estaban encarnadas en individuos cuya presencia no podia escaparsele a los miembros de la comunidad; todo el mundo en Lares conoda a los hermanos Marquez, a Caloca, 0 a Ferret, los princi­pales comerciantes. Es decir, el poder local 10 ejerdan per­sonas bien conocidas, y no instituciones impersonales. Por estas razones, los dirigentes de la insurrecci6n tuvieron exito en aglutinar una alianza de clases en su lucha nacio­nal en contra de los comerciantes peninsulares de Lares, a pesar de los conflictos que se daban a diversos niveles en el ordenamiento social. Para todos los larenos, "espanol" 0

"mallorquin" no representaban conceptos abstractos del colonialismo espanol, sino slmbolos muy reales de opresi6n

90 P~re% Moris, La ifJJ,.rrecci6n, p. 144.

Page 22: smjegupr.netsmjegupr.net/wp-content/uploads/2012/05/Cubano-Inmigraciones.pdf · 143 II~f HACIAEL GRITO DE LARES: CAFE, ESTRATIFICACION SOCIAL Y CONFLICTOS DE CLASE 1828-1868· Laird

185 184 local. Los peninsulares eran responsables de la adopci6n e implementaci6n del odiado reglamento de jornaleros. Los comerciantes peninsulares poseian obligaciones e hipo­tecas de casi todos los estratos de la sociedad rural, desde los minifundistas hasta los grandes hacendados de cafe. Des­pues de cada cosecha, los cafetaleros de Lares liquidaban sus cuentas, renegociaban sus hipotecas 0 sus deudas no sal­dadas, y velan c6mo el cafe que eUos habian cultivado y co­sechado se converda en fuente de extraordinarias riquezas para los comerciantes espanoles del pueblo.

La clase de los comerciantes era una sociedad cerrada 'll' ~ I: que recreaba sus filas mediante la inmigaci6n, y no median­l'lj "'I" te la asimilaci6n de la poblaci6n local. A partir de los pri­

" meros anos de la decada de 1840, la sociedad crioUa obser­vada c6mo los catalanes y maUorquines llegaban a Lares, se enriquedan, regresaban a Europa, y eran substituldos por hombres mas j6venes de la misma estirpe. El liderazgo revolucionario no tuvo dificultad en senalar como extran· jeros a estos hombres y al gobierno que ellos representa­ban, ni en presentarlos como tipos sociales extranos a la sociedad y la cultura puertorriquenas.

,:11 1

1 Sin embargo, estos inmigrantes que controlaban la econo­

mla local en 1868 tambien 10 habian hecho durante los anos "I, 1850. Pero para entonces, el monocultivo del cafe se encon­

",/, traba en su fase de expansi6n primaria. Hacia fines de los 1:( sesenta las tensiones y presiones creadas por el crecimiento ,1 de la agricultura comercial se habian desenvuelto 10 sufi­

1'1' ciente como para convertir la regi6n en campo lertil de la agitaci6n anticolonialista de los revolucionarios de la costa. La creciente coacci6n de la poblaci6n desacomodada, las pre­

~, siones sobre los terratenientes medianos y pequenos, las perpetuas deudas de los hacendados, y la nowria riqueza de los comerciantes peninsulares de la localidad habian he­cho de Lares un lugar receptivo a las fuerzas revolucionarias que arropaban a todo el Caribe de habla hispana. Existe evidencia de la influencia que en los Hderes de la revoluci6n

ejercieron la ideologfa y las corrientes poHticas que emana­ban de otras partes.91 No obstante, fueron las condiciones lo­cales las que determinaron la disposici6n de la poblaci6n de Lares hacia el brote revolucionario. Las causas principa­les de la revoluci6n fueron de alcance local, no nacional. Los hombres que comenzaron su marcha en la finca de Manuel Rojas, en el barrio Pezuela, sablan exactamente por que quedan eliminar el colonialismo espanol de la Isla. Para ellos, "Viva Puerto Rico libre" significaba arrebatar­Ie a los comerciantes peninsulares el cOntrol de la economfa cafetalera de exportaci6n en la cordillera central.

91 Rojas era amigo personal de Betances, quien tenia conexiones con el movimiemo revolucionario cubano y con liberales en la Peninsula. Vea~ Luis Hernandez Aquino, "Figuras del cemenario: Manuel Rojas, un pre­cursor inolvidable de la independencia puercorriquei'la" en ReviItIl del Inrtitmo de C*It*rll P*ertorriq*efla, 40 (julio-sept. de 1%8), 61. "iViva Betances!" -ese fue uno de los gricos de combate escuchados en Lares tras la coma de la alcaldla. Ver Cruz Mondova, HiItOrill de P~o Rico. 1,455.

II