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Número 129 / 11 de Diciembre de 2013

EN EL TRENDEL ÉXITO Fo

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Por primera vez desde que empezó la aventura de GijónSport una deportis-ta, en femenino, protagoniza la por-tada de nuestra revista. Fallo nues-tro sin duda teniendo en cuenta los grandes ejemplos que tenemos en Gijón. Figuras como Ángela Pumarie-ga, Jessica Alonso o la propia Lucía Martiño.

Todas tienen en común que a la di-ficultad de luchar por el deporte fe-menino se suma el hecho de que se dedican a deportes que pocas veces reciben los focos de atención. En el caso de Ángela y de Jessica el hecho de ser medallistas olímpicas ni siquie-ra les ha garantizado un futuro en el que puedan dedicarse a su deporte y vivir de ello de una forma digna.

Por eso en GijónSport queremos que ellas, las mujeres que se dedican al deporte, sean también protagonistas y puedan contarle al mundo lo que hacen en su día a día y los logros que están cosechando en sus carreras deportivas. Por eso también hemos querido que esta semana Lucía Mar-tiño ocupe el reportaje principal de nuestra revista.

GijónSport - Editorial

Nos estrenamosEdita:GijónSport S.L.

Contenidos:David González@DavidGonzalezzz

Marcos Martín@MarcosMatin87

Marta Tejerina@MartaTeje

Fotografías:Gabino Jovewww.gabinojove.es

Maquetación:El Tajalapiz S.L.

Publicidad: Dani Arango

Contacto:[email protected]@gijonsport.es

GijónSport es una publicación digital de caracter semanal y gratuita. Queda expresamente prohibida la reproducción total o parcial de los textos, fotografías y otros elementos sin la expresa autorización.

Con la surfista gijonesa nos hemos dado cuenta de la dureza de un de-porte que poco tiene que ver con la imagen que habitualmente tenemos ligada al surf. Lucía se dedica a un deporte en el que madrugar significa levantarse cuando aún es de madru-gada, una disciplina que requiere una gran forma física y en la que muchas veces debes ser capaz de soportar las bajas temperaturas del mar en pleno invierno.

La parte buena quizás tenga que ver con sus constantes viajes. Con la posibilidad de ver mundo y conocer lugares increíbles. Pero eso también implica estar alejado de los tuyos du-rante mucho tiempo y eso no es algo fácil de llevar. Por eso queremos que conozcáis mejor a Lucía Martiño, una joven de Gijón que viaja tras un sueño y que dedica toda su vida al deporte.

“En GijónSport también queremos destacar la im-portancia del deporte feme-fino, hablar de sus logros y de su esfuerzo”

12. Lucia MartiñoLa surfista gijonesa se pasa la vida viajando y visitando algunos de los lugares más exóticos del planeta. Nos lo cuenta en GijónSport.

04. AnálisisRepasamos los detalles que no dejó el pasado domingo el Hércules-Sporting

08. Borja LópezEl jugador del Mónaco de-butó este fin de semana con el primer equipo del Monaco y nos lo cuenta en su carta.

10. MirandésConocemos de cerca al próximo rival del Sporting.

32. Juan MeraEl autor del gol que daba la victoria al Sporting B sobre el Oviedo también se pasa esta semana por GijónSport.

36. Los hermanos PlazaHablamos con los jugadores del Juanfersa Grupo Fegar.

NÚMERO 129, 11 DE DICIEMBRE DE 2013

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Especiales

C O N T E N I D O S

Otros temas

Y además...

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El Sporting está donde tiene que estar. Tercero, a tres puntos del ascenso directo, peleando como uno más por el ascenso a Primera. El Sporting no es más que nadie, pero algunos trataban de hacer ver que sí menos que otros. Este año está en la pelea. Es para reconocerlo, pero sin estri-dencias. Pelear por el ascenso. ¡Qué menos!

Para el equipo gijonés estar en la pelea por el ascenso a Primera es lo normal, el mínimo exi-gible. Lo raro fue lo de la desastrosa tempora-da pasada, o lo de la década infame en la que hundieron al Sporting entre dirigentes, técnicos y jugadores mediocres. Durante más de cinco años, el equipo no se metió ni un solo día, ni de casualidad, en puesto de ascenso, hasta la temporada en la que Marcelino García Toral lo situó primero, antes de la todavía difícil de creer caída en picado. Tendrían que pasar otras cuatro temporadas para que el equipo acabara consiguiendo el objetivo del ascenso. Lo que di-ferencia aquellas de esta es que el Sporting en

las primeras se marcaba el objetivo más como un deseo que como un objetivo (sobre todo en la temporada de Manolo Preciado). Este año se han tomado todas las decisiones pensando en ello.

“Al Sporting se le ve como un equipo competitivo, pero poco fiable, poco regular en su fútbol

pero no tanto en sus números”

El Sporting tiene, curiosamente, los mismos puntos (28) que tenía en la jornada 17 de aque-llas dos temporadas: la 2003/2004 (la del casi ascenso) y la 2007/2008 (la del ascenso). Lo cual puede ser una señal contradictoria: son unos buenos números, pero no garantizan nada.

Y son precisamente los números los que ava-lan a los optimistas. Las cuentas sí pueden salir. Lo de las sensaciones es otra cosa, mucho más discutible. Nadie pide exhibiciones futbolísticas,

ESTAR ENLA POMADA

GijónSport - Análisis

pero el equipo sigue dando una de cal y otra de arena. Sandoval volvió a recurrir al 3-5-2 para jugarle al Hércules. Y en la habitual bipolaridad del equipo, esta vez defendió bastante mejor de lo que atacó. Le sirvió para ganar, pero no para ser superior a su rival. Cuentan las puntos, pero también importan las sensaciones que transmi-te el equipo.

Y al Sporting se le ve como un equipo competi-tivo, pero poco fiable, poco regular en su fútbol. No tanto, repetimos, en los números: lleva seis partidos seguidos sin perder y en Alicante logró lo que tanto le costaba: dejar la puerta a cero después de ocho jornadas sin hacerlo.

El gol de Santi Jara no pudo ser mejor aprove-chado. Del partido no se puede rescatar mucho más que un buen y solidario trabajo defensivo,

una falta de fluidez en el centro del campo a partir del minuto 20 y hasta el 90, dos pasillos preocupantes en las bandas y una tarde gris y desasistida de los soberbios delanteros serbios. Pero con todo eso, los tres puntos volaron hacia Gijón. Y el Sporting está en la pomada. Donde tiene que estar. Y que siga.


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GijónSport - Opinión

La victoria del Sporting en el Rico Pérez, sirve para devolver al equipo rojiblanco a la zona no-ble de la clasificación, muy cerca de los puestos de ascenso directo en los que se ha marcado el propio equipo acabar la temporada. Fue de nuevo un partido en el que tocó sufrir en exceso a la parroquia rojiblanca, y no sirvió en ninguno de los casos para despejar las dudas que sigue generando, pese a todo, el fútbol de los de San-doval esta campaña.

Sin querer entrar tampoco en valoraciones tác-ticas o técnicas, lo cierto es que el gol de Santi Jara en los inicios del partido, sirvió a la postre para sumar tres puntos que saben a gloria, es-tadísticamente hablando. Pero volvió a jugar en exceso con fuego el Sporting, a raíz de ceder metros y entregar descaradamente el balón a un rival que venía en clara progresión, y que pudo costarle muy caro al Sporting, que sigue sin en-contrar el punto de equilibrio clave para tener la necesaria regularidad de un aspirante al ascen-so esta campaña.

Achacarlo todo la suerte, sea a favor o en con-tra, es un argumento demasiado ramplón. Pero el Sporting la tuvo de su lado en Alicante, y no se puede negar tampoco la evidencia. Sandoval sigue apostando por alterar el sistema jornada tras jornada, y mientras los resultados acom-pañen, perfecto. Aunque parece olvidársele al técnico de Humanes una de las premisas que él mismo instauró a su llegada al banquillo del Sporting. “No nos vamos a conformar con ganar

de cualquier manera”, aseguró, aunque de mo-mento no se está cumpliendo.

Lógicamente todos queremos y buscamos lo mismo: El Sporting en Primera. Pero la forma de conseguirlo que tiene el míster en mente, sigue estando muy alejada de la que le gustaría con-seguirlo a la afición de El Molinón, por la sapien-cia que ésta tiene de fútbol, acumulada en sus más de cien años de historia. Y que sigue vien-do a un equipo demasiado cogido con alfileres pese a todo.

Las jornadas van pasando. El equipo está arriba y en evidente crecimiento. Eso es cierto. Pero dejando de lado algo que se añora, y mucho, en la Asturias rojiblanca: el buen fútbol. Los es-tadistas dirán que es secundario mientras se gane, pero mientras el Sporting no sea capaz de alcanzar, no la excelencia a la que se refiere siempre el míster, sino el punto de equilibrio ne-cesario, se dependerá en exceso de los errores del rival a la hora de aprovechar las facilidades que seguimos dando. Y no tanto del potencial que se le presupone, y tiene, este Sporting, res-pecto a la gran mayoría de equipos de Segunda este año.

Todos queremos lo mismo, ver al equipo en Pri-mera el año que viene. Pero nos sigue faltando algo vital en este deporte: fútbol. Al menos en lo que nos han hecho creer que podían hacer y que, de momento, brilla por su ausencia. Cuan-do a priori parece ser el camino más directo ha-cia el objetivo final.

Ganar sin fútbolJaime CeñalPeriodista Marca Gijón@AdrianRHuber

Desde el otro Principado

Por Borja López

Capítulo XI

Gran fin de semana para el deporte gijonés, y también para nosotros.

Primero fue el turno del Sporting. Tenían un par-tido muy complicado, el sábado en Alicante, pero pudieron conseguir los 3 puntos, que ha-cen que el Sporting ya sea tercero, a 3 puntos del ascenso directo, y 3 por encima del séptimo clasificado. Del partido cabe destacar el gran trabajo defensivo de todo el equipo, ya que el Hércules apenas dispuso de ocasiones claras de gol. Es muy importante dejar la portería cero. También hay que destacar el buen disparo de Santi Jara en el gol y el trallazo de Barrera al larguero.

Con el pitido final, era el turno del Juanfersa Gi-jón. Y como no, ganaron 32-30 al Villa Aranda con un gran Alex Costoya que ya es el máxi-mo goleador de la Liga Asobal con 80 goles. Increíble la temporada que está haciendo todo el equipo. Ya llevan 13 puntos, ¡y que sean mu-chos más!

El domingo por la mañana sería el turno del Ma-reo Femenino, que ganó al Arousana por tres goles a uno. Nunca hay que olvidarse del fútbol femenino, que cada vez es más reconocido. Y a la tarde, llegaría el partido más esperado: Spor-ting B-Oviedo. Este año sin Guerrero, pero con Pablo Pérez y Juan Mera que se salieron. Están haciendo una buenísima temporada los dos, y también el resto del equipo. No fue un 4-1 como el año pasado, pero fue un 2-1 que valen 3 pun-tos y un “subidón” de moral, por lo que repre-senta siempre este derbi.

Por último, en la noche del domingo me tocó ver desde la grada del Stade Louis II a mi equi-po. Después de ganar el derbi por semana en Niza, y después de conocer las derrotas del Li-lle y del Marsella este fin de semana, era muy importante ganar al Ajaccio. Y así fue, 1-0 con gol de Rivière que hace que nos coloquemos segundos a dos puntos del PSG. Va a ser muy difícil disputarles la Liga pero vamos a intentarlo hasta el final.

Sin más, me despido hasta la próxima semana en la que espero seguir contando buenas noti-cias del deporte gijonés. Un saludo a todos.

C.D. Mirandés

El próximo rival del Sporting es un equipo que se caracteriza por su disciplina y su

compromiso en todas sus líneas. Muestran gran intensidad en los encuentros y la nota más dife-renciada con respecto a la temporada anterior es un juego combativo y más asociativo. Los de Arconada realizan posesiones más largas y tie-nen más pausa con el balón en los pies. En las jugadas a balón parado son peligrosos. Tienen la ausencia de uno de los jugadores más de-terminantes del equipo, Díaz de Galarreta, para lo que resta de temporada debido a una grave lesión de rodilla.

Ante los burgaleses el Sporting intentará sumar una nueva victoria que le permita seguir esca-lando puestos en la clasificación. Sin embargo, los de Sandoval tendrán que cuajar un buen partido si quieren imponerse este próximo do-mingo al Mirandés.

Entrenador: Gonzalo ArconadaEstadio: Municipal de AnduvaCapacidad: 6.500Puesto en la clasificación: 15º (22 puntos)

GijónSport - El rival

Últimos resultados

PORTERODani Jiménez: Portero muy rápido y ágil bajo palos. Empezó de suplente y le llegó la opor-tunidad por la lesión del chileno Prieto. Está realizando grandes actuaciones; en el último partido, ante el Murcia, salvó al equipo con dos grandes intervenciones en los últimos minutos.

DEFENSAMalón: Lateral derecho. Llega a Miranda tras pasar dos años en el Numancia. Jugador ague-rrido en la marca y agresivo en sus acciones. Defiende bien y tiene una salida de balón acep-table. No es demasiado rápido pero siempre está bien posicionado dando pocas facilidades al contrario.

Caneda: Central, mucha experiencia y muy in-teligente. Buena colocación y demuestra con-centración en todo momento. A pesar de no ser excesivamente alto, domina a la perfección el juego aéreo, siendo peligroso cuando se incor-pora al ataque en las jugadas de estrategia.

Kolikili: Ex del Athletic de Bilbao. Lateral iz-quierdo que destaca por sus condiciones de-fensivas. Muy intenso en todos las acciones y muy agresivo en la entrada. Busca la anticipa-ción, muchas veces reacciona bien en las accio-nes de uno contra uno. Con el balón, en tareas ofensivas, en numerosas ocasiones se precipita y perdiendo precisión en sus jugadas.

MEDIONagore: El veterano mediocentro sigue man-teniendo su nivel en la categoría a pesar de la edad. Gran trayectoria en el fútbol profesional. Mantiene la posición dando equilibrio al equipo. Corta muchas jugadas de ataque del contrario y cuando recibe el balón para salir jugando lo juega con criterio. Demuestra tranquilidad con el balón en los pies y desplaza bien en largo.

Pablo Infante: Icono del equipo. Tiene buen re-gate y puede salir para cualquiera de los dos perfiles, siendo más peligroso cuando busca el centro ya que dispone de un gran disparo desde lejos. Se ofrece y le gusta entrar mucho en jue-go. Golpea con peligro las estrategias. A veces peca de individualista.

Lucena: Jugador que os resultará familiar por su paso por Luanco y por el Sporting, aunque tuvo poca participación. Tras unos años de éxito en Granada llegó este verano a Miranda. Cuan-do juega lo está haciendo siempre en la posi-ción de mediocentro. Demuestra un buen trato de balón y una buena colocación para cortar los avances del contrario. Es un poco lento de mo-vimientos pero juega fácil, no arriesga y defien-de bien.

Docal: Ex del Racing de Santander. Puede jugar tanto de lateral como de interior. Buena zurda, potente y con mucho recorrido. Intenso defen-sivamente y vertical cuando tiene que atacar. Saca centros con precisión cuando gana línea de fondo

DELANTEROSGoiria: Delantero corpulento que juega bien de espaldas y domina a la perfección el juego aéreo. No es rápido aunque dentro del área se mueve bien para ganar los espacios y buscar el remate.

Díaz de Cerio: Tiene mucha movilidad y veloci-dad aceptable Juega al límite del fuera de juego, define bien ante el portero y domina el juego aé-reo. Presiona con intensidad a los centrales y se hace fuerte en las disputas.

GijónSport - El rival

El tiempo entre maletasPor Marcos Martín / Fotos Gabino Jove

Lucía Martiño

GijónSport - En portada

La ropa, el neceser, el cargador del mó-vil y el libro que está leyendo. No se le

olvida nada. Lucía Martiño cierra su maleta de modo rutinario, casi sin prestarle atención, por-que lo ha hecho decenas de veces. Su amor por el surf, al que dedica gran parte de su tiempo, ha hecho de los viajes una parte muy importante de su vida.

Y es que, detrás de las maniobras entre las olas, hay mucho más. Muchos kilómetros de carre-tera y aventuras en estaciones y aeropuertos. Lucía ha conocido muchos países y culturas, aunque nunca se cansa de seguir aprendiendo. “En cuanto llego a un sitio nuevo y tengo un rato libre, salgo a conocerlo. Me gusta preguntar a la gente y saber por qué hacen las cosas en cada sitio”.

Precisamente, la singularidad de cada lugar en el que ha tenido que surfear ha ido llenando de anécdotas las páginas de su cuaderno de via-jes. En Sumbawa, una isla de Indonesia donde se practica el Islam, tuvo que improvisar su ves-tuario para poder pisar tierra firme. “Estuve una semana en un barco y cuando iba a bajar en

biquini, porque hacía muchísimo calor, me dijo el capitán que me cambiase. Tuve que ponerme una falda y una toalla debajo porque sólo podía mostrar los tobillos”.

Muy cerquita de Indonesia –y Nueva Zelanda, donde también ha surfeado– se encuentra el próximo destino de Lucía. También es uno de los pocos rincones del planeta que le quedan por conocer: Australia. Tiene marcado el viaje en rojo en el calendario: “En febrero, voy allí a participar en dos campeonatos que me servirán de piedra de toque para el circuito europeo”.

“También me gustaría pasar una temporada lar-ga, dos o tres semanas, en California. He esta-do, pero sólo tres días, haciendo escala para ir a Hawai”. A veces, los aeropuertos se han con-vertido en hoteles de lujo y el suelo de una ter-minal en una confortable cama para descansar en mitad de interminables viajes. Recuerda el que le llevó a Auckland: “Nos pasamos dos días en aeropuertos y aviones. Salimos de Gijón, hi-cimos escala en Barcelona y llegamos a Singa-pur. Allí pasamos la noche. Y después cogimos dos aviones más hasta llegar a Nueva Zelanda”.


“En cuanto llego a un sitio y tengo un rato libre salgo a conocerlo, a hablar con la gente del lugar”


A pesar de que todavía no ha cumplido veinte años, Lucía Martiño ha recorrido miles de kiló-metros. Y no sólo en avión o tren. También por carretera. La pasada temporada, el cuentakiló-metros de su coche pasó de marcar cero a trece mil en seis meses. “A todos los campeonatos de Europa fui en coche. La mayoría de ellos condu-ciendo yo, aunque a veces le pedía a mi entre-nador que lo hiciese él. Me gusta conducir, pero también me gusta descansar”, dice riéndose.

A Lucía le encanta viajar. “Me gusta estar fuera de mi casa; incluso cuando estoy en Gijón, me gusta salir, moverme, conocer gente,…”. Y le da igual que sus viajes sean ‘por negocios’, y no por placer. Gracias al surf, ha conocido lugares que costaría situar en el mapa, como la Isla Re-unión –muy cerca de Madagascar–. También ha estado en las Maldivas, Francia, Portugal, Bali o Marruecos.

“Aunque por ambiente de surf, temperatura del agua y playas, me quedo con Indonesia”, Ma-rruecos es uno de sus países preferidos. Ha estado una decena de veces, está más cerca que otros destinos y conoce a mucha gente. “¿Te cuento una historia curiosa de mis ami-gos surferos marroquís? Son musulmanes y en el Ramadán, sólo surfean unos 40 minutos –el tiempo que pasa entre que se esconde el sol y todavía hay claridad para entrar en el agua–, porque tienen miedo a tragar algo de agua y no cumplir con el ayuno de comida y bebida”.

Afortunadamente, la comida no es un problema para Lucía. “Me gusta comer de todo. En Ma-rruecos es increíble; vas al mercado y es todo natural, el pescado lo acaban de pescar, la fruta es fresca,…”.


“El surf es muy sacrificado. En invierno se te congelan los pies solo con pisar la arena”


A pesar de todos sus viajes, su estómago no ha opuesto resistencia alguna: “Nunca me he puesto mala. En Indonesia, los primeros días comía en restaurantes ‘europeizados’ porque el resto de sitios eran muy sucios, pero acabé co-miendo en puestos que había en la calle… Y no me pasó nada”.

Divide su vida entre Asturias y el resto del mun-do. Cada año, pasa seis meses lejos de ‘casa’ y por eso, en vacaciones, aparca los viajes y dis-fruta de Gijón. Conoce mucho, ha pisado la are-na de las playas más espectaculares del mundo, pero… “San Lorenzo es una de las que más me gusta, es inevitable. También Rodiles y Xagó. Y si me tengo que quedar con una del extranjero, elegiría Lakey Peak, en Sumbawa”.

Durante la temporada, se las apaña para seguir viendo a su familia. “Como mucho, puedo estar tres semanas o un mes sin ver a mi familia. En Francia, suelo estar un mes con mi hermana; mi padre, si puede, viene a verme los fines de se-mana y a Marruecos, también suelo ir un mes con mi madre”.

Además, las nuevas tecnologías también han acortado las distancias. “Con mi madre hablo

todos los días. O por Whatsapp o por Skype”. A pesar de ser una chica responsable y excesi-vamente ‘currante’ para su edad, una madre es una madre. Por eso, siempre está pendiente de Lucía. “La maleta la suelo hacer yo, pero es ver-dad que ella está detrás de mí, diciéndome que no se me olviden algunas cosas. Como todas”.

Aunque su futuro –y su presente– sobre una tabla de surf son muy prometedores, Lucía no ha aparcado los libros. Estudia Administración y Dirección de Empresas a distancia y habla, además del castellano, el francés, el inglés y está estudiando chino. “También chapurreo ita-liano, puedo entender mantener más o menos una conversación, pero exceptuando el chino, el resto de idiomas los he aprendido viajando”.

“El surf es muy sacrificado. El invierno, por ejem-plo, es muy duro. El agua está muy fría y se te congelan los pies sólo pisando la arena”. Lucía nos recuerda que todos sus paradisiacos viajes son sólo el envoltorio de un caramelo que hay que trabajar muy bien para que al final deje un dulce sabor. “Es como cualquier otro deporte, si quieres conseguir algo, tienes que sacrificar cosas, pero tiene su recompensa”.


“Es como cualquier otro deporte, si quieres conseguir algo tienes que sacrificar cosas, pero tiene su recompensa”


GijónSport

No le importa trabajar duro. Y a pesar de sus muchos éxitos, sigue queriendo más. La pasa-da temporada, tras ser tercera hace dos años, se tuvo que ‘conformar’ con un sexto puesto en el Circuito Europeo ProJunior. “Fue una buena temporada, pero no cumplí mi objetivo de aca-bar entre las dos primeras. Creo que me metí demasiada presión a mí misma, y me puse más nerviosa de lo que tendría que haber estado”.

Por eso, y tras sólo una semana de descanso, se ha puesto manos a la obra para ser la me-jor del circuito continental. Ha comenzado su pretemporada y con el traje de neopreno para pelear contra las bajas temperaturas, entrena dos días a la semana en Santander y el resto en Gijón. “Sólo descanso los domingos. Esté como esté el agua, tengo que entrar… ¡Hay que entrenarse en todas las condiciones! Si no hay olas un sábado, tengo que surfear igual; y si el domingo hay muchas, no debería entrar”.

No debería, pero lo hace. “Hay veces que cam-bio el día de descanso al lunes, porque si ves

que el mar está para entrar, no se puede evi-tar. Aunque luego mi entrenador me echa la bronca…”. Completa el trabajo con ejercicios físicos… Y con boxeo. “Me dijeron que era un complemento, lo probé y me encantó. De he-cho, estuve viendo la velada de Aitor ‘El Dia-mante’ Nieto hace unas semanas. Me gusta mucho el boxeo”.

Posiblemente, Papá Noel le deje esta Navidad, debajo del árbol, unos guantes nuevos para se-guir boxeando, como hace una década una ta-bla de surf. Desde entonces, sólo se ha bajado de ella para montarse en aviones, trenes y co-ches y poder surfear así olas de otros mares y océanos.

Ya está preparada para su próximo viaje. Dicen que a la tercera va la vencida y por eso, en su equipaje, y a pesar de lo que ocupan sus tablas de surf y todo lo que le ha recordado su madre que debe meter, todavía hay hueco para el tro-feo del Circuito ProJunior Europeo 2014.


Agradecimientos:Museo del Ferrocarril de Gijón

Poison Heart (Vestuario)Diseños Susana Teverga (Atrezzo)

Pipo Palacios (Producción)Verónica Braña (Peluquería

Sheila A.G. (Maquillaje)


GijónSport - Entrevista

GijónSport - Entrevista

A sus 20 años, a Juan Mera le ha llegado su momento de gloria. Su gol frente al Oviedo en el último minuto le ha convertido en el hombre de moda en Gijón. Pero Juan Mera hizo mucho más el domingo. Completó un partido sensacio-nal, con una asistencia de lujo a Pablo Pérez en el primer gol y un recital de jugadas interesantes en la banda. Ahora reconoce que está en una nube. “Todo esto es un sueño”, dice el jugador del Sporting B.

Aún no ha tenido tiempo para comprobar si, como a Guerrero, los taxis se paran por la calle para felicitarle. Pero sí es consciente de la re-percusión que ha tenido su gol al eterno rival. Si para Guerrero fue una día especial, imaginen para un gijonés, sportinguista desde niño, for-mado en Mareo desde los diez años y que el domingo tenía en la grada a su familia y amigos.

“Fue uno de los momentos más felices de mi vida. Meterle gol al Oviedo en El Molinón, en el último minuto... Fue increíble”. Así recuerda Juan Mera el gol que dio la victoria al Sporting B el domingo. Desde entonces su móvil no ha dejado de sonar. Mensajes de wathsapp y men-ciones en el móvil. Y muchas risas, con algunos de los mensajes típicos de la rivalidad entre los dos equipos.

Mera echa balones fuera cuando se le pregunta si, en la jugada de su gol, el balón sale previa-mente del campo por línea de fondo. “No me fijé”, dice con una sonrisa pícara. Aunque lo hu-biera hecho, su obligación es seguir la jugada, como ocurrió. Del partido, aplaude “la valentía” de Abelardo al apostar por gente joven (el equi-po acabó con cuatro juveniles sobre el terreno de juego) y sólo lamenta que “en la primera par-te, en la que fuimos mucho mejores que el Ovie-do, no lográramos algún gol más”.

La estadística dice que los goles de Juan Mera son decisivos esta temporada para el Sporting B. Cuando él anota tantos, el filial rojiblanco no pierde. Lleva cinco este año, unos números que no recordaba desde su etapa en el equipo de Liga Nacional Juvenil.

Mera termina contrato el próximo 30 de Junio y de momento no sabe nada de su futuro. No sólo le avala su gol al Oviedo, sino la progresión que ha mostrado esta temporada, en la que ha ido ganando continuidad y peso en el equipo. Le encantaría seguir en el equipo de sus amores, aunque por ahora no tiene noticias del Sporting, sí de otros equipos que le quieren. Pase lo que pase, no tiene pinta de que nada pueda cambiar su sonrisa inocente y su mirada bonachona. Y, probablemente tampoco, su fútbol eléctrico.

El heredero de GuerreroPor David González

Juan Mera

Decía el Gijón Jovellanos cuando presentó su campaña de abonados que ‘Asturias es de ASOBAL’. Por eso, Avilés celebró que el equipo de Alberto Suárez no pudiese jugar en La Guía contra el Villa de Aranda. El Pabellón de El Quiri-nal disfrutó del balonmano de alto nivel; vibran-do, además, cuando Abel Serdio, Samuel Pérez, Adrián Fernández y Álex Costoya, avilesinos los cuatro, saltaban a la cancha. Sólo faltó Pepe Espina. El juvenil entró en la convocatoria del Juanfersa Grupo Fegar, pero no pudo debutar en ASOBAL.

El gran protagonista fue el ‘7’ del equipo gijo-nés. “No sabía que había marcado 12 goles, pero nunca había conseguido tantos”, decía Álex Costoya al acabar el partido. El chaval ya es el máximo anotador de la Liga ASOBAL e hizo olvidar las lesiones con las que el Juanfer-sa afrontó el partido. Pepe Maia, Santi Acetti y Amir Cakic –se notó su baja, sobre todo en de-fensa– no estuvieron en Avilés.

Por eso, Alberto Suárez recordaba en las redes sociales que su equipo había ganado 32-30, con un bosnio y catorce asturianos. Algunos de ellos, sin haber cumplido la veintena. El único extranjero del Juanfersa en el partido, el portero Adam Savic, no completó su mejor partido, pero apareció cuando lo tenía que hacer. Como los cracks.

“Los trece puntos que tiene el equipo le acercan a una perma-nencia que puede llegar mucho

antes de lo previsto”

Una doble parada, en el último minuto, evitó cualquier posibilidad de remontada por parte del Villa de Aranda que, por cierto, estuvo apo-yado por medio centenar de seguidores, situa-dos en la grada entre los más de mil asturianos. Hicieron mucho ruido y dieron color a El Quirinal con sus camisetas, tan amarillas como el pollo del escudo de su equipo.

LA CONEXIÓNAVILESINA


A pesar de la victoria, el marcador siempre estu-vo igualado. La máxima ventaja para el Juanfer-sa fue de tres goles; y para el Villa de Aranda, de dos. Y para darle más emoción, los encargados de mesa le regalaron dos goles, uno en cada tiempo, al equipo visitante. La afición y el cuer-po técnico gijoneses se dieron cuenta y fueron a avisar. En el primer tiempo, con calma. En el segundo, con cierto grado de desesperación y sobre todo, cabreo.

El mismo cabreo con el que se fue el serbio Sla-dic, expulsado con tarjeta roja tras un impacto de su antebrazo con la cara de Álex Costoya. Los árbitros, que unas veces dan y otras quitan –también en balonmano–, decidieron castigar esa acción del jugador más determinante del Vi-lla de Aranda, aunque con dos minutos hubiese sido suficiente.

En cualquier caso, el balonmano le devolvió al Juanfersa Grupo Fegar lo que le quitó en Cuen-ca en la anterior jornada, y sigue completando una campaña de ensueño. Sus trece puntos, que le mantienen a seis del descenso, le acer-can todavía más a una permanencia que puede llegar mucho antes de lo previsto. Y bienvenido sea.


GijónSport - Reportaje

Por Marta Tejerina / Fotos: Cris Valle

Un reencuentro en lo más alto

Manu y David PlazaGijónSport - Reportaje


David Plaza: “Alberto Suárez se acercó y me preguntó que si quería debutar en Asobal. ¡Pues claro! No me lo pensé”


Cuando su hermano mayor empezó a ju-gar a balonmano, David ni siquiera sa-

bía muy bien en qué consistía ese deporte en el que, al contrario de lo que hacían la mayoría de los niños de su edad, al balón no se le daban patadas y los goles se marcaban con la mano. Manu, sin saberlo siquiera, le señalaba el ca-mino convirtiéndose en su ejemplo, para todo. Hace unas semanas, en la cancha del Huesca, los Plaza disputaron sus primeros minutos jun-tos en Liga Asobal. Un sueño cumplido para dos de las jóvenes promesas del Juanfersa Grupo Fegar.

En el pabellón del colegio Inmaculada de Gijón se formaron muchos jugadores de balonmano. Allí, Manu y David descubrieron que su futuro iba a estar ligado a este deporte, que conocie-ron gracias a un maestro que marcó sus vidas y que recuerdan con mucho cariño. “Avelino me propuso probar y gracias a él me enganché. Fue un excelente profesor y una gran persona y le tengo que agradecer el haber empezado en esto”, explica Manu, que comenzó a entrenar junto a sus inseparables amigos, los hermanos Paraja. “Ellos tenían a su padre como referen-te. Nosotros somos los primeros de la familia en esto del balonmano”. Mientras los tres practica-ban sobre la pista, el pequeño David les obser-vaba atento desde la grada. “Me gustaba mu-cho ver entrenar a mi hermano. Recuerdo que muchas veces pensaba en la rabia que me daba ser cuatro años más pequeño y no poder jugar

con él”. No podían hacerlo en sus respectivos equipos durante su etapa escolar, pero sí lejos de los muros del colegio. “Guardo en la memo-ria una imagen de los veranos jugando juntos, con amigos y conocidos, en una cancha que había en el pueblo”, recuerda Manu.

Los Plaza completaron su formación en el cole-gio compaginando las obligaciones académicas y las deportivas con resultados sobresalientes. Algo que siguen haciendo a día de hoy. “Siempre hemos tenido claro que lo primero son los es-tudios”, aseguran. El esfuerzo ahora es mucho mayor, sobre todo para Manu que a lo largo del día apenas tiene tiempo para comer. “Terminé la carrera de Química y ahora estudio un Más-ter en Desarrollo Sostenible en Oviedo, al igual que Miguel Paraja. La verdad es que la vida que llevo es bastante complicada. Tengo laborato-rio por la mañana y clases por la tarde. Llego a Gijón justo para entrenar y al día siguiente vuel-ta a empezar. Pero bueno, mientras el cuerpo me permita llevar este ritmo…”, bromea. David optó, una vez más, por seguir los pasos de su hermano y se matriculó en Química. Pero tras los primeros meses de curso se ha dado cuen-ta de que, en este caso, sus caminos no van a seguir la misma dirección. “Me matriculé bas-tante influenciado por Manu…”, dice mientras ambos se miran y ríen. “Pensé que podría ser lo mío pero me he dado cuenta de que no, así que el curso que viene me pasaré a Fisioterapia. Es algo que siempre me ha gustado.”

Cuando Manu empezó a la Universidad a su hermano pequeño aún le quedaban cuatro años más de colegio así que sus caminos se separa-ron momentáneamente. Fue entonces cuando nació el Gijón Jovellanos, que contó con el ma-yor de los Plaza para formar parte de la primera plantilla de su historia. David siguió jugando en el Inmaculada mientras veía orgulloso cómo su hermano crecía compitiendo en Primera Nacio-nal, ascendía a División de Honor Plata, jugaba una fase de ascenso y, la temporada siguiente, conquistaba su sueño de convertirse en jugador de la Liga Asobal. El debut de Manu Plaza en la máxima categoría coincidió con la llegada al Juanfersa de su hermano David como miembro del equipo filial. Sus caminos volvían a unirse gracias al balonmano.

Hace unos meses que los Plaza pertenecen al mismo club. Primera plantilla y filial comparten varios entrenamientos a la semana y, además, Manu tiene ficha para jugar en ambos conjuntos así que podría decirse que al inicio de esta tem-porada los hermanos habían cumplido su deseo de jugar en el mismo equipo. Al menos sobre el papel, porque a la hora de competir tan solo habían tenido la posibilidad de disputar juntos un partido del segundo equipo ante la Atlética Avilesina en el que Manu bajó para reforzarles. Hasta el pasado 22 de noviembre, un día que quedará para siempre grabado en sus memo-rias. “Estábamos terminando el último entrena-miento antes del desplazamiento. Yo estaba es-

tirando cuando Alberto Suárez se acercó y me preguntó que si quería debutar en Asobal. ¡Pues claro! No me lo pensé”, cuenta David Plaza to-davía emocionado. La baja de Pablo Fernández por motivos laborales le abrió las puertas del primer equipo para viajar a Huesca. Ser convo-cado ya fue un premio para él, pero su sueño se cumplió cuando, durante el partido, el en-trenador mandó sentarse a David Pellitero para que el chaval saliese en su lugar. “Jugué siete minutos, los mejores siete minutos de mi vida. Mientras pasaban pensaba que no podía creer-lo, ¡estaba jugando en la máxima categoría! Lo disfruté muchísimo. Fue una pena porque perdi-mos, pero en lo personal fue inolvidable”. Debu-tar en la Liga Asobal con 18 años es, sin duda, motivo de felicidad. Pero más todavía cuando, a tu lado, está jugando alguien muy especial para ti. “El único consejo que le di antes del partido fue que se dejase el alma. Y me hizo caso por-que no se me olvidará una imagen: mi herma-no parando al pivote del Huesca, un tío de dos metros y de más de cien kilos de peso…. Nos dejó a todos con la boca abierta”, cuenta orgu-lloso Manu. “Miré de reojo a Alberto Suárez y vi que estaba aplaudiendo así que me vine arriba”, bromea David.

Mientras todo esto sucedía en Huesca, desde Gijón los padres de los Plaza lo seguían muy atentos pegados a la radio. “Al final del partido nos entrevistaron y mi padre en ese momento se había marchado del salón así que mi madre


Manu Plaza: “El único consejo que le di antes del partido fue que se dejase el

alma. Y me hizo caso”


empezó a pegarle voces para que corriese a es-cucharnos. Están muy orgullosos de nosotros”. Por supuesto, no se pierden ni un solo partido en La Guía. Los hermanos han conseguido in-cluso que su padre, futbolero empedernido, se haya enganchado al balonmano. “Queremos agradecerles todo el apoyo que nos dan”. Está claro que en su educación les han inculcado dos valores fundamentales: apreciar lo que se tie-ne y sacrificarse para mejorar. Ambos son muy prudentes cuando se les pregunta por el futuro. “Lo principal es afianzarse en el equipo, contar con más confianza y minutos. En mi caso, han sido cinco años de trabajo muy intenso para lle-gar hasta aquí. Mi prioridad esta temporada es jugar, sea en Asobal o con el filial en Segunda Nacional”, explica Manu. Su hermano tiene muy claro qué debe hacer después de su debut en la máxima categoría: “Ahora que ya se me quitó ese miedo de la primera vez, estoy dispuesto a ayudar cuando sea necesario. Daré el máximo en todos los entrenamientos y si me surge otra oportunidad, la aprovecharé”.

Para Manu fue muy especial ver a su hermano junto a él compitiendo en la máxima categoría.

Le ha visto crecer y, de alguna manera, se con-sidera responsable de su evolución por ser el primero que optó por el camino del balonmano. Eso le hace sentirse, si cabe, más orgulloso. “Me encanta la manera de jugar de David, sobre todo su capacidad goleadora, el ataque que tiene, su juego con el pivote. Y su valentía, su descaro, pese a que sólo tiene 18 años”. Para David, su hermano mayor es su principal referente y no se cansa de enumerar sus cualidades, como juga-dor y como persona. “La intensidad con la que disputa cada balón, su garra, su entrega… Y por encima de todo, su capacidad de superación. Después de todas las lesiones que ha tenido, llegar a este nivel tiene mucho mérito y es fruto de su trabajo. Yo le he visto en casa rehabilita-do la rodilla, la muñeca… pasándolo mal. Es un ejemplo a seguir para mí”. Mucha gente les dice que si pudieran juntar las características de los dos en una sola persona, el resultado sería el jugador de balonmano perfecto. De momento, por separado, los dos dan muestras de su ca-lidad individual y esperan poder reencontrarse pronto en la pista, compitiendo juntos en lo más alto, como ocurrió ese 22 de noviembre que ja-más olvidarán.


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