1. La construcción se ambienta enigmáticamente en una habitación con papel pintado en la pared y un mar por suelo, con planchas de hielo en su superficie.

2. La pared está ejecutada con una foto de papel textura-do y pintado, sometida a diferentes tratamientos con un programa informático; con él se cambia su posi-ción, se mejora el enfoque y se aplican ajustes de luz, contraste y color (se introducen azules).

3. Para confeccionar el suelo se emplea una foto-grafía de un mar helado tomada de Internet.

4. La imagen se somete a una considerable trans-

formación de diversa índole, eliminando el ma-mífero y su sombra, modificando la perspectiva y extensión, recreando una zona efectuando clonaciones, aplicando luces selectivamente y aumentando el enfoque.

5. - 8. Para crear una composición de cuadros foto-gráficos, en la pared de la habitación, se utilizan fotos propias de charcos helados.

9. - 12. Las cuatro fotografías se intervienen acrecentan-do su enfoque, oscureciéndolas y aumentando el bri-llo y el contraste en distintos grados. A una de las fo-tos, además, se le invierte su posición horizontalmen-te.

13. A continuación, se añade a la composición de cuadros fotográficos uno más, empleando dos fotos propias del mismo charco helado.

14. Se procede con ambas fotos como en las imágenes anteriores (de la 9 a 12), y se emplea la inferior para efectuar un añadido a la más amplia, invirtiéndola horizontalmente, girándola, deformándola y realizan-do clonaciones de la superior variada de posición.

15. y 16. Por último, para concluir la composición de cuadros fotográficos, se confecciona uno más del mismo modo que en la imagen 14, trabajando con la foto inferior ampliada y obteniendo de ella tres zonas añadidas.

17. y 18. Para enmarcar las seis fotografías de la composición, se hace uso de una foto propia de un marco (no importa que el interior desmerezca técnicamente). Empleando unas guías se corrige la perspectiva e inclina-ción del marco, se recorta la parte central, eliminando las bandas exteriores e interiores, y se modifican sus dimensiones, suavizando después sus bordes. Posteriormente se incrementa el enfoque, se reduce el brillo y se añade claridad.

19. Para ultimar la construcción fotográfica se usa una toma de una escultura propia “Lo que el enigma esconde” (Septiembre de 2010), que se interpreta fotográficamente en este trabajo.

20. El tratamiento de la imagen se inicia aumentando el enfoque, girándola levemente y conformándola. Luego se recorta, eliminado su base, y se suavizan sus bordes. Por último, se aplica brillo y contraste.

21. Estando organizadas en capas todas las fotografías modifica-das (la 2, 4. 9 a 12, 14, 16, 18 y 20), se ajustan los tamaños de los distintos componentes y se ubican en los lugares deseados. Luego, se aplican las sombras a los seis cuadros, a las planchas de hielo que se salen de dos de ellos, a las que han caído al de-talle de mar helado y a la escul-tura. Posteriormente, se desen-focan y se borran con distintas gradaciones las puntas de los hierros de la escultura que en-tran en el agua. Para finalizar, se aumenta la intensidad cro-mática al conjunto.

TÍTULO: “Lo que el enigma esconde”. MEDIDAS: Variables. FECHA DE CONCLUSIÓN: Marzo de 2015. MATERIALES: Doce fotografías en total; una de un mar helado tomada de Internet y once propias procedentes de: una de una pared, ocho de charcos helados, una de un marco de fotografía y otra de una escultura exenta propia.

TÉCNICA: Construcción fotográfica con recursos digitales.

COMENTARIO:

Esta interpretación fotográfica está efectuada sobre la escultura exenta propia titulada “Lo que el enigma escon-de” (Septiembre de 2010). Era un modesto homenaje a la artista franco-norteamericana Louise Bourgeois, autora de una obra muy personal, tremendamente enigmática, de enorme diversidad técnica, formal, estilística y expositiva. Con esa obra pretendía llamar la atención sobre los extraños contenidos, de índole diversa, que las obras enigmáticas ocul-tan, aunque en ésta, y en toda mi producción, no sean mis conflictos personales, particularmente de la infancia, como en el caso de la autora homenajeada, los que la alumbren, sino sencillamente la mera actividad lúdico-creativa. La carga enigmática que encierra la escultura se ve ampliada en esta construcción fotográfica por la escenografía creada: una habitación con la pared empapelada (cubierta que oculta la propia pared) y un suelo mutado en mar con su superficie helada, cu-yas planchas quebradas dejan entrever un agua oscura; pero también se ve acrecentado su carácter enigmático por el resto de elementos de la composición: los seis cuadros dispuestos muy juntos en la pared, ocultándola parcialmente al cerrarla, que tienen por motivo charcos helados (nuevamente agua cubierta por láminas heladas que la tapan misteriosamente y la trastocan), desbor-dándose inexplicablemente de sus límites dos de ellos, y que cuentan con unos marcos que por naturaleza encierran un detalle de una realidad, conteniendo intrigantemente algún secreto.