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Entre la modernizaci6n y Ia dependencia 47

EL LIBRE COMERCIO EN EL NUEVO ORDEN INTERNACIONAL

Despues de examinar las dos principales interpretaciones de la actual division internacional del trabajo, es importante hacer referen­cia a las tendencias mas recientes del orden mundial con el fin de determinar su incidencia en los procesos politicos de Colombia y

America Latina, La generalizacion del modelo neoliberal en el mun­do entero y partieularmente en este subcontinente guarda estrecha conexion con la terminacion de la Guerra Fria hacia finales de la decada de 1980, con 10 que concluyo tambien la larga confrontacion politico-militar del viejo mnndo bipolar, EI derrumbe de las "demo­cracias populares" de Europa Oliental y la disolucion de la federacion sovietica brindaron a la superpotencia estadonnidense la posibilidad de afianzar su dominio globa\. La emergencia y consolidacion de 10 que se ha dado en llamar el "nue~o orden mundial", disenado a la medida de los intereses imperiales norteamericanos, fue el resultado mas palpable de dichas transformaciones de la situaci6n politica internaciona\. El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, para no mencionar sino un ejemplo, quedo por completo subordinado a las necesidades de la politica exterior de Washington.

La confrontaci6n entre las viejas y las nuevas potencias econo­micas por el control de recursos y mercados en todo el mundo se encuentra actualmente en su punto mas algido. La conformacion de bloques regionales en torno a tres grandes economias, Estados Uni­dos, Alemania y Japon, constituye una estrategia clave en esta guerra comercial. En palabras de Jacques Attali, antiguo presidente del Banco Europeo de Reconstruccion y Desarrollo,

Una rivalidad violenta en torno a territorios y recursos bien puede

ser el resuItado parad6jico de la desaparici6n de ideologfas distintas y de la generalizaci6n de 1a economfa de mercado42.

42. The Reuter Business Report, noviembre 28 de 1991, tornado de Lexis-Nexis, Services of Mead Data Central, Inc.(base de datos).

48 EI modelo neoliberal

yn rasgo fundamental de la disputa permanente entre los paises mas mdustnahzados ha sido la persistencia de sus viejas pnicticas protecClOmstas. Obligados a competir entre si, rehusan desmantelar las barreras comerciales e incluso las fortalecen e incrementan tal CO~O 10 muestran los permanentes enfrentamientos entre Est~dos Umdos, Japan y la Union Europea. La paradoja principaJ que esta confrontaCIon economica global pone en evidencia es que esos paises pregonan las bondades del "libre mercado" y obligan a las nacianes del Tercer Mundo a abrir sus economias al comercio internacional y a adoptar polfticas econ6micas de "orientaci6n hacia afuera" en tanto. que ellos misrnos restringen cada vez mas "el acceso a 'sus proplOS mercados de los productos de los paises menos desarrollados.

EI resuItado final de la Ronda Uruguay del desaparecido GATT, en dlClembre de 1993, refleja la inclinaci6n antes descrita. Mas aun tras la retorica de la liberalizacion del comercio, sus conclusione~ bus can precisarnente afianzar estas tendencias contradictorias y ne­fastas para I~s economias debiles del mundo. Su objetivo principal fue el de abm los mercados a diestra y siniestra con el fin de crear

un "pr6spero. ambito para el mercado internacional en el que pro­duc:os y servlclOs se deslicen sin esfuerzo a traves de las fronteras na~lOnales"43. Perc al mismo tiernpo que se busca la apertura gene­rahzada del comercio el acuerdo finaJ del GATT del " I . " ' , que SurglO a actual Orgamzaclon Mundial del Comercio (OMC);dio importantes pasos en 10 que respecta a hacer mas estricta la proteccion de los derechos de propiedad intelectual y las patentes en los sectores de serVlClOS yalta tecnologia, en los cuales Estados Unidos continua temendo la absoluta delantera.

En este mercado global;las compafiias multinacionales se encuen­t~an e~ un~ posicion mas privilegiada que nunca para aprovechar la hberahzacl6n de las barreras comerciales. Como ya se vio la _ ct' ~ ". , con en :acIOfi econOIDlca se ha acentuado considerablemente a partir de

la decada del sesenta. En palabras de Lynn Krieger Mytelka:

43. Business Week, enero 12, 1994, p.29.

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Entre la modernizaci6n y 1a dependencia .\9

EI proceso de oligopolizacion ya se inicio en nurnerosas indus trias intensivas en conocimiento, si bien el alcance real de este proceso se ve en derta fonna velado por el hecho de que fiuchos de los acuerdos de cooperacion que se hacen no implican movimientos de capital y nominalmente se preservflla "independencia" de los dos SOciOS44.

Por su parte, Peter F. Drucker reconoce que las alianzas formales e informales se estan convirtiendo en el modo predominante de integracion economica en el sistema mundial. Tales alianzas pueden tomar la forma de joint-ventures, sociedades (partnerships), acuer­dos de conocimiento 0 arreglos de outsourcing45 .

EI control real de la producci6n y del comercio mundiales por parte de las corporaciones multinacionales de las grandes potencias, pero en especial de Estados Unidos, es enorme. En la edicion de 1992 de Global Economic Prospects and the Developing Countries, del mismo Banco Mundial, se encuentran los siguientes datos:

Para comienzos de los ochentas, el comercio al interior de las 350 principales corporaciones transnacionales represento alrededor de un 40 por ciento del comercio global. Mas de una tercera parte del coinercio de Estados Unidos se realiza entre las subsidiarias extran­jeras y sus casas matrices en ese pais. De la misma manera, las subsidiarias de las empresas japonesas en el Este de Asia envfan un cuarto de sus exportaciones a las casas matrices de Japon y adquieren de ellas mas de un terdo de sus importaciones. En 1982, un 47 por ciento de las exportaciones de Singapur fue realizado por compafifas de Estados Unidos. Un 52 por ciento de las exportaciones de Malasia a Estados Unidos fue hecho por empresas de este pafs; y los 5 principales exportadores de productos electr6nicos de Taiwan son compaiifas estadounidenses. De la misma manera, las exportaciones de bienes electronicos por parte de productores japoneses en Corea

44. Lynn Krieger Mytelka, "Knowledge-Intensive Production and the Changing Internationalization Strategies of Multinational Firms", en Caporaso (camp), op.

cit., p.61. 45. Peter F. Drucker, "Trade Lessons from the World Economy," Foreign

Affairs. Invierno, 1992-93, p.99.

50 EI modelo neoliberal

han tenido una incidencia fundamental en el surgimiento de este pais

en el mundo de la electr6nica46.

Proceso similar de concentraci6n del poderfo econ6mico es dia a dia mas notorio en eI sector financiero. En eI mundo se estan impo­niendo los megabancos y cada vez tienen menos espacio las institu­cione, financieras pequenas. Recientemente se reaIiz6 Ia fusi6n de dos de los mas importantes bancos de Estados Unidos: eI Chemical Bank y eI Chase Manhattan Bank. Otra fusi6n que recibi6 un des­pliegue publicitario mucho menor pero que resulta aun mas impor­tante fue Ia de los bancos japoneses Mitsubishi y Bank of Tokyo, cuyos activos pasaron a sumar 819.000 miIlones de d6Iares. Con e\lo, los duenos del capital financiero internacional refuerzan su capacidad para expandirse a nivel global".

En sintesis, hay una tendencia cada vez mas marcada hacia Ia concentraci6n y monopolizaci6n del comercio y de las actividades productivas fundamentaIes en los paises de mayor industriaIizaci6n. A principios de Ia decada de 1990, con poco mas del 16 par ciento de Ia pobIacion mundiaI, estos concentraban eI 85 par ciento de Ia produccion mundial y eI 80 par ciento del comercio internacionaI; recibian mas del 80 por ciento de Ia inversi6n extranjera directa (lED) y contaban con un PIB promedio por habitante casi cinco veces mas alto que eI promedio mundiaI, y 56 veces superior aI PIB promedio de los lIamados "paises de ingreso bajo", que representan casi dos tercios de Ia pobIaci6n de Ia Tierra4'. iTaI es eI paraiso del Iibre comercio y de Ia gIobaIizacion en eI que se pretende que las naciones latinoarnericanas entren a competir exitosamente t

46. Citado por Doug Henwood en "Clinton's Trade Policy", Free Trade and Economic Restructuring in Latin America, NACLA Report on the Americas, Nueva York: Monthly Review Press, 1995, p.32.

47. "Los grandes pegan dos veces", en Portafolio, Bogota, septiembre 25 de 1995, p.28. Segun e1 mismo artfculo, s610 en Europa entre 1985 y 1993 seregistraron 1.768 casas de fusiones 0 adquisiciones. De enos, 442 fueron operaciones trans­nacionales y las demas locales. La mayorfa de estos negocios fueroo adquisiciones de pequefios bancos par cuenta de entidades mas grandes.

48. Banco Mundial, Injorme sobre el desarrollo mundial, Washington DC.,

1993.

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LA ENCRUCIJADA DE AMERICA LATINA

Los cambios en la sitnaci6n global han representado una intensi­ficacion del dominio econ6mico y poIitico ·por pmte de Estados Unidos sobre toda America Latina. La crisis econ6mica y social, agudizada por eI problema de Ia deuda externa, hizo que estas naciones perdieran cualquier posibiIidad de negociaci6n can los paises economicos poderosos, cuyos intereses representan eI FMI Y las demas instituciones financieras internacionales.

Pese a Ia aIarma inicial generada tras eI estaIIido de Ia crisis de Ia deuda a comienzos de los anos ochentas, Ia estrategia adoptada por Ia banca internacionaI para afrontar eI problema demostro ser muy provechosa para sus intereses. Durante Ia decada pasada Lati­noamerica dedico casi 224 mil milIones de d6Iares aI servicio de Ia deuda (una suma equivaIente aI 67 par ciento del monto de Ia deuda en 1982, que era de 332.4 mil miIIones). Sin embargo, a fines de 1994 Ia deuda conjunta de Ia region ascendia a 534 mil miIIones de d6lares4'. En eI caso de Mexico, pais que ha servido de vitrina para los experimentos de Estados Unidos en eI continente, eI monto de Ia deuda casi se dupIic6 aI pasar de 90.000 miIIones de doIares en 1982 a 166.000 miIIones en 19945°. Como en general no se Ies otorgaron nuevos prestamos a estas naciones, para continuar cubrien­do eI servicio de Ia deuda tuvieron que vaIerse de sus ingresos por exportaciones; de agudos recortes aI gasto publico y de los procesos de privatizacion. De esta forma, Ia adopci6n de las politicas de economia de mercado, presentada como una salucion a la crisis, en reaIidad no hizo mas que empeorarla, aparte de que vino como una imposici6n de las instituciones financieras internacionales. Tal como 10 senaIa Cm'Ios Vilas,

49. Ver Comisi6n Econ6mica para America Latina, "Balance preliminar de Ia economfa de America Latina y el Caribe, 1994", Comercio Exterior, VoI.45, No.2, Mexico, febrero de 1995, p.I72.

50. Tras el denumbe de la economia mexicana en diciembre de 1994, el monto de la deuda externa del pais y el condicionamiento de las agendas financieras y de Estados Unidos se incrementaron todavia mas.

52 EJ modelo neoliberal

Si b.ien no todos los recu[SOS procedentes de las privatizaciones se

deS,tI~an al pago de la deuda, el proceso de privatizacion como tal esta l:gado a los arreglos de la deuda, en la misma medida en que co~stltuye un ingrediente de la reestructuraci6n de las econornias latmoamericanas. Dicho proceso tambiein cumple con una de las

condiciones basicas de los acreedores para darles a estos gobiemos acceso a reducci6n parcial de la deuda51,

Durante la decada de 1990 la especulaci6n financiera en los mer­cados .d~ valores se ha convertido en eI tipo de inversi6n de mayor rentablhdad para las grandes mullinacionales. Los paises del Tercer Mund~ se volvieron el centro de atenci6n de los principales mercados de capltales, por cuanto eran los que ofrecian tasas de interes mas aItas. Fue asi como entre 1990 y 1993 los inversionistas de Estados Um~os compraron acciones en diez paises asiaticos y nueve latinoa­mencanos par un valor neto de 127.000 millones de d6Iares".

En 1:94 el flujo de capitales privados hacia el Tercer Mundo ascendlO a 173.000 millones de d6lares, una cifra sin precedentes, temendo en cuenta que hasta 1991 el ingreso anual promedio de recursos a estas regiones fue inferior a los 50.000 mill T b' . ones. an exo~ Itante mversi6n privada en los lIamados mercados emergentes se VIO recompensada ~on creces: en paises como Hong Kong, Indo­neSia, Malasla y Br~s!l, el valor de las acciones en las respectivas balsa: se IDcremento en un promedio del ciento por ciento53. No es extrano. que para el reducido circulo de financistas que poseen ex­penencIa, coneXlOnes decisivas e informaci6n actualizada al minut I . 0, as operaclOnes de la balsa en todos estos paises representaran "Ia

mayor bonanza de enriquecimiento que alguien pueda recordar"54 . Dentro de dicho contexto de esplendor de la especulaci6n fina~­

Clera, este IIpo de inversi6n aIcanz6 entre 1990 y 1993 la cifra de

St 51 R C;rlOS Vilas, "Back ~o the 'Dangerous Classes?' Capitalist RestructurinO' ate e orm and the Working Class in Latin America" The Columb' U. ",

't N Y k . . ., la mver-51 y- ew or Untverstty Consortium, Papers On Latin America No 34 N York, 1993, p.9. . , ueva

52. :'The Wall Street Journal Americas", El Tiempo, enero 12 de 1995. ~~. 'Th.e Wall ~treet Journal Americas", EI Tiempo. enero 12, 1995. ,)4. Latlll America Data Base, vo16 No 6 febrero 8 de 1995 'I ., ., ,VIa nternet.

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176.4 mil millones de d61ares en Lalinoamerica, de los enales Mexico recibi6 casi la mitad. A ella contribuyeron de manera sustancial la lIamada desregulacion del comercio internacional y la generalizacion de las politicas de corte neoliberal55• Para ese entonces casi todos los paises deudores se habian vista forzados a renegociar su deuda externa y la banca internacional empezaba a registrar grandes ga­nancias. EI Plan Brady, que contempla el cambia de parte de la deuda par acciones y bonos en las companias estatales de los paises deu­dores, aument6 el flujo de capital especulativo hacia Latinoamerica. Los inversionistas extranjeros se sintieron cada vez mas atrafdos por la posibilidad de obtener enormes y nipidas ganancias en la regi6n".

Pero aparte de beneficiar a los magnates de las finanzas interna­cionales, la renegociaci6n de la deuda sirvio de puntal para la apli­caci6n de las medidas neoliberales en America Latina. Ella fue consecuencia directa de la perdida de todo resquicio de autonomia en enanto a la formulaci6n de politicas de desarrollo por parte de los paises deudores. La siguiente afirmaci6n de Jerome I. Levinson, exfuncionario del Banco Interamericano de Desarrollo, es bastante clara en este sentido:

Para el staff del Tesoro de Estados Unidos ( ... ) la crisis de la deuda constituy6 una oportunidad sin paralelo de alcanzar en los parses deudores las reformas estructurales apoyadas por la administraci6n

Reagan. El nueleo de estas reformas fue el compromiso por parte de

dichos paises de reducir el papel del sector publico como vehiculo

55. Diversos autores se han referido a Ia falacia de Ia desregulacion: 10 que ha ocurrido es e1 desarrollo de un nuevo regimen regulatorio, adaptado a Ia nueva situacion global, mediante el cual los paises industrializados recurren a cuotas y tarifas para proteger su produccion nacional.

56. En terminos generales, a nivel mundial, las ganancias en el sector financiero se han incrementado a un ritmo mas vertiginoso que en los sectores petroiero, automotriz y de electr6nica yalta tecnologia, los OtTOS tres campos en los que estrin concentradas las grandes multinacionales. A manera de iIustraci6n, entre 1985 y 1989 los bienes de las grandes corporaciones financieras crecieron en un sorpren­dente 87 por ciento (Martin Camoy. "Multinationals in a Changing World Eco­nomy: Whither the Nation-State?", en Carnoy, (comp), The New Global Economy in the Information Age, Penn State: The Pennsylvania State University Press, 1993, pA8).

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para el desarrollo econ6mico y social y confiar mas en las fuerzas del mercado y en la empresa privada, tanto nacional como extranjera57•

Otro factor que ha hecho aiin mas penosa la crisis de la deuda es el marginamiento creciente de America Latina con respecto a la economia y al comercio mundiales. En los ultimos treinta anos Ia participacion de Ia region eu el comercio internacional disminuy6 casi en dos tercios. En 1990 las exportaciones combinadas de todos sus paises sumaron menos de 130 mil millones de d6lares, cifra inferior a las exportaciones de Holanda, una nacion con solo quince millones de habitantes".

Fue en dicho contexto internacional y regional donde se impuso eillamado "Consenso de Washington", un terminG acunado por John Williamson, del Instituto de Estudios Economicos Internacionaless9.

EI Consenso surgio de la conferencia "Latin American Adjustment: How Much Has Happened?", organizada por dicho instituto en no­viembre de 1989, que reunio a economistas de ocho paises latinoa­merieanos (Bolivia, Mexico, Chile, Peru, Argentina, Brasil, Colombia y Venezuela). Se pidi6 a los participantes que en sus informes nacionales hicieran un examen del "nuevo realismo en las politicas economicas de America Latina"60. De acuerdo con el mismo Williamson,

El prop6sito al intentar delinear 10 que Washington cree que los paises deberfan hacer, y luego preguntar cuanto es 10 que han realizado no es alentar el habito de obligar a los deudores a que sigan 6rdenes del

57. "New Proposals for the Debt Crisis", en Robert C. Effros, (camp), Current Legal Issues Affecting Central Banks 1 (Washington DC., International Monetary Fund, 1992), citado par Doug Henwood, op.cit., p.29.

58. Carlos M. Vilas, America Latina en el "nuevo orden mundial", Universidad Nacional Autonoma de Mexico, Mexico, 1994, p.12-13.

59. Por Washington se entiende no sQlo el gobierno de EEUU, sino las institu­cianes financieras internacionales y los "think-tanks" 0 grupos de expertos ide6-logos que abanderan las refonnas neoliberales (John Williamson, El cambio en las polfticas economicas de America Latina, Mexico, D.F.: Gernika, 1991, p.27).

60. Ibid., p.25. Uno de los representantes par Colombia fue Rudolf Hommes, quien como Ministro de Hacienda del gobierno de Gaviria tuvo a su cargo la puesta en pnktica de 1a apeltura.

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extranjero, sino mas bien establecer si los puntas de vista sobre las politicas aconsejables tienden a converger61.

La conferencia identifico diez aspectos que sirvieron de base para integrar un amplio consenso en tomo a las reformas de politica economica que los paises deudores debian tener como objetivo. Dichos aspectos son disciplina fiscal, recortes al gasto publico, reforma tributaria (incluidos los impuestos indirectos y la ampliaci6n de la base tributaria), liberalizaci6n financiera, un tipo de cambio competitivo, liberalizaci6n del comercio, inversion extranjera direc­ta, privatizaci6n de las empresas estatales, desregulaci6n y protec­cion a los derechos de propiedad. Todas estas politicas pueden resumirse en la creencia ciega de que el libre mercado es la clave del desarrollo econ6mico62.

La famosa Iniciativa de las Americas, anunciada por elpresidente Bush en junio de 1990, se basa precisamente en la proposici6n de que el comercio es la llave maestra de la prosperi dad hemisferica. EI proyecto busea establecer una zona unificada de libre comercio desde Alaska hasta la Patagonia. EI Tratado de Libre Comercio de Norteamerica (TLCNA), vigente desde el primero de enero de 1994, represent6 el paso inicial hacia el objetivo de alcanzar la integraci6n econ6mica de todo el continente bajo la ferula de Washington en la Asociacion de Libre Comercio de las Americas (ALCA). Estados U nidos ha ofrecido negociar acuerdos s-imilares con otros paises latinoamericanos. en la medida en que sus reformas maduren y esten dispuestos a contraer el mismo tipo de compromisos exigidos a Mexico, de acuerdo con un funcionario del gobierno estadouniden­se63 . Entre las condiciones que se estipulan para la firma de acuerdos de libre comercio estan "una buena posicion en el GAIT, disponi­bilidad de abrir sus economias a lainversion extranjera y a1 comercio

61. Ibid., p.28. 62. Ibid., Ver tambien Paul Krugman, "Dutch Tulips and Emerging Markets",

Foreign Affairs, julio-agosto de 1995, p.29. 63. Peter Morici, director de la Office of Economics of the U.S. International

Trade Commission (USITC), Free Trade in the Americas, The Twentieth Century Fund Press, Nueva York ,1994, p.4.

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de servicios, y tener habilidad para poner en pnictica proteccion 'world cIass' para la propiedad intelectual"64

Como era de esperarse, Estados Unidos ya se ha beneficiado sustancialmente con las reformas econ6nricas que se han puesto en pnictica a 10 largo y ancho de toda la region. Las politicas neoliberales han traido como resultado el crecimiento de las exportaciones y el restablecimiento de mercados vitales para los productores norteame­ricanos: en 1981, el ano previo al estallido de la crisis de la deuda Latinoamerica invirtio 44 mil milIones en la compra de producto~ estadounidenses, 10 que representaba un 18 por ciento de las expor­taciones de ese pais. En 1986, la contraccion ocasionada por la crisis economica hizo que esta cifra cayera a 31 mil millones, correspon­dientes al 14 por ciento de las exportaciones globales estadouniden­ses. En 1992, cuando toda la regi6n ya se habia embarcado en las 11amadas reformas del mercado, las importaciones latinoamericanas provenientes de Estados Unidos sumaron 75 mil millones, equiva­lentes al 17 por ciento de las ventas en el exterior de ese pais durante el mismo afio65. Y precisamente en ese rnismo ano, por primera vez desde mediados de los oehentas, la balanza comercial de America Latina con su principal socio comercial volvio a registrar saldo negativo. Entre 1990 y 1993 el deficit de la cuenta corriente de la region casi se multiplic6 por siete (de 6.3 mil millones a mas de 46 mil millones)66. Para 1994 este deficit ascendi6 a 50 mil millones de dolares. Llama la atenci6n que el unico pais que mantuvo exce­dente comercial hasta 1994 fue Brasil, considerado hasta ese entonces como la "oveja negra" por los organismos financieros internacionales

64. Ibid., p.5.

65. Morici, ibid., p.6. De acuerdo con Alexander F. Watson, Secretario Asistente de ~s~ad~, "la region se ha convertido en uno de nuestros mercados mas grandes y dlOamlcos. Las exportaciones de Estados Unidos a Latinoamerica se han mas que duplicado en seis anos. hasta Uegar a 76 mil millones de d6Iares en 1993- esta es una cifra ~onsiderablemente mayor que 10 que vendemos a J~p6n, y apro:ima­dumente eqUlvalente a 10 que Ie vendemos a todos los paises en desarrollo del Este asiatica" (Capitol Hill Hearing Testimony, marzo 9 de 1994, Federal Document Clearing House Congressional Testimony, Lexis-Nexis).

66. Carlos M. Vilas, America Latina en el "nuevo orden mundial" Mexico D.E: Universidad Nacional Autonama de Mexico, 1994, p.17. '

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Entre la modernizacion y la dependencia 57

por SU renuencia a aplicar de manera consistente el paquete de medidas neoliberales.

En efecto, la estrategia de promover sus exportaciones y de invertir en los lIamados mercados emergentes sigue siendo central para Estados Unidos. En un discurso de marzo de 1995, el Subsecretario de Comercio, Jeffrey Garten, declaro 10 siguiente:

Nuestras exportaciones y empleos dependen de que consigamos una mayor participaci6n en los grandes mercados emergentes. Ninguna empresa de Estados Unidos sera una compafifa de talla mundial si no se involucra de manera considerable en estos grandes mercados67 .

Sobra anadir que para alcanzar tales objetivos, Estados Unidos recurre cada vez mas a sus viejas pnicticas proteccionistas. Por ella, no es extrano que en la Cumbre de las Americas de diciembre de 1994, funcionarios latinoamericanos y caribenos presentaran a la potencia del Norte una lista de sesenta productos de la region que sufren restricciones para entrar al mercado estadounidense68 .

EL MODELO AUTORITARIO NEOLIBERAL

En alios recientes, los cientificos sociales latinoamericanos han desarrollado diversas teorias para explicar la relacion entre la emer­gencia de gobiernos autoritarios y el proceso de desarrollo econnmico de la region. Estas explicaciones han surgido dentro del enfoque de la dependencia y, por ello, rechazan la existencia de una correlacion entre modernizaci6n y democracia, uno de los postulados basicos de los teoricos de la modernizaci6n. Asimismo, cuestionan la supuesta prevalencia de un "legado autoritario" inherente a la sociedad y cultura latinoamericanas, como explicacion para el predominio de gobiernos abiertamente dictatoriales durante el presente siglo. Ambos conceptos son ampliamente defendidos y propagados por la ideologfa neoliberal.

67. Citado par Paul Krugman, op.cit., p.29. 68. El Tiempo, domingo 18 diciembre de 1994, p.se.

58 El modelo neoliberal

Algunos autores han seiialado que Ia dimimica del desarrollo y la industriaIizacion tardia han generado diversas formas de gobierno autoritario en la region. Si bien sus teorias se retieren a periodos ya superados de la historia latinoamericana, en elias se encuentran algunos elementos Utiles para caracterizar 10 que he denominado el modeIo autoritario neoliberal. Por ello, las examinare brevemente a

continuaci6n. Para Peter Evans resulta claro que, en eI contexto del desarrollo

dependiente, Ia asociacion entre democracia burguesa y acumuIaci6n capitaIista no puede darse, como si ocurrio en eI caso de Ia indus­triaIizaci6n temprana europea. En los paises dependientes, senala, la "autocracia burguesa" se expresa abiertamente, en la medida en que la necesidad de represion es grande, en tanto que la de ejercer la demoeracia es pequena. En sus propias paIabras,

Durante la revoluci6n industrial original era esencial un cierto grado de consenso polftico entre los miembros de las clases poseedoras para llevar a cabo su "proyecto de clase" de acumulaci6n capitalista. Perc cuando la acumulaci6n depende de la triple" alianza entre las multina­cionales, las empresas estatales y sus aliados locales privados, los metodos parlamentarios para alcanzar eI consenSD resultan inapropia­

dOS69 .

Por su parte, Gunder Frank sostiene que cuando la democracia y otras formas del Estado burgues ya no resultan adecuadas para satisfaeer las necesidades del capital extranjero y nacional, una coaIicion capitalista actlia para reemplazar estas formas con regime­. nes autoritarios 70.

EI modelo burocratico-autoritario, desarrollado por el argentino Guillermo O'Donnell, intento proporcionar una explicacion de tipo economico y politico aI surgimiento de los regimenes militares del Cono Sur durante los aiios sesentas y setentas. Se trataba de gobiernos

69. Peter Evans, op.cit., p.47. Esta noci6n de 1a existencia de una triple alianza sera cuestionada en el siguiente capitulo.

70. Citado par Martin Carnoy, The State and Political Theory, Princeton, New Jersey: Princeton University Press, 1984, p.191.

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Entre Ia modemizacion y Ia dependencia 59

altamente exclusionarios, cuya principal base social era una burgue­sia "oligopolizada" y transnacional. En el Estado burocratico-auto­ritario los especialistas en coercion y los tecnocratas tenian un peso decisivo. Estos dos sectores eran los encargados de "salvar" a la nacion, restaurar eI orden politico y social y promover el desarrollo economico. En 10 politico, la adopcion del modelo correspondio a una abrnmadora derrota de los sectores populares. En terminos eco­nomicos, O'Donnell 10 presenta como una condicion necesaria para profundizar el proceso de industrializacion en estos paises7I

Los analisis anteriores se refieren aI perfodo de las dictaduras militares del Cono Sur. Es claro que estos regimenes pertenecen al pasado y que los paises de la region cuentan hoy con gobiernos civiles elegidos mediante elecciones. No obstante, en los argumentos que se han dado para explicar el ascenso de dichas dictaduras se encuentran elementos muy importantes para entender la tendencia crecientemente autoritaria que se desarrolla en Colombia y los demas paises latinoamericanos bajo Ia adopcion del modelo neoliberai. En primer lugar, en dichos argumentos se destaca la articulacion exis­tente entre los intereses de las multinacionales y los de Ia burgllesia transnacional de cada pais, y Ia necesidad de mantener un regimen autoritario para defender sus intereses comunes. Como veremos a 10 largo del presente libro, la implantacion del modelo neoliberal en Colombia ha requerido de un regimen cada vez mas autoritario, debido a que los costos sociales yeconomicos de sus politicas recaen fundamentalmente sobre los trabajadores y demas sect ores populares, que representan la mayoda de la poblacion.

En segundo lugar, un punto importantisimo en eI analisis de Evans y de O'Donnell es el papel desempefiado por los tecn6cratas en dichos regimenes miIitares. Estos teenocratas se encuentran al frente de los proyectos neoliberales que se adelantan en Ia actualidad en toda Ia region. Constituyen el eje de la elite neoIiberaI, cuya natu-

71. En reaUdad, lejos de Ilevar a una profundizacion deJ desarrollo industrial, la puesta en pfiktica de las medidas neoliberales bajo este modelo condujo a un proceso creciente de desindustrializaci6n. como 10 evidencian los resultados de las dictaduras militares de Chile y Argentina.

60 EI modelo neoliberal

raleza, ideologfa y valores estudiare a profundidad en el tercer ca­pitulo. Debido a su indole civil y al hecho de que aducen tener un enfoque polfticamente neutral hacia la aguda crisis economica de estos paises, la. nueva elite pudo poner en practica el modele sin que se hubiese presentado considerable oposicion. Sus miembros cuen­tan, como es obvio, con un clima ideol6gico internacional altamente

favorable, resultante del fin de la Guerra Fda y de la supuesta desaparici6n de alternativas politicas distintas al capitalismo. Por ello, la idea de que la implantacion del modele burocratico-autori­tario en el Cono Sur correspondi6 a una abrumadora derrota de los sectores populares es tambien aplicable a los regimenes neoliberales actuales.

Los amilisis de los norteamericanos Gary Gereffi y Barbara Sta­llings son particularmeute ilustrativos en 10 que respecta al papel que desempelia el Estado autoritario en el desarrollo econ6mico de los palses del Tercer Mundo". Partiendo de un enfoque comparativo entre los paises del Este asiatico y los latinoamericanos, estos autores coinciden en selialar que, en ambas regiones, la clave para entender la conjuucion entre resultados ecouomicos y Estado autoritario hay que buscarla en su diferente y cambiante relacion con las grandes potencias economicas a nivel mundial y en su distinto papel estra­tegico en los intereses de estas, como se vera en el capitulo siguiente.

Continuando la misma !fnea de amllisis, otros autores han desta­cado que la desmovilizacion politic a y la exclusion de la poblacion no SOn nn fenomeno accidental sino un elemento de primer orden en el modelo de "industrializacion para la exportacion" , conocido en iugles bajo la sigla EO!. Esto se debe a que dicho modelo de desarrollo descansa en la existencia de una fuerza laboral altamente disciplinada y de bajo costo73 EI argumento, extraido de la expe-

72. Ver Gary Gereffi y Donald L. Wyman, op. cit. 73. Frederic C. Deyo, "Economic Policy and the Popular Sector", en Gary

Gereffi y Donald L. Wyman (camp) op.cit., y David A.Smith y Su-Hoon-Lee, "Limits on a Semi peripheral Success Story? State Dependent Development and the Prospects for South Korean Democratization", en William G. Martin (comp), SemiperipJzeral States ill the World-Economy, Westport, Connecticut: Greenwood Press, 1990.

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Entre la moderruzaci6n y la dependencia 61

riencia de los pafses del Este asiatico, resulta apropiado para entender el proceso en curso de reestructuracion economica mundial bajo los lIamados principios del libre eomereio. Pese al hecho de que se refiere al desarrollo de otra region, dicho analisis es muy uti 1 para entender los rasgos concretos que adopta el modelo autoritario neo­liberal en su version latinoamericana. No hay dudade que estas politicas solo pueden implantarse mediante la "flexibilizacion", la sumisi6n y el "disciplinamiento" de la fuerza laboral, 10 que acarrea el deterioro de las condiciones de vida y de empleo de los trabajadores y la eliminacion de buena parte de sus derechos politicos.

Ademas de los planteamientos anteriores, se han desarrollado algunas explicaeiones en torno a la relacion especffica que se presenta entre regimen autoritario y modelo neoliberal en America Latina. En su libro sobre los primeros experimentos de este tipo en el Cono Sur, Alejandro Foxley sostiene que, dentro de la logica neoliberal, la supuesta interconexion entre libertad economic a, resultante del funcionarniento del mercado, y libertad politica no es valida para estos paises. Por el contrario, el argumento que sirve para justifiear el autoritarismo en Latinoamerica, tomado de la teoria de "eleccion publica" de James Buchanan, afirma que el Estado debe apartarse tanto como sea posible de los procesos decisorios de la soeiedad, asf como se retira de la actividad economica. Sin embargo, cuando durante mucho tiempo los individuos han estado sometidos a la influencia de nn Estado omnipotente y benefactor, estos no actuan raeionalmente en la forma en que 10 requiere la toma de decisiones con base en el mercado y, por 10 tanto, no puede esperarse de ellos un comportamiento raciona!, "al menos no antes de que haya quedado claramente en evidencia la superioridad de los nuevos principios del sistema de libre mercado". De acuerdo con Foxley, se configura asf una racionalidad que justifica la exclusion de los mecanismos de­mocraticos de decisi6n y se da via libre al autoritarismo neoliberal, al concentrarse el poder en una elite para que puedan funeionar, sin interferencia, los mecanismos del mercado. En palabras del autor,

Este papel puede ser asumido en forma mas eficiente, al decir de los

ide61ogos, por una esclarecida autoridad central, capaz de discernir

62 EI modele neoliberal

cuates son las soluciones racionales (cientfficas) y de conducir a los individuo~ de esta forma a la optimacion social. La autoridad debe ser fuerte y perrnanecer vigilante, considerando 10 fnigiles que son

los mecanismos del mercado, en presencia de una opinion publica

que no siempre observa una completa racionalidad74•

En un estudio conjunto sobre los experimentos neoliberales em­prendidos durante los afios ochentas en los paises andinos, Catherine Conaghan, James Malloy y Luis A. Abughattas destacan los poderes autoritarios que adquiere el Ejecutivo en la implantacion de ese modelo (los regimenes considerados en este an:ilisis son el de Be­lalinde Teny en Perli (1980-85), los de Hurtado (1981-84) y Febres Cordero (1984-88) en Ecuador, y el de Paz Estenssoro (1985-88) en Bolivia). Al respecto, los autores senalan 10 siguiente:

Un poder altarnente centralizado en el Ejecutivo, unas legislaturas debiles y un estilo exclusionario aislaba a los equipos econ6micos de

las pujas de la politica pluralista. La oposicion desde abajo permanecio

relativamente mnda debido al estatus de desmovilizaci6n de los sec­

tores laborales75 .

En este orden de ideas, las reformas constitucionales que se hi­cieron en los tres paises durante los regimenes mencionados Ie otorgaron poderes de decision altamente centralizados a la rama ejecutiva del gobierno. Mediante dichos poderes recien adquiridos, a los equipos tecnocniticos de esos paises se les permitio desanollar yaplicar las politicas economicas sin siquiera consultar al Congreso,

. la mayoria de las veces por la via de los decretos ejecutivos. Con respecto a esta clara conexi on entre un Ejecutivo fuerte y la implan-tacion de las politicas neoliberales, Catherine Conaghan y sus colegas concillyen que

74. Alejandro Foxley, Experimemos neoliberales en America Latina, Mexico D.F.: Fonda de Cultura Economica, 1988; p.lO!.

75. Catherine M. Conaghan, James M. Malloy y Luis A. Abughattas, "Business and the 'Boys': The Politics ofNeoliberalism in the Central Andes", LatinAmerican Research Review, University of New Mexico, Albuquerque, NM, Vol. XXV, No.2, \990, p.5.

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Entre la modemizacion y la dependencia 63

En realidad las implicaciones de costas que traen los programas de estabilizacion neoliberal requieren de unos ejecutivos que actuen de

una manera decididamente autoritaria, a pesar de los marcos formal­

mente democraticos dentro de los cuales el poder ejecutivo se formula

y legitima. En sintesis, en todos los tres casos vemos el bosquejo de

una forma hfbrida de gobierno en la cual una fachada de democracia

formal enmascara una inclinacion realmente autoritaria, en especial en el area de la polftica econ6mica 76.

Dentro de una linea de an:Hisis similar y con base en el caso de Argentina b'\io el gobierno de Menem, Nancy Bermeo se ha referido a un modelo de "democracia exclusionaria" propio de los gobiernos civiles que han adoptado las politicas neoliberales. Este modelo se caracteriza por la legitimacion de una forma de hacer politica alta­mente discriminataria, que, ademas, sustenta la idea de que tal ex­clnsion no solo es tolerable sino necesaria, tras la crisis resultante de regimenes "inclusionarios" y de naturaleza populista. Bajo estos regimenes, las nnevas elites pueden convencer a la poblaci6n de que los gobiernos anteriores son los responsables de la crisis economica y, en especial, de la hiperinflacion que azoto a la mayor parte de los paises del continente. De acuerdo con este analisis, el comun deno­minadar de la region es un Ejecutivo con mucha autoridad, designado por Bermeo como "Ejecutivo elevado", que se encarga de adelantar las transfonnaciones neoliberales77 .

Algunos estudiosos de los regimenes de Europa del Este y de Latinoamerica han sei\alado qne en la mayor parte de ellos los presidentes elegidos hacen uso extensivo del poder de emitir decre­tos, pasan por encima de instituciones democraticas como el Con­

greso y los partidos politicos y gobiernan de una manera plebiscitaria que por momentos parece tener fuertes tendencias dictatoriales ocul­tas. En el contexto latinoamericano, ejemplos notorios son los de

76. Ibid., p.27. 77. Nancy Benneo, "Civil Society and Scarcity in Third Wave Democracies."

ponencia presentada en el 90 Congreso Anual de la Asociaci6n de Cieuda Politica de Estados Uoidos (APSA), Nueva York, septiembre 1 de 1994.

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64 EI modelo neoliberal

Carlos Menem en Argentina, Fernando Collor de Melo en Brasil y, el caso mas extremo y evidente, el de Alberto Fujimori en Peru78 .

Asimismo, incluso desde una tradicion liberal y moderada, un numero cada vez mas considerable de analistas se ha referido a las tendencias autoritarias que han acompanado estas reformas eco­nomicas en Latinoamerica y reconoce que "Ia consolidacion de­mocratica es dificil durante periodos de crisis economica y/o

restructuraciones econ6micas importantes"79. Guillermo O'Donnell, por su parte, ha planteado la existencia de un nuevo tipo de regimen, el de la "democracia delegativa", una mezcla peculiar de rasgos democniticos y autoritarios caracterizada por una autoridad ejecutiva que llega al poder mediante elecciones periodicas y regulares pero gobierna virtualmente sin ninguna restriccion, y, en buena medida, por decreto. Para Carlos Vilas, este tipo de regimen pone en evidencia

el surgimiento de formas de dominaci6n polftica que combinan la legitimacion electoral del gobernante, la exacerbaci6n de la suprema­da, tradicional en America Latina, del pader ejecutivo frente al legislativ~ y al judicial, y la integraci6n subordinada de amplios segmentos de la poblaci6n empobrecida a estrategias de expansion de los segmentos mas transnacionalizados del capita18o.

Los anaJisis y modelos antes descritos ilustran muy bien las ten­dencias politicas que han acompanado las reformas economicas de la region. Si bien todos ellos se basan en la experiencia de otros paises latinoamericanos, sirven para entender el proceso politico que empezo a desarrollarse en Colombia desde mediados de los anos

78. David Collier y Steven Levitsky, "Democracy 'with Adjectives': Strategies for A voiding Conceptual Stretching", ponencia presentada al 19 Congreso de Ia Asociaci6n de Estudios Latinoamericanos, LASA, Washington, septiembre-octubre de 1995, p.IO.

79. Eduardo Feldman y Mary Alice McCarthy, "Rethinking Development Theo­ries in Latin America: A Rapporteur's Report". Working Paper #9, septiembre de 1993, Political Science, UNC-Chapel Hill (Resumen de las ponencias presentadas en Ia conferencia titulada "Rethinking Development Theories in Latin America", marzo de 1993), p.20.

80. Ver Vilas, Latinoamirica ... , p.35.

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Entre Ia modernizaci6n y Ia dependencia 65

ochentas. Los analistas de los experimentos neoliberales en el con­tinente apuntan hacia dos factores, que son, en mi concepto, los componentes esenciales de la tendencia autoritaria. El primero es la consolidacion del poder politico en manos de la elite tecnocratica neoliberal y la exclusi6n de buena parte de otros sectores de las viejas clases dominantes, en especial la llamada "clase polftica" tradicional, de todos los procesos importantes de toma de decisiones, 10 que se ha reflejado en el fortalecimiento del Ejecutivo frente a las ramas legislativa y judicial. En el caso de Colombia, el proceso se ha puesto en pra.ctica mediante diversas reformas estatales, pero en especial con la adopci6n de la Constitucion de 1991. El segundo factor son las reformas y otras politicas recientes del Estado que buscan frenar el descontento y la protesta de los trabajadores orga­nizados y de los sectores populares. Como en el caso de otros paises latinoamericanos, en Colombia tambien se ha generalizado el ma­

lestar social debido a las diffciles condiciones economicas impuestas a la poblacion por el modelo neoliberal y a causa de'la crecienle exclusi6n de la mayor parte de los sectores politicos de los procesos fundamentales de toma de decisiones.

Capitulo 2

EL PAPEL DEL ESTADO Y EL MODELO DE DESARROLLO

EL ESTE DE ASIA y LATINOAMERICA:

UNA COMPARACION INELUDIBLE

Tanto el papel desempeiiado par el Estado en eI proceso de desa­rrollo economico comO eI camino hacia la industrializacion que han seguido los diversos paises constituyen puntas esenciales en el debate entre la economia neoclasica y los enfoques que la contradicen, en sus diferent~s versiones. A partir de los afios cincuentas, en forma paralela al surgimiento de las teorias de la modemizacion, los pro­blemas de desan-ollo de las naciones del Tercer Mundo se volvieron objeto de atencion par parte de los analistas sociales. Durante la decada del ochenta, cuando Latinoamerica cayo en una severa crisis economica, se empez6 a comparar con cada vez mayor insistencia el desarrollo de estos paises can eI de los NICs del Este asiatica!.

1. La sigla NICs (del ingles Newly Industrialized Countries) ha venido aplicandose en un sentido amplio a los paises del mundo en desarrollo que han alcanzado un grado considerable de industrializaci6n. Se ha sefialado que el termino no resulta rouy apropiado para el casa de los paises latinoamericanos, por cuanta el desarrollo industrial de esta region no es reciente, sino que se inici6 durante las primeras decada de este siglo. Para los prop6sitos del presente

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EI papel del Estado y el modelo de desarrollo 67

En los estudios comparativos se ha intentado contrastar las "his tori as exilosas" de Corea del Sur y Taiwan con el fracaso de los paises latinoamericanos, y se insiste en presentar a los primeros como el modelo que deben seguir los segundos. Sin embargo, la mayor parte de estos analisis no tiene en cuenta el contexto historico de las dos regiones, ni la dimimica del sistema econ6mico y polItico interna­cional, ni la forma en que dichos factores influyeron en el desarrollo de los dos gmpos de paises que se comparan. Ello ha llevado a simplificaciones extremas, cuando no a serias distorsiones en 10 que respecta a la vision de los procesos de desarrollo en ambas zonas geograficas.

EI transcun-ir historico del Este de Asia y de Latinoamerica y sus relaciones can los centros del poder economico del mundo no han sido en absoluto similares. Para empezar, las dos regiones han estado bajo la influencia de potencias diferentes. Durante el tiempo com­prendido entre la ultima decada del siglo pas ado y la Segunda Guerra Mundial, los paises del Este asiatico estuvieron bajo el dominio del colonialismo japones, en tanto que Latinoamerica ha estado la mayor parte de este siglo bajo la egida de Estados Unidos. Desde el punta de vista del desarrollo, este factor tuvo implicaciones decisivas. Debido a su reducido territorio y a la necesidad de alimentar a sus propios habitantes, Japon adelanto una profunda reforma agraria en los paises que estuvieron bajo su ocupacion. Gracias a ella, la clase ten-ateniente tradicional se vio considerablemente debilitada. David A. Smith y Su-Hoon Lee afirman que, tanto para Corea del Sur como para Taiwan, el momento oportuno y la forma en que se dio su incorporacion inicial al sistema mundial moderno, por medio del colonialismo japones, fueron factores cruciales. De acuerdo can estos dos autores,

Diffcilmente podrfa considerarse a los japoneses como imperialistas benevolos, pero debido a que su propio status·global era relativamente

analisis, cuando hablo de los paises del Este asiatico hago referenciaexclusivamente a Corea del Sur y Taiwan.

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68 EI modelo neoliberal

vulnerable, a Ia contigiiidad de Corea del Sur y de Japon y aI valor estrategico de la peninsula, la ocupaci6n japonesa trajo varias conse­cuencias para el desarrollo, a diferencia del colonialismo en atras partes del mundo. Los japoneses invirtieron en industria pesada mo­derna ( ... ) y establecieron una red de transporte que aventaj6 cuanti­tativa y cualitativamente el desarrollo de infraestructura en otros paIses en desarrollo2.

La situacion de America Latina bajo la influencia de Estados Unidos ha sido por completo diferente. Los intereses econonticos y politicos de la potencia del Norte en la region emergieron a la vuelta del siglo, cuando las corporaciones multinacionales empezaron a vincularse a la extraccion de recursos naturales y luego ala naciente industria manufacturera. La presencia de la inversi6n extranjera requirio de una cierta modernizacion y desarrollo de la infraestructura de estos paises, especialmente en el caso de las industrias extractivas. No obstante, la persistencia de la vieja oligarquia agraria de la region, ligada al poder terrateniente, no Se vio nunca' amenazada por los inversionistas extranjeros. En la mayona de los palses latinoameri­canos las corporaciones multinacionales forjaron una alianza de facto, mutuamente provechosa, con esta clase social. Asi, nunca se realize una reforma agraria radical y las elites agrarias tradicionales pudieron preservar su poder economico y continuar ejerciendo un peso decisivo en el poder del Estado.

Otro factor, importante que debe considerarse tiene que ver con el balance de poder entre las dos superpotencias durante la era de la Guerra Fria y con los intereses estrategicos de Estados Unidos en ese entonces. Para este pais, la relacion con Corea del Sur y Taiwan se convirti6 en crucial, dentro del objetivo de contrarrestar la in­fluencia y el avance de sns vecinos comunistas, Corea del Norte y la Republica Popular China. Por ello, a partir de los afios cincuentas los dragones de Asia empezaron a recibir enormes cantidades de ayuda financiera y una gran inversion por parte de Estados Unidos. De otro lado, cuando las corporaciones multinacionales comenzaron

2. David A. Smith y Su-Hoon Lee, op.cit., p.82.

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EI papel del Estado y el modelo de desarrollo 69

a desplazar operaciones manufactureras hacia los palses subdesarro­llados. buscando mejores condiciones de inversi6n, en un cOlnienzQ

escogieron a los paises del Este asiatico. Algunos analistas como Christopher Ellison y Gary Gereffi sostienen incluso que las econo­mias de Corea del Sur y de Taiwan no hubiesen podido sobrevivir sin las enormes cantidades de asistencia e inversion estadouniden­seg3,

En contraste con la sitnacion del Este de Asia, Latinoamerica ha sido en el transcurso del presente siglo un territorio relativamente seguro para la hegemonia norteamericana. Ninguna otra potencia ha representado una amenaza real para sus intereses econ6micos y politicos en el continente. Es cierto que el triunfo de la revoluci6n cubana en 1959 tuvo repercusiones politicas en toda la regi6n. No obstante, a pesar de la oleada antiimperialista que emergi6 por do­quier, la situaci6n nunca estuvo fuera de control para Washington. La guerra de guerrillas y el foquismo no representaron jamas una opcion real para las clases populares latinoamericanas. Mas adelante, durante las decadas del setenta y del ochenta, America Latina, pero en especial la region centroamericana, se convirtieron en escenario de la confrontacion politica y militar entre las dos superpotencias. Pero si bien es cierto que la of ens iva sovietico-cubana tuvo avances importantes en la region, en especial a partir de la constituci6n del regimen sandinista de Nicaragua en 1979, a la vuelta de una decada Estados Unidos logro contrarrestar dicha of ens iva y recuperar ple­namente Sil dominio casi centenario sabre el continente.

Las circunstancias disimiles en que se dio el desarrollo de los paises del Este asiutico y Latinoamerica, y el papel estrategico que los primeros desempeiiaron durante la epoca de la segunda postgue­ITa, tuvieron importantes implicaciones para el desarrollo econ6mico de ambas regiones durante las cuatro ultimas decadas. Una y otra han mantenido una diferente relaci6n con las potencias econ6micas mnndiales y, 10 que es mas importante, han manejado esa relacion de manera distinta. Los paises del Este asiatico han estado bajo una

3. Cristopher Ellison y Gary Gereffi, "Explaining Strategies and Patterns of Industrial Development", en Gary Gereffi y Donald Wyman, op. Cil., p.374.

70 EI modele neoliberal

doble influencia poderosa, representada por Estados Unidos y Japon. Por ella, el capital extranjero invertido en estos paises ha provenido tambien de ambas potencias. Barbara Stallings destaca dos conse­cuencias de primer orden, resultantes de esta situaci6n. La primera es que las naciones del Este asiatica han dependido en un menor grado de la inversion extranjera directa, que es el tipo de capital que ha causado mayores fricciones en e1 mundo subdesarrollado. Las compafiias extranjeras han desempenado un papel mucho mas limi­tado en los dos paises, 10 cual ha permitido el desarrollo de las empresas privadas locales. La segunda es que la procedencia mas diversa de los prestamistas ha lIevado a que se establezcan unas condiciones de pago de la deuda mas favorables para Corea del Sur y Taiwan. Aparte de ella, una proporci6n mayor de la deuda externa de estos pafses fue contraida con prestamistas del sector publico, quienes otorgaron mayores facilidades para su pago"

Muy distinta fue la situacion de los paises latinoamericanos, que contrajeron la mayor parte de su deuda can la banca privada inter­naciona!. Fernando Fajnzylber senala al respecto que quizas la prin­cipal diferencia entre las experiencias de America Latina y Corea del Sur tiene que ver con el peso de la deuda externa en relacion con las exportaciones. Mientras en el caso de America Latina la relaci6n entre ambos factores es aproximadamente de 3 a I, en el pais asiatico es de menos de I a 15. En estas condiciones, eS indudable que Corea del Sur y Taiwan se han encontrado en una mejor posicion para "negociar la dependencia" y han disfrutado de un mayor margen de maniobra frente a las grandes potencias economicas.

Desde los inicios de su proceso de industrializacion, las economias latinoamericanas se han visto penetradas de manera extensa por subsidiarias de las companias multinacionales. Despues de la Segun­da Guerra Mundial. estas buscaron establecerse par doquier para suplir los mercados domesticos. En los paises mas avanzados de la

4. Barbara Stallings, "The Role of Foreign Capital in Economic Development". en Gary Gereffi y Donald L. Wyman, op.cit., p.64.

5. Fernando Fajnzylber, "The United States and Japan as Models ofIndustria­lization", en Gary Gereffi y Donald Wyman, op.cit., p. 341.

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E1 papel del Estado y el modelo de desarrollo 71

region, Brasil y Mexico, se desarrollaron plantas de ensamblaje en sectores como el automotor, petroquimico y maquinaria electrica y no electrica. Las compaiifas extranjeras tambien intentaron moderni­zar algunas industrias tradicionales, tales como los textiles y el procesamiento de alimentos, con el consecuente desplazamiento de muchos de sus rivales locales" Este proceso de apropiacion de las indus trias y mercados por parte de las compaiifas multinacionales en los paises latinoamericanos, trajo como consecuencia ellimitado desarrollo de la burguesfa nacional industrial en dichos paises.

Ef papel del Estado y ef modefo de desarrollo

En la comparacion entre el Este asiatica y America Latina los defensores del neoliberalismo han planteado dos argumentos prin­cipales relativos al papel del Estado y al modelo de desarrollo. EI primero sostiene que el Estado ha tenido una funci6n muy limitada en el proceso de industrializacion de los paises asiaticos, en tanto que en Latinoam6rica su injerencia en los asuntos economicos ha sido muy fuerte. EI segundo afirma que el desarrollo de los paises asiaticos se base en la promocion de exportaciones (desarrollo hacia afuera), en tanto que el de las naciones latinoamericanas ha descan­sado exclusivamente en la industrializacion por sustituci6n de im­portaciones (desarrollo hacia adentro).

En el campo de los estudios sobre el desarrollo existe una impor­tante corriente de pensamiento que destaca el papel esencial desem­pen ado par el Estado en los procesos exitosos de industrializacion. Este enfoque puede encontrarse tanto en el pensamiento marxista como en algunas vertientes liberales, y se nutre de las experiencias de los paises industriales avanzados y de los menos desarrollados. Se opone radicalmente a la concepcion neochisica, de acuerdo can la cual el Estado esencial es el Estado minimo, restringido ante todo, si no por completo. a proteger los derechos individuales y la propie­dad de las personas.

6. Gary Gereffi, op.cit., p.99.

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72 EI mode1o neoliberal

La expeliencia hist6rica es fiUY ilustrativa en cuanta a la impor­tancia del Estado en el desarrollo economico y social. En su bien conocido estudio sabre las naciones europeas de industrializaci6n tardia durante el siglo XIX, Alexander Gerschenkron destaca el papel especifico desempenado por el Estado en dichos paises, consistente en la movilizaci6n y centralizaci6n de los recursos necesarios para

la tarea prioritaria de crear industria propia. En una de las seis consideraciones que hace sabre este proceso, afinna:

Entre mas atrasada era la economfa del pais, fue mayor el papel desempefiado por factores institucionales especiales concebidos para aumentar el suministro de capital para las nacientes industrias Y. ademas, para proporcionarles una direcci6n empresarial menos des­centralizada y mejor informada; entre mas atrasado era el pais, estos faetares fueron mas coercitivos y comprehensivos?

El mismo autar menciona dos "ventajas" que obtuvieron del atraso los paises de industrializacion tardia. La primera fue la posibilidad de aprender de los errores de los pioneros y corregirios, y la segunda consistio en que la conciencia de atraso era compartida por los intelectuales y los dirigentes politicos de los paises de desarrollo tardio, con 10 que se Ie proporciono una especie de carta blanca a la aecio~ ~statal tendiente a movilizar recursos, tamar iniciativas y aSUffilr nesgos. Gersehenkron explica como en su proceso industria­lizadar de fines del siglo pasado, Alemania pudo ingresar de una vez en un sector dimimico y de reciente surgimiento, como fue el

de los petroquimicos, en lugar de pasar por las diferentes etapas, partIendo de la manufactura textil, tal como 10 hizo Inglaterra. Re­firiendose al estudio de este autor, Albert O. Hirschman destaca el hecho de que la industrializacion tardia estuyo COll frecuencia acom­panada por proteccion tarifaria y una vigorosa orientacion exporta­dora, 10 cual represento una amenaza para la posicion dominante

. :: Alexand~r ,Gerschenkron, "Economic Backwardness in Historical Perspec­tlV~ , repr~~~cldo par Gerard M. Meier, Leading Issues ill Economic Development (qUinta edlclOn), Oxford: Oxford University Press, 1989, p.73.

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EI papel del Estado y el modelo de desarrollo 73

de los viejos paises industrializados en varios mercados de imp or­tancia8•

La casi milagrosa recuperacion economica de Japon despues de la Segunda Guerra Mundial es otro ejemplo notable del papel pre­ponderante desempenado por el Estado. Chalmers Johnson destaca como al finalizar la guerra, cuando los recursos financieros eran muy

esc as os, el Estado japones actuo como sustituto de Ull mercado de capitaies que no existia, al tiempo que "inducia" la toma de decisiones con respecto a inversiones innovativas. Las instituciones estatales desempenaron un papel crucial en la consecucion de inversiones de capital para la industria y fue el papel central del Estado en este respecto el que permitio que se diera una "racionalizacion industrial",

asi como una politica estructural de industrializacion9.

Mas alla del mundo capitalista, el proceso de industrializacion de la extinta Union Sovietica durante las decadas del veinte y del treinta y su sorprendente recuperacion tras la devastacion de la Segunda Guerra Mundial fueron una clara muestra del papel fundamental e imprescindible del Estado. La misma consideracion es valida para el caso de la Republica Popular China, que en poco mas de dos decadas y media (1949-1976) se transform6 de una economia agraria en una industrializada.

EI papel desempenado por el Estado en el desarrollo economico de los NICs asiaticos y los paises latinoamericanos debe evaluarse, por 10 tanto, en el contexto historico e internacional analizado en la seccion anterior. Sin duda, la relacion de todos estos paises (deno­minados de industrializaci6n tardia-tardia dentro del esquema de Gerschenkron) con los paises industrializados avanzados es muy diferente a la que tuvieron los paises de industrializacion tardia con los paises avanzados durante las ultimas decadas del siglo XIX. Como senala Albert Hirschman, en los paises de industrializacion

8. Albert O. Hirschman, A Bias for Hope: Essays on Economic Development and Latin America, New Haven, Connecticut: Yale University Press, 1971, p.l16.

9. Chalmers Johnson, "Political Institutions and Economic Performance: The Government-Business Relationship in Japan, South Korea, and Taiwan", en Deyo, Frederic c., (camp), The Political Economy of rile New Asian Industrialism, Ithaca: Cornell University Press, 1987, p.142.

74 EI modelo neoliberal

tardia-tardia, este desarrollo ha sido por completo "un asunto de imitacion e importacion de procesos ya ensayados y probados"lO. La diferencia fundamental entre los dos grupos de paises tiene que ver con el contexto internacional y resulta del cambio en la naturaleza del capitalismo, de libre competencia a monopolico, que tuvo lugar hacia principios del presente siglo. Ciertamente, esta transformacion afecto de manera decisiva el proceso industrializador de los paises menos desarroIIados.

En el amilisis del desarrollo en los paises industrializados del Tercer Mundo, algunos autores se han referido a la existencia de una triple alianza que incluye a las multinacionales, a! Estado y a la burguesia industrial natiya. Esta alianza es presentada como una condicion necesaria para el desarrollo dependientell . De acuerdo con dicho planteamiento, se trata de tres socios que comparten un interes comun en la acumulacion capitalista, si bien sus otros intereses son contradictorios. Esta nocion es bastante problematica, por decir 10 menos. Ademas de desconocer el papel secundario desempenado historicamente por Ia burguesia industrial en los paises dependientes, e! planteamiento de la triple alianza parte de la idea de que el Estado es un socio mas en eIIa, independiente de la clase social que posee e! poder economica.

La nocion de Ia autonomia relatiya del Estado con respecto a las clases sociales, implicita en esta fonnulacion, fue desarrollada ini­cialmente par Althusser, Poulantzas y Fried Block. En forma mas reciente, se ha yenido aplicando al analisis de los procesos politicos y economicos de los paises en desarrollo por parte de autores como los norteamericanos Peter Evans, Theda Skocpol y Alfred Stepan, quienes Ie han dado fundamento a 10 que los cientificos politicos han denominado el paradigma estatista. La idea cardinal de este enfoque es que el Estado tiene sus propios intereses, distintos a los de la clase capitalista, por 10 qne dicha clase no 10 controla directa­mente, sino que este se encuentra bajo la direccion de su propia burocracia. Para SkocpoI, por ejemplo, el conflicto mas importante

10. Hirschman, op.cit., p.92. I L Ver Peter Evans, op.cit., 1979, y Gary Gereffi, Op.cif., 1990.

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EI pape! del Estado y el modelo de desarrollo 75

que explica el cambio socia! es aque! que se da entre Ia clase dominante en el terreno economico y el Estado l2 • Es evidente la similitud de esta vision con el enfoque pluralista liberal defendido por Max Weber, Robert Dahl y David Truman, entre otros. Las ideas de neutralidad e imparcialidad subyacen en el concepto de la auto­nomia relativa del Estado con respecto a la estTUctura social. En este sentido, el paradigma estatista tambien coincide con el enfoque neolibera! e, ironicamente, la separacion tajante que se establece entre la clase dominante y el Estado Ie proporciona justificacion teorica a la privatizacion de las empresas estatales.

Otro aspecto altamente controvertible de Ia nocion de la existencia de una triple alianza en el Estado de los paises en desarrollo se des­prende del caracter de la burguesia nacional en estos. Cardoso y Faletto destacaron la participacion de Ia burguesia domestica en el bloque hegemonico del Estado, en condiciones de igualdad con los demas sectores de este bloque. Esta idea va en contra de un hecho incontrovertible: en los paises del Tercer Mundo, la burguesfa in­dustrial autoctona, par asi decirIo, ha desempefiado un pape! subor­dinado, y no de socio, frente a los intereses de las corporaciones multinacionales, motivo por el cual la nocion de una triple alianza resulta por completo equivocada.

Dentro de un enfoque bastante mecanicista, esta apreciacion no distingue entre la IIamada burguesia intermediaria y la burguesia nacionai. En el caso de Latinoamerica, el desarrollo de ambos sec­tores se inicio durante las primeras decadas del siglo, en forma concomitante con la penetracion de la region por parte del capital extranjero. No obstante, el papel politico y economico de estos dos sectores de la burgnesia ha sido historicameute distinto. La burguesfa intermediaria es el aliado mas firme de los intereses de Estados Unidos y desde un principio se constituyo en el principal soporte de su dominacion en el continente, con la cual se ha beneficiado con creces. Asi, ha habido una clara coincidencia entre los intereses de las multinacionales estadonnidenses y los de este sector de la bur-

12. Theda Skocpol, State and Social Revolutions: A Comparative Analysis of France, Russia, and China, Cambridge: Cambridge University Press, 1979.

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76 El modelo neoliberal

guesfa, que encarna 10 que Osvaldo Sunkel ha denominado un "nu­eleo transnaclOnal":

u~ complejo de act~vidades, grupos sociales y regiones en diferentes pals~s ( ... ) que estan estrechamente vinculados transnacionalmente me~lante muc~os i.nt~reses concretos, al igual que por estilos, manera y mveIes de vIda slIDllares, 10 mismo que por afinidades clllturales13.

En la epoca de la generalizacion de las lIamadas economfas de mercado e t " ' I . . ' s e nuc eo transnaclOnal" esta representado por la elite neohberal, tal como veremos en eI siguiente capftulo.

Como resultado de la alianza entre las compaiifas, multinacionales y la burguesfa intermediaria, la burguesfa industrial nacional no ha temdo un desarrollo relevante en la region. Andre Gunder Frank y San:lf Amm senalaron este factor en su ami!isis de los rasgos dis­tmt~~os de la dependencia. Diversos especialistas en los procesos polItIcos y socmles de Latinoamerica desde las rna's van' d . ~ . ' a as COll-

cepclOnes teoncas, han destacado tambien el debil' . 'I , . ISlmo pape que en 10 poh~lcO y 10 economico desempena dicho sector de la burguesfa. Como senala Albert Hirschman,

Ellos (los analistas) han deplorado la falta de auto-afirmaci6n de esta clase· . "d . Y su lllcap.acl ad para influenciar los asuntos publicos.( ... ) Los mtereses de los mdustriales no ejercen en Latinoamerica la I'nll . r' . uenCIa po Iuca ill poseen el prestigio social que han terudo en los .. pafses industriales I4 vleJos

S~gun este autor, ella se debe en parte a que la opini6n de los duenos ~e plantas de embotellamiento de refrescos a de industrias de cosmellcos 0 farmaceuticas (correspondientes a la industria !igera de consumo que ha predominado en la regi6n) nC) tiene el mismo a1cance e mfluencia que la de los fabricantes de acero y maquinaria.

in ~~.OS;a1dO. Suni~l y Stephany Griffith-Jones, Debt and Development Crises

Press-~~f~;;~~~~erSi:;~~S:: :'~4~:usion, Nueva York y Oxford: Clarendon

14. Hirschman, op.cit., p.97.

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El papel del Estado y el modelo de desarrollo 77

De otra parte, en el caso de los pafses latinoamericanos, es indis­cutible que el Estado ha representado en esencia los intereses de las compafifas multinacionales Y de 1a burguesfa intermediaria. En este sentido, es cierta la aflrmacion de Gunder Frank segun la cual eI Estado de los paises del Tercer Mundo es un instrumento esencial para la administracion del papel dependiente de estas economias en la divi­sion internacional del trabajo Y en el proceso mundial de acumulacion de capital15. La burguesia industrial domestica ha tenido una participa­cion muy limitada en los procesos de toma de decisiones de estos paises, y su supuesta carencia de "espfritu empresarial" debe entenderse en

este contexto especifico de Iimitaciones al desarrollol6

EI caso de Brasil entre finales de la decada del sesenta y comienzos de la del setenta, bajo la dictaduramilitar, merece especial atenciOn. Si bien es cierto que algunos sectores de la burguesia industrial se beneficiaron can las politicas economicas adelantadas por eI Estado, dicha c1ase no fue en manera alguna un socia, en igualdad de con­diciones, de las companias multinacionales, ni lIego tampoco a con­trolar el Estado. En 1978, par ejemplo, el99 por ciento de la industria automotriz, eI 84 par ciento de la farmaceutica, eI 76 por ciento de las bebidas embotelladas Y del tabaco y e168 par ciento de la industria textil se encontraban en manOS del capital extranjero

l'. En este

respecto, hay que tener en cuenta mas bien que, como 10 senala Barbara Stallings en su anlliisis del impacto de la inversion extranjera

en eI desarrollo de los paises receptores,

Independientemente de la forma que adopte, el prop6sito del capital extranjero es servir los intereses de aquellos que 10 proveen. El desarrollo de los paises que redben este capital es, en el mejor de los

caSQS, un efecto colateral fortuito18.

15. Citado por Martin Carnoy, The State and Political Theory, Princeton, New

Jersey: Princeton University Press, 1984, p.l88. 16. En su amilisis del desarrollo econ6mico. Gerschenkron hace mucho enfasis

en que el "espiritu empresarial" es llna de sus condiciones fundamentales (ver

Gerschenkron, op.cit., p.73-75). 17. Ver Gary Gereffi, "Big Business and the State", en Gereffi y Wyman, op.cic.

18. Stallings, op.cit., p.84.

78 EI modelo neoliberal

Las anteriares consideraciones sabre Brasil resultan tambien va­lidas para comprender el desarrollo de los NICs del Este asiatico.

Sin embargo, es claro que en dichos paises la burguesia nacional ha

contado con un mayor peso para influir sabre las decisiones estatales.

Debido a las razones historicas y e'strategicas ya mencionadas, esta

clase ha podido mantener un mayor poder de negociacion con las

compaiiias multinacionales. EI Estado de tales paises ha sido carac­

terizado como "desarrollista", entendido como aque! que desempeiia

un papel fundamental en e! desarrollo industrial al tiempo que es

capaz de forjar perspectivas empresariales de largo plazo entre las

elites privadas, aumentando los incentivos para comprometerse en

inversiones transformativas y reduciendo los riesgos de tales inver­

siones". Esta definicion es uti! para entender el papel decisivo del

Estado en el desarrollo industrial. Par ella, uo es gratuito que en su

amilisis, los NICs asiiiticos sean presentados como ejemplos exitosos

de estatismo.

En un estudio en el que establece comparaciones intrarregionales,

Fernando Fajnzylber senala la importancia que ha tenido en la in­

dustrializaci6n de los NICs la fijacion de unos claros objetivos

nacionales:

Pese a diferencias obvias en el desarrollo hist6rico de Brasil y de Corea del Sur, los sectores publico y privado de ambos paises han mantenido una relaci6n estrategica en la que la actividad empresarial es orientada hacia el cumplimiento de unos objetivos nacionales cuidadosamente definidos. Por el contrario, las elites empresariales de Argentina y Mexico han tenido una actitud de desprecio hacia nociones tales como la de "responsabilidad nacional"2o,

En 10 que respecta al Este de Asia, Robert Wade hizo nn minucioso

estudio sectorial sobre las principales ramas industriales en Corea

19, Peter Evans, "Predatory, Developmental, and Other Apparatuses; A Com­parative Political Economy Perspective" Sociological Forum, 1989, VolA, NoA, p.562.

20. Fajnzylber, op.cit., p.343.

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El papel del Estado y el modelo de desarrollo 79

del Sur y Taiwan y sobre la forma como estas haMan sido afectadas

por las polfticas estatales. Conclnyo que el desarrollo industrial no

podria haberse presentado sin el papel estrategico del Estado en

cuanto al manejo del mercado a nivel interno e internacional y a la

colocacion de ambos al servicio del interes economico naciona[21.

Por su parte, Gary Gereffi identifica cinco etapas principales seguidas

por los NICs en su proceso de industrializacion. Tres de ellas son de

orientacion hacia afuera: la primera de exportacion de productos pri­

marios y las olr"as dos de industrializacion para la exportacion (IOE),

primaria y secundaria. Las dos etapas restantes son de orientaci6n hacia

dentro: industrializacion pOf sustitucion de importaciones (lSI), prima­

ria y secundaria. Las etapas se diferencian una de otra por el tipo de

productos que se genera en ellas. En los extremos de este proceso de

desarrollo industrial se encuentran, de un lado, la exportacion de

materias primas sin refinar 0 semi-procesadas (etapa de exportacion de

productos primarios) y, del otro, la produccion de una variedad de

artfculos manufacturados intensivos en capital y tecnologia, tales como

los bienes intermedios y de capital (segunda fase de lSI)". Estas estapas

del proceso industrial no deben confundirse con el camino lineal hacia el desarrollo defendido por los teoricos de la modernizacion. Mas bien,

deben examinarse en el contexto de loque se ha designado como el sistema

manufacturero global, en el que los NICs no solo se especializan en las distintas ramas de la manufactura, sino que cada vez mas 10 hacen en

diferentes etapas de la producci6n dentro de una industria en particular.

Los paises del Este asiatico han podido combinar estas distintas

etapas del proceso de desarrollo industrial. No obstante, elpaso de

una etapa a la siguiente se ha realizado bajo los auspicios de Estados

Unidos. Bruce Cumins afirrna que tanto en el caso de Corea del Sur

como en el de Taiwan la decision de entrar en la etapa exportadora

fue adoptada por la superpotencia23 • Por su parte, Tun-jen Cheng

21. Robert Wade, "Industrial Policy in East Asia: Does it Lead or Follow the MarketT', en Gary Gereffi y Donald L. Wyman (comp), op.cit., p.248.

22. Gary Gereffi y Donald L. Wyman, op.cit., 1990, p.17 Y 27. 23. Cumings, Bruce, "The Origins and Development of the Northeast Asian

Political Economy: Industrial Sectors, Product Cycles, and Political Consequen­ces", en Frederic C. Deya (comp), op.cit., p.70.

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80 EI modelo neoliberal

explica en detalle como se desarrollo todo este proceso en los dos paises. Seglin 61, a ambos se les pidio por primera vez que redujeran "voluntariamente" sus exportaciones de texliles de algodon mediante un acuerdo suscrito en 1971 con Estados Onidos y los dos firmaron los acuerdos multifibra (MFA) para limitar sus exportaciones de flbrasintetica en 1973. EI mercado interno para la produccion in­duslnal era entonces 10 suficientemente grande como para sostener una. producci6n en economia de escala de bienes intermedios y de capllal en ambos paises. Las consideraciones de defensa los lIe­v~ron a orientarse hacia la produccion industrial pesada, en espe­cIal de acero y maquinaria. En ese momenta, los paises industriales avanzados se estaban volviendo cada vez menos competitivos en ramas tales como la construccion de barcos, al tiempo que aban­donaban la aclividad industrial generadora de poluci6n. Asi, en 1973 tanto Corea del Sur como Taiwan se lanzaron a Ii industria pesada ~ara Ilenar este vacio, y con miras a ello volvieron a restringir las ImportaclOnes y destinaron grandes recursos de capital a estos dos sectores24 .

Queda establecido entonces que, mas que alternativas opuestas, los tlpOS de industrializacion hacia adentro y hacia afuera se han co~plementado entre sf. No obstante, hay que recordar que en los palses menos desarrollados el proceso de industrializacion se pre­senta en condlclOues de desventaja con .respecto a la forma como este se dio en las naciones capitalistas avanzadas. En su analisis sobre eI.~esarrollo latinoamericano, Hirschman senala que Ia indus­tnahzaclOn por suslitucion de importaciones (IS I) se inicio con Ia manufactura de productos de consumo acabados que antes se impor­taban. Luego prosiguio en forma mas 0 menos rapida y exitosa hacia las e:~pas mas alt~s de Ia manufactura, correspondientes a Ia pro­dUCClOll de blenes mtermedios y de maquinaria, si bien ella ocurri6 en muy pocos paises. Sin embargo, el grueso de las nuevas indus trias correspondio al sector de productos de consumo y, debido a su dependencia de maquinaria e insumos importados, Ia industrializa-

24. Tun-j~n C?,eng, "Political Regimes and Development Strategies: South Korea and TaIwan, en Gereffi y Wyman, op.cit., p.162.

I

El pape1 del Estado y el modelo de desarrollo 81

cion via sustituci6n de importaciones se convirti6 en un proceso altamente secuenciaI y condicionado. La diferencia fundamental con

el camino que siguieron los primeras paises que se industrializaron es que incluso cuando estos se encontraban en Ia etapa de produccion de bienes de cansumo ligero, ya producfan sus propios bienes de capital:

La lSI trae una tecnologia compleja pero sin la experimentaci6n tecno16gica sostenida y su concomitante entrenamiento en innova­ci6n. que fueron caracteristicos de los paises industrializados pione­ros25.

La gran mayoria de los paises Iatinoamericanos no ha podido entrar firmemente en Ia etapa secundaria de lSI y consolidar asf su desarrollo industrial. Por 10 demas, con Ia apertura economica y las otras medidas impuestas por las instituciones financieras internacio­nales en toda Ia region, es claro que esta posibilidad se vuelve cada vez mas remota.

Tambien con respecto a las limit.ciones que tuvo el modelo lSI en Latinoamerica y otras regiones del Tercer Mundo, Gunder Frank y Samir Amin se han referido • las restricciones impuestas al desa­rrollo del mercado interno por I. domin.cion extr.njera. De acuerdo con ellos, dentro de este tipo de industrializacion no se crea un mercado interno como el que surgio con el desarrollo del capitalismo en Estados Onidos y Europa. Ello se debe a que en sus inicios el modelo se baso en Ia exportacion de materias primas resultantes de Ia actividad de trabajadores mineras y agricolas superexplot.dos y, posteriormente, en la fabricaci6n de manufacturas para el consumo praducidas par obreros industriales tambien superexplotados26 De esta manera, no se via 1a necesidad de incrementar los sal arias can

el fin de aumentar Ia capacidad adquisitiva del pueblo y crear el mercado interno. Cardoso y Faletto, a su tumo, rechazaron de pI.no esta afirmaci6n sabre 1a inexistencia de un mere ado interno en los paises dependientes e insistieron en que los sectores populares fueron

25. Hirschman, op.cit., p.91. 26. Samir Amir, Imperialism and Unequcll Development, Nueva York: Monthly

Review Press, 1973, y Marrin Carnoy, The State ... , p.186.

82 El modelo neoliberal

necesarios en el proceso de industrializacion, no s610 como fuerza laboral sino tam bien como parte integrante de dicho mercado. Con respecto a estos argumentos opuestos, hay que sefialar que si bien es cierto que las gran des multinacionales impusieron importantes restricciones al desarrollo de los mercados internos, el papel y la importancia de estos en el proceso de industrializacion de los paises latinoamericanos no debe subestimarse, en especial en el caso de aquellos que a!canzaron un desarrollo industrial importante.

La retoriea neoliberal sefiala con insistencia que los paises lati­noamericanos han desarrollado, en la mayor parte de los casos, modelos de industrializacion "hacia adentro", con base en unos mere ados muy protegidos. Sin embargo, hay evidencias de que la region ha oscilado entre modelos "hacia adentro" y "hacia afuera", en desarrollo de un proceso que tuvo sus inicios en las primeras decadas del siglo. Estos cambios de politicas economic as han sido motivados casi siempre por las exigencias de los inversionistas ex­tr.njeros. El Estado de estos paises no ha concebido ni puesto en pnictica un proyecto coherente y sostenido de industrializacion, que fije prioridades en este aspecto y que provea los incentivos politicos y economicos para sacarlo adelante.

Y en efecto, el modelo lSI resullo muy beneficioso para los inversionistas extranjeros en las dos regiones. Como 10 demuestra Gary Gereffi, el impulso inicial que recibio dicho modelo fue el resultado de "imperativos de la situacion" determiuados por los cambios profundos ocurridos en las relacioues internacionales. En el caso de Latinoamerica, la Gran Depresion y la Segunda Guerra Mundial Ie proporcionaron un estimulo importante a este tipo de industrializacion. Posteriorrnente, durante el periodo de sustituci6n de importaciones de las decadas del cincuenta y del sesenta, las compafiias mullinacionales "pusieron en practica un principia de segmentaci6n nacional mediante el eual establecieron indus trias nacionales paralelas can el fin de suplir unos mercados domesticos altamente protegidos"27 Rene Villarreal, par ultimo, afirma que

27. Gereffi y Wyman, op.cit., p.373.

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El papel del Estado y el modelo de desarrollo 83

Los grandes oligopolios intemacionales se aprovecharon de la pro­tecci6n local y de los incentivos tendientes a impulsar el desarrollo de las empresas nacionales, sin desarrollar rringuna transferencia tecno16gica y con unos costos rnuy altos para el pais receptor en terminos de la cuenta corriente de la balanza de pagos28 .

Durante el presente siglo, en consecuencia, los asf Ilamados Es­tados sobreprotectores de America Latina han desempenado el papel de garantes locales de los inversionistas extranjeros de la region. Ella foe exigido como requisito necesario, dada la relativa debilidad del sector privado en la mayor parte de los paises. De ahi que no sea extrafio que durante las decadas de! sesenta y del setenta el Banco Mundial se mostrara especialmente interesado en apoyar y financiar proyectos adelantados par empresas estatales.

De todo el analisis anterior se desprende que el Estado ha desem­pefiado un papel decisivo en el desarroIlo economico, tanto de los paises de aIta industrializaci6n como de los del Tercer Mundo, en el pas ado y en el presente. La experiencia historica suministra argu­mentos irrefntables en torno a que la planeacion y centralizacion de la actividad economica han sido los elementos mas importantes de un proceso de industrializacion exitoso. Por 10 demas, es innegable que no existe incompatibilidad sino complementacion entre las lla­madas vfas "hacia adentro" y "hacia afuera" de industrializacion.

Para finalizar, senalemos que las historias exitosas de los paises asiaticos deben mirarse can una buena dosis de reserva. Evans, par ejemplo, considera que las economias de estos paises son "desarti­culadas", en el sentido de que sus empresas no estan conectadas entre si de la misma manera en que 10 estan las economfas del "centro". Par otra parte, su ventaja comparativa en el mercado in­ternacional ha radicado en primer termino en los reducidos costos de su fuerza laboral, can 10 que el mantenimiento de unos bajos niveles de vida se convierte en la base del desarrollo dependiente y en la clave de su exito exportador. En este sentido, los men ores

28. Rene Villarreal, "The Latin American Strategy of Import Substitution: Failure or Paradigm for the Region?", en Gereffi y Wyman, op.cit., p.293.

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84 EI modele neoliberal

casias laborales los presenta la Hamada segunda generaci6n de paises asiaticos: Tailandia, Malasia, Indonesia y China. Singapur figuraba como el pais de mayores costas en 1993 (9.92 marcos par hora trabajada en la industria), can alrededor de un 20 par ciento del costa laboral de la industria alemana. En segundo lugar estaba Corea, seguido par Taiwan y Hong Kong29 •

Otro elemento altamente discutible es la equiparaci6n tajante que se hace de desaITQllo con industrializaci6n y crecimiento econ6mico. Como afirma Giovanni Arrighi, "Ia rapida industrializaci6n de paises relativamente pobres ha sido tomada por 10 general, sin mayor cues­tionamiehto, como equivalente a 'desarrollo"'3o. Gary Gereffi y Mi­guel Korzeniewicz selialan al respecto que con la emergencia de un sistema manufacturero global, los terminos "industrializaci6n" y "desarrollo" no pueden ya considerarse sinonimos. "Si bien la in­dustrializacion es condicion necesaria para aIcanzar un status central en eI sistema mundial, ya no es una condici6n suficiente"31. Como ya se vio, el proceso y el grado de industrializacion de los "dragones" asiaticos han side forjados par los intereses de los paises capitalistas avanzados. Sus resultados en cuanto a crecimiento economico han sido notorios, en especial si se les compara can los paises latinoa­mericanos y africanos. Pero el termino "crecimiento" no incluye otros factores cruciales, tales como las condiciones politicas, sociales y economicas de los trabajadores y demas sectores populares, y la distribuci6n del ingreso. Una vez que estos indicadores son tenidos en cuenta, las historias exitosas de los paises del Este asiatica tienden a languidecer.

nel paralelo entre el papel econ6mico del Estado y el camino hacia la industrializacion en el Este asiatica y en Latinoamerica quedan dos puntas en claro: el primero, que el analisis comparativo solo resuIta acertado en la medida en que se tengan en cuenta las condiciones historicas e internacionales en las que se ha gestado el

29. "Costos laborales: la clave de los tigres", Porta folio, Bogota, agosto 14 de 1995, p.25.

30. Giovanni Arrighi, "The Deve]opmentalist IIlusion: A Reconceptualization of the Semiperiphery", en William Martin (camp). op.cit., p.12.

31. Gereffi y Korzeniewicz, op.cit., pAS.

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EI papel del Estado y el modelo de desarrollo 85

desarrollo de las dos regiones, y que ella es precisamente 10 que nO

hacen los defensores del neoliberalismo. Es evidente que los paises del Este asiatica encontraron en su proceso de industrializacion unas condiciones mucho mas favorables que las que tuvieron que afrontar las naciones latiuoamericanas, debido ala relacion especifica de las primeras can las potencias economicas del mundo. Par ella, no tiene sentido pregonar el camino "exitoso" del Este asiatica como un modelo que deben seguir a ojos cerrados otras regiones. Segundo, la defensa incondicional de una industrializacion "hacia afuera" como garantfa de exito no tiene asidero en la realidad. De nuevo la experiencia historica enselia que proteger la producci6n industrial es la condicion fundamental para que los paises alcancen competi­

tividad global.

INTERVENCIONISMO DE ESTADO Y REFORMAS DE L1BERALIZACION ECONOMICA EN COLOMBIA (1960-1996)

Colombia ingreso ala decada de 1960 bajo eI mandata del Frente NacionaI. Este regimen, resultante de un acuerdo entre los dos par­tidos tradicionales, busco ponede fin al largo perfodo conocido como La Violeucia. La alianza, que se extendi6 durante dieciseis anos (1958-1974), se baso en los principios de poder compartido y paridad. Los dos partidos se pusieron de acuerdo para dividirse par igual todos los cargos ejecutivos, legislativos, judiciales y burocniticos. Tambien se estipul6 la altemacion de la presidencia entre los dos, can la exclusion de cualquier otra fuerza politi ca. En terminos ge­nerales, los analistas politicos han descrito este sistema como alta­

mente exclusionario32•

32. Jonathan Hartlyn menciona los distintos terminos que los analistas polfticos han utilizado para caracterizar el regimen del Frente Nacional. Algunos de ellos son: democracia "controlada" (Williams, 1976; Bagley, 1979); "oligarquico" (Wil­de, 1978), y "elite bipartidista tradicional" (Cardoso & Faletto, 19:9). Tam~i~n ha sido descrito como "casi poliarqufa" (Dahl. 1971). Hanlyn caractenza este regImen como "consociativo". Todos estos terminos aparecen citados par Hartlyn en The