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Enrique Ricardo Garrido Jiménez La literatura como espejo de la realidad en 2666 de Roberto Bolaño I.-La literatura y la realidad Julio Cortázar nos cuenta cómo un hombre se envuelve de tal manera con la literatura que las barreras lingüísticas se rompen, las palabras cobran tal sentido que lee su propia muerte novelada. Es al mismo tiempo lector y personaje. La realidad se confunde con la ficción. El cuento termina con la frase: “La puerta del salón, y entonces el puñal en la mano, la luz de los ventanales el alto respaldo de un sillón de terciopelo verde, la cabeza del hombre en el sillón leyendo una novela” 1 . El efecto estético de “puesta en abismo” también se filtra al lector real; en algún momento de la lectura nos volvemos “personajes y lectores”. El relato se llama La continuidad de los parques, y nos recuerda las posibilidades imaginativas que tiene la literatura. No resulta extraño vincular la literatura con la realidad, ya que ambas forman parte del imaginario humano. Por una parte tenemos la capacidad de distinguir entre lo real y lo mental 2 . En la antigua Grecia, Aristóteles diferenció tres tipos de literatura: la lírica, la épica, y la dramática, las cuales comparten un mismo material: las palabras. Mientras que la lírica busca crear un cosmos individual, la épica y la dramática son representaciones del hombre enfrentando su evolución social 3 . La literatura se yergue como un espejo de la realidad 4 , que busca crear una imagen total de una realidad objetiva; por lo tanto tiene un referente en lo material (naturaleza) y únicamente lo representa. David Hume en Sobre la delicadeza del gusto, de la pasión dijo, con respecto a la catarsis, que es un efecto placentero y surge de la pena, el dolor, el terror y la ansiedad; sin embargo, el espectador (o lector) sabe que no es real, porque si fuera real nos produciría una inquietud mayor. Pero las palabras son poderosas y puede trastocar el orden real. Fernando Savater menciona que las 1 En Cortázar, Julio (2011). Cuentos completos. Punto de lectura. México 2 Cfr con Rorty, Richard. (1979). LA filosofía y el espejo de la naturaleza. Catedra, España. 3 Cfr con Alatorre, Claudia Cecilia (Ed. 1999). Análisis del Drama, México, Escenología. Claudia Cecilia hace referencia a Aristóteles y su Poética. 4 Cfr con Rorty, Richard. (1979). LA filosofía y el espejo de la naturaleza. Catedra, España. 1

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Ensayo

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  • Enrique Ricardo Garrido Jimnez

    La literatura como espejo de la realidad en 2666 de Roberto Bolao

    I.-La literatura y la realidad

    Julio Cortzar nos cuenta cmo un hombre se envuelve de tal manera con la literatura que

    las barreras lingsticas se rompen, las palabras cobran tal sentido que lee su propia muerte

    novelada. Es al mismo tiempo lector y personaje. La realidad se confunde con la ficcin. El

    cuento termina con la frase: La puerta del saln, y entonces el pual en la mano, la luz de

    los ventanales el alto respaldo de un silln de terciopelo verde, la cabeza del hombre en el

    silln leyendo una novela1 . El efecto esttico de puesta en abismo tambin se filtra al

    lector real; en algn momento de la lectura nos volvemos personajes y lectores. El relato

    se llama La continuidad de los parques, y nos recuerda las posibilidades imaginativas que

    tiene la literatura.

    No resulta extrao vincular la literatura con la realidad, ya que ambas forman parte

    del imaginario humano. Por una parte tenemos la capacidad de distinguir entre lo real y lo

    mental2. En la antigua Grecia, Aristteles diferenci tres tipos de literatura: la lrica, la

    pica, y la dramtica, las cuales comparten un mismo material: las palabras. Mientras que la

    lrica busca crear un cosmos individual, la pica y la dramtica son representaciones del

    hombre enfrentando su evolucin social3. La literatura se yergue como un espejo de la

    realidad4, que busca crear una imagen total de una realidad objetiva; por lo tanto tiene un

    referente en lo material (naturaleza) y nicamente lo representa. David Hume en Sobre la

    delicadeza del gusto, de la pasin dijo, con respecto a la catarsis, que es un efecto

    placentero y surge de la pena, el dolor, el terror y la ansiedad; sin embargo, el espectador (o

    lector) sabe que no es real, porque si fuera real nos producira una inquietud mayor. Pero las

    palabras son poderosas y puede trastocar el orden real. Fernando Savater menciona que las

    1 En Cortzar, Julio (2011). Cuentos completos. Punto de lectura. Mxico

    2 Cfr con Rorty, Richard. (1979). LA filosofa y el espejo de la naturaleza. Catedra, Espaa.

    3 Cfr con Alatorre, Claudia Cecilia (Ed. 1999). Anlisis del Drama, Mxico, Escenologa. Claudia Cecilia hace referencia a Aristteles y su Potica.

    4 Cfr con Rorty, Richard. (1979). LA filosofa y el espejo de la naturaleza. Catedra, Espaa.

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    palabras le pueden costar la vida al alguien: Apunten, Fuego!. El lenguaje crea imgenes

    que sirven como puente para relacionar la literatura con lo real.

    Las palabras estn en el campo de lo inmaterial, ya que no las podemos tocar; pero

    que al acomodarlas construyen campos de sentido que tienen relevancia en el mundo real.

    Gadamer acuara la frase el hombre es en la medida que es en el lenguaje, as el

    lenguaje, constriccin humana, rebaza al hombre y lo domina. El hombre no puede

    despegarse de la seguridad que le dan las palabras; necesita pertenecer a algo ya sea un

    grupo, comunidad, o sector social para no sentirse solo. El lenguaje nombra al hombre y lo

    hace parte de la sociedad. Nietzsche dice que vivimos en una ficcin5, ya que la verdad es

    inalcanzable y el hombre, como creador del lenguaje, no desea alcanzarla. Es ms cmodo

    vivir dentro de las normas que l mismo cre. Las verdades son ilusiones que se han

    olvidado que lo son. El hombre se define dentro de un conjunto de metforas, metonimias

    y antropomorfismos; es decir, un bagaje de recursos retricos. Puesto as, la literatura, por

    su naturaleza lingstica, entra en un proceso identitario del hombre, aunque la imaginacin

    edulcore6 la realidad. La novela 2666, del chileno Roberto Bolao, establece vasos

    comunicantes con la realidad: en un sentido social, con los asesinatos de Ciudad Jurez y

    La parte de los crmenes; la funcin lectora de los crticos y lectores en relacin con la

    obsesin de buscar qu hay en realidad detrs de las letras; adems de la creacin y su

    vnculo con la vida.

    II.- Literatura y violencia: Reflejo de la realidad y la naturaleza del hombre

    Arthur Schopenhauer plante que la maldad es innata en el hombre7. La naturaleza del

    hombre est plagada de egosmo. Richard Dawkins dice que todos tenemos dentro lo que se

    conoce como el gen egosta8, por lo que atacamos a todos, buscando la preservacin, o

    5 Cfr con Nietzsche, Friedrich Wilhelm. (1990) Sobre la verdad y mentira en sentido extramoral. Tecnos Madrid

    6 En un sentido esttico.

    7 Cfr con Schopenhauer, Arthur (Ed. 2011) Dialctica Erstica o el Arte de tener siempre la razn. Expuesta en 38 estratagemas. Traduccin: Luis Fernando Moreno Claro, Madrid, Trotta.

    8 Crf con Dawkins, Richard. El Gen egosta. Las bases biolgicas de nuestra conducta. Salvat 1989

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    como dira Darwin la supervivencia del ms apto. Cuando nos sentimos atacados,

    inmediatamente concretamos una venganza que sale de lo ms profundo del ser, contiene

    toda la maldad, la verdad, la complejidad, a veces es directa, otras veladas, pero siempre

    contiene un elemento hostil, ese que provoca en palabras de Philip Zimbardo el efecto

    Lucifer9; as que creamos infiernos para que nuestros semejantes sufran los castigos

    corporales, adems de satisfacer un deseo que subyace en el dolor ajeno. Salvador Elizondo

    en Teora del infierno comenta que la nocin de infierno sintetiza el carcter siniestro del

    mundo que nos rodea y es privativo de cosas como la carne y la tortura. Cuando nos

    recreamos imaginativamente en el horror, decimos que estamos imaginando

    infiernos[ (Elizondo, 1981, p. 41)]. La literatura refleja la violencia real.

    En La parte de Fate se narra las desventuras de un periodista norteamericano en Santa

    Teresa10.la idea era cubrir una pelea de box de Count Pickett; pero al adentrarse en la

    Ciudad conoce la realidad que pasa en ella. Por su labor periodstica tiene una visin

    privilegiada del entorno. Jos Manuel Servn dice:

    Hay un punto en comn que evita las perogrulladas: la Crnicaes la literatura de la realidad (y en el mejor de los casos, abundarayo, de la realidad del cronista), un registro de gneros literarios ydisciplinas sociales debidamente fisionadas en una narracin queapuesta por la atemporalidad. No hay distancias imposibles niasunto menor para quienes escriben crnicas. De hecho sedistinguen por su curiosidad casi morbosa por todo lo que les rodeay por la paciencia de un cazador, que sale en busca de su presa conuna sola bala en el rifle. El cronista es un autodidacta de disciplinaespartana que aprende del entorno internndose en sus rinconesoscuros.[( Servn,2012, p. 14) ]

    Y esto es lo que precisamente hace Fate; pues su deseo de conocer, adems de pasar

    un poco de tiempo con Rosa, lo internan en un mundo oscuro.

    Lo mataron, claro. Se meti demasiado en el asunto y lo mataron. Noaqu, en Santa Teresa, sino en el DF. La polica dijo que se trataba deun robo con desenlace fatal. Quiere saber cmo fue? Se subi a untaxi. El taxi se puso en marcha. Al llegar a una esquina se detuvo y se

    9 Vase Zimbardo, Philip. El efecto Lucifer. El porqu de la maldad. Paids 2007

    10 Un lugar imaginario, pero que por lo relatado en 2666 sabemos que se trata de Ciudad Jurez.

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    subieron dos desconocidos. Durante un rato estuvieron dando vueltaspor diferentes cajeros automticos, vaciando la tarjeta de crdito de miantecesor, luego se dirigieron a una zona del extrarradio y lo cocierona cuchilladas. No es el primer periodista que muere por lo que escribe.[(Bolao 2009, p 376) ]

    Al entrar en la casa de Charly descubre la violencia que ronda por aquella zona.

    Desde los comentarios machistas y francamente lascivos contra las mujeres, hasta la cinta

    adjudicada a Robert Rodrguez. Si tomamos en cuenta que el periodismo es una forma de

    literatura, Fate descubre la violencia que hay detrs de l. A pesas de no contar con un

    apoyo por parte de su medio, Fate se interna en los rincones ms srdidos de la sociedad

    para percibir una realidad velada. El peligro es inminente, pues ante esa gente no se puede

    jugar, y se ve en la necesidad de huir. La violencia lo supera y lo orilla a escapar junto con

    Rosa.

    En la Parte de los crmenes hay una forma novelada de la realidad. Santa Teresa es un

    reflejo de Ciudad Jurez. Bolao ficcionaliza una situacin real. Lo recrea y, a la vez, lo

    denuncia, ya que no se muestra timorato a la hora de emitir juicios respecto a la inoperancia

    de la polica. Los casos presentados entran en la realidad inmediata y la sensacin de

    escozor se apodera del lector por la cercana y la verosimilitud con la que es presentado. La

    novela presenta un sentimiento que permea en nuestra realidad: la misoginia. La rudeza con

    la que son relatados los crmenes, nos traen a colacin la nota roja: un gnero periodstico

    que tiene un gran pblico. Al presentar una gran cantidad de casos parece que llega a

    desensibilizar al lector, lo convierte en juez de lo acontece y, adems, lo deja con la

    frustracin de no poder hacer nada. Lo nico que se puede hacer es contarlo para que no

    caiga en el olvido. Es ah donde entra la relacin que establece la diputada y Sergio. Ella le

    entrega los resultados de las investigaciones sobre una amiga suya, para que los publique y

    gener una reaccin: Ahora quiero que usted utilice todo lo que entre Loya y yo reunimos

    y que agite el avispero [(Bolao, 2009, p. 790 )] . La literatura se vuelva un foro de

    denuncia.

    Uno de los guios que hace a la literatura y su relacin con la realidad es la mencin

    que se hace de Drcula. Un texto plagado de violencia. Cuando Hans Reiter se encuentra en

    la guerra, se encuentra en el castillo del conde de Transilvania. Al internarse en los

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    pasadizos secretos que haba en la casa se topa con la Baronesa Von Zumpe teniendo

    relaciones con el general Entrescu:

    y recomenzaron los gritos y los gemidos y los llantos, mientras labaronesa descenda por la verga de Entrescu o mientras la verga deEntrescu ascenda en el interior de la baronesa Von Zumpe, elgeneral rumano emprendi un nuevo recitado, recitado queacompaaba con el movimiento de ambos brazos (la baronesaagarraba su cuello), un poema que una vez ms ninguno de ellosentendi, a excepcin de la palabra Drcula, que se repeta cadacuatro versos ()clavndole las uas en el cuello a su amante,refregando la sangre que an manaba de su mano derecha en la carade su amante.[(Bolao 2009, p. 865)]

    En un juego simblico, Reiter conoce lo que existe detrs del texto: una sexualidad

    desenfrenada y hemoflica. El deseo y la perversin que existen detrs de las letras.

    Otro de los reflejos sociales que se dan es la estancia de la guerra. Como sabemos la

    guerra es un evento que trae consigo mucha sangre y muerte. La experiencia le da a Reiter

    una perspectiva de la condicin del hombre. l tiene la visin de todos los estados que tiene

    la guerra: violencia, muerte, dolor. Todo esto le servira para configurar la personalidad que

    adquira despus: Archimboldi. Se trata del odio real llevado a la literatura. La segunda

    guerra mundial novelada y retratando sus ms oscuros sentidos, pues estos eventos no son

    lo que en muchas ocasiones nos quieren hacer creer: un semillero de hroes. Ms bien se

    trata de un cmulo de atrocidades que el hombre lleva a cabo por su obsesin de poder.

    III.-Escritor: Revelador de la naturaleza del hombre

    La figura del escritor ha sido trabajada por muchos autores. Por lo general se le presenta

    como un creador que tiene las funciones de Dios.11 Huidobro deca que el poeta es un

    pequeo Dios12, que crea personajes y tiene su destino en sus manos. En Altazor, el

    personaje del poeta le reclama al escritor por su condicin que le toc vivir. En 2666, se

    refiere, ms bien, a un proceso vivencial vinculado con la realidad como fuente de

    11 En el sentido de Demiurgo.

    12 En Arte Potica Publicado en El espejo de Agua. 1916. Reproducido por Vicente Huidobro, Obras Completas 1. p. 219.

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    inspiracin creativa. Tal es el caso de Archimboldi, quien vive una guerra y una vida

    peculiar. Toda la experiencia vital es la que le da la posibilidad de crear una obra. Cuando

    se encuentra en el campo de batalla, se topa con un cuaderno de notas de un tal Ansky. Se

    dedica a leerlos: A veces por las tardes, se meta dentro del escondite, armado slo con los

    papeles de Bors Ansky y una vela, y se estaba all hasta bien avanzada la noche, hasta que

    se le acalambraban los msculos y se le helaba el cuerpo, leyendo, leyendo [( Bolao,

    2009,p. 884)]. En l se detalla toda su experiencia como soldado y prisionero. Un discurso

    metadiegtico que funciona como un antecedente de los acontecimientos ocurridos en la

    guerra. La vida del personaje resulta interesante y su nico sostn es la realidad. Son las

    experiencias las que brindan el tema, tambin la escritura como discurso histrico.

    Dentro del cuaderno de Ansky habla sobre Ivnov. Es un escritor que trabaja para el

    sistema comunista. Su labor es la propagandista. Slo con la creacin de personajes y

    utopas se logra que en el inconsciente colectivo se arraiguen ideas. Esta parte es una crtica

    contra los escritores que responden a un sistema. La literatura desvirtuada de su capacidad

    crtica. Octavio Paz dijo que los artistas no pueden estar relacionados con el gobierno,

    perderan su capacidad de crtica que es parte fundamental de la misma.

    Dentro de la novela tambin existe la mencin al Quijote de la Mancha: As que

    Ivnov se consideraba el cervantes de la literatura fantstica[( Bolao, 2009 ,p 904) ]

    Uniendo los cabos, el escritor, en este caso Archimboldi, adquiere una envestidura

    simblica de caballero andante. Como buen caballero, anda por el mundo alimentndose de

    experiencias que le servirn para su misin final de escritura. Archimboldi en la guerra

    adquiere la experiencia para la creacin, adems que se hace de un nombre (Archimboldi),

    de su arma: una mquina de escribir. As, siguiendo la lgica presentada en el Quijote, Hans

    Reiter se convierte en caballero, se convierte en Archimboldi, y es escritor.

    La escritura se yergue como un proceso identitario. Es en el papel donde se delimita

    quin es uno. Archimboldi escribe sobre su vida; es ah donde adquiere notoriedad y la

    gente sabe realmente quin es. Tambin Bolao presenta una crtica sobre esos escritores

    que buscan fama y notoriedad. Ivnov es alguien al que le perturba la posibilidad de olvido.

    Sartre deca que uno de los mayores miedos que tiene el ser es el de caer en la nada, esto

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    sirve como potencializado de los actos, tanto buenos, como malos13 Cuando lo ignoran los

    estudiantes en el entierro de Gorki, su estabilidad emocional entra en crisis por pasar a la

    historia en el olvido.

    IV.-Lector (Crtico): un vaco de realidad

    El crtico es un ser que se alimenta de la obra de otro. Bolao no es ajeno a esta

    caracterstica y lo resalta en la Parte de los crticos. Los crticos son presentados como seres

    vampricos que se alimentan del talento de escritores, se dedican a estudiar su obra y en

    ocasiones de obsesionan con su figura. Creen que por leer sus libros ya conocen al autor y

    lo llegan a exaltar casi como profeta. En realidad no lo conocen. Muchos de ellos basan su

    vida en el autor y pierden las nociones de la realidad. Para Norton, Espinoza y Pelletier,

    Archimboldi es lo nico que los une. Sin l su vida no tendra sentido. Se trata de seres

    solitarios que llenan su vaco con una filosofa de vida en la que ellos mantienen encuentros

    sexuales sin reparar en la necesidad de las relaciones personales. Existe un vaco del ser, y

    lo tratan como algo acadmico. La figura de Morini es importante: se trata de un hombre

    que es muy sabio, pero que est pegado a una silla de ruedas. Representa al crtico

    impotente emocionalmente que est pegado a una silla buscando a alguien que tal vez est

    muerto, o que simplemente es un ser humano que no tiene nada de extraordinario. Al final

    es Morini quien destaca por su inoperancia, pero es l el que va ms all de la

    superficialidad (lo corpreo), ya que es el nico que no busca a Archimboldi; prefiere

    quedarse a vivir su vida mientras pueda. Norton no es ajena a ello y por eso lo escoge, ya

    que es el que no se aferra a un fantasma que no quiere ser encontrado

    La obsesin por la figura del escritor llega a niveles ridculos; primero por los

    crticos, quienes llegan a postular a Archimboldi para que sea premiado con el Nobel, ya

    que ellos mismos no lo pueden ganar. Su vida gira entorno a l; tambin es presentado con

    la esposa de Amalfitano, quien en la locura, renuncia a su vida personal (familia) por

    emprender la bsqueda de un poeta que conoci hace mucho: El pretexto que us Lola fue

    el de ir a visitar a su poeta favorito, que viva en el manicomio de Mondragn, cerca de San

    Sebastin[( Bolao, 2009 , p 213)] Al adentrarse al mundo del poeta descubre lo que en

    realidad hay: locura y miseria.

    13 Crf con El ser y la nada de Jean Paul Sartre

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    V.-Conclusiones

    El vaco de la sociedad posmoderna lo lleva a buscar sentido en elementos externos que

    sirven como paliativos en medio de una realidad enferma. En el caso de 2666, se trata de la

    literatura. Es un lugar que usan para tratar de encontrarse a s mismos. El viaje que

    emprenden los crticos a Santa Teresa para buscar a Archimboldi es en realidad un intento

    desesperado por encontrarse ellos mismos, el escritor slo es un pretexto, un recipiente que

    les da forma.

    En la novela destaca un elemento literario muy interesante: el paralelismo literario.

    La literatura puede entablar puentes comunicantes que acortan las distancias

    espacio/temporales. Las relaciones que se entrelazan cuando la muerte y la violencia se

    desarrollan en diferentes momentos histricos. Cuando en el pasado la segunda guerra

    mundial se habla de asesinos de mujeres, en el presente Santa Teresa se concretan las

    muertes.

    Finalmente la literatura se muestra como espejo que refleja la realidad que la genera.

    Puede representar la naturaleza del hombre: ambicin, vaco, violencia, incluso hasta el

    amor filial. Se trata de una ventana donde podemos hallar nuestra propia historia: Lotte

    compra un libro de Archimboldi, y descubre en l su propia vida. Es esta una de las

    caractersticas ms hermosas que la literatura contiene.

    BibliografaBolao, R., 2009. 2666. Cuarta ed. Barcelona: Anagrama.

    Elizondo, S., 1988. Cuaderno de escritura. Segunda ed. Mxico: Fondo de Cultura Econnica.

    Servn, J. M., 2012. D.F. Confidencial. Mxico: Almada.

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    Bibliografa