La Orden de Palmira

Sheyla Prevé

Presentar al mundo una obra

literaria es de los sueños más grandes

de un escritor, contar con su compañía

el día en que mi sueño se hace

realidad, será el más bello honor.

Sheyla Prevé

La Orden de Palmira

Borges era un escritor apasionado de la brevedad, por lo mismo le daba primacía a los valores del cuento, su vocación esencial era de poeta y ello se deja ver en sus lecturas preferentes de autores como Blake, Byron y Shelley. Del género narrativo prefería a los autores como Edgar Allan Poe por su manejo de la síntesis. Horacio Quiroga definía al cuento como “la novela desprovista de todo complemento” y para Cortázar, era una “máquina infalible destinada a cumplir su objetivo con la economía de palabras”.

El rito de escribir inicia cuando se lleva en la alforja a un

Rimbaud y su precoz “videncia”, a un James Joyce con su novedoso “Ulises”, a un Vallejo y la hondura de sus “Heraldos Negros”, junto a la teoría del Inconsciente Colectivo de Carl Jung que nos revela lo contemporáneo. Después el escriba exorciza los excesos del postmodernismo para dejar los colores a una posteridad que tal vez se digne a leer las oscuras sombras de las luces.

Agregando a esto Mario Nandayapa refiere que: “publicar en Chiapas es permanecer inédito, pues las obras no se distribuyen”. Por ende el gran reto de las editoriales y de los autores es darse a conocer. De esta manera y sin importar lo adverso en el proceso de creación, el literato busca los páramos del sueño a contraluz y divisa la belleza del insomnio que no es teoría cuántica, sino sensibilidad paroxística que diseca el alma petrificada por lo cotidiano. El ayer crece con exuberante gracia en las cosas simples. Es entonces cuando se invoca la génesis del fuego para discursar el cuento novelado de la poesía y tejer el organismo de los estados del tiempo.

Él ahora tiene una llama de futuro, cada quien lleva la incógnita en la mirada del instante, donde lo inesperado es voluntad hierática. He ahí el invento del sí mismo, que novela personajes descriptivos en actos a tenor de una palabra que sigue nombrando el rumbo del misterio.

Alguien dice lo que otro murmura en el anonimato de la página, hallazgo luminoso que trasciende en el vestigio de la historia. Quien lee interpreta y a su vez vuelve a inventar la siguiente hoja, así en la apertura de cualquier texto, el redactor es simultáneamente lector para hallar el sortilegio más profundo del arte de maravillar con su escritura, buscando la armonía de la orquestación perfecta de todo lo contado.

La sutilidad de las letras es un renacer permanente que nunca deja de sorprendernos como es el caso de la escritora Sheyla Prevé, que en su más reciente novela “La Orden de Palmira”, editado por la UNICACH, ha puesto en el horizonte este océano, para que los lectores puedan disfrutar los recovecos de las playas y el retumbo del mar que deshoja las espumas del verano.

Si Borges prefería la poesía y el cuento, es porque amaba la tensión provocada por la síntesis, de ahí que una novela debe tener la tensión de un arco a la flecha en lo inmediato y lo certero del cuento, aunado de la brevedad y el ritmo intenso de la poesía para mantener el interés de principio a fin. Dos fundamentos cruciales que logra Sheyla con la frescura que nos atrapa desde la primera página entre lo prodigioso y lo imposible.

Lo antiguo se vuelve reciente cuando nos sumergimos en

La “Orden de Palmira”, una organización creada para resguardar el legado Salomónico; tres familias la han liderado por largos siglos, logrando esconder el paradero de los valiosos secretos; no obstante, ahora que un nuevo peligro se cierne sobre sus cabezas y La Orden se encuentra más vulnerable que nunca, una de las familias fundadoras está cerca de la extinción y un traidor se esconde entre sus filas. Los sobrevivientes del último ataque tendrán que encargarse de resolver los asuntos que sus ancestros dejaron inconclusos, así como de rescatar un valioso documento robado, que en las manos de su ladrón pondrá en peligro a la humanidad entera. Dos décadas después de que fuera azotada la Orden no logra todavía recuperarse de las grandes pérdidas ocasionadas por su atacante, una nueva generación de líderes debe tomar las riendas, pero para lograrlo, deben vencer las amenazas que los acechan.

Hay personajes inolvidables como en este caso, donde la protagonista Lara, mujer carismática a quien el destino le otorgó el liderazgo de su pueblo y para lograr su cometido tiene que pasar por muchos riesgos que heroicamente supera gracias al amor. Lara trae consigo la fuerza vital de lo fantástico y en el transcurso de la obra persuade a la multitud que no ha perdido la niñez de más de cien años y a su vez libera a los jóvenes lectores de los dogmas que surgen del prejuicio. Aquí no es el clasicismo de los “Diálogos de Platón”, tampoco la “Metafísica” de Aristóteles que nos asombra, aquí es simplemente una novela que conquista desde el principio a los que nunca han perdido el entusiasmo.

Hernán León Velasco

La Orden de Palmira

Comentario II

A primera vista el diseño de la portada que realizó Daf Avendaño del libro de Sheyla Prevé, nos sugiere que estamos en un lugar remoto y desconocido. Así el nombre de “La Orden de Palmira” título de la obra que nos ocupa, nos lleva a Siria si recordamos que Palmira fue su antigua capital. Desde esa lejanía nos traslada a reflexionar en el arte que camina junto a los pueblos, cuya perspectiva se fundamenta en relatos comunes y también sobrenaturales, que demuestran la necesidad del ser humano a la inserción de hallar el enigma del universo. La humanidad en su constante búsqueda existencial encuentra la dualidad del bien y el mal, donde por supuesto está designado por fuerzas superiores para luchar contra la barbarie y aliarse con el bien para armonizar las cosas desde otras miradas de la tierra.

“La Orden de Palmira”, novela jovial de Sheyla Prevé, que de manera sustancial escribe sobre los legados como causa de conflicto para tomar el mando, y en nombre de ellos se efectúan actos violentos. En esta turbulencia de gestas sobrenaturales la autora conduce a los personajes desde el inicio por un sendero inusitado.

Lara - uno de los personajes centrales -, está elegida para enfrentar a las fuerzas traidoras que desean ejercer el poder de la “Orden” y junto a su compañero Evan recorren diferentes países para enfrentar lo inesperado y encontrar el amor. Solamente la grandeza del amor les permitirá sobrellevar las arideces de la aventura de esa travesía funesta para triunfar contra los que buscan apoderarse de los pergaminos que heredó Lara sin saberlo y que ahora le compete luchar para preservarlos y tomar el liderazgo venciendo a los opositores del bien.

Sheyla Prevé, escribe poesía, cuento y ensayo con la misma sapiencia estructural y contenido atractivo que invita al lector a leer con gran interés.

El trabajo expuesto fue hecho con la intensión de llegar a los jóvenes y de ahí se abre un espacio de espiritualidad entre el más allá del tiempo real y del espacio donde surge y se desarrolla la aventura ocasionando un enlace mágico entre la escritora y el lector.

La narrativa en Chiapas, se congratula con Sheyla que multiplica el numeral en el género de la ficción, pues la autora sitúa a los protagonistas en Cuba, y termina la historia en la República de Letonia – Europa –Además los legados Salomónicos son de Israel, esto extiende el campo de los temas a tratar por los escritores coterráneos, que magistralmente nos lanzan a otros hemisferios de la literatura para vernos incluidos en el espacio sideral de otras latitudes. Sheyla abre otras puertas de la narrativa en Chiapas y por eso está apostando en dirigir el contenido de su obra a nuevos lectores más allá de nuestras fronteras.

Socorro Carranco

Gravitaciones discursivas de La Orden de Palmira Por Reyna Hernández Haro

COMENTARIO III

La escritura de Sheyla Prevé denota una fina destreza en el manejo de la lengua. Cada palabra es precisa y nos entrega los indicios requeridos para continuar en la trama. El lector o lectora no puede alejarse de esa intriga. Deseamos saber qué sucederá con Lara y Evan, si lograrán cambiar la estructura organizacional de La Orden de Palmira o si David Marioni recapacitará en la traición hecha. Es precisamente este atrapamiento, o entrampamiento en el que nos encontramos, lo que permite nos identifiquemos con los protagonistas.

Fabuladora de historias, pero también promotora de la lectura, de la investigación, del conocimiento por el sujeto es la escritora chiapaneca quien nos presenta esta nueva creación suya como una apuesta discursiva. La Orden de Palmira remota a esas grandes novelas de amor, justicia y honor de la antigüedad; en ese sentido, Sheyla Prevé se muestra como juglar de la corte. Así, vestida de gala, nuestra anfitriona nos narra una historia que inició hace novecientos años, una historia donde la magia y los conjuros permean la vida de jóvenes herederos, donde la venganza es redimida por la benevolencia y en la que los protagonistas buscan el sentido de su existencia.

Se rescata el poder de la palabra como un acto generador que –de cualquier manera– desenlaza consecuencias. A través de la palabra es como nos acercamos a lo más íntimo de su escritura, a la ontología de la autora; a través de la palabra es como se pacta La Orden de Palmira y se colocan los candados para la organización; a través de la palabra es como el sentir se hace explícito. En una época donde la palabra pareciera no tener el valor que representa, Prevé nos recuerda que es la piedra angular de toda relación. Nos invita a poner especial énfasis no sólo en lo denotado, sino en lo connotado y en el tono de lo dicho.

Tema principal y fundante de la trama es la Magia Salomonis. Con ello, se da la construcción mística del imperio sobre los demonios, la sabiduría por sobre los actos y el motivo interno que moviliza a los personajes. Este mito originante gravita el contexto cultural del lector occidental ¿Sucedió en realidad? ¿Cuáles son las fuentes? ¿Podríamos alcanzar ese nivel de destreza en este arte? Todo concluye en la pregunta existencial del saber más acerca del saber.

El tópico amoroso-amatorio matiza la carga filosófica de la novela. A decir verdad, es el contendor de la historia. Las miradas, la cercanía, el deseo y la postura decidida de los amantes hacen de su lectura un placer provocador. Es una historia que habla del amor, no sólo una historia de amor. El derroche de sensaciones y observaciones a detalle, hace que quien toma en sus manos esta novela no pueda escapar de ella. Al estar estructurada en capítulos de rápida lectura permite la elaboración de un guión interno particular de cada receptor. Contarnos nuestra propia película.

El escritor presupone un tipo de lector, eso afirman los estudiosos de la Literatura. ¿Quiénes leerán La Orden de Palmira? ¿Tendremos la misma sensación al final de las páginas? ¿Cuáles serán los tópicos que nos motivan? Nuestra juglar, con el sombrero de pluma en la mano, lo extiende para otorgarnos la palabra.

Sheyla Prevé

Su obra como cuentista se ve reflejada en la antología “De Moctezuma a los Andes” publicada por la “Agrupación Cultural Puerta Abierta Chile-México” y presentada en la FIL Guadalajara 2012, así como en la antología gráfica titulada “Voces del Alma” (en proceso de publicación).

Sus libros publicados son: la novela “Samsara” publicada por el CONECULTA-Chiapas, en 2010. Y la novela “La Orden de Palmira” publicada en 2012 por la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas, obra que tuvo presencia en la FIL Guadalajara 2012.

Funge como Secretaria Nacional de la Agrupación Cultural Puerta Abierta Chile México y es miembro del Grupo Literario Décima Musa.

Dr. Efraín Ernesto Esperilla

Es director general del centro de desarrollo para las artes de Chiapas, institución privada dedicada a la enseñanza de las artes musicales.

Se ha desempeñado como catedrático en el centro nacional para las artes D.F. así como en la escuela superior de música del INBA.

Graduado de la universidad de Point Loma en San Diego California. Con doble licenciatura en arte y piano.

Maestrías en dirección coral y composición la Universidad de North Texas

Y doble Doctorado en la misma Universidad, con un Post Doctoral en Italia

Pianista, compositor, arreglista y director musical.

Rosario Maza - soprano

Rosario Maza Hernández. Estudió canto en la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas. Estudió con la soprano Claudia Montiel en la Ciudad de México.

Estudió en la Escuela de Ópera del Conservatorio de Prayne de Viena, Austria, donde también cantó con el barítono Noé Colín.

Se ha presentado en la Ciudad de Tuxtla Gutiérrez, San Cristóbal de las Casas y Tapachula, Chiapas; en el Museo del Carmen en la ciudad de México D.F., el Art Haus Wien, la Votivkirche, La Asociación Austriaco Mexicana en Viena, el Instituto Latinoamericano de Cultura en Viena, el Palacio de Bôsendorf, la Asociación Austriaco Americana en Viena, y el Instituto Francés de Cultura en Viena.

Ha actuado con la orquesta sinfónica de la UNICACH, en la obra La Marimba Arrecha dirigida por el autor Federico Álvarez del Toro, como solista del coro Fraternidad, ha actuado junto con el guitarrista Julio Jiménez en el dúo Kukulcán, siendo además concertista del Catálogo de Grupos Representativos de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM).

Participó en Formación y dirección de coros, impartido por Guadalupe Campos y Gabriel Saldivar, de la UNAM.

Ha impartido clases de canto y técnica vocal en la Escuela de Artes Escénicas de la UNICACH, así como en el proyecto de Red Cultural en el Estado de México, en la embajada mexicana en Austria, en el Instituto zacatecano de arte, en el Centro de Desarrollo para las Artes

En 2005 se integró a ARBATEL, compartió el escenario con la banda Arti e mestieri, y con Il Balletto di Bronzo.

Formó parte del coro de cámara de la orquesta sinfónica de Chiapas bajo la dirección del Dr. Efraín Ernesto Esperilla.

Actualmente da clases de canto en EMUNÁ.

Diseño

dessoftmexico.com

Opera Nacional

Ciudad de Riga, Letonia