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Formacion V portada: D. G. Jaime Peralta Benitzez

Revision V edicion: Leon Marquez Ortiz

Primera edicion en espanol, junio 2012

ISBN : 978-607-12-0253-6

D.R. Universidad Autonoma Chapingo,

km 38.5 carretera Mexico-Texcoco

Chapingo, Texcoco, Edo. de Mexico, c.P. 56230.

Tel: 015959521500 ext. 5142

Fotograffas: todas las fotos que ilustran este libro son de Artemio Cruz Leon, salvo las del capitulo, "Etnobotanica de los abales (ciruela mexicana) de Yucatan", que fueron tomadas por Rodo Ruenes.

Todos los derechos reservados. Cualquier forma de reproduccion (total 0 parcial), distribucion, comunicacion publica 0 transformacion de esta obra, por cualquier otro medio requiere autorizacion por escrito del representante legal de la obra, salvo en las excepciones previstas por la Lev Federal del derecho de Autor.

Impreso en Mexico

fNDICE

PRESENTACION 9

BOTANICA DE Spondias L. (ANACARDIACEAE): JOCOTES, JOBOS, ABALES 0 CIRUELAS MEXICANAS EN MEXICO 11 Hector M. Tovar-Soto, Gustavo A. Ballesteros-Patron, Alejandrina Robledo-Paz, Artemio Cruz Le6n

DISTRIBUCION GEOGRAFICA DEL GENERO Spondias EN MEXICO

Artemio Cruz Le6n, Angelica G. Gutierrez Jimenez

ACERCAMIENTO A LA DIVERSIDAD DE LAS CIRUELAS MEXICANAS Artemio Cruz Leon, Angel Pita Duque, Angelica G. Gutierrez Jimenez

ETNOBOTANICA DE LOS ABALES (CIRUELA MEXICANA) DE YUCATAN Marfa del Rocfo Ruenes Morales

CULTIVO Artemio Cruz Le6n, Benito Rodriguez Haros

FORMACION DEL BANCO DE GERMOPLASMA DE Spondias

Pedro Correa Navarro, Adolfo Ballesteros Patr6n, Artemio Cruz Le6n Hector Tovar Soto

EVIDENCIAS DEL PROCESO DE TRASFORMACION DE LOS FRUTOS DE CIRUELA:

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LAS RECETAS 111

Oralia Velez Coria, Artemio Cruz Leon

PRESENTACION

J ocotes, jobos, abales 0 ciruelas mexicanas, son los nombres comunes mas utilizados por los campesinos en Mexico y otros paises de habla hispana para referirse al fruto, la planta 0 algun producto proveniente

de las especies de Spondias sp. Existe un numero elevado de terminos utilizados en espanol y en otros idiomas para designar a la fruta y practicamente se tiene un nombre en lengua nativa de nuestro pais, de la que se encuentra en zonas tropicales, para designar a dicha planta. Esto nos habla de la antiguedad e importancia actual y pasada de las ciruelas mexicanas y el significado de las relaciones establecidas entre el hombre de esta region y las ciruelas, que dio como resultado la utilizacion de las diferentes especies y la domesticacion de algunas de elias.

locates, job os, abates 0 ciruetas mexicanas es el titulo de este trabajo de difusion que recoge la amplitud y diversidad de especies y variedades, nombres, usos y el proceso de interaccion del hombre con este conjunto de especies que se encuentran en estudio por un equipo multidiciplinario en formacion, reunido en torno al interes del Sinarefi-Sagarpa, por conocer las especies frutales de las ciruelas mexicanas. Este primer intento de difusion reune los avances de la investigacion realizada durante los dos ultimos anos, y esta dirigida al publico en general. Se ha privilegiado un estilo que supera los tecnicismos de los campos cientificos, que confunden al lector comun, pero tampoco se ha sacrificado la rigurosidad, y toda la informacion esta respaldada por investigacion de campo y revision documental especializada .

EI titulo del presente libro se construye a partir de algunos nombres populares que reciben las especies de Spondias en nuestro pais, de esta manera, "j 0 cote", es la espanolizacion de la palabra del idioma nahuatl xocath, que significa agrio y que describe perfectamente el sabor de los frutos de Spondias purpurea L., especie a la cual se Ie aplica dicho nombre; en tanto que la denominacion de jobo, se aplica a Spondias mombin L., palabra cuyo origen es el taino, dialecto del Caribe del cual

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los espanoles, en el siglo XVI, tomaron y difundieron algunos nombres de plantas del Nuevo Mundo al grado tal que hasta hoy son parte del idioma castellano, tal es el caso de mafz, maguey y ajf, entre otros. Abal, es el vocablo de la lengua maya para designar a las ciruelas, particularmente a Spondias purpurea L., y de acuerdo a los diccionarios, se traduce como, "que se pone aguado", 10 que resulta en una descripcion acertada del comportamiento del fruto posterior a la cosecha, y que se convierte en una de sus desventajas principales; al Ilegar a la madurez el fruto se pone aguado y eso resulta en pocos dfas de vida de anaquel. Por ultimo, ciruela mexicana, es el terminG ampliamente usado en castellano para denominar la fruta, y se cree que su utilizacion se dio por el parecido del ciruelo japones, aquel del genero Prunus, con la ciruela mexicana, aunque botanicamente nada tiene que ver con Spondias, sin embargo, entre la poblacion y hasta entre los especialistas, en ocasiones suelen confundirse. A Spondias radlkoferi, por su apariencia verdosa en estado maduro y por su parecido cercano al "jobo", se Ie denomina "jobo verde".

Se presentan siete apartados tematicos, en donde se incluye la botanica de las especies, resumen del conocimiento y complicaciones de la botanica que se ocupa de nuestras ciruelas, asf como su clasificacion y descripcion. Se continua con la informacion sobre las especies que se encuentran en nuestro pafs y su distribucion, de acuerdo a las colectas de material botanico disponible en 12 herbarios de Mexico y del mundo. Producto de la colecta del material de los frutos y las caracterfsticas de las plantas, se presenta un primer analisis de la diversidad de los jocotes cultivados en nueve regiones correspondientes a cinco estados del Centro del pafs. Como resultado de un estudio detallado en el estado de Yucatan se presenta la etnobotanica de los abales, nombre dado por los mayas a las ciruelas en Yucatan. En el apartado cinco se presenta una sfntesis del manejo agronomico que se Ie proporciona a la especie en explotaciones, tanto a nivel de huerto familiar, como de plantaciones comerciales. En el pen ultimo apartado se presenta una resena de los trabajos realizados para el establecimiento de las colectas de materiales vegetativos en Merida, Yucatan y Ciudad Altamirano, Guerrero, como bancos de germoplasma de trabajo, y por ultimo se presenta un muestrario de recetas, recomendaciones para preparar algunos platillos con frutos de ciruela mexicana, esperamos lograr el objetivo de dar a conocer esta planta mexicana, que en el nombre lIeva su identidad. Por 10 pronto ibuen provecho!

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Artemio Cruz Leon

Chapingo, Mexico. Primavera 2011.

Hector M. Tovar-Soto l • Gustavo A. Ballesteros-Patron l

Alejandrina Robledo-Paz2 • Artemio Cruz Leon3

BOTANICA DE Spondias L. (Anacardiaceae): JOCOTES, JOBOS, ABALES 0 CIRUELAS MEXICANAS

EN MEXICO

A MANERA DE INTRODUCCION

EI genero Spondias L. fue establecido por Linneo, en 1753, basado en Spondias mombin, especie americana. La taxonomfa ha sid a confusa, sabre todD en la de­finicion del numero de especies, pues mientras Airy-Shaw y Forman consideran 10, Kostermans incluye 14 y revisiones mas completas han descrito cerca de 17, donde se incluyen 7 taxa neotropicales (S. macrocarpa, S. mombin var. mombin, S. mombin. var. globosa, S. purpurea, S. radlkoferi, S. testudinis y S. tuberosa) y 10 de los tropicos asiaticos. Actualmente se cultivan seis especies: tres asiaticas (S. borbonica, S. citherea y S. pinnata) y tres americanas (S. mombin, S. purpurea y 5. tuberosa). Sistemas de cruzamiento variables son comunes en Anacadiaceae y Spondias . Se conocen varias especies que muestran flores unisexuales y bisexua­les, a veces con la presencia de ambas en un solo individuo. De los taxa neotropi­cales tres son nativos de Mesoamerica: S. mombin L. var. mombin, S. radlkoferi y 5. purpurea. Las primeras dos comparten muchas similitudes: ambas son arboles grandes (menores 35 m de altura), que se encuentran primariamente en selvas altas perennifolias S. mombin se distingue de S. radlkoferi par sus frutos; los de

1 In stituto Tecnologico de Ciudad Altamirano; Av. Pungarabato sin ; Col. Morelos; Ciudad Altamirano, Gro. 40660. 2 Programa de Semillas; Campu s Montecillo; Colegio de Postgraduados; km 36.5 Carr. Mexico­Texcoco; Montecillo, Texcoco, Mex. 56230. 3 Maestrfa en Ciencias en Desarrollo Rural Regional, Di reccion de Centros Regionales. Universidad Aut6noma Chapingo.

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la primera son esferas amarillo-anaranjadas, mientras los de la segunda son mas oblongos y de color verde al madurar. Adicionalmente, las hojas de S. rodlkaferi son pubescentes (con pelos). Los miembros de Spandias son arboles 0 arbustos palfga­mos, dioicos (sexos separados en diferente planta; es decir, existen plantas hembra y plantas macho) 0 monoicos (ambos sexos se presentan en la misma planta). EI fruto es una drupa suculenta, de color amarillo, anaranjado, purpureo 0 rojo ala madurez; con epicarpo (cascara) correoso, pulpa del mesocarpo (comestible) delgada yendo­carpo (Uhueso") lenoso. En la Red de Ciruela Mexicana (Spondias), auspiciadas por Sinarefi-Sagarpa, se han estudiado los materiales herborizados 0 realizado consultas en linea de nueve herbarios. Adicionalmente, se revisaron dos herbarios de la Uni­versidad Autonoma Chapingo (UACh) y uno de la Universidad Autonoma de Sinaloa. La base de datos formada contiene informacion de 735 ejemplares; a 131 de ellos que caredan de coordenadas geograficas, se les agregaron. Ademas, 51 accesiones se encontraron sin identificacion a especie, por 10 cual se les deja como Spondias sp. Los taxones encontrados fueron Spondias mombin (390t S. purpurea (219) y S. rodlkoferi (75). Con esta informacion se pudieron elaborar 21 mapas en Arc View: 20 estatales y uno de todo el pais. Se encontraron ejemplares en los herbarios estu­diados procedentes de 20 entidades de la Republica; el estado con mas Spondias es Veracruz, con 267 colectas, donde predomina S. mombin; Ie sigue Yucatan, con 87, dominando S. purpurea; luego continua Chiapas, can 70, donde sobresale S. mom­bin; despues les siguen Quintana Roo, Campeche, Oaxaca y Jalisco con 59, 53,46 y 41 colectas, respectivamente. Es pertinente mencionar que hace falta mucho traba­jo de campo (colectas vivas y de material herborizado) y consultar mas herbarios, a fin de avanzar hacia el censo de Spondias en Mexico. Tambien, y derivado de los trabajos de la Red de Ciruela Mexicana, se tiene en marcha la conformacion de la Co­leccion Nacional de Spondias, cuya sede se ubica en el Centro Regional Peninsula de Yucatan, de la UACh, en Merida. Una copia de esta coleccion se establecio en el Ins­tituto Tecnologico de Cd. Altamirano, en el estado de Guerrero. Ademas, de ambas colecciones de trabajo se hara una copia para concentrar en el Campo Experimental Inifap de Rosario Izapa, Chiapas, donde se ubican los materiales de las especies tro­picales estudiadas 0 financiadas por el Sinarefi-Sagarpa.

La familia Anacardiaceae

Los jocotes, jobos, abales 0 ciruelas mexicanas pertenecen al genero Spondias L., el cual se inserta en la familia Anacardiaceae, orden Sapindales, subclase Rosidae, y la clase Dicotiledoneas polipetalas (Ramirez, 2004); dicha familia fue estableci­da por Linneo en el primer gran libra de taxonomia dicotomica Species Plantarum (Especies de Plantas), en 1753. Aunque Bentham y Hooker (1862) propusieron la division de la familia en dos subfamilias (Anacardiaeae y SpondieaeL varios autores plantearon otras subdivisiones, como Engler (1883L can cuatro tribus. Sin emba rgo, los trabajos de Mitchell y Mori (1987L Thorne (1992), Takhtajan (1997), APG (1998 y 2003) Y Pell (2004) son de los mas recientemente aceptados por la comunidad

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internacional. Este ultimo incluye dos subfamilias : Anacardioideae (con cuatro tri­bus) y Spondioideae (con s610 la tribu Spondiadeae, la cual comprende 20 generos, entre los que destaca Spondios L.).

Anacardiaceae es una familia moderadamente grande, con unas 600 especies en 74 generos, cuyos miembros se conocen porque producen reacciones alergicas al contacto, debido a la presencia de compuestos fen61icos en la resina. EI habito pre­dominante en la familia es el arb6reo, seguido del arbustivo y de las lianas; muy pocos representantes son hierbas. Una caracterfstica tfpica es la presencia de cana­les resinfferos en la corteza, cuya resina es clara, pero se ennegrece al contacto con el a ire (Judd et 01., 2002). Las flores usualmente son muy pequefias, actinomorfas pentameras y unisexuales; por 10 comun, se encuentran en inflorescencias deter­minadas. EI ova rio es supero y se compone de tres carpelos, de los cuales s610 uno es fertil. EI fruto es una drupa dispersada por mamfferos y aves, aunque en algunos generos 10 hace el viento (Cronquist, 1981; Judd et 01., 2002).

Figura 1. Mango, fruta distintiva de la familia Anacardiaceae.

Tanto los sistemas de clasificaci6n tradicionales mas utilizados (Cronquist, 1981, 1988; Thorne, 1992), como el mas reciente, de APG (1998, 2003), situan la fami­lia Anacardiaceae en el orden Sapindales, el cual incluye las familias Burseraceae, Sapindaceae, Meliaceae, Rutaceae y Simaroubaceae (Thorne, 1992). Una de las di­ferencias mas importantes es la inclusi6n de la familia Julianiaceae como parte de Anacardiaceae, 0 su reconocimiento como una familia por sf sola. EI sistema de Thorne (1992) y el sistema del APG (1998, 2003) coinciden en incluir Julianiaceae en Anacardiaceae, mientras que Cronquist (1981) reconoce la existencia de la familia Julianiaceae (Martfnez-Millan y Ceballos-Ferriz, 2005).

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Anacardiaceae tiene importancia economica por la produccion de taninos, resinas y frutos comestibles. Esta es la familia del mango (Mangifera indica) y el maran on, nuez de la India 0 de Brasil (Anacardium occidentale), que junto con los pistaches (Pistacia vera) y las ciruelas mexicanas 0 jobos (varias especies de Spondias) son las mas representativas y comerciales de esta familia en el mundo (Cronquist, 1981; Mitchell y Mori, 1987; Nakasone y Paul, 1998; Watson y Dallwitz, 1992).

De la familia destacan las hojas frecuentemente alternas, muy pocas veces opues­tas 0 helicoidales, pinnaticompuestas 0 trifoliadas, raras ocasiones simples. Las flo­res a veces son perfectas (los dos sexes en la misma flor). En las flores unisexuales con frecuencia son evidentes las partes no funcionales del otro sexo. Los sepalos y petalos son valvados 0 imbricados. Las anteras son tetrasporangiadas, ditecales y abren longitudinalmente. Los granos de polen son binucleados y triporados, a veces 4 a 8 poras. EI gineceo puede contener 1 a 12 carpelos unidos (Cronquist, 1981) .

La subfamilia Spondioideae

Esta constituida por arboles y arbustos, hojas compuestas, raramente simples 0

Figura 2. Frutos de pistache, otras de las especies importantes ubicada dentro de la misma familia que las ciruelas mexicanas.

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unifoliadas. EI doble del numero de estambres que de petalos; 4 a 5 car­pelos, raramente uno 0 mas de cinco; 4 a 5 lobulos; un ovulo por lobulo; 4 a 5 estilos; polinizacion por insectos; endocarpo (semilla 0 "hueso") carno­so 0 lignificado; exocarpo ("cascara") delgado; el mesocarpo es delgado, al compararse con el endocarpo; la dispersion es realizada por los anima­les consumidores de los frutos (Pell, 2004) .

EI genero Spondias L.

Spondias fue establecido por Linneo como genero monotipico en 1753 (Species Plantarum: 371), basado en Spondias mom bin, especie nativa de America tropical. La taxonomfa de especies ha sido confusa, pues ha ha­bido muchas divergencias al respecto entre autores y, por anadidura, la de­finicion del numero de especies del

genera ha side controversial; de esta forma, Airy-Shaw y Forman (1967)

Figura 3. Jocote. (Spondias purpurea L).

consideran 10 especies, mien­tras que Kostermans (1991) incluye 14. Revisiones m as completas han descrito cer­ca de 17 especies (cuadro 1), donde se incluyen 7 taxa neo­tropfcales (Mexico a Brasil) y 10 especies en los tr6picos asiaticos (Linneo, 1762; Airy­Shaw y Foreman, 1967; Ding HOLl, 1978; Kostermans, 1991; citados por Miller, 2004) .

ActLlalmente se cultivan, al menos, seis especies: tres asiaticas (5. borbonica, S. citherea y S. pinnata) y tres americanas (5. mombin, S. purpurea y s. tuberosa).

Los sistemas de cruzamiento variables son comunes en la familia Anacadiaceae y en el genero Spondias . Se conocen varias especies que muestran tanto flores uni­sexuales como bisexuales, a veces con la presencia de arnbas en un solo individuo (5. pinnata, S. bipinnata, S. mombin y 5. purpurea) (Kosterrnans, 1991; Judd et al., 1999, citados por Miller, 2004) .

En los neotr6picos se reconocen seis taxa de Spondias: 5. macrocarpa Eng!., 5. mom­bin L. var. mombin, s. mombin L. var. globosa, s. purpurea L. , 5. radlkoferi Donn . Smith, s. testudinis J. D. Mitch. y Daly y S. tuberosa Arruda (Daly, citado por Miller, 2004). De estas, tres se presentan de manera natural en Mesoamerica (Mexico y Centroamerica): S. mombin L. var. mombin, 5. radlkoferi y S. purpurea. Las primeras dos comparten muchas similitudes: ambas son arboles grandes (menores a 35 m de altura) que se encuentran prima ria mente en selvas altas perennifolias. Las inflores­cencias son panfculas colgantes grandes que sostienen numerosas flores pequefias, color crema, blancas, amarillas 0 verdosas, prima ria mente hermafroditas y capaces de cruzarse s. mombin se distingue de 5. radlkoferi por sus frutos; los de la primera son esferas amarillo-anaranjadas, mientras que los de la segunda son mas oblongos y de color verde al madurar. Adicionalmente, las hojas de 5. radlkoferi son pubes­centes (con pelos) .

Los miembros de Spondias son arboles 0 arbu stos polfgamos, dioicos (sexos se­parados en diferente planta; es decir, existen plantas hembra y plantas macho) 0

monoicos (ambos sexos se presentan en la misma planta) . Flores pequefias en in­florescencias en forma de racimo, principalmente terminales; a veces tetrameras o pentameras, con pedicelos desde muy cortos a largos y colgantes, articulados. Los estambres insertados abajo del disco, iguales en longitud 04 a 5 veces mas pe­querios; los filamentos son tan 0 mas largos que los petalos; anteras dorsifijas que

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abren longitudinalmente. EI ovario, sesil, consiste de 3 a 6 carpelos unidos; cad a

uno con un ovulo. Los estilos cortos, corpulentos, con estigmas asimetricos. EI fruto

es una drupa suculenta, de color amarillo, anaranjado, purpureo 0 rojo a la madu­

rez; con epicarpo correoso, pulpa del mesocarpo delgada y endocarpo (lfhuesolf )

lenoso, duro. Este es el unico genera cuyo fruto tiene endocarpo completamente

rodeado por una capsula de fibras (Kostermans, 1991; Standley, 1961).

Todas las especies de Spondias son usadas como fruto fresco, tanto en estado inma­

duro como madura, yen la preparacion de conservas y bebidas refrescantes (Leon

Cuadro 1. Especies de Spondias y sus distribuciones geograticas (Kostermans, 1991; Airy­Shaw y Forman, 1967; D. Daly, com . pers. ; Popenoe, 1979. (Miller, 2004: 101).

ESPECIE AMPLITUD NATIVA CULTIVADA EN

1. S. acida BI. Peninsula de Malasia

2. S. acuminata Roxb. India, Birmania y Tailandia

3. S. bipinnata Airy-Shaw y Forman Tailandia (cerros calizos)

4. S. bivenomargina/is K. M. Feng, Yunnan, China P. Y. Mao y P. Me

5. S. dulcis Parkinson

6. S. macrocarpa Engl.

Asia; se cultiva en America Brasil, Caribe

Este de Brasil

7. S. ma/ayana Kosterm .

8. S. mombin L., var. mom bin

S. mom bin L., var. globosa

9. S. novoguineensis Kosterm .

10. S. pinnata (Koenig ex Linn . F.) Kurz

11. S. purpurea L.

12. S. rad/koferi Donn. Sm.

13. S. testudinis J. D. Mitch. y Daly

14. S. tuberosa Arruda

15. S. venu/osa Mart. Ex Engler

16. S. tonkinensis Kosterm .

17. S. xerophi/a Kosterm .

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Malasia, Filipinas

Mexico a Bolivia y Este de Brasil

Colombia, Venezuela, Ecuador, Peru, Bolivia

Nueva Guinea, Islas Salomon.

India, Himalayas, Birmania, Sri Lanka

Mexico - Centroamerica

Mexico - Centroamerica, Noroeste de Venezuela, oeste de Ecuador

Suroeste de la Amazonia

Noreste de Brasil

Este de Brasil

Tonkin, Provincia Langson

Sri Lanka

Mexico, Centroamerica, Brasil

India

Mexico, Centroamerica, Ecuador

Brasil

y Shaw, 1990), aunque en los ultimos anos se investiga su potencial para extraer diversos productos para la industria alimentaria (Koziol y Macia, 1998; Cunha et al., 2001); de algunas especies se aprovechan sus hojas tiernas como verdura y estas y otras partes en medicina tradicional. La ciruela mexicana (Spondias purpurea L.) ha sido considerada como uno de los frutos de primera importancia del tropico americano. Tiene su origen en Mesoamerica, aunque se distribuye hasta Panama, Peru, Ecuador, Colombia y Brasil, donde se Ie ha encontrado en estado silvestre y cultivada (Morton, 1987).

Figura 4. Jobo. Spondias mombin L.

EI genero Spondias L. en la Republica Mexicana

De acuerdo a Miller (2004) en Mexico existen tres especies, cultivadas 0 silves­tres, (cuadra 1): S. mombin var. mom bin, S. radlkojeri y S. purpurea. Sin embar­go, en la recopilacion de informacion de los herbarios mexicanos consultados se encontraron especfmenes de S. mombin, S. radlkojeri, S. purpurea y S. lutea. En la base de datos de la Conabio (http://www.conabio.gob.mx/. 2011) se informa de la presencia en Mexico, ademas de las primeras tres, de S. mexicana S. Watson, aunque esto es desmentido en la base de datos Tropicos, del Missouri Botani­cal Garden, al hacer a esta, sinonimia de S. purpurea (http://www. tropicos.org/, 2011) . Ademas, as. radkoljeri Ie insertan la variedad ovalifolia, misma que inclu­yen en la NOM 059 SEMARNAT (2002) como "amenazada". Por otro lado, varios

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autores, entre quienes destaca Standley (1961), mencionan que Spondias lutea, L. es sin6nimo de Spondias mombin L.; es decir, que se trata de la misma especie. Por ello, los seis ejemplares identificados como S. lutea de los 735 estudiados por la Red de Ciruela, en realidad son una err6nea identificacion de las accesiones de S. lutea; por 10 que esos materiales se deben reconocer dentro de S. mombin.

Spondias mombin L. (jobo, ciruela amarilla, hogplum, yellow mom bin)

EI jobo crece silvestre en toda America tropical y es poco cultivado. Los arboles deri­van de plantulas 0 de postes usados en los cercos de zonas humedas. EI tronco y las ramas principales estan cubiertos con placas gruesas y corcho. EI arbol mide de 40 a 80 cm de diametro y hasta 30 m de altura, con fuste recto 0 levemente abultado. Corteza externa agrietada color marr6n claro 0 grisaceo, las grietas separadas 3 a 4 cm entre sf. Corteza interna gruesa color rosado blanquecino. Hojas compuestas imparipinnadas, alternas y dispuestas en espiral, de 20 a 40 cm de longitud, el pe­ciolo tiene de 5 a 7 cm de longitud, foliolos 6 a 17, de 3 a 8 cm de longitud y 1.5 a 3 cm de anchura, oblongos a elfpticos; las hojas glabras, olorosas al estrujar (olor a mango). Inflorescencias dioicas; panfculas axilares multifloras, de 15 a 40 cm de longitud. Los brotes de algunas variantes son consumidos en fresco como golosina en muchas zonas tropicales.

Las flores se presentan en racimos terminales de hasta 60 cm de longitud, pequef\as y unisexuales, de 3 a 6 mm de longitud incluyendo el pedicelo, actinomorfas, con ca­liz y corola presentes, el pedicelo de 1 a 4 mm de longitud, el caliz abierto, de 1 mm de longitud, con 5 sepalos, la corola con 5 petalos blancos de 2 a 4 mm de longitud, glabros, las flores masculinas con el gineceo reducido 0 atrofiado, el androceo for­made por 10 estambres de 2 a 3 mm de longitud, el nectario lobado, situado entre los estambres y el ovario; flores femeninas similares a las masculinas pero estambres con anteras atrofiadas; gineceo con 3 a 5 carpelos, cada uno de ellos con un estilo libre y corto. Los f rutos son elipsoidales a ovoides, de 2.5 a 3 cm de longitud, amarillo brillantes y contienen una pulpa de 3 a 4 mm de espesor, amarilla y acida que rodea un endocarpo grande y duro, con surcos longitudinales, dentro del cual se encuen­tran de 3 a 5 semillas viables.

Los frutos son comestibles, agridulces y apreciados localmente y se emplean para preparar refrescos. Se trata de un frutal nativo poco conocido y estudiado. La made­ra es muy blanda y liviana, con grana recto y textura media, de color blanco a amari­llo palido. Se Ie emplea para postes en cercos vivos, en la fabricaci6n de chapas, tri­play y como madera para aeromodelismo. Una gran cantidad de animales silvestres se alimenta con los frutos de la ciruela amarilla 0 jobo y 10 dispersan ampliamente. Tambien, los frutos de S. mombin y S. purpurea son arrastrados por las corrientes de agua y se encuentran en grandes cantidades en las playas (Leon y Shaw, 1990).

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Se distribuye de Mexico a la Amazonia, hasta el Centro-Este de Brasil y Bolivia, mayormente debajo de los 700 msnm. Se Ie observa en ambitos con precipitaci6n elevada y constante, aunque tam bien en aquellos con una estaci6n seca marcada. Es una especie de tendencia heli6fita, de crecimiento rapido, comun en bosques secundarios y presente en bosques primarios, en suelos arcillosos a limosos, usual­mente fertiles, bien drenados, con pedregosidad baja a media.

Spondias purpurea L.

(jocote, jobo, abal, ciruela mexicana, red mombin)

Esta especie comprende arboles y arbustos muy ramificados, de 4 a 10 0 12 m de altura; el tronco es cilindrico, irregular, con diametros que varian de los 25 a 80 cm, con ramas gruesas; corteza suave grisacea 0 blanca, de 1.5 a 4 cm de espesor, lisa o muy verrucosa, rica en resina y numerosas lenticelas. La savia viscosa de color amarillento; las hojas se caen antes del periodo de florecimiento. Yemas desnudas, de 1 a 2 mm de longitud, agudas y glabras (Popenoe, 1948). Hojas en espiral, impa­ripinnadas, de 10 a 20 cm de longitud; foliolos 5 a 12 pares, opuestos 0 alternos ma­yormente subsesiles, muy variables en forma, pubescentes cuando j6venes, pero pronto glabros (sin pelos); petalos color purpura, de 3 mm de longitud (Standley, 1961). EI fruto es una drupa elipsoidal de 2 a 5 cm de longitud y 2 a 4 cm de anchura, lisa y brillante, de color rojo vino, purpureo 0 diferentes tonalidades de amarillo en

Figura 9. Corteza de joeate.

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estado maduro, con epicarpo firme, mesocarpo carnoso, de color amarillo y con 5 a 7 mm de grosor, de sabor acidulado muy agradable. EI numero de frutos por arbol oscila de 25 a 700 (promedio de 240), segun el tamafio, edad y vigor de la planta, en el occidente de Jalisco (Barrios y Cruz, 1978; Ramirez-Hernandez, 2004).

S. purpureo com pone el estrato dominante de la selva baja 0 bosque tropical cadu­cifolios sobre una gran diversidad de suelos, desde la costa de Sonora hasta Chia­pas y la Cuenca del Balsas, en el Pacifico; tambien, se encuentra en la Depresion Central de Chiapas, norte de Yucatan y Quintana Roo, hasta Veracruz, por el Caribe y el Golfo de Mexico. En estas regiones los climas son calientes y subhumedos, tendiendo a semisecos (Aw, A(C)w y Bsw, en la clasificacion de Garcia, (1988), con Iluvias en verano (Rzedowski, 1978) y temperatura media anual entre 20 y 29°C, con minima extrema superior a 4°C. Por 10 general se desarrolla en terrenos de ladera, pedregosos, con suelos someros arenosos 0 arcillosos, con buen drenaje superfi­cial (Ramirez-Hernandez, 2004), aunque otros autores la mencionan en suelo de diffcil drenaje, por 10 que es considerada una especie robusta con alta resistencia a sequia; es facil de producir mediante propagacion exclusivamente vegetativa (Mor­ton, 1987; Cuevas, 1992).

Entre las variantes cultivadas que se aprovechan en Mexico existe gran diversidad, por 10 que Leon y Shaw (1990) las agrupan en dos tipos: oj ciruelas de estacion seca (fructifican de febrero a mayo); de frutos pequefios redondos a elipsoida les,

Figura 10. Ciruela "guingur" de Tierra Caliente.

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ana ranjado a rojo intensos, de 2.5 a 4 cm de longitud, con epicarpo amarillo; meso­carpo blando, suculento y dulce a ligeramente acido. La mayorfa crece a altitudes de entre a y 1 200 m, y b) ciruelas de estacion humeda (fructifican de septiembre a diciembre); los frutos generalmente son mas grandes que los de la estacion seca, de color amarillo a rojo intenso; epicarpo liso y brillante. La mayor parte de estos clones crece entre 800 y 2 000 m de altitud. Recientemente, Ruenes et al., (2010) modifica esta afirmacion para Yucatan y propone un tercer grupo " ... Ias familias campesinas mayas reconocen a S. purpurea como una unidad taxonomica, abal, que agrupa a tres clases de acuerdo a la cosecha : primera, epoca de secas, yaxkim (se cosechan los frutos en abril a mayo); segunda, epoca de Iluvias, jajal (Ia cose­cha es de junio a julio), a 500 msnm y la tercera, finales de la epoca de Iluvias, keel (se cosechan frutos entre agosto y octubre) ... " En la Cuenca del Balsas (200 a 800 msnm), de Guerrero a Michoacan, hay tipos de frutos grandes, rojos, morados 0

amarillos que fructifican de febrero a mayo y se les denomina regionalmente tem­pranera, poroche, bota, guingur y mulata, entre otros nombres.

Spondias rad/koleri L. (ciruela verde)

EI a rbol alcanza hasta 30 m de altura y tiene un diametro de 40 a 80 cm; el tronco es recto y ciifndrico, generalmente caducifolio . Su copa es redondeada y relativamen­te abierta. Corteza lisa, cafe amarillenta y con Ifneas horizontales 0 cicatrices que semejan anillos. Hojas compuestas, formadas por foliolos de 7 a 17, que alcanzan una longitud de 3 a 14 cm y una anchura de 1.5 a 4.5 cm; bordes enteros u ondula­dos. Flores agrupadas en racimos terminales, de 15 a 28 cm de longitud; blancas 0

blanco-verdosas, muy pequenas, de 2.3 a 4.3 mm . Frutos carnosos, de 3 a 3.5 cm de longitud, de color verde cuando estan maduros.

Estudios realizados en esta especie recomiendan utilizar la madera para elemen­tos estructurales de cimbra, polines, vigas, viguetas, tablas, fabricacion de cajas de refrescos y empaque, cercas vivas, madera terciada, pulpa de papel, cabos de fosforos, embalajes y mangos de herramientas, chapas, componentes de muebles rusticos, palillos de dientes, abatelenguas, palos para paletas, cucharas para nieve, encofrados, aeromodelismo, decoracion de interiores, viruta excelsior, senalamien­tos marinos (boyas), tableros de partfculas 0 fibras aglomeradas. Tambien se em­plea en construcciones ligeras de todo tipo, procurando protegerla contra insectos, hongos e intemperismo. Su corteza posee gran cantidad de taninos que se emplean en farmacopea e industrialmente, para curtir pieles.

La especie se distribuye en el continente america no: en el sur de Mexico, Centro­america y norte de Sudamerica (Colombia y Venezuela). En Mexico se presenta en Veracruz, Tabasco, Chiapas y Campeche. Se encuentra en selvas medianas subpe­rennifolias, asf como en las selvas altas, vegetacion inundable, acahuales 0 vegeta­cion secundaria, 0 que resulta de la perturbacion de las selvas; ocasionalmente se encuentra en las selvas caducifolias. Tiene los siguientes requerimientos ecologicos:

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altitud de entre a y 700 msnm; clima calido-humedo; temperatura media anual de 22 a 26°C; precipitacion superior a 2000 mm anuales; suelos negro pantanosos, gris barrosos, negro arcillosos con rocas calizas y pardo arcillosos.

En el diagnostico del usa, importancia y conservacion de las diferentes variantes de ciruela (Spondias sp.), realizado por la Red de Ciruela Mexicana, auspiciado por el Sistema Nacional de Recursos Fitogeneticos de la Secreta ria de Agricultura, Ganaderia, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentacion Sinarefi-Sagarpa, desde 2009 se han estudiado los materiales, herborizados 0 en consultas en linea (www.conabio. gob.mx) de los siguientes nueve herbarios: Centro de Investigacion Cientifica de Yucatan (CICV), Merida; FEs-lztacala, UNAM, Tlalnepantla, Mex.; Herbario Nacional (MEXU), IB-UNAM, D.F.; Instituto de Ecologfa, UNAM, D.F.; Instituto de Ecologfa, A.C.,

en dos sitios : IE-Bajfo, Patzcuaro, Mich . e IE-Xal, Jalapa, Ver.; Real Jardfn Botanico de Kew, Inglaterra (KEW); Universidad de Texas A & M, Austin, Tx., EUA (LL, TEX); y el Jardfn Botanico de Missouri (MO), San Louis, Mo, EUA.

Adicionalmente, se revisaron los herbarios de la Preparatoria Agricola (JES-UACH) y la Division de Ciencias Forestales (CHAP-UACH) de la Universidad Autonoma Chapin­go (uAch), en Chapingo, Mex. Tambien, y en consideracion a que la zona del Pacifico es de importancia en la distribucion de Spondias, se visito el de la Universidad Au­tonoma de Sinaloa, en Culiacan.

La informacion obtenida de los ejemplares de herbario incluye nombre del herba rio, numero del ejemplar por los colectores, especie, fecha de colecta, estado, munici­pio, localidad, longitud, latitud, altitud, habitat y nombre del 0 de los colectores. En algunos casos no fue posible obtener toda la informacion y se desecharon muestras que carecian de datos clave (Iocalizacion, localidad, paraje y municipio). La base de datos formada contiene informacion de 735 ejemplares; de ellos 131 carecian de coordenadas, las cuales se agregaron con la ayuda de los mapas de Inegi. Ademas, 51 accesiones se encontraron sin identificacion de especie, por 10 cual se les dejo como Spondias sp. Los taxones encontrados fueron Spondias mombin (390), S. pur­purea (219), S. radlkoferi (75).

Es pertinente mencionar que hace falta trabajo de campo (colectas vivas y de ma­terial herborizado) y consultar mas herbarios, a fin de avanzar hacia el censo de Spondias silvestres y cultivadas en Mexico y la caracterizacion de los materiales sobresalientes, tendientes a establecer -en el media no y largo plazos- huertos cul­tivados para la cosecha de frutos y su venta a los mercados regionales y nacional, de ser posible . Dada la problematica de colecta en campo a partir de que muchos indi­viduos de Spondias no coinciden en fiorecimiento 0 fructificacion con la presencia de hojas, generalmente hay la necesidad de acudir, al menos, dos veces al mismo arbol a fin de lograr una colecta de herbario, material vivo y frutos para una cabal descripcion, 10 que aumenta costos y trabajo logfstico y de ubicacion precisa de las plantas 0 sus partes colectadas.

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Expresion sexual en angiospermas (dioecia, monoecia)

Una de las caracterfsticas distintivas de las ciruelas mexicanas es la existencia de plantas con flores de un solo sexo, 10 cual establece la presencia de plantas "macho" (solo pose en flores masculinas y no producen frutos) y "hembra" (tienen 5610 flores femeninas y son las que producen los frutos). Los campesinos han modificado la forma tradicional de reproducci6n de las ciruelas, favoreciendo 5610 aquellas que producen flores femeninas y dado que no se tiene necesidad de flores masculinas, las plantas domesticadas de las especies se basan en forma exclusiva en la repro­ducci6n de plantas que producen frutos .

La expresi6n sexual afecta las contribuciones geneticas relativas de la pr6xima ge­neraci6n dentro de una especie. Existen tres niveles para la expresi6n sexual en angiospermas: flor, planta y poblaci6n. 1) Una flor hermafrodita presenta androceo y gineceo; una estaminada (masculina) posee 5610 androceo y una pistilada (feme­nina) 5610 gineceo. 2) Una planta hermafrodita contiene 5610 flores hermafroditas. En una planta monoica cada flor es unisexual, es decir hay flores masculinas 0 fe­meninas separadas; p.e. el marz, donde las femeninas se encuentran en los jilotes, que mas tarde seran las mazorcas, y las espigas, ubicadas en la parte mas alta de la planta, son las flores masculinas. 3) En el tercer nivel se hace referencia mas co­munmente ala dioecia con la presencia de plantas masculinas (androicas) y feme­ninas (ginoicas) en la misma poblaci6n (Wilson, 1983; Wyatt, 1987) . En la poblaci6n de una especie pueden encontrarse situaciones intermedias y poligamia: plantas masculinas, femeninas y hermafroditas; plantas con flores hermafroditas y masculi­nas y plantas con flores hermafroditas y femeninas (Richards, 1986).

Las condiciones ecol6gicas y la planta interaccionan con respecto a la expresi6n sexual. La monoecia esta ampliamente distribuida en plantas polinizadas por vien­to y agua (Richards, 1986), mientras que la dioecia se presenta principal mente en plantas polinizadas por insectos y parece comun en especies que producen frutos carnosos y donde las semillas son dispersadas por animales que consumen frutos (Bawa, 1980; Givnish, 1980). Por otra parte, la dioecia es comun en especies lenosas de clima tropical (22% a 40%), escasa en arboles de clima templado y muy escasa en hierbas y arbustos templados; es comun en gimnospermas y poco usual en an­giospermas; se encuentra en un 3% a 4% de estas lIltimas (Bawa, 1980; Richards, 1986). La dioecia es mas comlln en floras tropicales debido a que: 0) la mayor parte de este clima favorece el habito arb6reo, y b) la dispersi6n de semillas de frutos carnosos por animales es mas comlln a bajas latitudes con climas calidos y poco viento (Givnish, 1980).

En angiospermas la dioecia se encuentra en muchas familias, aunque en baja fre­cuencia de especies; 5610 en algunas familias (por ejemplo Salicaceae) todas las especies son dioicas. Las plantas con producci6n de frutos muy abundantes pueden atraer una gran cantidad de dispersores; de tal manera que la ventaja por incre­mentar el esfuerzo reproductivo femenino puede, bajo ciertas circunstancias, favo-

2S

recer las plantas solo femeninas. De igual manera, una ventaja masculina despro­porcionada puede favorecer la dioecia (Bawa, 1980; Givnish, 1980). En un estudio en arboles de Costa Rica se encontro que las flores de especies dioicas tienden a ser menores de 1 cm de longitud 0 diametro; las masculinas tienden a ser mas pe­quefias que las femeninas. La relacion del numero de flores masculinas/femeninas tiende a ser alta. Solo las flores masculinas ofrecen polen a los polinizadores que generalmente son insectos pequefios, los cuales coinciden con las flores pequefias de los arboles dioicos (Bawa y Opler, 1975).

En un trabajo con cuatro materiales del estado de Morelos (ciruelos espontaneos, CE; cultivados de abril-mayo, CAM; intermedios, CI; y cultivados de septiembre-no­viembre, CSN), Avitia (1996) concluyo que: a) en CE las plantas masculinas presentan un periodo de florecimiento mas largo que las femeninas y producen mas inflores­cencias y flores y estas son mas pequefias que las de plantas femeninas; b) en CE y CAM las hojas brotan despues que los frutos se cosechan, mientras que en CI y CSN

las hojas brotan en eta pas iniciales del desarrollo del fruto; c) en CSN la falta de se­millas se debe a la carencia de una Fuente de polen (plantas masculinas), mientras que en CE la falta de polinizacion no es causa de aborto; d) los dfas de flor a fruto fueron de 105-120 para CE y CAM, de 180-200 en CI y de 220-270 para CSN; e) solo se observo dioecia en CE, ademas de que las plantas masculinas registraron seis veces mas flores que las femeninas; f) a pesar de que en cortes anatomicos no se observaron flores hermafroditas en plantas masculinas, es probable que sf ocurran, pues se encontraron algunos frutos sobre estas plantas, 10 cual sugiere que puede haber dioecia parcial; g) de los cuatro tipos de ciruela estudiados, solo los CSN fue­ron completamente partenocarpicos, pues el desarrollo del ova rio fue continuo, aun sin fecundacion.

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Artemio Cruz Leon1 • Angelica G. Gutierrez Jimenez2

DISTRIBUCION GEOGRAFICA DEL GENERO Spondias EN MEXICO

A partir del proyecto de diagnostico de la utilizacion, importancia y conservacion de los recursos geneticos de ciruela mexicana (Spondias spp.) se realizaron actividades de investigacion para establecer la distribucion del genero en nuestro pais, para ella se obtuvo la informacion de colectas de herbarios procedentes de la republica mexicana que resguardan 12 herbarios nacionales e internacionales. Los datos se obtuvieron por medio de visitas y revision a los herbarios y por consulta en internet, de la informacion disponible en la base de datos de la Pagina Web de la Comision Nacional de Biodiversidad Conabio .

Los herbarios consultados por este medio fueron:

• Herbario del Centro de Investigacion Cientffica de Yucatan, Mexico (CICY) • Jardin Botanico de Missouri (MO)

• FES-I, UNAM

• IBUNAM

• Herbario IEB dellnstituto de Ecologia, A.C., Mexico (IE-BAJfO)

• IE-DF,UNAM

• Herbario JES-UACH (Departamento de Preparatoria Agricola).

• Herbario CHAP-UACH (Division de Ciencias Forestales).

• Herbario UAS (Facultad de Agronomia)

• Herbario Kew del Real Jardin Botanico.

• Herbario de la Universidad de Texas Austin, EUA (LL, TEX)

Herbario XAL dellnstituto de Ecologia, A.C., Mexico (IE-XAL)

1 Profesor de la Maestrfa en Ciencias en Desarrollo Rural Regional. Universidad Aut6noma Chapingo.

2 Egresada de la carrera de Recursos Naturales de la Universidad Aut6noma Chapingo.

31

Las muestras de herbario de las instituciones visitadas fueron fotografiadas y a partir de elias se extrajo la informacion establecida, con 10 cual se forma la base de

datos presentada en el cuadro 1. Ejemplos de muestras de herbarios se presentan

en las figuras 1 a 4 .

Cuadro 1. Especies y colectas de Spondias localizadas por estado.

Spondias Estado Total

lutea mombin purpurea L. radlkoteri Sp.

Campeche 44 3 4 2 53

Chiapas 41 17 9 3 70

Colima 3 3

Guerrero 3 13 1 2 19

Hidalgo 1 1 2

Jalisco 5 36 41

Mexico 2 3 5

Michoacan 11 1 12

Morelos 1 9 10

Nayarit 2 11 13

Oaxaca 22 16 7 1 46

Puebla 5 1 6

Queretaro 4 3 7

Quintana Roo 1 44 5 1 8 59

San Luis POtOSI 5 2 7

Sinaloa 2 3 4 9

Tabasco 15 15

Tamaulipas 1 2 1 4

Veracruz 4 154 38 52 19 267

Yucatan 32 45 1 9 87

Total 6 384 219 75 51 735

32

Figura 2. Material de herbario de Spon­dias purpurea L. correspondiente a una pia nta "macho". Es la que produce s610 flores masculinas y por ello es inca paz de producir frutos .

Figura 1. Material de herbario de Spon­dias purpurea L. correspondiente a una planta "hem bra", aquella que produce flo­res femeninas y por 10 tanto la unica que produce frutos.

33

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Figura 4. Material de herbario de Spon­dias radlkoferi Donn. Sm . Observar el mayor tamano de los foliolos y de las hojas.

34

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Figura 3. Material de herbario de Spondias mombin L. N6tese el tamano y numero de flores.

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La informacion de las muestras de herbarios difiere entre instituciones, colectores y epoca de colecta, por ello, a pesar de contar con mas de 800 muestras del genero Spondias en los diferentes herbarios colectadas en Mexico, solo 735 se utilizaron para procesar los datos, determinar el numero de especies existentes en nuestro pais y su distribucion nacional. En la figura 5 se muestra una grafica en donde se registra el numero de muestras por especie localizadas en los estados.

300 I

250

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Spondias sp.

• Spondias rod/kot eri

Spandias purpurea L.

• Spandias mom bin

• Spondias /utea

Figura 5. Cantidad de muestras por especie del Genero Spondias en los diferentes estados de la Republica Mexicana .

La informacion obtenida establece que las especies del genero Spondias en Mexico, se encuentran en 20 estados de la republica localizados principalmente en la parte sur y cercanas a las costas, tal y como se muestra en la figura 6. Como puede observarse, el numero de especies y muestras colectadas en el estado de Veracruz, es infinitamente mayor que en el resto de los estados, y la cantidad representa 36% del total de muestras, Ie sigue Yucatan con 11.8%, Chiapas con 9.5%, Quintana Roo con 8%, Campeche con 7% , con 10 cual estos cinco estados poseen mas del 70% del total de muestras y tambien se observa la dominancia de la vertiente del golfo y zona caribena. La distribucion de las especies se muestra en la figura 6.

35

w en

600 o 600

Figura 6. Distribucion de especies del genera Spondios en Mexico .

1200 Kil6metros

Simbolagia

Spondios luteD

• Spondias mombin

4. Spondias purpurea L. *' Spondios radlko/eri

? Spondios sp

~ ! Republica Mexicana

Estado Spondias sp.

Gampeche 53 Chlapa; 70 Colima 3 Guerrero 19 Hidalgo 2 Jabsco 41 Mii<lco 5 Micll{)acan 12 MoreIos 10 Nayarl{ 13 Oaxaca 46 Puebla 6 Queretaro 7 QUlr~ana Roo 59 Sanl.t.As Polosi 7 SI ... 1oa 9 Tabasco 15 Tamaullpas 4 VeJacruz 267 Yucatan 87 Total 735

Escala 1:4 000 000

Con base en la informaci6n de los herbarios, se encontraron unicamente cuatro especies del genero Spondias :

• Spondias purpurea L. • Spondias mombin L. • Spondias radlkoferi • Spondias lutea

De todas estas la que se encuentra mayormente colectada es S. mombin L., que representa 52.54% de las muestras, y los estados donde se ha colectado principalmente son : Veracruz, Campeche, Quintana Roo y Chiapas. Para S. purpurea L., el numero de muestras de herbario casi representa 30% del total y los estados en donde se han colectado el mayor numero de muestras son Yucatan, Veracruz, Jalisco, Oaxaca y Chiapas.

S. radlkoferi unicamente representa poco mas de 10% de las muestras, y se encuentra en los estados de Veracruz, Chiapas, Oaxaca, Campeche, Guerrero, Yucatan y Quintana Roo. Por ultimo, S. lutea, no Ilega al 1% de las muestras y se localiza en Veracruz, Quintana Roo y Tamaulipas. Por ultimo, casi 7% de las muestras se han senalado como Spondias sp., esto se debe a que las muestras no se encuentran identificadas a nivel de especie, sino unicamente a nivel de genero, sin embargo, dado que proporcionan informaci6n de la distribuci6n a nivel de genero se incluyen en los diferentes tratamientos de la informaci6n .

Por 10 anterior, aparentemente el numero de especies del genero Spondias en Mexico es de 4, sin embargo, de acuerdo con Standley (1920-19269, Spondias lutea L. es considerada sinonimia de Spondias mombin L, por 10 cual el numero de especies se reduce a 3, cantidad min ima si consideramos el total de especies del genero, establecidas a nivel del mundo, que aunque es controversial entre tax6nomos; Airy­Shaw y Forman (1967) consideran 10 especies, mientras que Kostermans (1991) incluye 14.

BIBLIOGRAFIA

Airy-Shaw, H. K., and L. L. Forman. 1967. liThe genus Spondias L. (Anacardiaceae) in tropical Asia". Kew Bulletin 21(1) : 1-20.

INEGI. Marco Geoestadistico Municipal 2005 Versi6n 3.1.1. Poligonos de Localidades Urbanas Geoestadisticas. Fecha de consulta : 01/06/09. Disponible en: http:// www.inegi.org.mx.

INEGI. MGM 2000 . Umites Geoestadfsticos Municipales. Fecha de consulta: 29/05/09. Disponible en : http://www.inegi .org.mx.

INEGI. 2005. Conjunto de datos vectoriales de la carta de uso de suelo y vegetaci6n escala . 1:1 000 000 serie II (continuo nacional). Fecha de consulta: 01/06/09. Disponible en : http ://www.inegi .org.mx.

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Kostermans, A. J. G. H. 1991. Kedondong, ambarella, amra. The Spondiadeae (Anacardiaceae) in Asia and the Pacific area. Herbarium Bogoriense. Jalan Juanda 22. Bogor. Indonesia.

NASA. 2000. Orthorectified Landsat Thematic Mapper Mosaics. Fecha de consulta: 15/06/09. Disponible en: http://zulu .ssc.nasa.gov/mrsid/mrsid.pl.

Standley, P. C. 1920-1926. Trees and shrubs of Mexico.

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Artemio Cruz Leon1 • Angel Pita Duque2

• Angelica G. Gutierrez Jimenez3

ACERCAMIENTO A LA DIVERSIDAD DE LAS CIRUELAS MEXICANAS

I.Introducci6n

La ciruela mexicana es una de las especies marginadas; aquellas que no se han incorporado a los sistemas de comercializaci6n como producto de exportaci6n 0

Figura 1. Diversidad de frutos de ciruela.

1 Profesor de la Maestrfa en Ciencias en Desarrollo Rural Regional. Universidad Aut6noma Chapingo.

2 Profesor del Centro Regional Universitario Anahuac. Universidad Aut6noma Chapingo.

3 Egresado de la carrera de Recursos Naturales. Universidad Aut6noma Chapingo.

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como fruta de consumo interne masivo y por ello se mantienen dentro de los es­quemas productivos de la economfa campesina en las zonas calido-subhumedas de Mexico. Se encuentra en los huertos familia res, en las cercas y bordos de las parcelas de cultivo y como arboles dispersos en 10 que se podrfa identificar como sistemas agroforestales. Tambien, ocasionalmente se encuentran plantaciones co­merciales de donde se obtienen frutos para la venta 0 se procesan para su posterior comercializacion. La ciruela se produce bajo condiciones restrictivas de suelo yagua y no tiene problema para desarrollarse en condiciones de pendientes pronuncia­das; fructifica en el perfodo seco y caluroso del ano, y eso la convierte en un fruto oportuno en la selva baja -por ser el un ico de esa temporada- que contribuye a la alimentacion de sus habitantes.

Figura 2. Arbol de ciruela cuernavaquena, cultivado en huerto familiar. Amilcingo, Morelos.

Por siglos la ciruela mexicana ha side cultivada por la poblacion y esto ha derivado en la obtencion de una gran diversidad de formas, en las cuales la variacion en frutos es muy evidente. Una de las caracterfsticas distintivas de la especie es la pre­sencia de variedades silvestres que son recolectadas y consumidas por la poblacion rural y que se distinguen de su contraparte cultivada . Este apartado se enfoca en el intento de establecer las diferencias entre las variedades silvestres y las cultivadas, ademas de proporcionar una vision de la diversidad de las ciruelas, a traves de la variacion en para metros del fruto .

Ademas, se hace un anecdotario sobre el recorrido por la investigacion de la Red de Ciruela, que pretende acercar allector a otros aspectos que normal mente se dejan

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fuera en los reportes, pero que avudan a construir una historia sobre el tema de investigacion.

Quiza una de las preguntas del lector siga siendo la de por que estudiar los jocotes, jobos 0 abales, dado que se trata de una fruta tan insignificante a primera vista; sin embargo, hay varias razones que justifican su estudio V conservacion, dentro de las que podemos mencionar las siguientes: es una planta nativa, es decir se trata de una planta mexicana; se encuentran ejemplares silvestres V cultivados; se usa como alimento por habitantes del medio rural; se adapta a condiciones de bajas precipi­taci6n V alta temperatura V produce en la epoca seca del ano, cuando normalmente no hay otros frutos.

Desde la perspectiva agronomica es una planta que se reproduce vegetativamente; el proceso de floracion V fructificacion se realiza con reservas del ana anterior; es una planta multiproposito, va que adem as del fruto se pueden utilizar las hojas V obtener otros beneficios (sombra, cerco vivo V forraje); existe conocimiento empfrico sobre su manejo V, siendo un arbol, puede ser usado como componente de sistemas agrofo­restales.

Figu ra 3. Arbol con frutos y sin hojas.

II. Como se hizo el estudio

Para el conocimiento de la diversidad de las ciruelas se desarrollaron varias acti­vidades de investigacion, entre las cuales se incluven la visita a las comunidades a estudiar, las entrevistas a los productores V usuarios de la ciruela V la colecta de ma-

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teriales representativos de la diversidad reconocida en cada una de las localidades. Los frutos colectados para el estudio de la diversidad fueron tomados de un solo arbol, establecido como caracteristico, de la variante que se deseaba muestrear; en este caso se asume que se trata de una poblacion homogenea, y por ello el arbol es representativo del tipo deseado, esto se explica en terminos de que la forma de propagacion y establecimiento de los arboles es vegetativa, 10 que da como resul­tado que cada variante sea practicamente un cion.

En cada localidad se colectaron los materiales detectados como diferentes, los cua­les los usuarios reconocen dan doles nombres espedficos; sin embargo, es posible que se requiera mas tiempo en las comunidades para conocer los menos frecuen­tes. De cada variante se reunieron cuando menos 20 frutos maduros, los cuales fue­ron procesados para formar una base de datos que servira para realizar los analisis pertinentes. A partir de la informacion de colecta se seleccionaron las muestra s de las cuales se recaudo material vegetativo para establecer el Banco de Germoplasma de las Spondios, tarea que se encuentra en proceso.

La busqueda de la diversidad de ciruelas nos lIevo a establecer una estrategia de exploracion que arrojara, de manera rapida, una primera vision de la variacion; para ello se colecto en cinco estados de la Republica, en los que se trabajo en diferentes periodos de tiempo 10 cual se observa por el numero de colectas obtenidas; de esta manera, se hicieron un total de 87 colectas: 54 cultivadas y 33 silvestres, las cuales se obtuvieron entre los meses de mayo y junio de 2010. De estas, se recolectaron 40 muestras en el estado de Morelos, 17 en Veracruz, 23 en Guerrero, cuatro en Yucatan y tres en MichoaCi3n.

En el mapa 1 se presenta la ubicacion de los lugares de colecta en cada uno de los estados; para su elaboracion se utilizaron los datos de las coordenadas obtenidas, con GPS y la consulta de cartas geograficas al momenta de la colecta, adem as de la informacion vectorial dellNEGI. Las localidades donde se colectaron las muestras y el numero de colectas correspondientes a cada lugar se pueden ver en el cuadro 1.

Caracterizaci6n de los frutos de Spondios

La caracterizacion de los frutos se Ilevo a cabo en el Laboratorio de Nutricion de Fru­tales del Departamento de Fitotecnia de la Universidad Autonoma Chapingo, donde se determino el peso del fruto, as! como su forma, diametro ecuatorial y polar; forma de la base y el apice; color, textura y grosor del epicarpio; sab~r, jugosidad, aroma, grados brix y porcentaje de acidez titulable; peso del endocarpio, ancho, longitud y forma, tal y como se describe a continuacion.

Peso del fruto . Se tome el peso individual en gramos de 20 frutos de cada colecta, escogidos al azar, con una balanza electronica marca Sartorius de 500 gr.

Diametro ecuatorial y polar del fruto . Se midio el diametro ecuatorial y polar en milfmetros de los frutos pesados en cada colecta, con un vernier de plastico marca Pretul de 155 mm.

42

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1 Nueva Italia, Mugica, Michoacan

2 Ciudad Altamirano, Pungarabato, Gro.

3 Huitzuca, Guerrero

4 Tepalcingo, Morelos

Leyenda 6 Puente Nacional, Veracruz

7 Carrillo Puerto, Veracruz

8 Soledad de Doblado, Veracruz

9 Hocaba, Yucatan

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Escala 1:8000000

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5 Jalcomulco, Veracruz o Puntos de colecta Elabor6: Ing. Angel ica Gpe. Gutierrez Jimenez

t; Mapa 1. Localizacion de estados de la Republica Mexicana y sitios de colectas de Spondias purpurea L.

Cuadro 1. Estado, municipios, localidades, tipos colectados y numero de colectas de ciruela en 2010.

Estado Municipio Localidad Cultivadas Silvestres Num. de colectas

Pungarabato Ciudad Altamirano 3 1 4

Atopula 4 0 4

Escuchapa 4 0 4 Guerrero

Huitzuco Huitzuco 6 0 6

San Vicente Palapa 1 0 1

Tlaxmalac 4 0 4

Total del estado 22 1 23

Adolfo Lopez 2 0 2

Mateos

Morelos Tepalcingo Huitchila 8 0 8

Molotlan 0 27 27

Zacapalco 3 0 3

Total del estado 13 27 40

Michoacan Mugica Nueva Italia 2 1 3

Jalcomulco Sta . Marfa Tatetla 5 0 5

Conejos 0 4 4 Puente Nacional

Ejido San Isidro 2 0 2 Veracruz

Rancho Rolon 2 0 2 Soledad de Doblado

Rancho Los Teteles 1 0 1

Carrillo Puerto Rancho EI Cristo 3 0 3

Total del estado 13 4 17

Yucatan Hocaba Hocaba 4 0 4

TOTAL I 54 33 87

Fuente : Elaboracion pro pia con la informacion recabada de la colecta 2010.

Forma del fruto : Se tome de un catalogo elaborado con la diversidad de formas que se obtuvieron de las colectas en cuestien. A dichas formas se Ie dieron los valores siguientes :

1. Redonda

2. Semiredonda

3. Ovoide

4. Semiredonda con apice prolongado mediano

5. Semiredonda con apice prolongado grueso

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Figura 4. Forma de fruto de ciruela .

6. Cuadrada con apice prolongado delgado

7. Ovalada con apice muy grueso

8. Cuadrada

9. Flor

10. Asimetrica

Forma de la base del fruto . Se determina visualmente, tomando como referencia un catalogo de formas que se genera de la diversidad de la colecta.

1. Convexa

2. Truncada

3. Cancava

Forma del apice del fruto. AI igual que la forma del fruto y su base, se elabora otro catalogo de formas para el apice, mismo que se obtuvo de la diversidad de la colecta.

1. Polimamiforme

2. Mamiforme

3. Medianamente mamiforme

4. Ligeramente mamiforme

5. Semimamiforme

6. Redondeado

7. Truncado

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Figura 5. Ademas del color rojo caracteristico la ciruela puede ser morada, amarilla, naranja en diferentes formas.

Color del fruto. Para su determinacion se empleo un espectrofotometro de esfera, marca X-Rite, Inc., modele SP62, que reporto el valor directo de L, c Y °h; analizando de uno a cuatro frutos de cada colecta, considerados como una repeticion, donde:

• "L" es un parametro que mide la luminosidad a brillo de la muestra, cuyos valo­res varian desde 0, que representa colores oscuros, hasta 100, que representa colores de maxima brillantes (blanco) .

• "c" es un parametro que mide la pureza del color de la muestra .

• "oh" es un parametro que mide el angulo de tono de la muestra .

Tambien se considero el color que se observo a primera vista, (amarillo, anaranjado, raja y morado) .

Textura del epicarpio . Se determino par media del tacto, considerando la textura lisa a rugosa.

Grosor del epicarpio. Se midio en mm, con un vernier de plastico el grosor de las cascaras de tres frutos de cada colecta.

Sabor. Se determino probando los frutos maduros de cada colecta realizada, dando­les un valor para diferenciar su sa bar:

1. Agrio

46

2. Desabrido

3. Poco acido

4. Agridulce

5. Dulce

Jugosidad. Se determin6 apreciando la jugosidad del fruto maduro de cada colecta al momenta de probarlos, dandoles un valor para distinguirlos:

1. Jugoso

2. Muy jugoso

Grasor del mesocarpio. Se obtuvo al despulpar los frutos y observar la cantidad de pulpa que habfa entre el epicarpio y el endocarpio. En donde:

1. Delgado

2. Medio

3. Grueso

Aroma del fruto. Se determin6 percibiendo el aroma que desprendi6 la muestra de

cada colecta :

o Ninguno

1 Moderado

2 Fuerte

Grados brix. Es el cociente total de sacarosa disuelta en un Ifquido. Se determin6 colocando una got a del fruto maduro en el sensor 6ptico de un refract6metro de mano, obteniendo asf una lectura para la muestra de cada colecta.

Porcentaje de acidez titulable. Se determin6 mediante el metoda analftico propues­to por AOAC 2010. que consiste en licuar 10 g de pulpa del fruto con 50 mL de agua destilada, filtrar la mezcla con una gasa, medir el volumen total de la mezcla en una probeta de 100 mL, tomar una alfcuota con una muestra de 5 mL del juga que pos­teriormente es colocado en un va so de precipitado de 50 mL para despues agregar­Ie tres gotas de fenolftalefna y luego titular con NaOH 0.01 N hasta que vire al color rosa por un minuto y poder tomar la lectura del gasto para finalmente determinar el porcentaje de acidez en base de acido dtrico, con la siguiente f6rmula:

mL gasto de Na OH x N NaOH x Vol. total x 100 x Pmeq acido cftrico % Acidez=

Peso de la muestra x alicuota

Peso del endocarpio (hueso). Se tom6 el peso individual en gramos de 5 endocar­pios, escogidos al azar, con una balanza electronica marca Sartorius de 500 gr.

Ancho y longitud del endocarpio. Se midi6 el ancho y longitud en milfmetros de los endocarpios, que se pesaran de cada colecta, con un vernier de plastico marca Pretul de 155 mm.

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Forma del endocarpio. Se tome de un catalogo elaborado con la diversidad de for­mas que se obtuvieron de las colectas en cuesti6n :

1. Ovoide

2. Semirredonda

3. Redonda

4. Redondaconpun~

5. Asimetrica

6. Cilfndrica con cintura

7. Rectangular

8. Semicuadrada

9. Campana con base redonda

10. Campana con base plana

11. Campana en forma de flor

12. Campana con base concava

Despues de obtener estas caracterfsticas en ellaboratorio para cada muestra de la colecta, se elabor6 una base de datos en SPss con un respectiv~ diccionario para reunir la informaci6n y dar un valor ala categorfa correspondiente a cada una de las va riables comprendidas.

III. RESULTADOS

La diversidad de ciruelas

La diversidad de Spondias purpurea en America tropical fue advertida y documen­tada desde la lIegada de los conquistadores (Estrada, 1989; Cuevas, 1994). En este apartado se presenta un breve panorama de la diversidad de la ciruela mexicana con base en mediciones de algunos atributos morfologicos de frutos correspon­dientes a 87 colectas. Para este proposito, se comentan de manera sucinta algu nas diferencias entre las poblaciones silvestres y cultivadas, con base en algunas ca rac­terfsticas fenotipicas del fruto .

Diferenciaci6n de tipos silvestres y cultivados

EI proposito de este apartado es la comparacion entre poblaciones de ciruela sil­vestres y cultivadas para esbozar la magnitud de la expresion de los sfndromes de domesticacion en el fruto, entre los cuales el gigantismo es uno de los mas promi­nentes (Harlan 1992), como consecuencia de la evolucion bajo domesticacion de esta especie.

Los datos presentados en los cuadros 2 y 3 son informativos de los cambios que se han dado en las poblaciones de ciruela a causa de la domesticacion. Estos cambios se manifiestan en atributos del fruto relacionados con tamafio y forma, asf como caracterfsticas asociadas con su consumo (Miller y Schaal, 2005) .

48

Figura 6. Frutos de ciruela silvestre.

De entre el conjunto de colectas incluidas en este analisis, el tamano del fruto de las poblaciones cultivadas de ciruela mexicana es considerablemente mayor que el de sus contra partes silvestres; es caracterfstico de las poblaciones cultivadas un mayor peso del fruto y endocarpio, as! como mayores dimensiones (largo, ancho y diametro) tanto del fruto como del endocarpio (cuadro 2).

Ademas del tamano de los frutos, a consecuencia de la domesticacion, tambien se han modificado sus atributos relacionados con el consumo. Las poblaciones cultiva­das de ciruela mexicana tienen frutos mas aromaticos y con epicarpio y mesocarpio mas gruesos, 10 que los hace sean mas resistentes ala manipulacion del hombre as! como mas deseables para su consumo, debido a su aroma y mayor proporcion de pulpa por fruto. En adicion a 10 anterior, praducto de la domesticacion ha sido la predominancia de frutos con sabor dulce en las poblaciones domesticadas, 10 que contrasta con la exclusividad de frutos con sabor agrio en las ciruelas silvestres. La presencia de una mayor cantidad de azucares solubles (entre ellos la sacarosa cuyo contenido apraximado es indicado por los grados Brix presentados en el cuadra I), en el mesocarpio de las ciruelas cultivadas hace que estas ademas de ser mas dul­ces sean menDs acidas y tengan un mayor !ndice de madurez.

La seleccion bajo domesticacion ha modificado la forma y color de los frutos, que son atributos esteticos relacionados con el consumo. Si bien tanto en las ciruelas silvestres como en las cultivadas predominan las formas regulares del fruto (frutos ovoides y redondos), la proporcion de este tipo de frutos es mayor en las pobla-

49

Lr1 Cuadra 2. Rango, media, mediana, coeficiente de variaci6n e intervalo de confianza de 14 atributos de frutos de Spondias sp. colectados a en nueve regiones de Mexico.

Silvestre t Cultivada t Variable§

Rango Media Mediana e.V. I.e. (95%) Rango Media p50 c.v. I.e. (95%)

PF 28.6 6.9 5.5 0.64 6.52 - 7.19 54.1 13.4 10.5 0.67 12.88 - 13.96

DEF 29.0 20.5 20.0 0.21 20.14 - 20.80 34.0 25.8 24.0 0.23 25.43 - 26.15

DPF 23.0 25.0 24.0 0.17 24.67 - 25.31 38.0 30.5 30.0 0.23 30.09 - 30.95

L 30.6 43.8 42 .2 0.15 43.25 - 44.29 37.0 42 .9 38.8 0.24 42.26 - 43.49

C 21.1 41.4 40.8 0.12 41.00 - 41.79 43.2 39.6 37.8 0.22 39.07 - 40.13

H 48.1 39.9 35.8 0.30 38.98 - 40.83 59.2 41.3 31.5 0.46 40.12 - 42.42

GE 0.4 0.4 0.4 0.25 0.40-0.41 0.6 0.4 0.4 0.28 0.42 - 0.43

GM 1.0 1.4 1.0 0.35 1.33 - 1.40 2.0 1.9 2.0 0.20 1.87 - 1.91

BRIX 10.8 11.7 11.9 0.19 11.57 - 11.90 12.5 15.5 15.7 0.18 15.30 - 15.64

ATPF 2.5 2.1 2.3 0.35 2.07 - 2.18 1.1 0.6 0.5 0.38 0.56 - 0.58

1M 14.8 6.5 5.0 0.53 6.21 - 6.74 68.1 31.7 31.2 0.43 30.85 - 32.50

PE 1.9 1.3 1.2 0.29 1.26 - 1.32 6.1 2.1 1.6 0.61 2.04 - 2.19

AE 9.6 12.3 11.8 0.17 12.16 - 12.47 16.6 14.2 13.2 0.24 14.04 - 14.44

LE 9.4 18.5 17.8 0.13 18.28 - 18.64 20.4 21.1 20.8 · 0.22 20.85 - 21.40

§ PF= Peso de fruto (g); DEF= Diametro ecuatorial del fruto (mm); DPF= Diametro polar del fruto (mm); 1= Luminosidad; c= Pureza del color; h= Angulo de tone; GE= Grosor del epicarpio (mm); GM= Grasar del mesocarpio (mm); BRIX= Grados Brix; ATPF= Acidez titulable de la pulpa del fruto; IM= fndice de madurez; PE= Peso del endocarpio (g); AE= Ancho del endocarpio (mm); LE= Longitud del endocarpio.

tEl tamaRa de la muestra para las ciruelas silvestres y cultivadas fue de 660 y 1 057 frutos, respectivamente.

ciones silvestres que en las cultivadas (97% y 76% respectivamente). Asimismo, la frecuencia de las diferentes formas de la base y apice del fruto se ha modificado por la acci6n humana : al compararlas con las silvestres, en las ciruelas cultivadas existe una mayor frecuencia de frutos cuya base es truncada (54% y 71% respectivamen­tel y el apice es redondeado (48% y 72% respectivamente). La forma predominante del endocarpio tambien difiere entre silvestres y cultivadas: en las primeras la gran mayorfa de frutos (97%) tienen endocarpio alargado, mientras que en las cultivadas esa proporci6n es sensiblemente menor (75%). La cantidad de juga de los frutos no es diferente entre los arboles silvestres y cultivados.

Otra diferencia morfol6gica del fruto entre ciruelas silvestres y cultivadas reside en la textura del epicarpio (liso 0 rugoso). En las primeras, casi la totalidad de los frutos son lisos (98%) mientras que en el segundo grupo, si bien predominan los frutos lisos (88%), la presencia de frutos rugosos es apreciable (12%).

En 10 que respecta al color del fruto, la diversidad de colo res y la frecuencia de estos son diferentes entre las poblaciones de ciruelas silvestres y cultivadas. En el caso de las primeras predominan los frutos rojos (70%), seguidos de los anaranjados (27%) con una escasa presencia de amarillos (3%); por su parte, en las ciruelas cultivadas si bien predominan los frutos rojos es en menor proporci6n (52%) que en los silves­tres, seguidos por los amarillos, los de color naranja yen menor proporci6n los mo­rados (28%, 11% y 9%), estos ultimos ausentes en los frutos silvestres. (abe hacer

Figura 7. EI exocarpio de variantes cultivadas tiende a ser alargado.

51

notar que los parametros del color del fruto estimados en laboratorio en promedio no difieren entre los dos grupos de poblaciones.

Luego de este breve recuento, basado en algunas caracterfsticas fenotipicas del fru­to, se hace evidente que, como era de esperarse, la domesticacion ha ten ida como consecuencia la modificacion de atributos relacionados con el tamano y can el con­sumo asf como can la estetica de estos frutos (Cuadra 3).

Cuadro 3. Rango, media, mediana y prueba de independencia can chi -cuadrada de tipos de poblacion de ciruela mexicana (silvestre y cultivada) con nueve atributos del fruto de

Spondias sp. colectadas en nueve regiones de Mexico.

Silvestre t Cultivada t Prueba

Varia-de indegendenciao

ble Rango Media Mediana Rango Media Mediana chi2-Pearson v de Cramer

FF 5.0 4.7 5.0 5.0 4.2 5.0 ** 0.307

FBF 1.0 2.5 3.0 2.0 2.7 3.0 ** 0.175

FAF 3.0 3.4 3.0 3.0 3.7 4.0 ** 0.261

CF 2.0 2.7 3.0 3.0 2.4 3.0 ** 0.406

TE 1.0 2.0 2.0 1.0 1.9 2.0 ** -0.189

SPF 3.0 2.1 2.0 4.0 3.5 4.0 ** 0.829

JF 1.0 1.1 1.0 1.0 1.1 1.0 NS 0.016

AM 2.0 0.9 1.0 2.0 1.0 1.0 ** 0.086

FE 2.0 4.9 5.0 4.0 4.4 5.0 ** 0.305

§ FF= Forma del fruto; FBF= Forma de la base del fruto; FAF= Forma del apice del fruto; CF= Color del fruto; TE= Textura del epicarpio; SPF= Sab~r de la pulpa del fruto; JF= Jugosidad del fruto; AM= Aroma del mesocarpio; FE= Forma del endocarpio.

tEl tamafio de la muestra para las ciruelas silvestres y cultivadas fue de 660 y 1 057 frutos, respectivamente .

Dado que la domesticacion -como proceso evolutivo que opera bajo la influencia de las actividades humanas- involucra cambios en la estructura genetica de las po­blaciones sujetas a este proceso (Harlan, 1992) -que para el caso que nos ocupa ha sido bien establecido (Miller y Schaal 2005; Miller y Schaal 2006)- la magnitud de la diversidad de caracterfsticas espedficas, sobre todo aquellas relacionadas con el manejo, sera diferente entre las poblaciones silvestres y las cultivadas, aspecto que sera tratado en el siguiente apartado.

Diversidad de cultivados

Como consecuencia de la domesticacion, la diversidad de las ciruelas mexicanas, se ha modificado en diferentes aspectos. En algunos, como el peso, diametro ecua­torial del fruto y el color del mismo, la diversidad pre-existente en las poblaciones

52

silvestres se ha ampliado en gran magnitud, en concordancia con 10 observado en los frutos de 5. purpurea en otras regiones de Mexico (Ramirez-Hernandez et 01./ 200S; Ruenes-Morales et 01., 2010) Y en otros palses de America Latina (Macia y Barfod, 2000).

La mayor diversidad en el tamano del fruto de las ciruelas cultivadas reside en la mayor frecuencia de frutos grandes: en promedio esos frutos son 94% mas pesados que los de las eiruelas silvestres. Debido a la presencia de frutos mas largos y grue-50S, el range de variaei6n del diametro polar y ecuatorial del fruto de las poblacio­nes domesticadas es mayor que el de las silvestres e incluye el rango de variaci6n de estas ultimas.

En las poblaciones cultivadas el color del fruto tiene mayor variaci6n debido a que la gama de colores es mas amplia e incluye todo el range de variaci6n de las silves­tres. Como puede verse en la figura Se, la mitad superior de las silvestres consiste 5610 en frutos rojos, mientras que en las cultivadas se incluyen rajas y morados.

En otros casas, el incremento de la diversidad debido a la domesticaci6n es muy dra­matico, ya que la reducida diversidad de las silvestres se ha expandido grandemente, como en los casas de la forma y el sabor del fruto. En las silvestres predominan casi de manera absoluta los frutos redondos, mientras que en las cultivadas 5610 la mitad superior eonsiste de este tipo de frutos y la mitad inferior incluye frutos cuya forma varia de asimetrica a redondeada (figura Sd) . En 10 que respecta al sa bar del fruto, en las silvestres practieamente todos los frutos son agrios, aunque hay dulces en baja frecuencia, mientras que en las cultivadas mas de 50% de las poblaciones son frutos dulces con muy escasa frecuencia de acidos (figura Sf).

Sin embargo, en otros casas, como en el grosor del mesocarpio, la diversidad se ha reducido a tal grado que la gran mayorfa de las poblaciones domestieadas tienen frutos con mesoearpio grueso, mientras que en las silvestres existen ademas pobla­ciones con frutos cuyo mesocarpio es delgado (figura Se).

Las tres diferentes dinamicas de la diversidad a que se han hecho referencia ante­riormente se ilustran en las figuras S y 9 para los earacteres fenotfpieos del fruto antes mencionados.

Ademas de evidenciar la diversidad existente en las poblaciones de ciruela mexica­na, con especial enfasis en las diferencias entre silvestres y cultivadas, los resulta­dos aqui expuestos indican que las caracterfsticas del fruto de la ciruela mexicana son importantes para la percepci6n de las earacterfsticas can base a las cuales los agricultores crean y manejan la diversidad, aSI como para la transmisi6n de conocimientos entre agrieultores acerca de cada poblaci6n seleccionada. Estas ca­racterlstieas sobresalientes tambien son utiles para el mantenimiento de la pureza varietal y proveen marcadores para el manejo de los arboles cultivados en funci6n del ambiente, variedades y necesidades de consumo especfficas (Boster, 19S5; Gibson, 2009) .

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Figura 8. Variacion de seis atributos de frutos de Spondios sp. colectados en nueve regiones de Mexico.

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Figura 9. Variaci6n de seis atributos de frutos de Spondias sp. colectados en nueve regiones de Mexico.

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Andanzas y anecdotas con las ciruelas

Los trabajos que dieron como resultado 10 que aquf se presenta han pasado por va­rias viscisitudes que han constituido un reto para los participantes, a la vez que han permitido el enriquecimiento y convivencia con los personajes que tienen relacion con las ciruelas mexicanas. Esto nos ha nutrido de conocimiento y formas de ver la vida, pues nos ubica en concepciones campesinas cuyo resultado concreto, en el caso de las ciruelas, es la domesticacion de la especie y su utilizacion. Dentro de los aspectos sobresalientes podemos mencionar la actividad de los recolectores de ciruela en Morelos, en el sur de Puebla yen el norte de Guerrero, personajes que obtienen el sustento en la epoca mas seca y calurosa del ana a partir de la venta de ciruela de cerro, esa que por sus caracterfsticas y ausencia de manejo hemos Ilamado silvestre. Estos son campesinos sin tierra, que durante anos han practica­do este oficio; conocen los montes y parajes donde se encuentran los arboles, las plantas que producen los mejores frutos, (los carnosos, que son los que prefieren las amas de casa, en los pequenos y huesudos, no tienen interes); tam bien cono­cen la ubicacion de los arboles machos, -aquellos que no dan frutos-, su edad, su fructificacion y hasta los arboles jovenes. Asombra la facilidad con la que se suben a los arboles y la confianza que les tienen, dicen cosas como: " ... este arbol es bueno, no te tira, cuando te apoyas para subirte, el huarache no resbala, y sabes cuando la rama que pisas te aguante, cuando no es asf, el arbol te avisa, tambien es un arbol que no permite que Ie crezcan panales de avispas, ni de 'chopales' ni de 'negras', si acaso las hormigas negras que buscan las frutas tiernas en los calores de marzo a mayo, pero si uno va tempranito, todavfa no las topas a esa hora y cualquiera puede aguantar un piquete de hormiga negra, esas no duelen, a las que hay que tenerles miedo es a las avispas y sobre todo las de 'chopal' de esas hasta te sangra a donde ponen su veneno .... ".

Tambien encontramos expresiones sobre el comportamiento de las ciruelas; para decir que son arboles muy resistentes 0 adaptables, de facil manejo, nos dijeron: "los jocotes, son carne de perro, pegan donde quiera; me gustan por aguantado­res, no necesitan agua, uno no los tiene que andar regando y tampoco poniendole abono, y dan frutos hasta para dejar tirado, son como uno, acostumbrados a la mala vida, son criollitos, pues, de aquf mero". Una de las referencias frecuentes se relaciona con la facilidad para propagarlo y establecer nuevos arboles: "Ia ciruela, es una sinvergLienza, pega donde quiera, no tiene pena".

Tuvimos oportunidad de seguir una historia local que se deriva de una fotografia de empaque de ciruela, localizada en Soledad de Doblado, Veracruz, en un museD muy modesto, a punto de desaparecer, ubicado en la estacion del ferrocarril. Por ese lugar paso el Dr. Emiliano Perez Portila, investigador de la Universidad Autonoma Chapingo, y llama su atencion que en una foto, a orillas del camino, trabajadores se ocuparan de empacar frutos de ciruela de una variedad conocida como Pera, que resultaba extremadamente superior a 10 que se conoce actual mente; realizo un pequeno articulo de difusion y eso sembro la inquietud para visitar la region . En Soledad de Doblado, en nuestra busqueda de la ciruela de la foto, topamos con

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lugarenos que tienen en alta estima el trabajo que la uAch realiza en Veracruz, a traves del Centro Regional Universitario Oriente de Huatusco. Despues de plantear nuestro interes, inmediatamente identificaron el rancho que en otros tiempos fue un vergel en donde se producfan ciruela pera y pico de lora; los duenos en epoca de produccion lIenaban dos furgones de ferrocarril por semana, para ser enviados a la Ciudad de Mexico en donde se comercializaba . De esta manera colectamos dos variedades de ciruela de alta calidad.

Figura 10. La forma dominante en los tipos silvestres es redonda .

luvimos oportunidad de visitar los terrenos del antiguo rancho, donde algunos de los herederos mantienen su parte tal y como la dejo su padre, hace mas de 30 anos, y encontramos aquellos arboles de ciruela, que a pesar de no recibir ningun manejo, todavfa fructifican; eso nos lIeva a apreciar que es una especie que puede sobrevivir sin cultivo, 10 que coincide con 10 encontrado en 10 que fue el campo experimental de la Comision Nacional de Fruticultura, en lamarindo, Puente Na­cional, cerca de la Ciudad de Cardel, Veracruz. A finales de la decada de 1970, el campo fue abandonado por la desaparicion de la Comision, las 100 hectareas de tierra fertil se constituyeron en un botin que a final de cuentas permitio la creacion del ejido San Isidro, (el cual actualmente mantiene una diversidad importante de chicozapote y algunos arboles dispersos de mango). lodos los frutales fueron que­mados 0 arrasados para sembrar cultivos anuales, sin embargo, en la parte cercana al rfo, donde existio el vivero del campo experimental, quedaron abandonados los arboles, ahora dentro de un relicto de selva baja. Ahf, como parte de este tipo de vegetacion y todavfa con la alineacion y densidad de un vivero de reproduccion,

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se encuentran arboles de ciruela de diferentes variedades, a pesar de 30 anos de abandono. En esto Spondias purpurea comparte la capacidad de supervivencia sin presencia del hombre a pesar de que haya sido trasplantada por la mana de los hu­manos, con la pitaya (Stenocereus stellatus), la cual se puede encontrar en antiguos asentamientos humanos.

Figura 11. La colecta de frutos silvestres para consumo es una actividad que realizan algunos campesinos de los estados de Morelos, Guerrero y Puebla.

Ademas de los retos de investigacion, el estudio y sobre todo la colecta de la ci­ruela han representado el contacto con la realidad del campo mexicano. Recorrer nueve regiones del pars, nos ha enfrentado con la violencia e inseguridad, a pesar de las declaraciones gubernamentales. No estan para saberlo, pero salir a campo hoy tiene sus riesgos por la presencia de grupos de la delincuencia organizada. La primera advertencia fue en Ciudad Altamirano, donde ademas de colectar se esta­blece un banco de germoplasma de trabajo, en colaboracion con investigadores del Instituto Tecnologico de Ciudad Altamirano. Ahr, un profesor de origen colombiano de amplia experiencia en campo y contacto regional nos obligo a trabajar bajo sus normas y responsabilidad: de ocho de la manana a cinco de la tarde; despues hay que meterse en el hotel 0 salir de la region para evitar un encuentro desafortunado con la delincuencia. EI vehrculo oficial de Chapingo, no se puede usar en la region,

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y a las comunidades hay que trasladarse en un vehiculo local, de otra manera, se pod ria perder la vida, ademas del vehiculo.

Tambien en Michoacan tuvimos que operar bajo una 16gica parecida, y es que nues­tro viaje de colecta coincidi6 con el asesinato de autoridades municipales en la re­gi6n aguacatera del estado. En esa ocasi6n, en compania del colega Dario Rivera Moctezuma, despues de recorrer la zona lIegamos a Tepalcatepec con la intenci6n de viajar hacia Ixtlan de los Dolores, Jalisco. AI preguntar en el pueblo, por la terra­ceria que une Michoacan con Jalisco, un lugareno bastante preocupado por nuestra seguridad, despues de darnos las senas del camino, nos recomend6 que, por la hora (era n aproximadamente las cinco de la tarde) mejor nos quedaramos en el hotel del pue blo y al dia siguiente hicieramos el recorrido deseado, pues por la tarde y ma­drugada, habia asaltos y muertes en esos caminos, y para el era mejor disfrutar del descanso y por la manana anadirle al trabajo el deleite de los paisaje de la Sierra y del Volcan de Colima, ya casi lIegando a Tecalitlan, la tierra del mariachi. Desco­nozco los dones de convencimiento del lugareno, pero esa noche permanecimos en Tepalcatepec y por la manana recorrimos los magnificos paisajes de la Sierra de Xilotlan de los Dolores y la vista del Volcan de Fuego.

Figu ra 12. Frutos procedentes de Chiapas, puestos a la venta por vendedores ambulantes en ciud ades del centro de Veracruz.

Lo que falta por escribir

En el presente documento se ha conjugado una visi6n integral de los avances en el proyecto de investigaci6n, estructurados con fines de difusi6n. Queda pendiente la

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publicacion de materiales que se derivan del analisis de la informacion obten ida, mismos que se estructuraran en forma de artfculos cientfficos para ser publicados en revistas especializadas; algunos de los temas tienen que ver con las especies de Spondias en Mexico y su distribucion; etnobotanica de Spondias en Mexico; la diversidad de Spondias purpurea en Mexico, entre otros. Tambien else plantea ela­borar documentos de divulgacion para publicarlos como folletos y libros, en los cuales se aborden los siguientes temas relacionados con las ciruelas mexicanas: botanica, cultivo, etnobotanica, descripcion de las especies de ciruelas, historia de los nombres de las ciruelas mexicanas, entre otros.

Figura 13. Foto de frutos en el mercado, Los Reyes, Michoacan.

La necesidad de investigar la diversidad

La diversidad de ciruelas mexicanas es una caracterfstica evidente cuando en la epoca de produccion se hace un recorrido por las zonas productoras; se observa en los huertos familia res, en las plantaciones comerciales, en la parcela donde se han conservado arboles, en el monte donde crecen los tipos silvestres y sabre todo, en los mercados regionales. A simple vista es posible observar cambios de color, tamano y textura, y cuando se prueban se perciben a los diferentes sa bores, consis­tencias, acidez y contenidos de azucares. Esto en conjunto revela la diversidad de ciruelas, que se incrementa cuando se van sumando las de diferentes regiones. A este acercamiento de primera intencion, Ie hace falta informacion mas sistematica y especializada, que nos permita conocer en un primer momenta las especies bo­tanicas y su distribucion, la fenologfa de la planta, en la que habra que incluir doble trabajo ya que, segura mente, es diferente la que tienen los arboles "hembra" y

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Figu ra 14. Las ciruelas son parte de la cultura mexicana, aquf se utilizan para las of rend as del dfa de muertos.

los "machos"; la capacidad de produc­cion, las epocas, en fin, aspectos que contribuyen a conocer la diversidad. En esta labor se requiere el trabajo sistematico de los especialistas, por 10 que deberan participar los biologos, botanicos, etnobotanicos, agrono­mos, f isiologos y economistas.

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Consultas en linea

http://www.aoaciatina.com.av/publicaciones htm.

62

Marfa del Rocio Ruenes Morales1

ETNOBOTANICA DE LOS ABALES (CIRUELA MEXICANA) DE YUCATAN

Las plantas han sido elementos esenciales en el desarrollo de las familias campesi­nas, ya que han cubierto diferentes necesidades biol6gicas y culturales. La palabra abal deriva de la lengua maya y significa ciruelo; diversas variantes de abales co-

Figu ra 1. Rama con flores rojizas de Spondias purpurea en flora cion .

Figura 2. Rama con flores amarillo verdoso y frutos juveniles de Spondias purpurea.

1 Profesora de Manejo Y conse rvaci6n de recursos naturales tropicales. Universidad Aut6noma de Yuca tan .

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rresponden a la especie de Spondias purpurea. Los abales son arboles que pierden sus hojas en la epoca seca del ano, por ello se les llama caducifolios (figuras 1 y 2) .

Sus frutos son comestibles y sue len consumirse frescos, en conserva 0 como condi­mento de algun guiso; ademas, en ocasiones se utilizan algunas partes de la planta como medicina e incluso como alimento para animales (cerdos, conejos y ganado de postel .

La cosecha de los frutos de abales es una actividad economica de suma importancia para las familias campesinas; por medio del uso de estas frutas podemos reconocer costumbres, habitos, creencias y valores de la sociedad maya actual (figura 3).

Debido a su notable importancia, la etnobotanica se nutre del estudio de las sabidurfas tradicionales, tal como 10 senalo Barrera (1979) (figura 4). Pennignton y Sarukhan (1998) senalan que las especies son apreciadas por sus frutos y Sousa (1949) dice que S. mombin es alimento de murcielagos.

Los abales prosperan en una gran variedad de sustratos; se desarrollan en suelos del tipo cha lu'um (cambisol), kankan (Iuvisol), boxlu'um (Ieptosol), tzekel. Toleran condiciones de pH bajo, de 5.0 hasta arriba de 7.0; asf como suelos compactos 0 con escasos nutrientes; presentan un desarrollo de rafces superficiales y no requieren elevadas precipitaciones para su crecimiento. Son tolerantes tanto ala sequfa como a la abundancia de agua (figura 5).

Figura 3. Cosecha de frutos de tuspana aba!.

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Aspectos hist6ricos de su cultivo

Hasta el momento, se descono­cen evidencias arqueologicas de Spondias spp. en la penfnsu­la de Yucatan que permitan pre­cisar la antiguedad del cultivo. Sin embargo, MacNeish (1962), en Tehuacan -en la fase EI Riego (9 600 a 7 000 A.P.)-, identifico abundantes restos de plantas, entre elias semi lias de ciruela (Spondias mombin L., identificada por Smith, 1967), 10 cual sugiere que su aprove­chamiento fue practicado de manera intensiva por los pue­blos que ocuparon esa region. Cabe destacar que los resulta­dos obtenidos por Schreiner (2001), en Mesoamerica -en

, particular en la caleros del norte de las Tierras Bajas-, destaca el uso de especies que almacenan agua, como Spondias mombin, entre otras. Lo anterior permite establecer que la presencia y el manejo de Spondias spp. es an­tiguo en esta region. Se descono­cen evidencias artfsticas refleja­das en los codices 0 en los restos arqueologicos como templos y paredes, entre otros.

Figura 4. Arbol de Chi abal, creciendo en suelo rojo Tze ke'el.

Sin embargo, Reko (citado por Vi­llagomez s/f) senala que en el co­dice Fejervay-Mayer, el arbol del Este, que se encuentra arriba, es un ciruelo (Spondias purpurea), Yagapiaache 0 Yagabiadxi; el ar­bol de cacao (Teobroma cacao) al sur; el arbol del ceibo 0 Yaxche en el norte; el arbol del oeste serra un maguey -posiblemente el "maguey grande" del que no sa­can vin~, tobayee-. Las caracte­rfstica comun de los cuatro arbo­les es su estado de inflorescencia (figura 6).

Evidencias etnohist6ricas de Spondias spp. Existen cronicas de la epoca co­lonial que indican que la cirue­la fue cultivada desde tiempos prehispanicos por los mayas; por ejemplo, 10 que manifesto Landa (1566): "[ ... ] hay ciruelos de mu­chas diferencias y algunas muy sabrosas y sanas [ ... j". En Las re-

V~~ laciones historico-geograjicas de Yucatan (1581) se senala que las

. plantas de ciruelas se encontra-Figura 5. Arbol de chi abal, creciendo en suelo pedre- bit . , t I '

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65

como en cultivo en sus casas: "[ .. . ] hay gran cantidad y diver­sidad de ciruelas de diferente color y gusto de las de Espana, que lIaman ... aval [abal], ... la mejor de elias es la morada que Ilaman ... zabacabal [sabakabal] y otra muy buena que Ilaman yxchiabal [ixchi'a-bal] [ ... J". Cabe destacar que Barcena (1895), en su recopilacion Car­pologia mexicana, presenta una detallada informacion sobre la produccion de S. purpurea (ci­ruela roja y amarilla), S. lutea L. (jobo) y S. mombin L. (ciruela

Figura 6.Primera pagina del c6dice Fejervay-Mayer, amarilla) y menciona localidades donde se muestran los cuatro rumbas del universo. de produccion, as! como el total

anua l y la forma de vender.

En una carta del medico cirujano Roman S. Flores dirigida al director del Field Mu­seum of Natural History en Ch icago, IL -fechada el14 de junio de 1934-, Ie infor­ma que "las plantas conocidas con el nombre de Ciruela de Nicaragua se designan aSI a las ciruelas del pais las rosadas son Spondias purpurea L. y las amarillas Spon­dias mombin L."; da tambien una explicacion de las caracterlsticas del tronco y de la fragilidad de sus ramas, as! como de la forma de propagacion . Y dice: "Hay muchas variedades como vera en las figuras adjuntas. EI numero 1 es la Ciruela de cochino, muy poco apreciada. Numero 2 es la Keken abal, amarilla muy apreciada, el numero 3 es la Kan abal, amarilla muy apreciada, numero 4 Box abal, roja casi negra, muy buena, 5 Kusmin chica las hay verdes y rojas. 6 y 7 Tuxpanas, son grandes muy dulces pero de hueso grueso, Campechana, 9 Ekabal, 10 Chabal, la mas carnasa y muy dulces desde-verde. Todas estas variedades son exoticas de la Peninsula [ .. .]" (figura 7) .

Evidencias IingUisticas de Spondias purpurea

En cuanto a la informacion lingu!stica sobre Spondias purpurea, la estructura de los nombres vernaculos asignados a este grupo de plantas por las diversas culturas de Mexico muestra que la peninsula de Yucatan es una de las regiones donde se con­centra el mayor numero de abales, el cual es un nombre generico para las plantas de Spondias. Para diferenciar entre una y otra variante, se asigna otro nambre; por ejemplo, ke'ken abal, chi abal, xcan abal, entre otros; 10 anterior esta documentado por cronistas de diferentes epocas.

66

u ... « ~ ·H~' .. ~ II~~ . Figu ra 7. Dibujo enviado por el medico cirujano Roman Sabas Flores al Director del Field Museum of Natural History en 1934, proporcionada por Allison Miller en 2002.

Las investigaciones de Sousa-Novelo (1949) y Ruenes et 01., (2010) presentan infor­maci6n de los abales 0 ciruelas que se cultivan en Yucatan; en la que se indican las caracterfsticas mas sobresalientes de los frutos: tamano, color, sabor, usos y mues­tra de los diversos nombres asignados a las variantes de S. purpurea (figura 8).

Figura 8. Diversidad de formas y colores de Spondias purpurea cultivada en Yucatan.

Etnotaxonomfa

Las familias campesinas mayas reconocen a la Spondias purpurea como una unidad taxon6mica abal, que agrupa tres clases de acuerdo con la cosecha: 1~ secas (yax­

kim), 2~ lIuvias, hahal y 3~ finales de Iluvias, keel.

67

Ruenes et al. (2010) presentan la clasificacion etnobiologica de los abales Spondias purpurea en el municipio de Hocaba, Yucatan . Es de tipo utilitario, ya que incluye los usos de los abales. Dos subgrupos de abales han sido reconocidos por los estu­diosos en el area; las que producen frutos comestibles en la epoca seca y las que 10 hacen durante las lIuvias; descarta el ultimo grupo que las familias campesinas reconocen (figura 9).

Generico

ABAL

Spondios

Lexemas

Temporada Color fruto Significado en

castellano

Ek abal (frutos maradas); Ek = estrella

o ~ Keken abal (frutos morados); Keken = hay cochino de monte

~ / Xhuhi abal (frutos morados); Huhi = que viene la semilla del pueblo de Huhi

~ ~ ~ ~ ;':

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Spondias purpurea

~Chi abal (frutos rajas); Chi = pequeno. boca ----oXcusmil abal (frutos rajas) - Campech aba! (frutos anaranjados); que es de Campeche

Xcan aba! (frutos amarillos); Xcan = que es de color amarillo kakab

~ Tuspana aba! (trutos amarillos); Tus = mentira

Xhahal abol (frutos amarillos); Jajal = tiempo de lIuvia

"" Cosecha de junia-julio

~untura aba! (trutos amarillos); Xun= apodo de respeto para hombre 0 mujer

Cosecha agosto- octubre

Variante

Figura 9. Clasificaci6n de acuerdo ala gramatica maya con la nomenclatura botanica de s. purpureo L. Tomado de Ruenes et. 01./ 2010.

Distribucion de los abales en la peninsula de Yucatan

Un sistema de produccion tradicional en la Peninsula de Yucatan es el tancabal, en maya, y solares 0 huertos familiares en castellano; este se caracteriza par el manejo de la diversidad agricola, que constituye la fuente de los alimentos y de la medicina, y es el resultado del trabajo de domesticacion, adaptacion y conserva­cion que han realizado generaciones de familias campesinas desde el inicio de la agricultura -pudo haber sido desde antes de los 3 400 a. C. (Colunga et al., 2003). La diversidad varietal de la ciruela mexicana en la Peninsula de Yucatan 10 constata,

68

va que los abales son uno de los arboles frutales de importancia local V regional que podemos observar en la gran mavorfa de los solares 0 huertos familiares; se cultivan las variantes xiaba = xi abal = chiabal; xcampech = campech oval = campechiana; tuspana oval = tuspana = tuspan; hahal oval = hahal = jajal oval = jajal. En estos huertos se lIegan a encontrar cultivadas entre dos V siete variantes (figura 10).

Pero tambien es importante decir que existen plantaciones de la variante tuspana (Spondias purpurea) en algunas localidades V comisarias de la Peninsula de Yucatan, como son Tenabo, Oxcutzcab V Tekax, entre otras.

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(1 km o 30 60

Figura 10. Distribucion de las variantes de abales en la Peninsula de Yucatan, colecciones de herbaria [FMVZ-UADY, CICY Y MEXU) Y fuentes bibliograticas [Acosta et 01., 1993; Ander­son, 1993; Arias, 1980; Barcena, 1895; Caballero, 1992; Colunga y May, 1992; Flores, 1993 y 1994; Hernandez-X, 1959; Herrera, 1992; Herrera et 01., 1993; Herrera, 1993; Montu­far,1987; Ortega et 01., 1993; Ortega, 1993; Rico-Gray et 01., 1985; Rico-Gray et 01.,1990; Sanabria, 1986; Teran y Rasmussen 1994; Vargas, 1983; Villers et 01., 1981; Xuluc, 1995; Ruenes et 01., 1999 Y 2010).

Usos de Spondias purpurea L.

En cuanto a los usos que tiene esta especie, puede emplearse como alimento, pues­

to que los frutos son comestibles va sea en fresco, en dulce, en guisados 0 en be-

69

bidas. Ademas tienen un uso medicinal para aliviar la dermatitis ocasionada por piquetes de insecta y la reacci6n que produce la varicela.

Forma de preparacion del agua fresca de abal

Se lavan los frutos del abal que se deseen, se tamulan 0 majan (aplastan), se cuela el juga en un pichel 0 jarra, se Ie agrega agua y se Ie puede agregar azucar si se de sea, aunque no es necesaria porque son muy dulces (figura 11).

Forma de preparacion del pipian con abal

Para la elaboraci6n de este guisado, las familias senalaron utilizar la variante jajal aval, pues es la mejor para condimentar el pipian.

Ingredientes: pepita de calabaza (Curcubita pepo), achiote (Bixa orellana), chile seco (Capsicum annuum), ajo (Allium sativum), 21 frutos de jajal abal (Spondias purpurea), frfjol 0 pescado 0 polio 0 asado, de acuerdo con las posibilidades de la familia y sal al gusto.

La pepita se tuesta y se muele con el achiote, el chile seco y la sal, en el molino de mano; la molienda debe realizarse de manera constante para evitar que la pepita -0 semilla de calabaza- se seque y se vuelva diffcil de moler. Se coloca en la can­dela (al fuego) y se Ie agrega agua; se mezcla la pepita con la masa (nixtamal) y se pasa por la coladera; se agrega poco a poco hasta que espese. Se pone en la candela

hasta el primer hervor; se Ie agre­gan los frutos del xhahal abal y se dejan sazonar con frijol, polio asa­do 0 pescado. Posteriormente se separa la grasa que expide la pe­pita y se sirve caliente (figura 12).

Forma de preparaclon del dulce de abal

Se cortan los frutos cuando estan a punto de madurar -sipones-, se lavan y despues se les hacen unos cortes laterales; se dejan remojar con un poco de cal, para que no queden chichosas -es decir, con la resina que contiene el fruto-. Se hace el caramelo con azucar quemada y despues se Ie agregan las ciruelas, pre­

Figura 11. Fruto de Chi abal, para la preparacion de via mente escurridas. Luego de la refresco. cocci6n con el azucar, las ciruelas

70

Figura 12. Elaboracion de pipfan de polio .

los abales como tinte

se tornan de color obscuro (cafe ne­gruzco), 10 que indica que el dulce esta listo.

Almacenamiento de los abales a dulce xculin

Para almacenar los abafes se ponen a hervir (sancochar) los frutos, se escu­rren y se dejan al sol para que se des­hidraten; despues se almacenan en un bolsa de polietileno. Si se quiere pre­parar dulce, se hidratan con agua hir­viendo y posteriormente se les agrega el azucar la cantidad depende del gus­to de cada familia (figura 13).

los abales como forraje

En 10 referente a su uso como planta forrajera, las hojas de cualquier clase de abaf sirven como alimento para co­nejos, venados, cerdos, ganado y bo­rregos, entre otros. Ademas, cuando los frutos caen maduros de la mata se los comen los cerdos (figura 14).

los abales como medicina

Las hojas tambien pueden emplearse en infusi6n para curar cualquier clase de dermatitis (granos producidos por insectos 0 acaros) .

Tambien se ha utilizado la corteza para tenir la fibra 0 zosquif de henequen (Agave Jourcroydes), para la elaboraci6n de artesanias.

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Artemio Cruz Leon1 • Benito Rodriguez Haros2

CULTIVO

Figura 1. Ciruelo silvestre en las cercanlas de Ciudad Altamirano, Guerrero.

La ciruela mexicana es un cultivo que a pesar de su distribucion nacional en mas de 60% de los estados de nuestro pais, cuenta can una superficie cultivada registrada que resulta insignificante, ya que no se encuentra cultivada en plantaciones comer­ciales, sino solo en huertos familia res, bordos y limites de parcelas y potreros, en

1 Profesor de la Maestrfa en Ciencias en Desarrollo Rural Regional. Universidad Autonoma Chapingo. 2 Profesor de la Universidad de Guanajuato.

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donde se cultivan algunos arboles, en los cuales se procura lograr la representatividad de las diferentes variantes de los frutos preferidos por las familias de los cultivadores. Tambien habra que mencionar la limitada vida de anaquel de la fruta y su bajo precio como factores que han propiciado que el jocote sea una fruta de pocas plantaciones y limitado comercio nacional 0 de exportacion. En contraste, el autoconsumo local y regional asociado a la produccion en huertos familia res y parcelas, ademas del co­mercio regional ponen a disposicion de los consumidores una gran variedad de tipos locales que se intercambian y venden en pequena escala y que son un muestrario de la diversidad de la especie. EI cultivo de ciruela mexicana es una actividad intensa pero que no se registra en las estadisticas y por ello no forma parte de los registros nacionales; sin embargo, se encuentra viva y resulta fundamental para la alimenta­cion y las economias locales y ayuda a entender la dina mica del cultivo de especies marginadas (cuadro 2).

Figura 2. Ciruela colorada cultivada en un huerto familiar de la colonia Adolfo Lopez Mateos, Tepalcingo, Morelos.

Con base a los datos estadisticos reportados en diferentes publicaciones, en nuestro pais para el ana 2004 se producia ciruela mexicana en 21 estados, concentrada en Puebla {3 554 hal, Chiapas (2 327 hal y Sinaloa (151O hal, que en conjunto alcanzan una superficie total de 7 391.5 ha, 10 que constituye 61% del total de la superficie

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cosechada en el pars para ese ano. La mayor parte de la superficie contabilizada en este cultivo se encuentra en huertos familia res bajo deficientes condiciones de manejo poscosecha (Cruz, 2006). En los ultimos 23 anos la superficie ocupada por el cultivo de ciruela mexicana tiende a incrementarse, ya que paso de 7 249 ha en 1981, a 11 476 ha en 1994, y para el ana 2004 se registro un total de 12 183 ha. La distribucion y comportamiento de la superficie por estados se registra en el cuadro 1. Si consideramos que la produccion se realiza en pequenos huertos de traspatio, el numero de unidades de produccion beneficiadas con la produccion de ciruela mexicana asciende a un numero aproximado de 50000 familias.

Requerimientos ambientales

La ciruela mexicana, es una planta no totalmente domesticada (Alcorn 1984); en Mexico se Ie encuentra formando parte de la vegetacion natural del bosque tro­pical subcaducifolio y del bosque tropical caducifolio (Rzedowski, 1978) a los que Miranda y Hernandez (1963) lIaman selva alta 0 mediana subcaducifolia y selva baja caducifolia, pues las condiciones ambientales en donde crecen estos tipos de vegetacion las apropiadas para el crecimiento y desarrollo de Spondias. Gonzalez (1991), reconoce a la ciruela mexicana como una planta rustica que se adapta bien a las peores condiciones de suelo y estivales en climas calidos. La temperatura opti­ma para su desarrollo es de 24.5°C, aunque prospera bien en el rango comprendido

Figura 3. Cultivo de ciruela guingur en cercos de parcelas. Ciudad Altamirano, Guerrero.

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entre los 19 y 29° C de temperatura media anual (Calderon 1987). Puede soportar temperaturas bajas par period os cortos de tiempo can una minima extrema de 0° C Y una maxima extrema de 40° C (Simmons, 1972).

Figura 4. La ciruela se adapta a ciimas calidos subhumedos y secas.

Par su comportamiento respecto al fotoperiodo, se trata de una especie de dia largo y Ie favorecen las altas intensidades luminosas, sobre todo en la etapa reproductiva, siempre que no coincidan con temperaturas tan altas que causen la deshidrataci6n de las flores y las yemas florales (Hernandez, 1981); los vientos calientes y secas pueden ser perjudiciales en la etapa reproductiva (Martinez, 1988).

En 10 referente a los requerimientos edMicos, este frutal prospera optimamente en suelos arenosos, pedregosos, calcareos y hasta salinos, y tambien tiene buena respuesta en sue los ricos, profundos y bien drenados, con pH ligeramente acido (Hernandez, 1981).

En la epoca de lIuvias requiere entre 500 y 1 600 mm de precipitacion anual y de cinco a ocho meses de estiaje. Se ha observado que la humedad relativa alta es­timula la etapa vegetativa, pero so porta muy bien, y hasta parece requerir, una temporada de ambiente seco en la fase reproductiva. A 10 anterior se suma que la rusticidad de la ciruela mexicana Ie permite prosperar bien en laderas, faldas de

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Cuadro 1. Superficie y produccion, por entidades federativas de Mexico, de jocotes, jobos 0 cirue las mexicanas (Spondias sp) .

Entidad Ano 1981 *Ano 1994 Ano 2000 Ano 2002 Ano 2004 federativa Super- Produccion Super- Produccion Super- Produccion Super- Produccion Super- Produccion

ficie (Hal (T) ficie (Hal {Tl ficie {Hal (T) ficie {Hal (T) ficie {Hal (T) Aguasca lientes 11 88 4 19.2 4 47 4 38 Baia California Sur 17 49 17 94 17 47 19 38 Campeche 361 1125 Coahuila 1 7 31 99.55 31 184.8 Colima 170 1785 215 1300 182 994 161 16028.5 173 17540.15 Chiapas 600 6000 1547 9360 1167 8193.9 2247 16028.5 2327 17540.15 Chihuahua 66 385 24.5 504.5 10 77 Distrito 42 141.5 42.5 155.4 Federal

Durango 26 91 13.4 186.16 122 610 140.1 287.95 Guerrero 214 1312 798 4682 570 3508.6 577 3428.4 586 3127.5 Hidalgo 90 540 243 1226 226 705 226 605 Jalisco 1324 8947 1069 8900 1029 5236 1032.5 7776.9 992.5 6323.34 Mexico 1205 2427 194 996 453 2366.4 441.5 2240.15 296 2463.1 Michoacan 221 1086 699 5592 360.5 2474.9 360.5 1911 260.5 2449 Morelos 475 4809 145 975 172 1134 219 1672.2 241 2130 Nayarit 289 1643 622 3760 738.38 4454.5 733.88 4071.9 732 3602.2 Nuevo Leon 90.5 438.3 Oaxaca 507 5050 1044 4428 422 1928 172 427 172 388 Puebla 230 1761 3349 12491 3067 12650.2 3154 8322 3554 12874 Queretaro 54 283 San Luis Potosi 7 56 Sinaloa 605 2120 892 1784 1496 3438 1607 2394.9 1510 3078 Sonora 136 236 Veracruz 248 1362 505 4401 923.5 8449.15 840.5 6289.65 880.5 6111.68 Yucatan 500 3118 39 74 50 129.5 51 145.5 51 137.5 Zacatecas 13 65 61 69 70 96.75 71 239 81 518.2 Total en 7249 43735 11476 60441 11,027.78 56450.26 12134.38 54216.25 12183.5 62600.2 el Dais

Fuente: SARH-DGEA (1982), SARH (1995), SAGARPA (2005).

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Cuadro 2. Valor nutricional de ciruela mexicana y comparativo con otras frutas, (datos en 100 gr de porcion comestible) .

Componente Unidad Ciruela mexicana

*Ciruela (Prunus sp) *Albaricoque *Cereza *Durazno *Mango Analisis A Analisis B *Analisis C

Porcion comestible 95% Valor energetico Kcal 0.07 74 52 44 58 39 56 Calorfas 48 cal Humedad Gr 81.7% 77.6 83.7 85.3 82.8 87.5 82.0 Proteinas Gr 0.8% 0.8% 0.7 0.6 0.9 0.9 0.8 0.6 Grasas Gr 2.1% O.4gr 0.2 0.2 0.1 0.4 0.1 0.3 Carbohidratos Gr 13.8% 11.8 gr 19.1 11.9 9.9 12.7 8.7 12.8 Fibra Gr 1.0% 0.5 1.7 1.9 1.9 0.8 1.7 Minerales (cenizas) Gr 0.6% 0.7 0.5 0.7 0.5 0.5 0.5 Almidon Gr 2.47 0 Traza 0 0 0.3 Pectinas Gr 0.22 0.8 1.0 0.4 0.5 Fructosa Gr 2.53 2.1 0.9 5.5 1.3 2.6 Glucosa Gr 2.0 2.7 1.7 6.1 1.2 0.9 Azucares reductores Gr 8.08 Sacarosa Gr 6.59 2.8 5.1 0.2 5.4 9.0 Calcio Mg 26 mg 15 mg 17 14 16 17 8 12 Fosforo Mg 31 mg 42 18 21 20 23 13 Metal (Hierro) Mg 2.2 mg 0.78 mg 0.72 0.4 0.7 0.4 0.5 0.4 Sodio Mg 6 2 2 3 1 5 Potasio Mg 250 221 278 229 205 190 Zinc Ug 20 70 70 1.50 20 100 Caroteno Ug 119 210 1790 84 440 2770 Vitamina A 70 mg Tiamina Ug 1 mg 0.05 mg 84 70 40 40 30 50 Riboflavina uK 1 mg 0.03 mg 40 40 50 40 50 50 Niacina Ug 1 mg 0.9 mg 1.0 0.4 0.8 0.3 0.9 0.7 Vitamina C 1 mg Acido Ascorbico Ug 12.0 mg 49 5 9 15 1010 3939 Aq. Retinol 11.1 mg pH 3.29 Grados Brix 18 Acido cit rico Mg 30 34 400 13 240 296 Acido Malico Mg 110 1220 1000 940 330 74 Acido oxalico Mg 30 12 3 7 0 36 Acido tactico Mg 20 81

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Figura 5. Suelos someros y pedregosos, no son limitante para el crecimiento y fructificaci6n de jocotes.

cerro, planicies, y a corta distancia del mar, siempre en dimas tropicales 0 subtropi­cales subhumedos (Calderon, 1987).

Manejo del cultivo Obtencion de material reproductivo

Dado que las semillas presentan dificultades para germinar 0 no son viables y se pre­fiere producir 10 mas pronto posible, la forma de reproduccion para el establecimien­to de huertas 0 plantas en huertos familia res de Spondias purpurea L. y s. mombin, es por medio de metodos de propagacion vegetativos, para 10 cual se utilizan los meto­dos de estacas, ramas 0 tallo, que dan buenos resultados (Caflizares, 1984).

Para la obtencion de estacas con fines reproductivos se seleccionan los arboles que se desean reproducir, tomando en cuenta las caracterfsticas de la variedad y que presenten ramas para usar como estacas. Las estacas deben tener un diametro ma­yor a 6 cm, ya que a mayor grosor se incrementa el prendimiento y vigor de las nuevas plantas en las fases iniciales (Carbajal, 1981); otros factores que influyen en el porcentaje de prendimiento son epoca del corte de la estaca (se recomienda se realice al final del perfodo de latencia 0 inicio de la temporada vegetativa), la forma

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del corte (realizarlo en forma horizontal en las partes superior e inferior de la estaca con serrucho); el diametro (de 6.1 a 12 cm) y la altura de 150 cm (Olmedo, 1992). Las estacas deberan de cortarse de ramas principales y secundarias de la planta madre; con una edad de un ano y de crecimiento del ano anterior 0 mas viejas (Ca­nizares, 1984); para el periodo de encallado de estacas se recomienda someterlas por quince dras a un sombreado del 100%. Durante el acarreo a la huerta se debe evitar al maximo los danos mecanicos a las estacas; en el caso de que hayan brota­do se recomienda plantarlas cuando los brotes alcancen una altura de 10 a 20 em. Gonzalez (1991) menciona que la rusticidad de la ciruela mexicana permite obtener plantas con gran facilidad, ya que ha observado que los troncos y tallos pueden perdurar en el sistema de roza-tumba-quema conservando su capacidad de propa­gacion por varios anos y eventual mente enraizan y regeneran nueva mente el arbol; en no pocas ocasiones se plantan como poste, Ilegan a rebrotar y se estableeen como un arbol nuevo.

Variedades

Puesto que se trata de un cultivo nativo que ha side domesticado en Mesoame­rica, la ciruela presenta una gran diversidad de varieda­des que se ubican en las di­ferentes regiones de nuestro pars, tal y como se asienta en el apartado de diversidad del presente documento. En una region amplia, en el ni­vel estado 0 region natural, se reconocen variedades regionales propias que su­man hasta un maximo de 12, las cuales se diferencian de otras regiones. Esta situacion se reafirma con trabajos rea­lizados con anterioridad, que documentan diferentes in­vestigaciones realizadas en el pars, en las que se reconoce

Figura 6. Planta nueva de siete meses de edad obtenida la ausencia de una clasifica­a partir de estacas de ramas vigorosas. cion formal de cultivares de

ciruela mexicana, pero por la heterogeneidad de esta especie se distinguen varios tipos que se diferencian eon

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nombres que varian de una region a otra, aludiendo siempre a una a varias carac­terfsticas del fruto. Como ejemplo, en el estado de Veracruz, Hernandez (1981) re­porta a la especie Spondias purpurea L. en cultivo que se conoce local mente como Amarilla Verde, Amarilla Corriente, Amarilla Meona, Amarillo Cabeza de Lora, Ama­rilla Acazonica, Amarilla Media, Anaranjada, Morada, Morada roja, Purpura, Java, y Roja Cornuda.

En Sinaloa, Conafrut (1972) menciona que en las areas de Concordia, Mazatlan, Rosario y Escuinapa, los cultivares se conocen por nombres regionales como Vera­cruz:ana roja, Yoyoma amarilla, La Cora, Coyota Raja, Morada, Llanera, Somonena y La Salmon.

Figura 7. Muestra de 26 tipos de ciruela colectados en Morelos, Guerrero, Veracruz, Michoacan y Yucatan.

Para el estado de Nayarit, Barrios, (1981) menciona que se cultivan varios tipos de Spondias conocidas par sus nombres regionales que no coinciden con los citados en 13 literatura: Ciruela China, Ciruela Mecateca, Ciruela Tecuata, Ciruela Melonci­lIa, Ciruela Jacobina, Ciruela Tiernita, Ciruela Carga, Ciruela Cimarrona Colorada y Ciruela Cimarrona Amarilla.

En el presente trabajo se identificaron 12 variedades en la zona oriente en Morelos, ocho en la region de Huitzuco, Guerrero, 12 en Ciudad Altamirano, Guerrero y Hue­tamo, Michoacan. Adicionalmente los trabajos de Ruenes et al. (2010) reconocen 12 para el municipio de Hocaba, Yucatan; mientras que Terrazas et al., reconocen 12 para la costa de Jalisco.

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Figura 8. Variedad Guingur, tfpica de la Tierra Caliente de MichoaC<3n y Guerrero.

Considerando la epoca de fructificaci6n, Le6n y Shaw (1990) proponen el agrupa­miento de los cultivares de ciruela mexicana en dos grandes grupos; en el primero ubican las "ciruelas de estaci6n seca" que fructifican de febrero a mayo y cuyas caracterfsticas generales incluyen frutos pequenos, de redondos a elipsoidales, de anaranjados a rojo intenso, de 2.5 a 4 cm de largo, lisos, brillantes y con epicarpio amarillo; el mesocarpio es blando, amarillo, suculento y de dulce a ligeramente aci­do. Cuando es verde se asemeja a las aceitunas. La mayorfa crece a bajas altitudes, entre a y 1 200 msnm. En el segundo grupo se incluyen a "ciruelas de estaci6n hu­meda" que fructifican de septiembre a diciembre; estos frutos generalmente son mas grandes, de color amarillo 0 rojo intense 0 con diferentes tonalidades; el epi­carpio es liso y brillante, con protuberancias en el extrema apical correspondientes a la cicatriz del estigma. La mayor parte de estos "clones" crece en altitudes alrede­dor de 1 700 msnm.

Plantacion

La mejor epoca para realizar la plantaci6n es al principio de la temporada de lIuvias, debido a que en este momenta la especie inicia su mayor actividad vegetativa y la nueva planta encontrara las condiciones de humedad propicias para su arraigo y crecimiento, ademas de que en ese momenta tendra toda la epoca de Iluvia para crecer. Se recomienda usar estacas, ramas 0 brotes vegetativos j6venes con callo previamente formados.

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EI sistema de plantacion recomendado es en marco real, con distanciamiento de ocho metros, la profundidad de la cepa es de 30 cm (Carbajal y Castro, 1981); 0 bien marco real de 12 0 14 m, en consideracion de que se trata de una planta de rapido y considerable crecimiento (Canizares, 1984).

Preparacion de cepas

EI terreno se prepara en el mes de abril. Primero se realiza un desmonte 0 deshier­be con herramientas manuales. La vegetacion eliminada se amontona a un costado de la parcela,y podra ser quemada un mes despues (Carbajal y Castro, 1981); en areas previa mente cultivadas se procede al diseno de la plantacion y posteriormen­te a la apertura de cepas (Martinez, 1988).

Figura 9. Cepas para plantar ciruela en la Peninsu la de Yucatan. Despues de remover la tierra, se aplica tierra de monte.

Riego

En Ja lisco, Estado de Mexico, Sinaloa, Puebla, Sonora e Hidalgo se cultiva ciruela mexicana en condiciones de riego, aunque se debe evitar la aplicacion de riegos pesados y frecuentes en los meses de otono invierno ya que pueden afectar la flo­racion (Gonzalez, 1991).

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Nutricion y fertilizacion

Se desconocen los registros, sin embargo Martinez (1988) menciona "los fruticul­tores consideran que la especie no requiere de fertilizantes qu!micos, por ser esta de comportamiento rudimentario y la naturaleza la diseno para desarrollarse en ambientes con condiciones limitantes de humedad y nutrientes minerales, donde las labores culturales no son tan indispensables como en otras especies cultivadas. Martinez (1988) menciona que "es una especie muy adaptada a condiciones de sue-10 limitantes, sin embargo, la respuesta a la fertilizacion ha sido muy prometedora en ensayos preliminares aunque hace falta determinar la formula optima para cada region productora".

Poda

Las podas son una buena practica en el cultivo de la ciruela mexicana, y se deben realizar al final de la epoca de produccion, para favorecer el encallamiento de las heridas durante el periodo de secas y as! no haya pudricion por efecto de las lIuvias. Las mismas ramas podadas se pueden utilizar como material vegetativo para la pro­pagacion, siempre y cuando provengan de ramas sanas (Gonzalez, 1991).

La pod a provoca el engrosamiento general del arbol y favorece el incremento de la produccion siguiente, tanto en cantidad como en calidad comercial. Sin embargo la poda excesiva provoca el nacimiento de chupones que se tardan mucho para producir y cuando 10 hacen se forman aglomeraciones en la punta de las ramas, mientras que las ramas ordinarias producen uniformemente en toda la rama (Gon­zalez, 1991). Canizares, (1984), menciona que la pod a no es del todo necesaria y solo es aconsejable para mantener los arboles dentro de ciertos limites, as! como para eliminar ramas secas 0 lastimadas.

Plagas

Plagas del tallo y troncos

Barrenador del tallo. De acuerdo con Gonzalez (1991) posiblemente se trata de la larva de un coleoptero crisomelido cuyo dana se caracterizan por la aparicion de pequenas erupciones de color rojizo en la corteza por donde penetra la larva del insecto. Tambien las ramas superiores se ven afectadas con lesiones similares cau­sadas por el mismo agente y es frecuente el ataque de este insecta a las estacas de propagacion.

Plagas del follaje

Gusano trozador, gusano medidor, coleopteros de color negro pequenos que se alimentan de las hojas. En este mismo sentido las hormigas arrieras son especial­mente peligrosas ya que pueden causar la defoliacion completa del arbol si no se les

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controla a tiempo, debilitando los arboles por efecto de defoliaci6n extemporanea (Gonzalez, 1991). De acuerdo con el mismo autor, el control de la hormiga arriera se realiza mediante la aplicaci6n de Senogaz en dosis de 100 gr/ hormiguero y la colo­caci6n de plasticos alrededor del tronco limita el ascenso de las hormigas al follaje y resulta una practica bastante efectiva (Martinez, 1988). Para las otras plagas que atacan el follaje se recomienda Nucr6n 60% en dosis de 15 cm3/1 de agua (Gonzalez, 1991).

Alfaro (1993) hace referencia a la existencia de tres especies de escamas (Chloropul­vinaria psidii Maskell, Coccus hesperidium L. y Ceroplastes sp.) que atacan troncos, ra­mas, hojas, flores y frutos de la ciruela mexicana. Cerplastes sp. ataca principalmente tallos tiernos. Los metod os de control sobresalientes fueron dimetoato (1.75 c.c./I), parati6n metilico (1.5 c.c./I) y diazin6n (2 c.c./I).

Plagas del fruto

En apariencia el periodo de fructificaci6n de la ciruela mexicana esquiva el ataque de la mosca mexicana de la fruta, ya que en condiciones de dimas calidos secos la fruc­tificaci6n termina en el mes de junio al mismo tiempo que se establecen las primeras lIuvias, que es cuando aparecen los adultos de mosca y al no beber frutos escapa del ataque; sin embargo, cuando existen condiciones de riego, se adelantan las lIuvias 0

bien se tienen variedades de ciruela que producen en la epoca de lIuvias, sf hay ata-

Figura 10. Ataque severo de ciruelo en floraci6n por escamas.

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que de este insecta en el fruto, par 10 cual se vuelve inservible, a pesar de que en algunas regiones del pais los productores no tienen inconveniente en consumir los frutos dafiados de ciruela, aun con larvas del insecta.

Existen varias especies que se conocen como mosca mexicana de la fruta Anas­trepha spp. entre las que se encuentran A. ludens Loew, A. obliqua Macque rt, A. serpentina Wiedman y A. monbinpracoptans. Es una plaga casi cosmopolita y se reportan ataques a Spondias cultivadas en el oeste de la India, en America, Islas Tri­nidad, La Antigua, San Vicente, Granada a Carriacou de Sudamerica y en las Antillas (Somerijer, 1975). Para su combate, Boscan (1987) recomienda colectar los frutos dafiados y destruirlos con fuego, controlar las malezas, mejorar las practicas cultu­rales y adoptar nuevas tecnologias en el huerta, cosechar 10 mas pronto pos ible y en un periodo reducido de tiempo, asi como usar atrayentes en trampas de captura para esterilizar a los machos. Aparte de estas medidas de limitada efectividad no se conocen otras para este insecta.

Figura 11. Ataque severo de mosca de la fruta, que provoca maduracion prematura y pudricion de frutos.

Otras plagas

Aves de diferentes especies (pishitos, calandrias, copetones, etc.) se alimentan de los insectos polinizadores, de las flares y de los frutos maduros. Se controlan colo-

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cando plasticos que por efecto del viento producen ruido y los repelen, otra forma es espantarlos directamente (Martinez, 1988; Martinez y Pena, 1997).

Figu ra 12. Frutas de ciruela danados par ataque de aves.

Enfermedades

Rott y Frossard (1986), citados por Gonzalez, (1991), reportan la incidencia de en­fe rmedades bacterianas (cancer bacteria no) en Spondias cytherea, caracterizada como lunares necr6ticos aceitosos en las hojas y retonos no lignificados, que se desarrollan despues como canceres letales en las ramas. EI agente causal ha sido diagnosticado como Xanthomonas campestris campestris y Xanthomonas campes­tris mangiferae, que ataca tambien al mango.

Alfa ro (1993) menciona la existencia de un hongo asociado al ataque de escamas (Ch l oropulvinaria psidii Maskell, Coccus hesperidium L. y Ceroplastes sp .) que pro­voca la fumagina en arboles de ciruela mexicana. Dicho hongo es sapr6fito que se alimenta de las mielecillas que produce la escama y puede lIegar a cubrir totalmen­te el follaje, frutos y tallos, interfiriendo principalmente con la funci6n fotosintetica de la planta, 10 cual influye en los rendimientos y en la calidad de los frutos .

Cosecha

Para determinar el momenta de la cosecha se consideran los indices de madurez fisiol6gica, entre ellos cuando el fruto ha adquirido brillo y se empiezan a colorear.

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La cosecha dura de dos a tres semanas (Martinez, 1988). EI periodo de maduraci6n y cosecha en casi todas las regiones de Mexico se inicia ell0 de mayo y termina el 20 de junio; obteniendo 25% los primeros siete dfas, 50% los quince dfas siguientes y 25% los ocho dfas restantes. La vida de anaquel oscila entre los tres y cuatro dfas en promedio (Martinez, 1988). Carbajal (1980) recomienda la aplicaci6n de Ethrel (450 a 500 ppm en 400 I de agua por hectarea) como promotor de la maduraci6n, al considerar que se obtienen beneficios significativos ya que adelantan la madu­raci6n del fruto concentrando un mayor volumen de la cosecha en menos tiempo. La cosecha se realiza de manera manual y con el auxilio de canastillas. Aunque esto dependera del destino de la producci6n (figuras 13, 14 y 15).

Los frutos destinados a ciruela pasa, son aquellos muy maduros que caen al sue-10; se recolectan manualmente y su caracterfstica fundamental es que son de color rojo.

La ciruela negra se recolecta cuando el fruto esta verde, pero sazonado.

La ciruela cristalina se recolecta cuando el fruto empieza a madurar, si la fruta se destina al mercado en fresco.

La madurez debe ser media y debe evitar al maximo golpear los frutos, ya que son muy sensibles y pueden reventarse 0 magullarse.

Figura 13. Cosecha de ciruela can canastilla en Huaquechula, Puebla.

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Figu r a 14. Frutos cosechados "recios", para incrementar los dfas de anaquel y evitar el dana en e l manejo.

Figu ra 15. Frutos puestos a la venta en las cercanias de Cuautla, Morelos.

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Rendimientos

Los rendimientos son variables y van de 1.16 ton/ha que se logran en condiciones de temporal en el estado de Zacatecas hasta 12 ton/ha en el estado de Guerrero bajo condiciones de riego (SARH, 1995).

Perdidas postcosecha

Los frutos de ciruela mexicana son altamente perecederos. Alves et 01. (2000) men­cionan que los estudios realizados en los ultimos anos, reportan un perfodo de vida postcosecha al ambiente del fruto, de solo un dia cuando se cosechan completa­mente maduros y de tres dias cuando se cosechan despues de la perdida del color verde (Diaz-Perez et 01., 1998; Koziol y Macia, 1998).

Transformacion del fruto

Los frutos que no se consumen ni comercializan en fresco una vez cosechados se

Figura 16. Ciruelas preparadas en encurtidos. Chiapa de Corzo, Chiapas.

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deshidratan a nivel casero, uti­lizando diferentes metodos, en donde previa a algun procedi­miento para fortalecer el epi­carpio, se someten al sol por periodos de cuatro a seis dias en zarzos construidos con made­ra, bambu (otates) 0 con canas secas de maiz. Los frutos deshi­dratados son almacenados y se utilizan a 10 largo del ana para la elaboracion de platillos especia­les, tamales 0 atoles.

La literatura reporta cuatro di­ferentes procesos de industria­lizacion en la ciruela mexicana (Martinez, 1988) : 1. ciruela pasa con sal ; 2. ciruela pasa sin sa I; 3. negra dulce, y 4. cristalina dulce, mismos que se utilizan en los lu­gares en los que existen planta­ciones comerciales y par ello los volumenes a procesar son consi­derables.

Ciruela pasa con sal

Se emplean ciruelas de la variedad Coyota. EI proceso se inicia con el escaldado de la fruta con salmuera en ebullicion, a base de 84 kg de sal en 60 litros de agua y dejando la fru­ta expuesta de cinco a diez minutos. EI escaldado se realiza con la finali­dad de abrir los poros de la cubierta exterior de la ciruela y facilitar su se­cado, ya que este tratamiento acele­ra la deshidratacion.

Para escaldar la fruta se realizan a su vez dos procedimientos: el primero consiste en colocar los frutos en ces­tas 0 canastas con capacidad de 30 a 35 kg para despues introducirlas en el cazo 0 tina de la salmuera expues­

Figura 17. Ciruelas cristalizadas, Chiapa de Corzo, ta al fuego. EI segundo consiste en Chia pas. agregar los frutos directamente a la

tina de la salmuera y posteriormente retirarlos con un colador 0 cedazo.

Secado. EI metodo mas popular es el secado al sol, para 10 cual la ciruela se lIeva a las mesas de secado que pueden ser de malla de alambre 0 de carrizo; se extienden los frutos en una sola capa sobre las mesas y se dejan ahf durante tres dfas segun las condiciones de insolacion. EI procedimiento esta asociado a perdidas importan­tes ya que el ataque de hongos y la fermentacion especialmente en dfas nublados es frecuente, aun y cuando se cubran con plasticos, hojas de plantas e incluso bajo techo (figuras 19 y 20).

Empacado. Cuando se comprueba que la fruta esta totalmente seca, se procede al empaque, para el cual se emplean costales de yute con capacidad de 60 a 70 kg, los que posteriormente se almacenan provisionalmente en lugares cubiertos.

Otro metoda de secado consiste en introducir la fruta en camaras de deshidrata­cion . La camara esta construida de ladrillo refractario y tiene acoplado un quema­dor tipo canon para diesel 0 gas LP y un ventilador con capacidad de 26 000 pies cubicos por minuto.

En la secadora la fruta se coloca en rejillas de 100 cm x 100 cm x 5 cm y con capaci­dad para 30 kg de fruta en una sola capa . Las rejillas se van estibando en un carrito a razon de 24 rejillas 10 que equivale a 729 kg de fruta . La temperatura de secado es de 66° C que se regula por medio de termometros. En estas condiciones el tiempo de secado oscila entre 10 y 12 horas. La ciruela seca se empaca en bolsas de po­lieti lena de 1 kg y en costales de yute de entre 60 y 70 kg., que posteriormente se

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Ilevan a lugares protegidos para evitar la descomposicion por efecto de la humedad ambiental. EI rendimiento de ciruela seca varia entre 1 y 4 kg.

Tratamiento en anaquel. Si la ciruela se va almacenar por perfodos de tiempo lar­gos, se recomienda lIevaria a silos de madera y fumigarla con bromuro de metilo, en dosis adecuadas, en esta forma adem as de evitar el ataque de hongos se Ie protege contra el apolillamiento del hueso.

Ciruela pasa sin sal

Para la obtencion de ciruela pasa sin sal, se sigue el mismo procedimiento emplea­do para ciruela pasa con sal, la diferencia es que, en este caso no se emplea sal en el escaldado y el secado se realiza al sol.

Ciruela negra

Para este producto se utiliza ciruela amarilla sazon, a la que primeramente se da un piquete con el fin de romper la cuticula y que pueda penetrar el azucar. Estas ciruelas se introducen en un jarabe preparado con 750 centimetros cubicos de agua mas 1 kg de azucar, suficiente para 100 ciruelas. Bajo estas condiciones el jarabe y las ciruelas se mantienen en ebullicion durante dos 0 mas horas hasta que se haya concentrado y quemado el azucar; posteriormente se dejan secar por cinco 0 seis horas a temperatura ambiente.

Figu ra 20. Ciruela amarilla deshidratada. Huitchila, Morelos.

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Ciruela cristalina

Este producto se obtiene en forma similar a la ciruela negra, solo que se emplea fruta con madurez media y el tiempo de exposicion en el jarabe es un poco menor (Conafrut, 1985).

Comercializaci6n

j En la produccion de huertos y arboles dispersos en parcelas, la porcion de la cosecha que se destina a la comercializacion se realiza con los vecinos, de casa en casa 0 se acude a los merca­dos regionales, donde las mu­jeres 0 los ninos son los encar­gados de la venta del producto. Tambien, esta produccion pue­de Ilegar a comerciantes, que en mayores volumenes las venden en los mercados regionales. Los recolectores de frutos de cirue-

Figura 21. Venta de ciruelas en el mercado de Chiapa la silvestre utilizan el mismo de Corzo, Chiapas.

metoda de comercializacion.

La ciruela obtenida en plantaciones comerciales y que se vende para consumo en fresco, se coloca en los mercados regionales y en la Central de Abastos de la Ciudad de Mexico; la ciruela pasa con 0 sin sal se envfa principalmente al mercado nacional, en su mayor parte ala frontera norte y el resto a Guadalajara, Guanajuato y Monte­rrey asf como a mercados locales y regionales (Conafrut, 1985).

Existen dos mecanismos para la comercializacion, en el primero, el productor ven­de a un intermediario local, que a su vez vende a un intermediario regional que transporta y vende, en la Central de Abasto a un detallista quien pone finalmente el producto al consumidor. En el segundo caso, se trata de producto procesado, aquf el productor vende a la planta deshidratadora que transporta y vende en la Central de Abastos, en donde el detallista adquiere el producto que pone a disposicion del consumidor.

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Figura 22. Venta de frutos de ciruela en el tianguis de Huaquechula, Puebla .

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Pedro Correa Navarro1 • Adolfo Ballesteros Patron2

Artemio Cruz Leon3 • Hector Tovar Soto2

FORMACION DEL BANCO DE GERMOPLASMA DE Spondios

Los trabajos de investigacion en ciruela mexicana han lIevado a la identificacion y colecta de un numero considerable de variantes domesticadas y silvestres de la especie que se cultiva en algunas regiones de Mexico. Acorde con los objetivos de Sinarefi, se ha planteado la necesidad de establecer una colecta nacional de las especies del genera Spondias en nuestro pais, cuyo destino final sera el Banco de Germoplasma que este organismo establezca.

Por las caracterfsticas de propagacion vegetativa de la especies, en sus modalida­des cultivadas y silvestre, y dada la necesidad de caracterizacion y evaluacion de los tipos cultivados, se tome la decision de integrar bancos de trabajo en cuando menDs dos regiones contrastantes, 10 cual permitira establecer el comportamiento biologico y productiv~ de las colectas, con 10 cual se avanzara en su estudio. Pos­teriormente, a partir de los materiales establecidos en estos bancos de trabajo, se obtendran los materiales necesarios para la colecta nacional de Sinarefi.

Con base en 10 anterior ya la ubicacion de los centras de trabajo de los investigado­res que participan en la Red de Ciruela, uno de los bancos se establecio en Temozoc Norte, Merida, Yucatan, bajo la responsabilidad de Pedro Correa, del Centro Regio­nal Universitario Peninsula de Yucatan, de la Universidad Autonoma Chapingo, en tanto que el segundo fue establecido en el predio Itzimbaro, de Ciudad Altamirano, Guerrero, bajo la responsabilidad de Adolfo Ballesteros Patron y Hector Tovar Soto, del Instituto Tecnologico de Ciudad Altamirano.

1 Profesor-investigador del Centro Regional Peninsula de Yucatan. Universidad Aut6noma Chapingo.

2 Profesor dellnstituto Tecnol6gico de Ciudad Altamirano, Guerrero.

3 Profesor-investigador de la Maestrfa en Ciencias en Desarrollo Rural Regional.

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Figura 1. Pedro Correa Navarro, profesor investigador del CRUPY-UACH. Responsable del Banco de trabajo de ciruela en Merida, Yucatan. En la foto inspecciona el material vegetativo de las diferentes colectas que fueron plantadas en el ano 2010.

Figura 2. Adolfo Ballesteros Patron, profesor del Instituto Tecnologico de Ciudad Altami­rano, responsable del banco de ciruela en Ciudad Altamirano. Guerrero. En la foto, se encuentra procesando material vegetativo de Tierra Caliente, Guerrero que sera incor­porado al Banco de ciruela.

Para la colecta de materiales se ha procedido a establecer regiones piloto en don­de se hace un primer acercamiento a nivel comunidad. A partir de la informacion etnobotanica obtenida y algunas caracteristicas de los frutos (10 que se presenta en el capitulo referido a la diversidad de las ciruelas en Mexico), se tiene un primer acercamiento a los tipos de ciruela existentes, con 10 cual se tome la decision de las variantes a colectar y establecer en los bancos de trabajo.

Dado que es una especie que se propaga en forma vegetativa, se considera hi po­teticamente que cada una de las variantes identificadas por los campesinos con el mismo nombre, corresponde al mismo material genetico, es decir se trata de un cion. Por ello, para colectar material de propagacion se toman ramas, de un unico arbol que se considera representativo de la variante que se desea colectar.

De cada arbol colectado se obtienen un minimo de seis ramas, de preferencia de un metro de largo y con un minima de 10 cm de diametro; de elias, tres son enviadas a Merida, Yucatan y las otras tres a Ciudad Altamirano, para su establecimiento.

Para el caso de algunas variantes silvestres, en las cuales es posible encontrar semi­lias viables, se colectaron frutos de los cuales se obtuvieron semillas, mismas que

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han side procesadas para su conservaci6n en el banco de semillas de la Universidad Aut6noma Chapingo.

Establecimiento del material vegetativo

En el caso del banco de Spondios en Merida, se procedi6 a Iimpiar un terreno de media hectarea y se construyeron 180 pocetas, mismas que posteriormente fueron rellenadas con una mezcla de tierra de hojas. Dichas pocetas sirvieron para recibir los esquejes de ciruela colectados.

En el caso de Ciudad Altamirano el espacio destinado para el plantado de las colec­tas, era un terreno de cultivo bajo roturaci6n, por ello para prepararlo con la inten­ci6n de recibir las colectas de ciruela, fue barbechado y posteriormente se la pas6 la rastra con tractor. EI trazado y hoyado se realiz6 momentos antes de establecer los esquejes de las diferentes accesiones.

Los tipos colectados inc1uyen fundamentalmente a los cultivados, aunque existen algunos silvestres que se anexaron por presentar alguna caracterfstica sobresalien­te o En general, se colectaron las variedades senaladas por los productores como diferentes en las regiones de trabajo, mismas que se detallan en el mapa 1. Aquf se puede apreciar que durante la colecta de 2010 se trabaj6 principalmente en el centro y sureste del pafs, en donde se incluyen los estados de Veracruz, Morelos, Guerrero, Michoacan y Yucatan; al interior de estas entidades se reunieron mate­riales de nueve regiones.

En el cuadro 1 se presenta ellistado de materiales, plantados en los dos bancos de germoplasma, con su denominaci6n regional, que muchas veces resulta muy ilus­trativo de las caracterfsticas que posee, asf como las localidades, municipio y estado en donde fueron colectados.

Figu ra 3. Predio en Temozoc Norte, Merida, Yucatan, en donde se estab lecieron las co lectas de cirue la mexicana durante el ano 2010.

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1 Nueva itaiia, Mugica, Michoacan

2 Ciudad Altamirano, Punga rabato, Gro.

3 Huitzuca, Guerrero

4 Tepa lcingo, Morelos

5 Jalcomulco, Veracruz

leyenda 6 Puente Nacional, Veracruz

7 Carrillo Puerto, Veracruz

8 Soledad de Doblado, Veracru z

9 Hoca ba, Yucatan

o Puntos de colecta

Escata 1:8000000

Elabor6: Ing. Angelica Gpe. Gutierrez Jimenez

Mapa 1. Estados y municipios en los que se colect6 material vegetativo para conformar el banco de germoplasma de Spondias, durante 2010.

Cuadra 1. Nombre local de los tipos de Spondias colectados durante el ano 2010 y que fueron plantados en los bancos de germoplasma.

NOMBRE DEL TIPO PROCEDENCIA

1. Ciruela mansa Nueva Italia, Michoacan

2. Ciruela silvestre Nueva Italia, Michoacan

3. Ticuman Col. A.Lopez Mateos, Tepalcingo, Morelos

4. Conservera Zacapalco, Tepalcingo, Morelos

5. Ciruelo macho Huitchila, Tepalcingo, Morelos

6. Ciruela colorada Col. A. Lopez Mateos, Tepalcingo, Morelos

7. Morada Col. A. Lopez Mateos, Tepalcingo, Morelos

8. Silveste de casa Huitchila, Tepalcingo, Morelos

9 . Amarillo Huitchila, Tepalcingo, Morelos

10. Porache Ciudad Altamirano

11. Agrio Cerro Chuperio, Ciudad Altamirano

12. Tempranera Ciudad Altamirano

13 . Amarillo Ciudad Altamirano Ciudad Altamirano

14. Anfs Ciudad Altamirano

15. Malapili Ciudad Altamirano

16. Ciruela nueva Ciudad Altamirano

17. Guingure Ciudad Altamirano

18. Guingure amarilla Ciudad Altamirano

19 . Huautleca Zacapalco, Tepalcingo, Morelos

20. Roja chichota Rancho EI Cristo, Tamarindo, Veracruz

21. Morada 0 jobo Rancho EI Cristo, Tamarindo, Veracruz

22. Amarilla Santa Marfa Tatetla, Veracruz

23 . Pico de lora Rancho La Perla, Soledad Doblado, Ver.

24. Roja pera Rancho La Perla, Soledad Doblado, Ver

25 . Roja conafrut Ejido San Isidro. Puente Nacional, Ver

25. Amarillo conafrut Ejido San Isidro. Puente Nacional, Ver

27. Amarilla Rancho Teteles Rancho Teteles, Soledad Doblado, Ver

28. Roja f10r Santa Marfa Tatetla, Jalcomulco, Ver

29. Roja duraznillo Santa Marfa Tatetla, Jalcomulco, Ver

30. Ciruela teca Santa Marfa Tatetla, Jalcomulco, Ver

31. Hahal Abal Hocaba, Yucatan

32. Huhf Hocaba, Yucatan

33. Campech Abal Hocaba, Yucatan

34. Ek Abal Hocaba, Yucatan

35. Xuntura Hocaba, Yucatan

36. Tuspana Hocaba, Yucatan

37. Chi Abal Hocaba, Yucatan - --_._-

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Figuras 5, 6 Y 7. Aspectos de las accesiones de ciruela establecidas en Ciudad Altamirano, Guerrero, despues de cuatro meses del trasplante.

Las evaluaciones de prendimiento mues­tran que fue superior a 95% posterior al plantado, 10 cual no significo que en este proceso se hayan perdido materiales por falta de enraizado, debido a que se tras­plantaron tres plantas por colecta, sin

embargo, a un ano del establecimiento se tienen perdidas de 6%, ocasionadas par sequfa, comportamiento extremo de tem­peraturas, consumo y dana por vena dos, ataque de plagas y enfermedades. Los materiales que se han perdido seran co­lectados nuevamente en el presente ano.

La experiencia en el manejo de las co­lectas a 10 largo del primer ano ha pro­porcionado informacion para planear el manejo y evitar perdida de materiales por falta de agua y ataque de plagas y enfermedades, por ello, se ha procedido a asegurar la infraestructura para riego de auxilio, control de plagas y enferme­dades, manejo agronomico y calendario para realizar las diferentes actividades necesarias para la conservacion de los materiales.

La coleccion de los tipos de ciruela y su establecimiento como bancos de traba­jo serviran para registrar y caracterizar el comportamiento de las diferentes ac­cesiones, necesaria para establecer ba­ses morfologicas, productivas y de com­portamiento, que a final de cuenta son las manifestaciones de cargas geneticas diferentes, propias de cada una de las variantes establecidas.

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Oralia Velez Coria1 • Artemio Cruz Le6n2

EVIDENCIAS DEL PROCESO DE TRANSFORMACION DE LOS FRUTOS

DE CIRUELA: LAS RECETAS

En el proceso de obtencion de com ida, el conseguir la materia prima, aquello que por su contenido nutricional puede servir como alimento para el hombre, es solo el principio, una fase en el proceso de consumo que puede Ilevar a satisfacer la necesidad alimenticia, pero que hace falta trasformar hasta obtener un produc­to consumible, que recupere la energfa invertida y que proporcione reservas para el cuerpo. En este proceso de trasformacion de alimentos para hacerlos asimila­bles por el organismo, se ha invertido ingenio y obtenido grandes avances, que son trasformaciones fabulosas, que convierten a materias primas, en ocasiones hasta venenosas, en alimentos nutritivos, logrados por revoluciones tecnologicas de la humanidad, obtenidas en la cocina. Es un hecho poco debatido pero evidente que antes de la invencion de la agricultura, el proceso de trasformacion de materiales vegetales y animales, la cocina, tenfa grandes avances, que se fueron logrando a 10 largo de la existencia de la humanidad y que fueron parte de la creacion de la cul­tura en donde el invento de la agricultura, doto de materiales sobresalientes a esta actividad de trasformacion. A los avances en la cocina se asocia el descubrimiento de cambios bioqufmicos que alteran el sab~r, favorecen la digestion y destruyen ve­nenos, mucho de ellos asociados al dominic del fuego, que generaron tecnologfas alimentarias, entre las que se destacan la cocina con brasas, llamas vivas, en hoyos o en chimeneas, y la utilizacion del hervor.

La utilizacion de especies domesticadas, ademas del proceso de trasformacion ne­cesario para convertirlas en un cultivo, se asocia una gran diversidad de uses, que

1 Profesora especialista en artes culinarias.

2 Profesor-Investigador, Maestrfa en Ciencias en Desarrollo Rural Regional de la Universidad Autonoma Chapingo.

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normalmente se pasan por alto en los procesos de investigacion de especies nati­vas, pero que son fundamentales para entender el mismo proceso de domestica­cion, la diversificacion del cultivo y desde luego la cultura de utilizacion de dichos cultivos. EI caso de la ciruela mexicana nos puede servir para ejemplificar este fe­nomeno, pues si bien es una especie frutal de consumo en fresco, presenta una serie de trasformaciones que buscan disminuir la acidez en el fruto, obtener nuevos sa bores, mezclar con otros alimentos para obtener nuevos productos, conservar la fruta y con ello extender el tiempo de cosecha de un frutal que se distingue por poseer un periodo muy corto de cosecha y vida de anaquel. Las recetas que se pre­sentan mas adelante, dan cuenta de los procesos de trasformacion de una materia prima de consumo en fresco 0 bien como producto dentro del grupo de los postres, hacia productos considerados como plato fuerte, botanas, bebidas frescas y licores.

Tanto silvestres como cultivadas, las ciruelas son preparadas para su conservacion . A nivel casero se ponen unos segundos en agua hirviendo, luego se les agrega sal y se deshidratan al sol. Los frutos adquieren un color cafe caracterfstico y se alma­cena por period os prolongados; cada vez que se requieren para la preparacion de tamales 0 atoles son rehidratados y procesados para el producto deseado (figura 2).

La continuidad en el uso de los jocotes silvestres como materia prima para elabora­cion de platillos, puede estar asociada con su epoca de produccion 0 de aprovecha­miento. Entre febrero y mayo, una epoca en que en la selva baja caducifolia, lugar en donde crece esta especie, {(no hay una planta verde para descansar los ojos", por ello los frutos acidos pueden convertirse en un manjar, que proporciona minera les

Figura 1. Ciruela morada, lista para cosechar.

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y vitamina C. Ese sabor agrio que Ie da el nombre, se convierte en un sabor agrada­ble en salsas, platilio, botanas y bebidas refrescantes; tambien la acidez combinada con 10 dulce del fruto, es delicioso para golosinas, aguas frescas y licores (figura 3) .

Algunos ejemplos de estos se presentan en el siguiente recetario.

Figura 2. Proceso de deshidrataci6n de frutos de ciruela .

Figura 3. Ciruela de "cerro" tamaiio ideal para preparar platillos.

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SALSA DE CIRUELA Ingredientes

• 3 jitomates.

• 3 chiles serra nos.

• % de litro de agua .

• 250 gramos de ciruela de cerro, tiernas con hueso, 0 macizas sin hueso.

• 1 rama de epazote.

• Sal al gusto .

Procedimiento

• En el agua se hierven los jitomates y chiles.

• Cuando se encuentran suaves se les agrega las ciruelas, el epazote y se apaga el fuego.

• Se dejan reposar 10 minutos y se muelen en la licuadora 0 molcajete.

• Se colocan en una salsera para acompafiar con los alimentos.

Figura 4. Salsa de ciruela.

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SALSA DE CIRUELA CON CARNE DE PUERCO Ingredientes

• y, kg de espinazo de puerco.

• 3 jitomates.

• 2 chiles serra nos.

• y,. de kg ciruela silvestre tierna, sin rabo.

• Una ramita de epazote.

• Aceite.

• Sal al gusto.

• Cebolla .

• Ajo.

Procedimiento

• 5e cuece la carne con agua con sal, ajo y cebolla.

• Cuando se torne suave, se frfe con su misma grasa.

• Va frita se Ie agrega la salsa, preparada como se indica en la receta de salsa de ciruela.

Figura 5. Salsa de ciruela can carne de puerco.

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ATOLE DE CIRUELA Ingredientes

• X de kg de masa de marz.

• X de kg de eiruela.

• Azuear 0 piloneillo al gusto.

• 2 litros de agua .

Procedimiento

• En un reeipiente se hierve el agua con piloncillo hasta que se disuelva com ple­tamente.

• En un recipiente se disuelve la masa agregandole agua.

• Cuando se eneuentre hirviendo, se Ie agrega la masa disuelta pasandola por un eolador.

• Se Ie baja al fuego, y se mueve continua mente, agregandole azuear.

• AI momenta que el atole se eneuentre coeido, agregarle las eiruelas y dejar eDeer tres minutos.

• Las eiruelas pueden ser con 0 sin hueso.

Figura 6. Atole de ciruela.

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Ingredientes

• Yz kg de eiruela silvestre.

• Agua.

• Sal.

Procedimiento

• Se hierve el agua.

CIRUELAS BOTANERAS

• Cuando suelte el hervor agregar las eiruelas y dejarlas coeer un minuto.

• Dejarlas enfriar.

• Eseurrir y ponerlas en un platen.

• Espolvorear sal al gusto.

• Se eonsumen acompaPiadas con alimentos.

Figura 7. Ciruela botanera .

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ClRUELAS EN DULCE Ingredientes

• 1 kg de ciruela, de cerro 0 de casa, amarilla 0 roja.

• y, kg de azucar.

• 2 litros de agua.

• Una raja de canela.

Procedimiento

• Se pone a hervir el agua con el azucar y la canela.

• AI momento de ebullicion se Ie agregan las ciruelas y se baja el fuego.

• Durante una hora 0 una hora y media se mueve constantemente, con cuidado para no desintegrar los frutos.

Figura 8. Ciruela en dulce.

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TAMALES DE CIRUELA Ingredientes

• Masa preparada para tamales de dulce.

• Dulce de ciruela previamente preparado.

• Hojas de marz.

Procedimiento

• Se prepara la masa para los tamales de manera normal.

• En cada hoja de marz se colocan dos cucharadas de masa y un poco de conserva

• Se envuelve el tamal.

• Se cuecen en una vaporera entre 30 y 40 minutos.

Figura 9. Tamales de ciruela.

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CIRUELA AMARILLA CON RAJAS Ingredientes

• Ciruela amarilla .

• Rajas de chile cuaresmeno asadas y sin semi lias.

• Cebolla partida en rodajas.

• Sal.

• Queso fresco.

Procedimiento

• Acitronar la cebolla.

• Cuando se torne transparente, se agregan las rajas y las ciruelas.

• Se cuecen por cinco minutos.

• Se sirven en un platon adornado con queso.

Figura 10. Ciruela amarilla con rajas.

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AGUA DE CIRUELA Ingredientes

• 3 litros de agua.

• Azucar al gusto.

• Ciruela madura (roja 0 amarilla).

Procedimiento

• En recipiente separado y con las manos, se deshacen las ciruelas hasta que se encuentren separados los componentes del fruto.

• Se endulza el agua.

• Se agrega la ciruela, pasandola por un colador.

• Se Ie pone hielo al gusto.

Figura 11. Agua de ciruela .

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SALSA DE CIRUELA AMARILLA Ingredientes

• Ciruela amarilla madura de casa.

• Chiles serranos.

• Sal.

• Agua.

Procedimiento

• Se hierven los chiles con sal.

• Cuando se suavizan los chiles se Ie agregan las ciruelas dejando hervir tres mi­nutos mas.

• En el molcajete se muelen los ingredientes, sin moler el hueso de la ciruela que se deja en la salsa.

Figura 12. Salsa de ciruela amarilla.

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Ingredientes

• 2 kg de jobos maduros.

• 2 litros de agua mineral.

• 5 litros de agua natural.

• llitro de alcohol de cana.

• 1 kg de azucar.

Procedimiento

TORO DE JOBO

• Se disuelve el azucar en el agua.

• Se pone al fuego.

• Se Ie agrega el agua mineral.

• AI momenta de hervir, se Ie agregan el alcohol y los frutos de jobo.

• Se deja enfriar y se pone en un envase de vidrio.

• Se reposa en un lugar fresco.

• Se consume como digestivo aunque en cantidades mayo res puede convertirse en una bebida embriagante.

• Debe conservarse en refrigeracion.

Figura 13. Licor de jobo (Toro de jobol .

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