Post on 19-Sep-2018
1992 13 de junio 2017
XXV Aniversario de la declaración de
Venerable de nuestro Padre Fundador,
Luis Amigó y Ferrer
2
Celebración Eucarística
Con la participación de todos los miembros del MLA:
Zagales, Juvam, Laicos. Con los Laicos que comparten con nosotras la misión. Con el personal de nuestras obras. Bienhechores, Familia, Amigos, Vecinos.
INVITACION
J U N I O 1 3
XXV Aniversario de la declaración de Venerable de nuestro Padre
Fundador,
Luis Amigó y Ferrer
Por Juan Pablo II
3
MONICION DE ENTRADA:
Hoy hace “25 años”, la Iglesia declaró “Venerable” a nuestro Padre Fundador, Luis
Amigó y Ferrer, reconociéndolo como un “gigante de la vida espiritual, modelo y prototipo de
religiosos, sacerdotes, obispos y fundadores” y resaltando “que la vida del Siervo de Dios… fue un
progresar constante en el camino de la perfección, de ahí su singular perseverancia en el ejercicio
de las virtudes”. (Congregación para las de Causas de los Santos, Decreto sobre la Canonización
del Siervo de Dios Luis Amigó Ferrer).
Con la solemnidad de esta Eucaristía, se da apertura en nuestras dos Congregaciones y en
toda la Familia Amigoniana, al “Año Jubilar”. Tiempo de gracia, al que nos abrimos a la
bondad infinita del Señor, para reavivar el don de nuestra vocación (cf. 2Tim 1, 6), lo que nos
permitirá dar brillo a la espiritualidad franciscano-amigoniana, recibida como herencia de nuestro
Venerable Padre Fundador.
“El fondo de su ser era la paz”. Toda la Familia Amigoniana está de fiesta. Este año
“Bendito”, aunaremos esfuerzos, programamos, proyectamos, caminaremos juntos y desde la
espiritualidad y carisma saldremos al encuentro del otro…, de muchos… con la actitud del Buen
Pastor, que sabe salir oportunamente al encuentro del otro con corazón y entrañas de misericordia.
Ese era Luis Amigó.
Como Familia Amigoniana, nos unimos en la Celebración del Banquete Eucarístico, con el
gozo de sabernos hermanos y hermanas y, con la certeza de que el Señor sale a nuestro
encuentro para bendecirnos y acompañarnos durante este “Año Jubilar”.
Canto de entrada: Somos una gran familia (mp3)
Acto penitencial: Después de cada presentación cantar e l estribillo: De
nosotros piedad Señor
Mimo: En este momento te quiero pedir perdón Señor por las veces que
hemos sido indiferentes y no solidarios, con las personas que en medio de
sus necesidades materiales de una manera creativa buscan ganar el
sustento de su familia.
4
Payaso: Te pido perdón Señor por las veces que no te reconocemos en la voz de otras personas,
que viven felices y alegres y encuentran de nuestra parte un gesto poco amable rompiendo así la
hermosa cadena de la felicidad.
Bailarina: Te pedimos perdón Señor por las veces que no comprendemos
que todos somos una nota musical en la partitura de la creación y que con
nuestro esfuerzo diario podemos hacer de nuestra existencia una linda
melodía para todos
Ecologista: Te pido perdón Señor por las veces en las que maltratamos
o destruimos un ser de la creación, cuando no reciclo, cuando gasto sin
medida, agua, luz, cuando ensucio el medio ambiente, y no coloco en
práctica las sugerencias para salvar la vida del planeta.
Joven: Te pido perdón Señor por las veces que reniego del
llamado que me has hecho a existir, por las veces que no acepto
el maravilloso regalo de mi familia, por tantas veces que no
reconozco las hermosas oportunidades que la vida a diario
me regala.
Liturgia de la Palabra:
Entronización de la Palabra: Algunas jóvenes y/o
Hermanas entronizan la palabra danzando por todo el centro de la capilla hasta dejar el leccionario
en el ambón, acompañadas de la luz.
Lectura de la segunda carta del apóstol San Pablo a los Corintios (1,18-22):
¡Dios me es testigo! La palabra que os dirigimos no fue primero «sí» y luego «no».
Cristo Jesús, el Hijo de Dios, el que Silvano, Timoteo y yo os hemos anunciado, no fue primero «sí»
y luego «no»; en él todo se ha convertido en un «sí»; en él todas las promesas han recibido un «sí».
Y por él podemos responder: «Amén» a Dios, para gloria suya. Dios es quien nos confirma en
Cristo a nosotros junto con vosotros. Él nos ha ungido, él nos ha sellado, y ha puesto en nuestros
corazones, como prenda suya, el Espíritu. Palabra de Dios
5
Salmo118
Respondemos: Haz brillar, Señor, tu rostro sobre tu siervo
Tus preceptos son admirables, por eso los guarda mi alma. R/. La explicación de tus palabras ilumina, da inteligencia a los ignorantes. R/. Abro la boca y respiro, ansiando tus mandamientos. R/. Vuélvete a mí y ten misericordia, como es tu norma con los que aman tu nombre. R/. Asegura mis pasos con tu promesa, que ninguna maldad me domine. R/. Haz brillar tu rostro sobre tu siervo, enséñame tus leyes. R/.
Aleluya: Busca primero el reino de Dios y toda su justicia, y todo lo demás se os dará, por
añadidura. Aleluya, aleluya, aleluya…
Monición al Evangelio
En el evangelio de hoy nos anima a regalar vida, a ser para el otro, a entregar esperanza y
alegría, a dar aroma allí donde estamos. La invitación es a ser sal de la tierra y luz del mundo. La
sal no existe para sí, sino para dar sabor. La luz no existe para sí, sino para iluminar el camino. La
comunidad no existe para sí, sino para servir y dar razón del amor que Él nos tiene.
Lectura: santo evangelio según san Mateo (5,13-18):
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Vosotros sois la sal de la tierra. Pero si la sal
se vuelve sosa, ¿con qué la salarán? No sirve más que para tirarla fuera y que la pise la gente.
Vosotros sois la luz del mundo. No se puede ocultar una ciudad puesta en lo alto de un monte.
Tampoco se enciende una lámpara para meterla debajo del celemín, sino para ponerla en el
candelero y que alumbre a todos los de casa. Alumbre así vuestra luz a los hombres, para que
vean vuestras buenas obras y den gloria a vuestro Padre que está en el cielo.» Palabra del
Señor
Peticiones:
Agradeciendo al Señor todos los dones que de su bondad hemos recibido, pidámosle que
siga extendiendo sobre nuestra familia Amigoniana su mano protectora y presentémosle nuestras
súplicas confiadas.
Por intercesión de Luis Amigó, escúchanos Señor
Te pedimos Padre Eterno por el Papa Francisco, los obispos y sacerdotes del mundo, para que fieles a la misión que han recibido, no agoten esfuerzos en la ardua tarea de guiar al pueblo de Dios y adoctrinarlo en la fe.
6
Por los Hermanos y Hermanas Terciarias Capuchinas, quienes celebran el XXV aniversario de la Venerabilidad de Luis Amigó, para que asistidos por su espíritu y carisma sigan anunciando el Reino con la actitud del Buen Pastor.
Por todos los destinatarios de nuestra misión para que asumamos los valores emanados del carisma y de la espiritualidad, viviendo con gozo el amor, la misericordia y el perdón
Por cada una de nuestras familias para que, como dice el Papa Francisco, prevalezca en ellas la cercanía, la convivencia, el amor y el perdón porque una familia sana y misericordiosa puede ir transformando a la sociedad como constructora del bien común.
Ofrendas:
DANZA DE PRESENTACION DE OFENDAS: música
instrumental
Presentación del cuadro de nuestro Venerable Padre: Esta imagen representa la espiritualidad de Luis Amigó, quien como buen hijo de Francisco de Asís, encarnó las actitudes del Buen Pastor, teniendo a Cristo misericordioso y redentor como referente de su vida.
Joven: En la vida de este joven entregamos todos nuestros jóvenes y en ellos el amor desbordante de Luis Amigó por la juventud, su porción preferencial; quienes lo movieron a compasión para ofrendar su vida en servicio del Reino
Presentación del Pan y del Vino: A través del pan y del vino queremos presentar nuestros dones ante el altar del Señor, y así evidenciar los frutos cosechados desde el carisma del Venerable Luis Amigó y Ferrer, quien con amor y compasión se entregó a los más pobres y necesitados. Que su vida y su obra, sea reconocida por la Iglesia universal.
ORACION FINAL:
¡Oh Dios, que hiciste de tu Venerable Padre Luis Amigó, un modelo de virtudes
cristianas y un servidor de la humanidad doliente, te rogamos nos concedas, por su intercesión,
la gracia que te pedimos y, además, la de que, para tu gloria y bien de la Santa Iglesia, sea
elevado al honor de los altares.
Así te lo pedimos, por Jesucristo, tu Hijo, que contigo vive y reina por los siglos de los
siglos. Amén.