Post on 18-Jul-2022
TEMAS DE ACTUALIDAD
Te comparto algunas ideas y puntos de vista, sobre
temas actuales; en su mayoría, están tomados de mis
artículos, cuyo índice puedes consultar en “Cápsulas
ADEF”. En todas las opiniones e ideas que comparto,
hago la aclaración que, al ser sólo mis puntos de vista -
argumentados y apoyados en bibliografía- no
pretenden sin embargo ser la última verdad, pues en un
marco de respeto a las ideas y puntos de vista de todos,
las mejores conclusiones que se obtengan sobre cada
tema, son las que el lector genere, después de leer
nuestra información, de informarse quizá en otras
fuentes y generar, en el marco de sus valores y creencias
personales, sus propias ideas concluyentes.
Dicho esto, a continuación, te comparto mis ensayos
sobre algunos temas de actualidad. En su momento,
iremos incorporando otros. Me puedes solicitar el pdf de
cualquier ensayo, por mail, a jorge@jorgeoriza-adef.com .
Sobre el estrés y la inteligencia emocional -para regularlo. Jorge A. Oriza Vargas © 473-2021
Desde hace años, en todos los ambientes de convivencia social, desde el ambiente de la familia
hasta los ambientes laborales, se viene hablando de la importancia de controlar el estrés,
porque afecta nuestro equilibrio emocional y hace, incluso, daño a nuestra salud. Daniel
Goleman1 escribió desde hace más de dos décadas, sobre el estrés y cómo, el proceso de
generación de catecolaminas que se producen en exceso por el estrés -particularmente el
cortisol- ocasionan diversos desequilibrios biológicos, en el sistema cardiovascular, en el
sistema inmunológico o en el sistema digestivo. Es decir, afectan nuestra salud.
Por eso, es un tema que abordamos cuando hablamos de la conveniencia de ser
emocionalmente inteligentes; hace algunos meses, escribí sobre el estrés laboral2, por ser un
mal que comúnmente nos afecta a la mayoría de las personas en nuestros trabajos. Pero hoy
retomamos el tema, porque nuestra actualidad lo demanda, si vemos por ejemplo, la
complejidad que a nivel mundial ha generado la pandemia (el COVID); afectando las
economías, la estabilidad social, política y muchas otras cosas, en la mayoría de países. Las
familias, los trabajadores, los políticos, los maestros, tienen la necesidad de trabajar en
circunstancia más estresantes que las de hace años.
Así, algunas ideas, para intentar aclarar estas cosas y favorecer la reflexión de los lectores:
• El estrés se puede comprender mejor, si lo analizamos desde la psicología. Apoyándonos en
una definición autorizada, podemos decir que “el estrés es un proceso psicológico que se
origina por una exigencia a nuestro organismo, frente a la cual éste no tiene recursos para
dar una respuesta adecuada, activando un mecanismo de emergencia, consistente en una
activación psicofisiológica que permite (al organismo) recoger más y mejor información,
procesarla e interpretarla más rápida y eficientemente y así permitir actuar de una manera
más adecuada ante esa demanda”3.
La palabra estrés, se deriva del inglés “stress” (tensión o fatiga). Se suele denominar distrés,
al estrés con características negativas, es decir, el estrés común, que nos afecta y por lo
general provoca daños a nuestra salud; y eustrés, al que no tiene consecuencias negativas,
sino por el contrario, es la activación producida como mecanismo que favorece la actividad
motivada y el desempeño eficaz.
• Recientemente, vimos un reportaje en el que conocidos científicos y líderes, de formación
budista4, presentaron argumentos actuales, diría yo vigentes, con relación al tema del estrés
1 Goleman Daniel, La Inteligencia Emocional, Editorial Vergara, 1995. 2 Son temas tratados en diversas fuentes y en normas actuales; por ejemplo, la NOM-035-STPS-2018, se relaciona con las
consecuencias del estrés laboral en los ambientes organizacionales, así como las implicaciones de este factor en las responsabilidades
de las empresas. El tema lo abordé por primera vez, en la Cápsula ADEF No. 7 del 2009, cuyo título es precisamente El estrés y la
salud. Posteriormente en las cápsulas ADEF 450 y 451 del 2019. 3 Palmero, Fernández, Abascal, Martínez y Cholis; Psicología de la motivación y la emoción, Editorial Mc Graw Hill, Madrid, 2002.
P.424. mencionado en mi cápsula ADEF 7, de hace 12 años. 4 Pueden buscarlo en Netflix (el maestro es Mathie Rickard), el título presentado como documental es: El estrés y la felicidad.
y la felicidad; porque como se infiere, el estrés limita nuestras posibilidades de ser felices.
Retomo algunas ideas. A) Congruente con la definición que dí, el estrés se forma porque la
dinámica de nuestra mente, no procesa o tiene brechas, entre lo que hacemos -nuestras
expectativas- o estamos haciendo, vs lo que aspiramos o debemos hacer. Esas brechas,
dinámicas, en tiempo real, generan tensiones emocionales, ansiedad, temores -al no cumplir
esas expectativas- activando los mecanismos de defensa del sistema nervioso (y como
decíamos, los procesos biológicos de autodefensa), que están programados para situaciones
de urgencia, pero no para todos los momentos del día. B) Todo lo que nos pasa, es temporal
y mucho de ello, tiene que pasar (queramos o no); por eso deberíamos preocuparnos menos
por esas cosas; dejar que lo que tiene que pasar pase; buscando un equilibrio en nuestra
mente (eso sería sabiduría, creo así se implicó), desde una autocompasión, que es un valor
interno a desarrollar. Pero también, ocupando nuestro tiempo más, hacia el amor, hacia la
compasión hacia otros; eso equilibra el tiempo que ocupa nuestra mente, apartando,
distrayendo nuestro ego y nuestros pensamientos, de las cosas temporales que nos pasan;
pues lo ocuparíamos dirigiendo la mente hacia el amor altruista, hacia la compasión.
• Cultivar, desarrollar estrategias personales, para desarrollar esas cualidades interiores, de
reflexión personal, tiene que ver antes que todo, creo yo, con nuestra inteligencia emocional
y con una de sus principales componentes, el autodominio. La inteligencia emocional, se
relaciona en primer lugar con esas fortalezas internas, como la reflexión de nuestros estados
internos, el autoconocimiento; para favorecer el autodominio, que nos ayuda a regular los
temores y la ansiedad cotidiana, así como los estados emotivos prolongados (como el miedo,
el rencor, el enojo prolongado), que también acaban originando estrés en la gran mayoría
de los casos.
• No olvidar que, si no tomamos decisiones al respecto, corremos el riesgo de desarrollar
diversos padecimientos sobre los cuales existe, por cierto, en la actualidad, mucha
información en relación con su origen y consecuencias. Nos referimos por ejemplo a la
disminución de la efectividad del sistema inmunológico o a la hipertensión (y a la mayoría
de padecimientos cardiovasculares); a la colitis nerviosa, las úlceras, las migrañas y muchas
otras. Dice el Dr. Don Colbert5 una vez que explica estas relaciones de causa y efecto en la
salud; dice entonces que para aprender a “apagar” nuestro estrés, necesitamos identificar
las emociones subyacentes que lo generan, las cuales en mucho se “han quedado” en
nosotros conforme a nuestra percepción de las cosas, a lo que creemos de ellas y no
necesariamente a la relación directa o real de los eventos con nosotros.
Como podemos ver, es importante hacer algo, a tiempo, pues las consecuencias pueden ser
muy adversas. Por ello, mi recomendación final, es crecer, esforzarse, en desarrollar más
inteligencia para el control y regulación de nuestras emociones, y buscar una congruencia
importante con valores fundamentales, como el amor y la compasión, como el respeto y la
tolerancia. Capacitarse entonces en temas como la inteligencia emocional, es ahora más
5 Colbert Don, Emociones que matan, Editorial Grupo Nelson, 2006. P.33 y siguientes
que nunca indispensable. Ponemos a su disposición recursos bibliográficos para mejorar
en factores de comportamiento, de relación humana, de inteligencia emocional y social6
-con enfoque ético- en ambientes organizacionales, educativos y familiares.
Cualquier duda o comentario, me reitero a sus órdenes. Hasta la próxima. Jaov (Oct.2021)
Cualquier comentario u opinión, se agradece de antemano y se puede recibir en mi mail: jorge@jorgeoriza-adef.com NOTA: Este artículo puede ser compartido, con cualquier persona interesada en el tema, siempre y cuando se mencione la referencia de su
autor, y no sea para fines de lucro. El autor se reserva todos los derechos sobre sus artículos, conforme a las leyes vigentes. Todas las Cápsulas de ADEF, tienen registro de derechos de autor vigente.
SITIO WEB: www.jorgeoriza-adef.com
6 Nuestros libros y artículos, les ofrecen información diversa, para crecer en inteligencia emocional, y evitar el estrés laboral:
www.iema-oriza.com y www.etrillas.mx .
Los 10 pasos para tu desarrollo socioemocional
Jorge A. Oriza Vargas © 469-2020
En este artículo, te voy a compartir, de manera resumida, los diez pasos que facilitarán
tu desarrollo socioemocional, hoy tan necesario para enfrentar los retos que nos
presenta el complejo mundo contemporáneo. Son pasos, antes que otra cosa, porque el
desarrollo socioemocional es un camino largo, complejo y seguramente, deberás dar
muchos pasos más; pero si tienes cuidado de crecer en las cualidades que te propongo
en estos diez pasos, seguro tu vereda será más transitable.
Los pasos que hoy comparto, están dedicados de manera especial a los docentes, porque
el ambiente educativo demanda hoy como nunca, maestros con un desarrollo
psicoafectivo integral, como el que nosotros hemos propuesto en nuestro enfoque ético
de la inteligencia emocional7. Sin embargo, son para el desarrollo socioemocional de
cualquier individuo.
Desde el enfoque de la inteligencia emocional que he propuesto, relacionado con un
comportamiento coherente con valores fundamentales, consideramos -en relaciones de
causa y efecto- los elementos fundamentales que se relacionan o parten de estos
atributos, para darle integralidad al crecimiento socioemocional de los individuos. Así,
les detallo a continuación, los diez pasos concretos, específicos, que les sugiero recorrer
para su desarrollo socioemocional.
1. El primer paso, contigo mismo. Sigue el mandato de los filósofos griegos desde
hace cientos de años: conócete a ti mismo. El autoconocimiento, es el paso básico,
es el primero y te invita a repasar tus características personales; por ejemplo, los
factores genéticos que definen tanto tus fortalezas personales (cualidades), como
tus debilidades (defectos, limitaciones personales). Es necesario tener claridad en
nuestras propias tendencias de reacción emocional (las que caracterizan a nuestro
propio temperamento: sanguíneo, melancólico, flemático o colérico)8. En cada tipo
de temperamento, son diferentes las formas en que reacciona cada persona, en
factores como: la susceptibilidad de reacción, la intensidad o la frecuencia con la
que se producen sus reacciones y su tiempo de duración; así también, las
emociones y los sentimientos dominantes, frecuentes, recurrentes.
Conocernos bien, nos permite en primer lugar, potenciar nuestras fortalezas y cuidar
nuestras debilidades y limitaciones, superándolas en lo posible. Y también, ser
7 Este concepto se desarrolla con amplitud en nuestro libro: La Inteligencia Emocional en la Responsabilidad Docente (Trillas, México, 2019). P.98 8 Ver el concepto de temperamento, p.e. en mi libro citado, p.82
conscientes de los principales factores causales de nuestras respuestas emocionales,
según nuestra circunstancia y contexto, además de los factores inherentes a nuestra
personalidad. Ser conscientes de las cosas que nos generan emociones y sentimientos
negativos, nos ayudará a evitarlos con anticipación, según las características de nuestro
temperamento.
2. El segundo paso: se consciente de todas tus reacciones emocionales. Es
el paso que complementa al primero; es ser conscientes también de las reacciones
emocionales, en el momento que se producen, en el hoy y ahora, en este momento
o cuando se presentan; según nuestra circunstancia personal. Ya sea por influencia
del medio, de otras personas, o desde mis pensamientos y diálogos internos;
genero emociones y sentimientos que necesito identificar, situacionalmente, en el
hoy, en el ahora, lo que en este momento vivo y siento y en mi día a día; qué
pienso y porqué lo siento; cómo interpretan mis creencias a mi realidad y las
emociones y sentimientos que despiertan en mí. Saberlo, es indispensable para
tener la posibilidad del dominio personal
3. Trata de alcanzar el dominio personal. De los dos pasos anteriores, puedes
derivar la posibilidad de generar tus propios mecanismos de autoregulación; del
control que necesitas desarrollar para dominar tus estados emocionales negativos
y para propiciar estados emocionales positivos9. Necesitamos adquirir estrategias,
actitudes, hábitos, habilidades, para regular de manera sistemática todas nuestras
tendencias emocionales negativas y las situacionales, del hoy y el ahora.10 Separa
las que puedes “apagar” o desconectar contundentemente, de las que necesitas
regular sistemáticamente (en las que no puedes cambiar los factores causales).
Pero esmérate en crecer en tu dominio personal.
4. Vive motivado. Es necesario identificar tus principales fuentes, personales, de
motivación; lo que te mueve y te apasiona; si son necesidades de afecto, de
seguridad en ti mismo, de trascendencia o son motivos racionales, por objetivos y
metas retadoras; lo que te genera expectativas que tu valoras mucho. Esto tiene
que ver mucho con el autoconocimiento que te propuse en el punto 1. Estar en el
día a día, motivado, te da seguridad y confianza en todo lo que emprendas. Si eres
maestro (o eres padre de familia, o jefe) y necesitas motivar a otros, primero
motívate a ti mismo.
5. Se comprensivo. Haz tuyo el valor de la comprensión, como paso elemental de
la convivencia, de la relación con tus semejantes. Si te esmeras en ser
comprensivo, podrás desarrollar la habilidad empática, la cual se da, si primero
9 Cómo generar pensamientos positivos Cápsula 461-2020 10 Te sugiero leer sobre las estrategias de regulación emocional en mi anterior cápsula ADEF 44 del 2010 (también la 105 y 253)
asumes actitudes comprensivas. En relación de causa y efecto, primero es creer
en la comprensión; luego escuchar, después entender y al final, ponerte en los
zapatos del otro.
6. Regula tu empatía. No siempre conviene engancharse con las emociones y
sentimientos de otros y menos, de personas lejanas a nosotros, que pueden estar
generando enojos y temores perjudiciales para nuestro equilibrio emocional. Esto,
ya ha sido definido por algunos autores como ecpatía11, es decir, lo contrario de
la empatía; consiste en tratar de no sentir lo que otro siente, excluirnos de manera
consciente de los sentimientos negativos inducidos por otros. Autorregular así
nuestra empatía y poner estos límites, también se conoce como “empatía
selectiva”12, concepto que se refiere a la aptitud que nos permite establecer un
“distanciamiento psicológico”, un adecuado manejo del contagio emocional y de
los sentimientos inducidos por otros, o desde el ambiente.
7. Se coherente con los valores éticos que has hecho tuyos. Es decir,
esmérate en ser congruente con tus valores personales. Valores fundamentales
como el respeto, la responsabilidad, el amor o por ejemplo, la puntualidad y el
orden, demandan buenos hábitos, interés, coherencia, entre lo que dices y lo que
haces. Pero sí se puede, si también das el siguiente paso.
8. Se paciente, prudente y persistente. Estas son para mi las tres “p” de la
inteligencia emocional13; la paciencia, ser relaciona con controlar nuestra
velocidad para actuar o responder ante situaciones diversas y con saber esperar,
para obtener diversos bienes, metas, resultados. La prudencia tiene que ver con
la sensatez, con la moderación y la cautela14; implica pensar antes de actuar,
pensar antes de hablar y como dice la definición, ser cauteloso con nuestras
acciones. Y finalmente la persistencia tiene que ver con la constancia de
nuestros esfuerzos, hasta lograr nuestros objetivos. Se suele decir, el que
persevera alcanza, y perseverar es la otra forma de observar la actitud del
persistente.
9. Esmérate en comunicarte de manera efectiva. Esto implica que te asegures
de que los mensajes que transmites, tengan un propósito claro y sean bien
recibidos; escucha la retroalimentación, escucha activa y empáticamente, cuida
que tus mensajes verbales y no verbales sean congruentes. Busca desarrollar tus
habilidades como comunicador, en la comunicación oral y escrita. Aprende a
11 La ecpatia, la definimos en nuestra anterior cápsula 313; Puedes ver p.e.: http://www.josecarlosbermejo.es/articulos/empatia-y-ecpatia ; http://forum-
psicologos.blogspot.mx/2013/05/que-es-la-ecpatia.html, o también: https://www.psicoactiva.com/blog/la-ecpatia-empatia-vs-ecpatia/ Te sugiero leer mi artículo:
cápsula ADEF 455 Feb 2020 12 Ver por ejemplo a: Rita Arosemena, Empatía selectiva, P. -19/04/2017; publicado por: https://www.psyciencia.com/2017/19/cuando-demasiado-empatico-se-
convierte-problema/ 13 Ver estas “p”s en mi Cápsula ADEF 59, del 2011 14 Real Academia Española.. Ver: http://buscon.rae.es/draeI/SrvltConsulta?TIPO_BUS=3&LEMA=prudencia
dialogar, a lograr acuerdos, a negociar. Estas habilidades de comunicación, surgen
de la práctica, del entrenamiento y la experiencia.
10. Mejora la convivencia con tus semejantes. Empezando por tus
familiares y amigos, esmérate en tener buenas relaciones, respetuosas, tolerantes,
llenas de afecto. Crece en inteligencia social, busca siempre dejar puertas abiertas
en todas tus relaciones interpersonales; aprende a trabajar en equipo, a colaborar
con otros, a generar ambientes de confianza; desarrolla al máximo tus habilidades
sociales.
Por supuesto hay mucho más que decir para mejorar tu desarrollo socioemocional y las
habilidades que puede implicar; sin embargo, te sugiero procurarte momentos de
reflexión15, para dar estos pasos de manera práctica en tu vida cotidiana. Hasta la
próxima.
JAOV’
15 El concepto de autorreflexión, que se compone de la partícula auto, que significa sí mismo y del término reflexión que tiene que ver con el latín tardío reflexio, que
significa volver atrás. Ver mi cápsula ADEF 449 sobre este tema.
La psicología positiva y la inteligencia emocional Jorge A. Oriza Vargas © 461-2020
Hoy en día, parece conveniente o más bien necesario, contrarrestar los efectos negativos del importante flujo de información que recibimos cotidianamente, desde los muy
diversos sistemas de comunicación con los que interactuamos todos los días; redes sociales, medios públicos de radio o de TV, periódicos y nuestra conexión a internet, ya sea en nuestros dispositivos personales o equipos de cómputo. Desde todos estos artefactos tecnológicos del medio, recibimos cada día, una gran cantidad de mensajes y “videos” que consumen una parte importante de nuestro tiempo y de nuestra atención, con diversos contenidos noticiosos o simplemente informativos -los cuales en su
mayoría, no comunican contenidos éticos, no cuentan con sustento profesional, académico o bibliográfico y en ellos abundan, por cierto, las llamadas fake news. En general, todos estos contenidos generan en nuestra mente y pensamientos, diversos procesos emocionales, cargados de temor, de angustia, de enojo, tristeza y sobre todo, nos generan estrés y estados de ánimo negativos. Estos procesos emocionales cotidianos, desequilibran además, nuestro sistema inmunológico y limitan nuestra
concentración en el trabajo, nos hacen improductivos; en la familia, no se diga, enrarecen el ambiente de convivencia cotidiano.
Es en este contexto, que les propongo propiciar momentos de reflexión, sobre temas que se relacionan con favorecer el equilibrio en nuestros procesos emocionales; hemos insistido, en que actualmente, crecer en inteligencia emocional, es una necesidad imperiosa.
Diversos artículos hemos escrito sobre el tema16 y hoy más que nunca, creo que son temas vigentes, para defendernos del complejo ambiente social y para buscar nuestro equilibrio emocional.
Por ello, hoy me propongo compartirles algunas ideas que corresponden a la hoy llamada psicología positiva17, a partir de un libro muy interesante, que he estado leyendo en estos días; si bien no es su edición muy reciente, su contenido es más que vigente, pues el autor es uno de los autores clásicos sobre este tema. Me refiero a Martin Seligman y el título de su libro es “La auténtica felicidad” 18. Es probable que para muchas personas hoy podría no ser fácil pensar en ser felices, sin embargo, hay en los contenidos del libro
16 Por ejemplo, nuestra anterior cápsula ADEF 461 sobre pensamientos positivos; también puedes leer sobre estos temas en nuestros
libros, publicados por Editorial Trillas, los cuales están a tu disposición en www.etrillas.mx; 17 Una referencia conceptual muy a la mano: La Psicología Positiva se centra en descubrir y potenciar las fortalezas y virtudes personales con el
objetivo de lograr la estabilidad y armonía en todas las facetas de nuestra vida. Estrechamente vinculada a la misma, la Inteligencia Emocional ha
despertado un gran interés dentro de la investigación psicológica.
Recuperado de: https://www.researchgate.net/publication/301778623_Psicologia_Positiva_e_Inteligencia_Emocional_en_Educacion
18 Martin E. P. Seligman: La auténtica felicidad; Penguin Random House, México, 2018; primera edición del autor, en 2002.
muy diversas ideas, interesantes, que considero pueden ser de utilidad para con ellas, incorporar en nuestra vida recursos prácticos que favorezcan nuestro equilibrio emocional y que nos ayuden a crecer, por supuesto, en nuestra inteligencia emocional.
Ser felices, o sentirse felices, depende según el autor, de varios factores; para empezar, factores fijos, de nuestra propia personalidad. Otros factores o variables, circunstanciales, del momento, del ambiente y de las condiciones en las que vivimos
cada uno de nosotros; y finalmente, propone un tercer grupo de factores, que dependen de nuestra voluntad, de lo que nosotros podamos hacer conscientemente para generar emociones positivas y a partir de ello, sentir momentos de felicidad.
Como puede verse, ser felices depende de muchas cosas; además de ser situacional, es multifactorial; pero si por ejemplo, revisamos brevemente los últimos factores, los que dependen de cada uno de nosotros y solo atañen a nuestra propia voluntad, podríamos
esforzarnos en orientar nuestros pensamientos hacia tres enfoques o visiones principales que propone el autor: una, viendo o proyectando la mente hacia el pasado; menciona que ahí podemos encontrar experiencias vividas, que nos pueden evocar satisfacción, complacencia, gratitud, orgullo o la serenidad. Otro enfoque, viendo hacia el futuro, para generar expectativas positivas, que favorezcan sentimientos de optimismo, de esperanza o de confianza. Finalmente, viendo o más bien, viviendo las experiencias en el presente,
pero buscando proactivamente pensamientos y situaciones que nos ayuden a encontrar alegría, tranquilidad, entusiasmo, euforia, placer y fluidez.
En este último enfoque, el que centra nuestros pensamientos en el aquí, en el hoy y en el ahora, menciona por ejemplo a los placeres y a las gratificaciones19. Para ello, nos aporta la siguiente clasificación de los placeres: los corporales, en los cuales nuestros sentidos, pueden generar de manera natural, biológica, emociones positivas; como las
que experimentamos al tocar o al saborear, al oler, mover el cuerpo o también al ver o escuchar cosas diversas desde nuestros sentidos (incluye en este grupo a la reacción orgásmica). Por otra parte, hay otro tipo de placeres; estos son los que denomina placeres superiores, porque requieren más de recursos cognitivos, de nuestra inteligencia. Estos, pueden clasificarse según su intensidad; por ejemplo, el bienestar, la armonía la contemplación, el relajamiento, son de baja intensidad; otros, son de
intensidad moderada, como por ejemplo, el regocijo, la alegría, el gozo, el buen humor, el entusiasmo, la diversión; y finalmente ubica a los que son de intensidad elevada, como es el caso de la euforia, el goce, el júbilo, la excitación, la hilaridad.
La atención, mejora las posibilidades de experimentar placeres superiores y la felicidad transitoria; menciona en este sentido al mindfulnes (atención plena) y a la meditación trascendental, como posibilidades de atención consciente de la experiencia presente20.
Seguramente hay mucho más que analizar, reflexionar y en su caso, debatir, sobre estas posibilidades de generación de emociones positivas, en las circunstancias personales de
19 Op. cit, Seligman, p.161 (todos los conceptos en cursiva, son textualmente tomados del libro). 20 Op. cit. p. 162 y 168
cada quién, para encontrar espacios de felicidad, sin apartarnos de una conducta ética. Nosotros incorporamos solo un muy breve resumen; sin embargo, lo que si es muy coincidente con lo que venimos comentando en nuestros artículos, es considerar a la atención plena21 y a la meditación, a la contemplación, como elementos que favorecen la generación de emociones positivas y espacios de felicidad, como él dice, transitoria, pero que contrarrestan las emociones negativas, la ira o el temor guardados, acumulados.
Esto, por supuesto tiene que ver con nuestra inteligencia emocional, porque nos lleva a la autoregulación de nuestras emociones negativas y favorece como vimos, la generación de emociones positivas, sentimientos positivos y estados de ánimo positivos22; nos permite concentrarnos en factores de automotivación y nos facilita generar esperanza y optimismo ante situaciones complicadas y emociones y
sentimientos negativos que prevalezcan en la mente.
Así, recuerde, también desde la psicología positiva es recomendable regular y controlar nuestras emociones y sentimientos negativos; y para ello, es conveniente practicar ejercicios de respiración profunda y de atención plena.
Ojalá y me comparta su punto de vista; nuestra sociedad necesita lecturas que fomenten valores y mentalidades positivas. Hasta la próxima.
21 En nuestra anterior cápsula ADEF 461 lo tratamos 22 Cada concepto, emociones, sentimientos y estados de ánimo, tienen sus propias definiciones, no son exactamente lo mismo. Lo
pueden leer en mis libros; p.e. La Inteligencia Emocional en la Responsabilidad Docente, Trillas México 2019, p.83 y 87
El maestro y su responsabilidad social Jorge A. Oriza Vargas © 435-2019
Hoy en día, hablar de temas relacionados con el magisterio, es de actualidad y sobre
todo, implica muchos puntos de vista y apreciaciones sobre la problemática en la que
viven los docentes, que para nosotros siempre han sido, son y serán, los actores
educativos que mayor influencia tienen en la educación y cultura de todos nosotros; por
ello, siempre inicio mis reflexiones sobre temas educativos, con mi más profundo
agradecimiento a todos los buenos maestros que han influido para nuestro bien, en
nuestras vidas.
Dicho esto, les propongo en este artículo analizar la importancia que hoy en día tiene la
posibilidad de que los maestros e instituciones educativas, puedan reflexionar sobre
temas relacionados con las responsabilidades docentes23, dentro de las cuales quiero en
esta ocasión destacar, la que considero es su responsabilidad social. Y es importante
hacerlo, porque estoy convencido que en nuestro país –y en muchos otros países-
atravesamos por una importante crisis moral24 que afecta en los muy diversos ámbitos
de interacción en nuestras relaciones humanas. Es crisis moral, porque se ha perdido en
muchos individuos, el piso moral sobre lo que es bueno o malo, y como efecto de ello,
en sus conductas muestran recurrentemente muchos actos inmorales, ya sea porque
todos lo hacen, o porque se ha vuelto costumbre, o solo por prejuicios ideológicos o
políticos.
Revertir gradualmente esta crisis moral, sólo se logrará en el largo plazo, desde la
educación. Y no hay otra forma, más que desde la educación; destacando la educación
en valores fundamentales, en donde por ejemplo, el respeto a nuestros semejantes y la
tolerancia hacia nuestras posibles diferencias, sean prioridades educativas.
Es una educación que por supuesto debería darse en el hogar, pero que necesariamente
se debe apoyar –por los muchos casos de hogares en crisis- en la educación
escolarizada. Y es por ello, que el profesional de la educación y las mismas instituciones
y organizaciones educativas, del estado y particulares, adquieren ahora una mayor
importancia social, y por ello deberían reflexionar sobre cual es ahora, en estas
complejas circunstancias, su papel en la sociedad; y en ese contexto, cuál es su
responsabilidad social.
23 Oriza Vargas Jorge A. LA Inteligencia Emocional en la Responsabilidad Docente, TRILLAS, México, 2019. 24 Te sugiero leer mi artículo así titulado: La crisis moral y el docente. Cápsula ADEF 421 del 2018.
La Responsabilidad Social se ha definido por ejemplo, en el ámbito organizacional25,
como “… la seria consideración del impacto que tienen en la sociedad, sus diversas
acciones”; otro concepto, definido como Sensibilidad social se refiere a “La capacidad
de una empresa, para establecer una relación entre sus acciones y políticas con las
condiciones sociales de su entorno, en forma mutuamente benéfica, para ella misma y
para la sociedad.” Estos conceptos, tomados de libros de administración aún vigentes,
aplican hoy más que nunca a todas las empresas, pero de manera especial, a las
instituciones y organizaciones educativas, que participan en la educación de los
ciudadanos de la sociedad.
Y es en este mismo contexto, que creo ahora se ubica ahora la responsabilidad social
del docente. Si la vemos de manera más específica, ésta tiene que ver con su interés y
compromiso para contribuir voluntariamente a la construcción de una sociedad más
justa, más ética, mediante la mejor educación de sus alumnos, y mediante la influencia
que directamente pueda tener en los ambientes educativos y sociales en los que
participe. Y conviene que para ello tenga en cuenta, que “…la responsabilidad social
puede estar comprendida por acciones negativas y positivas, es decir, las primeras se
refieren a abstenerse de actuar y las segundas a actuar26.
Por lo antes comentado, hemos propuesto desde hace algunos años a los maestros, esforzarse en ser percibidos como líderes27, lo cual es conveniente si tomamos en cuenta que dos de los importantes atributos del liderazgo, la influencia y la persuasión, son elementos básicos del proceso de enseñanza; y que la influencia se puede lograr de manera contundente, cuando el maestro asume la responsabilidad de ser modelo de comportamiento hacia sus alumnos.
Para ello, el maestro deberá crecer en inteligencia emocional, puesto que esto le permite
entre otras cosas, lograr el dominio personal y tener la necesaria empatía, para primero,
asumir una conducta coherente con valores fundamentales, y segundo, para influir y
persuadir a sus alumnos en los cotidianos procesos de enseñanza aprendizaje28.
Les comparto así, maestros, esta respetuosa reflexión, con mi agradecimiento y saludos;
esperando que en estas líneas encuentren áreas de oportunidad para la reflexión y
también para que obtengan sus propias conclusiones sobre estos temas.
Jaov
25 Tomado de Koontz y Weihrich, Administración, Mc.Graw Hill, México 1997, dato obtenido a partir de una encuesta entre 439
ejecutivos, en donde el 68% de ellos coincidieron en estas definiciones. Existen por supuesto, ediciones más recientes de este clásico
de la Administración. 26 Tomado/recuperado de: https://www.significados.com/responsabilidad-social/ 27 Tema que propuse desde el año 2013, en mi artículo (Cápsula ADEF) 174: “Debe el maestro ser un líder” 28 Tema tratado con amplitud en: Op. cit La Inteligencia emocional en la responsabilidad docente.
El efecto de las redes sociales en nuestras relaciones
Jorge A. Oriza Vargas © 379-2017
Hoy en día, se ha hecho normal observar en la mayoría de los lugares públicos y también
en la conducción de los autos, o también en muchos hogares, a muchísimas personas
con sus “teléfonos inteligentes” (Smart phones); platicando, “chateando”, escuchando
música, abstraídos de la realidad, sin escuchar otra cosa o a alguien que les pudiera
hablar o advertir de algo en ese momento, o sin ser conscientes de que su distracción
les pueda ocasionar –lo que sucede con frecuencia- algún problema.
El uso generalizado de estos aparatos, responde entre otras cosas a su innegable
utilidad; además de ser teléfonos portátiles, nos permiten comunicación en tiempo real
con muchas personas al mismo tiempo; nos permiten distraernos, informarnos y muchas
otras cosas que nos presentan en sus múltiples “Apps”29. Con todo lo que nos ofrecen,
llenan nuestro tiempo libre, o interfieren en nuestras actividades, pero de manera
importante, conviene subrayar que llenan también algunos espacios psicológicos, como
los propiciados por la soledad, la inseguridad personal, la falta de afecto, de autoestima,
etc. De ahí que su uso cotidiano, se ha vuelto habitual y necesario para muchísimas
personas.
Y por ser ya algo tan importante en nuestras vidas, por haberse convertido en una
necesidad contemporánea, es importante reflexionar más que en sus ventajas, que son
evidentes, en algunas desventajas y problemas que nos pueden estar causando sin
darnos cuenta; les comparto algunas ideas al respecto.
a) Uno de los principales problemas que nos causa su uso desmedido, es que en muchos
casos, se convierte en un elemento de distracción (en el sentido de descuido), con
relación a nuestras actividades cotidianas o en las interacciones que tenemos con otras
personas. Si nos hemos acostumbrado a utilizarlo en todo momento, es evidente que
esas distracciones nos causen problemas, ya sea nuestras relaciones con las demás
personas, como en los resultados, o la eficacia de las actividades que estemos
haciendo en nuestro día a día; y las estadísticas dicen, que se generan muchos
accidentes, cuando se usa al mismo tiempo que se conduce un auto.
b) Las relaciones humanas, sobre todo las buenas relaciones con nuestros semejantes,
son altamente dependientes de procesos de comunicación interpersonal, la cual es
29 Muchas de esas Apps, son inducidas por agentes de la sociedad de consumo, orientadas a propiciar precisamente diversos hábitos de
consumo en los “clientes” cautivos en su Smartphone.
factor causal de la calidad de la relación; por eso, esa comunicación, sobre todo con
las personas cercanas a nosotros, debe ser efectiva30 y personal, cara a cara de
preferencia, para lograr sus propósitos. No podemos comunicarnos bien con los
demás, en las interacciones personales (familiares, amigos, p.e.), si al mismo tiempo
estamos distraídos con nuestro teléfono inteligente; o si pensamos que comunicarnos
con los demás utilizando preferentemente este medio, es la mejor forma de
comunicarnos, porque es actual, es moderna. La comunicación que estos dispositivos
nos ofrecen no puede compararse en nada con la comunicación interpersonal cara a
cara.
c) Llevar varios, o la mayoría, de los procesos de comunicación con otras personas, desde
un teléfono inteligente, o desde las redes sociales en nuestra computadora personal,
puede afectar nuestras relaciones interpersonales por diversas razones. Revisemos,
por ejemplo, la comunicación interpersonal, cara a cara; una de sus ventajas es que
la retroalimentación que nos da nuestro receptor, se observa de manera directa (en
tiempo real); y además, observamos esa retroalimentación en los mensajes verbales
y en los no verbales, como las expresiones, el tono de la voz, la mirada, la posición del
cuerpo, etc. En general, los especialistas en comunicación nos dicen que cerca del
65% del significado de todos los mensajes, se transmite en nuestra comunicación no
verbal31. En cambio, en la comunicación escrita, a través de una red social, solo se
leen mensajes verbales escritos, los cuales no muestran más que una parte limitada
de lo que se quiere comunicar.
d) Los mensajes escritos, por lo general, pueden entonces no mostrar el verdadero
significado o propósito de lo que realmente se quiere comunicar; podemos escribir:
estoy bien, estoy contento, aunque nuestra realidad sea diferente, y nuestro rostro
pueda estar mostrando enojo o tristeza en ese momento. Aunque acompañemos
nuestros mensajes de imágenes, que por lo general copiamos de alguien más y no
necesariamente se apegan al objetivo, circunstancias e ideas de nuestros mensajes,
podemos estar comunicándonos con poca calidad y utilidad para nuestra relación con
los demás. Pero además, los mensajes escritos desde las redes sociales, se prestan a
extorsiones y otro tipo de delitos, que los receptores no pueden identificar con
antelación, es decir, se prestan al engaño, por las razones expuestas.
e) Por supuesto las facilidades de comunicación de un teléfono inteligente son muchas;
ayuda mucho en comunicaciones urgentes, prioritarias, y con personas lejos de
nuestro alcance directo, inmediato, o de nuestra localidad. El problema de su utilidad,
es que nos convierte en dependientes del medio de comunicación; se generan hábitos
30 Ver el concepto de comunicación efectiva en: Oriza Vargas Jorge, Relaciones Humanas, Editorial Trillas México, 2014, p.138 31 Eileen Mc. Entee, Comunicación Oral, Mc. Graw Hill 1996. p.184. Ver cápsula ADEF 66, sobre la comunicación kinésica.
adictivos y gradualmente se van generando problemas en nuestras relaciones con los
demás; las personas adictas a este medio, son ahora más antisociales, pues no
conviven con otras personas, están absorbidos en su teléfono inteligente o en las redes
sociales de su computadora. Esos hábitos conducen a que, todo lo que muchas gentes
quieren decir o hacer, ahora solo lo expresen o lo comuniquen a través de WhatsApp
o Twitter o Facebook; ahí van pensamientos, decisiones, noticias, emociones
(emoticons), pero sobre todo, las redes están cargadas además, de contenidos de
autoayuda, de banalidades, de cadenas religiosas o políticas, fakenews y mensajes no
firmados, mal documentados, sin soporte conceptual o referencias bibliográficas; todos
opinan de todo y todos saben de todo y todos aconsejan y le quitan el tiempo a los
demás, con la saturación que frecuentemente vemos en los chats o las redes.
f) Por eso, se recomienda en redes o chats de muchas personas, sobre todo en
WhatsApp, no saturar la red de cosas triviales, o que no tengan que ver con los
propósitos de quienes integran esa red. Tampoco enviar mensajes con contenidos
densos, del tipo de información como la mencionada en el inciso anterior; o mensajes
en altas horas de la noche o al amanecer; o mensajes dirigidos a una sola persona del
grupo, de los que todos se enteran; para ello, el sistema les ofrece la posibilidad de
enviárselos directamente a una sola persona. Cuando se hacen cosas como las citadas,
parece que se tuviera otra intención diferente al interés del grupo, o que es uno
insensible a las molestias que puede causar y por lo general, se distraerá la atención
de los demás, en asuntos que igual no les incumben.
Para concluir, no olvidar que siempre es conveniente diferenciar los medios de los fines;
cuando un medio se convierte en un fin por sí mismo, algo está funcionando mal.
Y por supuesto, se vale diferir, pues es legítimo pensar de otra forma; me gustaría
escuchar su punto de vista.
Jaov
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