Post on 02-Jan-2015
LA COMUNIDAD HUMANA
El hombre posee unadimensión social.La auténtica convivenciahumana requiere respetar
la justicia y la recta jerarquía de valores.
Así como el subordinar las dimensiones materiales e instintivas a las interiores y espirituales.
Toda sociedad humana tienenecesidad de una autoridad.La autoridad se ejerce de manera legítima cuando
procura el bien común, y para conseguirlo utiliza medios moralmente lícitos.
Las leyes injustas y lasmedidas contrarias alorden moral no obliganen conciencia.
LA SALVACIÓN DEDIOS: LA LEY Y LAGRACIA
La ley moral prescribe alhombre los caminos y lasreglas de conducta que llevan a la bienaventuranza y prohíbe los caminos que apartan de Dios.
La ley natural, inscrita por el Creador en el corazón de todo hombre, consiste en una partici- pación de la sabiduría y bondad de Dios, y
permite al hombre discernirel bien y el mal, mediante larazón.
La nueva Ley oLey evangélica se resume en el
mandamiento de amar a Dios y al prójimo, y de amarnos como Cristo nos ha amado.
La gracia es un don gratuitode Dios, por el que nos hacepartícipes de su vida divinay capaces de obrar por amor a Él.Se le llama
gracia habitual, santificante o deidificante, porque nos santifica y nos diviniza.
Además de la gracia habitual,existen otros tipos de gracia:las gracias actuales ( donesen circunstancias particulares);las graciassacramentales
(dones propios de cada sacramento).
Las gracias especiales ocarismas ( que tienencomo fin el bien comúnde la Iglesia), entre las que se encuentran gracias de estado, que
acompañan al ejercicio de losministerios eclesiales y de lasresponsabilidades de la vida.
El mérito es lo queda derecho a larecompensa por unaobra buena.
Dios da al hombre la posibilidad de adquirirméritos.
Todos los fieles estamosllamados a la santidadcristiana.
La Iglesia interviene en elcampo moral, porque sumisión es predicar la fe
que hay que creer y practicar en la vida cotidiana.
Los preceptos de la Iglesiatienen como finalidad garantizarque los fieles cumplan con lomínimo indispensable en relación
al espíritu de oración, a lavida sacramental, al esfuerzomoral y al crecimiento enel amor a Dios y al prójimo.
Los preceptos de la Iglesiason cinco:1)Participar en la Misatodos los domingos y fiestas de guardar, y no
realizar trabajos y actividades que puedan impedir la santificación de estos días.
2) Confesar los propios pecados, mediante elSacramento de la Reconci-liación,almenos una
vez al año.3) Recibir el Sacramento de laEucaristía, al menos en Pascua.
4) Abstenerse de comercarne y observar el ayunoen los días establecidos porla Iglesia.
5) Ayudar a la Iglesia en susnecesidades materiales, cadauno según sus posibilidades.