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ANÁLISISLINGÜÍSTICO LÍNEA DE BASE
Cultura política y Diversidad cultural: Empoderando ciudadanía en poblaciones quechua andinas de Perú y Bolivia
AUSPICIA:
Cochabamba, abril de 2012
Análisis lingüístico: Línea de base
El aspecto lingüístico en la conceptualización de
términos de la esfera política
Carmen Terceros
Abril de 2012
Proyecto “Cultura política y diversidad cultural: Empoderando ciudadanía
en poblaciones quechua andinas de Perú y Bolivia”
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Esta sistematización se ha realizado en el marco del proyecto “Cultura política y diversidad cultural: Empoderando ciudadanía en poblaciones quechua andinas de Perú y Bolivia” - EIDHR/2009/166-434, auspiciado por la Unión Europea, ejecutado por CIUDADANÍA, Comunidad de Estudios Sociales y Acción Pública (Bolivia) y el Movimiento Manuela Ramos (Perú). El contenido en ningún caso debe considerarse que refleja los puntos de vista de la Unión Europea.
© CIUDADANÍA, Comunidad de Estudios Sociales y Acción Pública
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Sistematización: Carmen Terceros
Coordinación y revisión:
CIUDADANÍA, Comunidad de Estudios Sociales y Acción Pública: Olivia Román/ Gonzalo Vargas V.
Cochabamba, abril 2012
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Contenido 1. Introducción................................................................................................................................. 4
2. Antecedentes ................................................................................................................................ 4
3. Análisis lingüístico e interpretación de las expresiones en quechua y en castellano ........................ 5
3.1. Conceptualización de Derechos Humanos............................................................................ 5
3.2. Conceptualización de Deberes .............................................................................................. 6
3.3. Conceptualización de Justicia ................................................................................................ 7
3.4. Conceptualización de Discriminación ................................................................................... 8
3.5. Conceptualización de Violencia Física y Verbal contra la Mujer ............................................ 9
3.6. Conceptualización de Autoridad ......................................................................................... 10
3.7. Conceptualización de Institución Pública ............................................................................ 11
3.8. Conceptualización de Participación Política ........................................................................ 11
4. Elementos culturales y lingüísticos de la cultura política quechua y sus valores subyacentes ........ 12
5. Recomendaciones generales para la elaboración de una propuesta comunicacional con fines
políticos ...................................................................................................................................... 16
Anexos ............................................................................................................................................... 19
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Análisis lingüístico: Línea de base
El aspecto lingüístico en la conceptualización de términos de la esfera
política
Carmen Terceros
1. Introducción
Este capítulo abordará el tratamiento lingüístico de ocho1 vocablos quechuas vinculados con el
concepto de Democracia. Su objetivo se orienta al análisis de respuestas en quechua y
castellano brindadas por líderes/as de organizaciones sociales y municipios del Valle Alto y
Central del Departamento de Cochabamba, con el fin de enriquecer el lenguaje político en el
ámbito comunicacional con relación al diálogo intercultural, a través de la incorporación de
términos quechuas que hagan referencia a este ámbito discursivo.
La descripción y el análisis se realiza con base en datos procedentes de reuniones llevadas a
cabo por entrevistadores nativo hablantes del quechua con 12 grupos focales, además de 30
entrevistas realizadas a hombres y mujeres (15 mujeres, 15 varones), con cargos diversos en
seis municipios: Arbieto, Cliza, Punata, Quillacollo, Colcapirhua y Tiquipaya (Alcaldes, ex
Alcaldes, Presidentas y ex Presidentas de la Organización de Mujeres, Director de Obras del
Municipio, Concejales, miembros de la Federación de Regantes, miembros de Organizaciones
Cívicas, Dirigente de la Cooperativa Social de Trabajos, Presidentes y Responsables de OTBs).
El capítulo se organiza en cuatro apartados que siguen el siguiente orden: Antecedentes,
Análisis e interpretación de expresiones y quechua y castellano en torno a ocho vocablos
relacionados al concepto de ciudadanía, Identificación de elementos culturales y lingüísticos de
la cultura política quechua y sus valores subyacentes; y, por último, Recomendaciones generales
para la elaboración de una propuesta comunicacional.
2. Antecedentes
Gran parte de los hablantes entrevistados para este estudio caracterizan el quechua que hablan
como “quechuañol”, algunos incluso se adscriben como “quechuañoles” debido a que el
quechua de las regiones de donde proceden dichos hablantes constituye una lengua híbrida,
característica del habla actual del Valle Alto y del Valle Central de Cochabamba. Este
1 La elaboración original de este documento prevé el análisis de siete vocablos; no obstante, se hace notar
que, por razones de mayor comprensión para el lector, se han separado los conceptos de “institución
pública” y „participación política‟ en dos apartados. Por consiguiente, los conceptos descritos y analizados en
este documento serán ocho en vez de siete.
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fenómeno genera, sobre todo, la incorporación de términos castellanos en el habla quechua
con sufijos propios de esta lengua, términos que, a su vez, pueden mantener, resemantizarse o
ampliar su marco semántico a otros ámbitos de uso, en particular en el discurso político,
algunos de comunicación y otros ámbitos de uso formal urbanizado o rural. A menor escala, se
observa el rescate y ampliación semántica de terminología quechua de uso cotidiano y que,
poco a poco, se va incorporando hacia ámbitos discursivos de uso formal, tal como ocurre con
algunos medios de comunicación.
3. Análisis lingüístico e interpretación de las expresiones en quechua y
en castellano
Como un aspecto preliminar, habría que mencionar que el quechua del Valle Alto y del Valle
Central cochabambino corresponde a un dialecto propio de estas regiones; por ello se observa
la presencia de la /s/ en el inventario fonológico en lugar de /∫/ (por ejemplo, los hablantes
de ambas regiones pronuncian /ruwasani/ contrariamente a /ruwa∫ani/ correspondiente a los
hablantes de Tarabucho, Chuquisaca o del Norte de Potosí. Asimismo, en cuanto a los
préstamos del castellano, este documento mantendrá la escritura y alfabeto de este idioma,
dado que los y las entrevistados/as lo pronuncian siguiendo estos patrones, a excepción de la
“f”, la misma que se pronuncia como “j” por algunos hablantes (por ejemplo: “juerza” en lugar
de “fuerza”).
3.1. Conceptualización de Derechos Humanos2
La gama de términos utilizados para referirse al concepto de “Derechos” en quechua va desde
la expresión de la voluntad o el deseo con munay, poder (atiy), la autoridad o el encargo
(kamachiq), el manejo del conocimiento o del saber (yachay „saber‟), el sentido de colaboración
(yanapay „ayudar‟), el fortalecerse o empoderarse (kallpachakuy), hasta lo afectivo (qhispikuy
„salvar‟, ancha llakikuy „apenarse mucho‟ o „preocuparse mucho‟), e incluso la acción con libre
albedrío (Gustuy kanman ima ruwanaypaqpis „Sería mi voluntad libre para hacer cualquier cosa‟).
Estos términos se complementan con conceptualizaciones de los derechos vinculados al amor
a la vida, tal como en el enunciado de una de las mujeres entrevistadas: Kawsay, munakuy
kawsayniykita „Vivir, amar tu vida‟.
Por otra parte, hay que hacer notar la conjunción de tres conceptos: Munayniy, atiyniy, yachayniy
„Mi voluntad, mi poder o lo que puedo y mi saber‟, los cuales describen el sentido de Derechos
para una de las mujeres entrevistadas y que puede resumir – de cierta manera- todo lo
expresado por los y las entrevistados/as. Los tres términos expresarían, por un lado, el hecho
de realizar la voluntad de alguien, pero también una voluntad sujeta al poder hacer, así como al
acceso al saber o al conocimiento. Por consiguiente, los derechos no se podrían interpretar
como la libre expresión y realización de la voluntad (tal como lo expresa una entrevistada), sino
más bien determinada por la capacidad de poder realizar y saber.
2 Todos los ocho vocablos que se desarrollan en este capítulo se hallan consignados en ocho cuadros comparativos que se encuentran en Anexos.
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Respecto a algunas distinciones en la expresión de hombres y mujeres, los usos semánticos de
los términos no son tan diferenciados, tan solo se observa una mayor alineación afectiva por
parte de las mujeres y una mayor alineación con la capacidad reflexiva por parte de los
hombres, puesto que uno de los entrevistados enuncia el umachakuy „ingeniarse, hacer funcionar
la cabeza‟. Sin embargo, esta situación debe tomarse únicamente como una hipótesis en
relación con el concepto de Derechos. Al mismo tiempo, los hombres se distinguen por
conceptuar los Derechos como el empoderamiento: kallpachakunanchik „empoderarnos‟,
„nuestra fuerza‟, asociado a la capacidad de ayudarse los unos a los otros de manera mutua
(yanapanakunanchik). Sin embargo, también resalta el saber (yachay) en el discurso femenino.
3.2. Conceptualización de Deberes
De manera general, existe coincidencia en el discurso femenino y masculino respecto al uso del
sustantivo ruwana „deber, obligación‟, como término equivalente a deber. Los y las
entrevistados/as lo manifiestan como deberes individuales y colectivos; por ejemplo, para el
sentido individual se usa ruwanay „mi deber, „mi obligación para hacer‟ (con exclusión de otros y
otras destinatarios). En cambio, el sentido colectivo se expresa en dos formas: ruwananchik
„nuestros quehaceres o deberes‟ (con inclusión de todos y de todas los destinatarios), y
ruwaynayku „nuestros quehaceres‟, con exclusión de otros u otras destinatarios. Por lo tanto, en
la expresión de los y las entrevistados/as no solo prima lo colectivo o comunitario, sino que
también se establece un ámbito de deberes propio a cada individuo.
Un aspecto que llama la atención a lo largo de las entrevistas realizadas (no tan solo en las
preguntas delimitadas para realizar este capítulo) se observa en el hecho de que la mayor parte
de las mujeres asocia el deber con las obligaciones del cuidado de la casa y la atención de los
hijos y del marido. Es decir que se posicionan – de preferencia- en el dominio físico espacial de
lo interno versus la predominancia del dominio físico espacial externo por parte de los
hombres (Ruwanasniyku tiyan familiapi, sociedadpi „Tenemos nuestras obligaciones en la familia, en
la sociedad‟, “Todos tenemos diferentes deberes; por ejemplo, mi esposa tiene que mantener
limpia la casa, preparar los alimentos…; los hombres tienen que ver que no falte nada en
casa… [por eso salimos a trabajar fuera]” ). En suma, se toman los deberes como una misión
con tareas y roles diferenciados, tanto para el hombre como para la mujer.
Al mismo tiempo, los deberes identifican a los sujetos que los cumplen o deben cumplirlos:
aquellos con la capacidad de atiy „poder‟ (atiyku „podemos‟ inclusivo), tal como expresa una de
las mujeres entrevistadas. En este contexto, esta acepción se refiere al nivel del desarrollo físico
mental de las personas como a la capacidad económica (los infantes aún no tienen esta
capacidad de cumplir con deberes, pero sí a medida que van creciendo y desarrollando
capacidades físicas y mentales). Por eso, una de las entrevistadas también complementa el
sentido de deberes asociado a atiyku „podemos‟ y a yuyaniyuq „con pensamiento maduro y
responsable‟, „con talento‟. En todo caso, los deberes adquieren – para hombres y mujeres- un
sentido material y moral.
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Asimismo, si bien el término de deberes se conceptualiza en el marco de la acción familiar y
comunal con el término de ruwananchik, ruwanay „nuestros quehaceres‟, „mi obligación, mi
quehacer‟; el uso de junt‟ana „cumplir‟, „pagar‟ posee un significado vinculado a autoridades
elegidas o a personas a quienes se les ha encomendado una función que deben cumplir. La
idea de junt‟ana, de esta manera, conlleva un alto nivel de compromiso para cumplir un
obligación por parte de una autoridad o bien de cualquier individuo que adquiere un
compromiso o una deuda con su familia o su comunidad (por ejemplo, en los pasantes).
En lo que respecta a rasgos distintivos en la expresión de hombres y mujeres para el término
“deberes”, en el discurso femenino se observa la asociación con el nivel emocional, pues los
deberes representan preocupaciones importantes que afligen a la mujer (anchata phutikun „se
apena mucho‟ [mi corazón], sunquy nanan „duele mi corazón‟).
Por último, se aprecia que el sentido de deberes está muy presente en la vida cotidiana del
mundo quechua, tanto que se explicita con el uso del sufijo –na- sufijado a las raíces verbales y
nominales de los términos empleados por las y los entrevistados/as. Dicho sufijo expresa el
sentido de obligatoriedad que los quechuas le asignan a las acciones como a los conceptos en el
plano del cumplimiento material y moral (por ejemplo, ruwa-na-y; junt‟a-na-y). Y aunque,
también este sufijo –na sirve para nominalizar o convertir un verbo en un nombre o sustantivo,
no todos los verbos en el quechua se nominalizan con este sufijo. Por ello, se podría sostener
la apreciación antes referida.
3.3. Conceptualización de Justicia
Dentro de la gama de términos utilizados por los y las entrevistados/as, resalta el uso de
allinchay „arreglar, corregir o solucionar‟ para referirse al concepto de justicia. Por añadidura,
también se observa el sentido de obligatoriedad en la impartición de la justicia a través del uso
del sufijo de obligación –na agregado a allinyachi-nay „lo que debo corregir, arreglar o solucionar
para caminar o andar por el camino correcto o recto (chiqan puriy), para trabajar de forma
correcta (chiqan llamk‟yay), para hacer lo justo (cabalta ruway3).
La connotación de la obligatoriedad se refuerza semánticamente como un rasgo general en la
manera como los y las entrevistados/as conceptualizan la justicia, pues el allinchay también se
complementa con términos como kamachiq „autoridad‟ y kamachiy „ordenar, mandar‟, „mandato,
ordenanza‟. En consecuencia, dado que la justicia obedece a un mandato, ésta debe ser
respetada (Imatataq rispitachikusaq „Lo que debo hacerme respetar‟). La obligatoriedad, por otro
3 Una traducción literal de este nombre compuesto cabalta ruway sería „hacer las cosas de forma cabal‟. Este nombre se ha construido a partir de un adjetivo del castellano (cabal) y otro procedente del quechua (ruway „hacer‟), dando lugar a la idea de justicia, de hacer lo justo o correcto en quechua. Por lo general, el uso del adjetivo “cabal” en el habla quechua (algunos hablantes lo pronuncia como /kawal/) de muchas regiones quechuas de Bolivia corresponde al sentido de justeza en cantidad; por ejemplo, una comerciante en el mercado puede decir “Kawalpacha” „está cabal‟, „está completo‟, „está exacto‟, „está o es justo‟, para expresar su satisfacción en el pago; y, a su vez, una compradora puede afirmar lo mismo cuando recibe el peso justo de su compra o bien el cambio adecuado del dinero que ha pagado.
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lado, se concibe como un principio imperativo para todos y todas de manera equitativa (“Que
se respete todos los derechos humanos, sin discriminar a nadie”, “Que se respete a todos,
cualquiera su situación”…).
En lo que concierne a rasgos distintivos de significados asignados por hombres y mujeres
respecto al concepto de justicia, al parecer, las mujeres explican haciendo mayor alusión al
plano de los significados que expresan actos más concretos (Policiaman rinki „Vas a la Policía‟,
Quejakamuchkayku, parte pasamusaq „Vamos a ir a quejarnos, vamos a pasar una parte o a
presentar una queja‟), mientras que los hombres tratan de expresar dicho concepto con
referencias más generales. Pero también algo que distingue el discurso femenino es la
referencia al plano de la justicia asociada a dos significados que pueden ser complementarios si
los colocamos en un plano relacional, uno como condición previa y otro como consecuencia o
finalidad: la condición para la salvación se realizaría a través de yanapay „ayudar‟. El primer
sentido se enuncia mediante uyarichikuy „hacerse escuchar‟; para lo cual, la persona que así lo
expresa visualiza un acto o una serie de actos previos para lograr „hacerse escuchar‟. Añadido a
ello y a comparación con el sentido que tiene el hacerse escuchar en castellano, uyarichikuy no
solo se queda en el nivel del sentido literal del hacerse escuchar, sino que –en la lengua
quechua- conlleva un sentido performativo, puesto que su misma enunciación ya supone que la
acción se realiza (por ejemplo, cuando una madre reclama a su hija mayor en ocasión de
hacerse obedecer con la hija menor).
El otro significado se expresa a través del uso de qhispichiy „hacer salvar, hacer librar‟, en tanto
consecuencia del ayudar. Aunque el uso de este verbo es actualmente muy limitado4 y se
escuchaba hasta hace algunos años atrás en contextos religiosos y en regiones con poca
influencia del castellano, aquí es importante notar la asociación semántica de justicia con la
salvación divina.
3.4. Conceptualización de Discriminación
El término común de referencia para el concepto de Discriminación en quechua, tanto por
hombres como por mujeres es chiqniy „odiar‟, con sus diversas realizaciones de chiqnikuwan „me
odia‟, chiqninakuy „odiarse unos a otros de manera mutua o recíproca‟. Este término se
complementa de manera bastante fuerte con chhuqunaku „vengarse‟, „mironearse‟, así como con
qhawanaku „miramiento‟. Otros términos complementarios constituyen t‟aqay „separar‟,
tanqarpariy „empujar de golpe haciendo a un lado‟, karunchasqas „alejados‟, mana valechiwanchikchu
„no nos hacen valer o no nos valoran‟; los cuales, a su vez, encuentran asidero en la
descripción que ofrece Waq laduman runata churay „poner a la gente a un lado‟. Aquí, sin
embargo, habría que hacer notar que chiqniy, karunchay y k‟uchunchay poseen mayor fuerza
semántica e ilocutiva5 que qhawanaku.
4 Según el Diccionario Quechua de Joaquín Herrero y Federico Sánchez de Lozada, 1983. Ed. CEFCO. 5 La fuerza ilocutiva hace referencia a la fuerza de la intención comunicativa de un hablante en función al logro de dicha intención (aunque el logro ya se designaría con lo performativo). En este caso, el término “odio” expresa una intención de mostrar con fuerza la discriminación y lograr impacto en la audiencia.
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Frente a todos esos términos, qhisachiy o también con su variante qisachay „relegar‟, „tener poco
aprecio por alguien‟ también posee una aproximación semántica cercana al término de
Discriminación. Por otra parte, este término en quechua no se trata de un neologismo o
palabra recientemente creada, sino más bien de un término recuperado del uso tradicional de
hablantes menos castellanizados. No obstante, pese a ello, este término solo fue mencionado
por un participante, pues el término predominante fue chiqniy „odiar‟ o chiqninaku „odio‟,
„odiarse unos a otros‟. De todas maneras, faltaría aún indagar más acerca de los diferentes
contextos de uso y tópicos de habla en la interacción y la práctica sociales donde se utilicen
estos vocablos.
Asimismo, la discriminación en el sentido de separación, de hacer a un lado, y - como un
sentimiento más fuerte – de odio, se conceptualiza como una acción recíproca, no únicamente
en el sentido unilateral que muchas veces caracteriza a la enunciación en castellano. El uso del
sufijo que marca reciprocidad –naku en la mayor parte de términos utilizando por los y las
entrevistados/as estaría marcando dicho sentido: chiqni-naku „odiarse los unos a los otros
(Ñuqanchik pura chiqninakunchik „Nosotros mismos nos odiamos los unos a los otros‟), qhawa-
naku „mironearse los unos a los otros‟, chhuqu-naku „vengarse, mironearse‟. Por consiguiente, se
deduce que la discriminación es vivenciada entre personas de la misma comunidad, en
particular, por las mujeres. Al parecer, se desconoce la exclusión por parte del Estado, pues
ello no emerge en el discurso de los y las entrevistados/as.
En lo concerniente a la diferenciación discursiva entre hombres y mujeres con referencia a la
enunciación del término Discriminación, los hombres se involucran de manera colectiva, o
bien en tercera persona, sin incluirse ellos solos como sujetos de discriminación. En cambio,
las mujeres se refieren a este hecho en todas esas formas, pero agregando su inclusión de
manera individual, mostrando así su experiencia de discriminación. Para mayor profundidad,
habría que estudiar este fenómeno con las diversas trayectorias o historias incorporadas
(habitus, en términos de Bourdieu) de los y las entrevistados/as.
3.5. Conceptualización de Violencia Física y Verbal contra la Mujer
Para la referencia de violencia física contra la mujer, de manera particular y común al discurso
de hombres y mujeres, sobresale el término de ch‟allpay „golpear o asesinar violentamente‟
relacionado a la mujer (warmi). De ahí que sale la combinación de warmi ch‟allpa „golpeador o
asesino de mujeres‟. Ch‟allpay posee, en su acepción tradicional, el sentido de „aplastar algo con
violencia‟. En consecuencia, se puede afirmar que el concepto de violencia física contra la
mujer se significa con bastante crudeza en las regiones quechuas del departamento, y –aunque
algunos y algunas entrevistados/as afirmen que también existen qhari ch‟allpas6 „golpeadoras o
asesinas de hombres‟- el término ch‟allpa va mayormente asociado a las mujeres. De ahí
también que la designación con términos específicos que hacen a esta violencia por parte de los
6 Aunque, en la normalización de la escritura quechua, lo más adecuado sería usar el sufijo pluralizador –kuna; es decir, “ch‟allpaq-kuna‟ en vez del uso de la „s‟ como marca de pluralización que procede del castellano.
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hombres se describa con actos como jayt‟ay „patear‟, lak‟ay „golpear con la palma de la mano
abierta‟.
Un aspecto que resalta en el discurso femenino alude a la conducta desviada del camino
correcto del hombre, el adulterio (Jaqay malta portakuchkan, mana allintachu purichkan „Aquél está
portándose mal, no está andando por buen camino, está traicionando a su pareja‟) parece
constituir la mayor causa de la violencia física contra la mujer; y la consecuencia de dicha
violencia es su sufrimiento (ancha maqan warmita, ancha sufrichin „le pega mucho a la mujer, la
hace sufrir mucho‟). Para otras mujeres, la violencia física contra la mujer adquiere una
vinculación semántica directa con la muerte, pues ello se expresa de la siguiente manera:
Wañuyta rikuchichkanman „Le estaría mostrando la muerte‟, Wañuyta ñawpaykuchichkanman „Le
estaría adelantando la muerte‟, Wañu wañuyta jap‟ichichkanman „le estaría haciendo alcanzar con la
muerte‟.
En el discurso masculino, otro tipo de violencia asociada no sólo a la violencia física, sino
también con extensión semántica a la violación de la mujer, se manifiesta en el uso del verbo
incorporado del castellano al quechua de abusanchik „abusamos‟ (Turiaykuy, sumaq jap‟iytawan
warmita a la fuerza abusanchik „Molestarle, abusar a la mujer agarrándola fuertemente‟). Esta
conducta suaviza su significado cuando los hablantes utilizan únicamente el adjetivo “abusivo”
o “abusiva”, con lo cual se mantiene la acepción original del castellano.
Respecto a la violencia verbal, los términos más utilizados corresponden a ch‟aqwaykunas7
„alborotos, bullas‟, qhapariykuy „gritarle a alguien con alevosía‟. En la primera acción; es decir,
ch‟aqwakunas, se observaría el uso de malas palabras por el hecho de que los hablantes califican
a los participantes de dichos griteríos como Ancha millay kanki „Eres muy asqueroso‟.
Por último, un término globalizador para significar violencia en el discurso femenino como
masculino es maqanaku „pelea‟. Sin embargo, no mantiene la fuerza ilocutiva de ch‟allpay.
3.6. Conceptualización de Autoridad
Kamachiq runa „autoridad‟, „hombre que manda‟ constituye el término de referencia común a
hombres como a mujeres de la muestra entrevistada. No obstante, el uso de runa „hombre,
varón‟ solo hace referencia a una autoridad masculina, quizá porque la tradición cultural
enfatizó la presencia del hombre en cargos de autoridad. De manera paralela, se observa
también el uso de kamachiq „el o la que manda u ordena‟, aunque este término también equivale
a “ley” u “ordenanza”, y su significado se especifica en el contexto de la situación
comunicativa.
Otros términos compuestos que se refieren a Jatun Tata „Gran Padre‟, Jatun runa „Gran
hombre‟, Jatun kamachiq „Gran autoridad‟, corresponden a términos equivalentes a autoridad,
7 Este término tiene doble marcador plural, pues tiene tanto el sufijo propio que marca el plural en quechua –kuna, como el marcador plural propio del castellano –s (ch‟aqway-kuna-s). Se podría sostener que los hablantes del Valle Alto como del Valle Central de Cochabamba realizan esta doble marcación para enfatizar lo plural.
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dependiendo de la jerarquía y nivel de responsabilidad adquirida por quien ocupa dicha
posición; por ejemplo, el presidente, el gobernador.
Asimismo, es importante observar la connotación positiva del significado de autoridad con
alguien que detenta conocimiento, característica de ser una persona trabajadora, responsable y
con compromiso de servicio social con la comunidad a la que representa (llamk‟aq runa
„hombre trabajador‟; yachayniyuq „el que sabe‟, „con conocimiento o con saber‟; servidor
público). De todos modos, una vez más sobresale, en el uso de estos términos, la alusión al
ámbito de lo masculino.
3.7. Conceptualización de Institución Pública
Tanto hombres como mujeres establecen el significado de “lugar de reuniones” para referirse a
Institución Pública (Tantakuy Wasi „Casa de Reuniones‟, Jatun Tantakuy Wasi „Casa Grande de
Reuniones‟), quizá por ello este término se vincula con participación, aunque eso no
necesariamente signifique participación. Por añadidura, el significado de reunión se
complementa con sentidos diversos como Kamachiq Wasi „Casa que emite ordenanzas o
mandatos, que ordena‟, de espacio donde se piensa y/o reflexiona (“Casa donde se piensa”), de
lugar que ayuda o colabora (Yanapaq Wasi „Casa de Ayuda‟) y de lugar donde que tiene el rol de
enseñar (“Casa de Enseñanza”). La institución pública se conceptualiza, por otro lado, como
un lugar de dominio público; es decir, de lugar adonde todos pueden acudir (Tukuypaq Wasin
„Casa de Todos‟) porque representa una casa de colaboración. Otra entrevistada relaciona
directamente a la institución pública con lugares donde las personas que allí trabajan lo hacen
para el gobierno. Llama la atención que un entrevistado se refiera a este concepto como “Casa
de Descanso”.
Por todo lo anteriormente señalado, Kamachiq Wasi sería el concepto más cercano a Institución
Pública del castellano, y, dependiendo de la importancia del rol que realiza la institución, podría
también utilizarse Jatun Kamachiq Wasi.
3.8. Conceptualización de Participación Política
De acuerdo con los y las entrevistados/as, tantakuy „juntarse, reunirse‟ y qutuchakuna „agruparse‟
son los términos que reflejan de manera más cercana el concepto de participación política.
Asociados al objetivo de reunirse y agruparse, se hallan los significados de dialogar (parlarikuna
„dialoguemos‟), de buscar el bien para la comunidad (sumaq mask‟ay „buscar el bien‟, las
instituciones quieren mejorar, buscan mejorar…). Sin embargo, los y las entrevistados/as
también asocian el hecho de reunirse para dialogar y participar con el sentido de aprendizaje
y/o enseñanza de los unos con los otros de manera recíproca (Yachachinakuna ñuqanchik pura
„Enseñarnos mutuamente entre nosotros mismos‟; Yachachiq jukkuna jukkunaman „Enseñar
unos a los otros‟). A su vez, la participación, en la concepción de los y las entrevistados/as, se
caracteriza por el hecho de que los participantes consultan o conversan con uno y con cada
uno de los y las participantes; razón por la cual surgiría la denominación de “participación
política” (jukwan jukwan parlariy „hablar con uno y con otro‟). Sumado a ello, el sentido de
aproximación o de cercanía con qayllakuna („aproximación, aproximémonos‟) está asimismo
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presente en el significado de participación política versus la lejanía que supondría la no
participación.
Frente a todo ello, un significado que habría que rescatar por el valor de equidad que posee, en
este caso vinculado a participación y complementario a este concepto, corresponde a
khuchkachakuy „dividir en partes proporcionales‟, „solidarizarse‟. La raíz verbal de este término
posee los siguientes significados: khuchkan „mitad‟ y khuchka „juntos‟.
Por otra parte, llama la atención que la participación política se asocie a la reunión de personas
que saben (Tantanakuna yachayniyuq pura „Juntarse entre quienes saben‟). Sería interesante
indagar más acerca de este sentido, pues, por el momento solo podríamos lanzar la hipótesis de
que una condición para participar de manera efectiva en política sería el conocimiento, el saber.
4. Elementos culturales y lingüísticos de la cultura política quechua
y sus valores subyacentes
Los elementos culturales y lingüísticos expresados en los ocho vocablos que se han dilucidado
en las entrevistas se manifiestan, en principio, al nivel de dos dimensiones: a) las redes o nexos
semánticos que dichos vocablos generan al ser conceptualizados en quechua y que permiten
mostrar formas culturales de ver dichos conceptos; y b) las formas de estructuración discursiva
en dicha conceptualización.
a) Los nexos semánticos entre lo cultural y lo lingüístico
Esta parte desarrollará la manera cómo los y las hablantes entrevistados/as establecen
conexiones semánticas de los términos lingüísticos con la dimensión cultural, en específico con
valores subyacentes a la cultura quechua de las seis regiones de procedencia de los y las
entrevistados/as.
- La palabra dada y la concreción del compromiso. Se percibe la invocación de un alto nivel de
compromiso para cumplir con la palabra dada con el vocablo junt‟ay „cumplir‟ cuando
se asocia con una autoridad, sobre todo con una autoridad gubernamental. En las
entrevistas realizadas, los y las hablantes entrevistados/as hacen referencia tan solo a
este punto; sin embargo, junt‟ay designa al menos tres significados: cumplir una
promesa, cumplir el tiempo que dura un cargo de autoridad y cumplir una deuda y/o
un compromiso adquirido con alguien (para el caso de un individuo o más personas).
Si, a su vez - tomando en cuenta el caso de una autoridad- asociamos junt‟ay con quién
o quiénes son capaces de lograrlo, la percepción del perfil de un líder o de una
autoridad, así como la forma de conceptualizar los deberes y los derechos en quechua,
permiten visualizar capacidades que se vinculan a ciertos valores que constituyen
condiciones para ser una autoridad que pueda cumplir una promesa y un mandato, tal
como se desarrolla en los dos siguientes puntos.
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- Conocimiento, capacidad de pensar y reflexionar con madurez y responsabilidad, capacidad de ayudar.
Estas capacidades se muestran estrechamente vinculadas al perfil ideal de una autoridad
o un líder. Kamachiq es el correlato del término castellano para “autoridad”, en tanto
dirigente de una organización comunal, designación que se hace extensiva a una
autoridad estatal, pues dicho término es descrito como Jatun runa yachayniyuq „Gran
hombre, con saberes, con conocimiento‟ y se complementa con deberes una vez que
consideramos el yuyaniyuq „con pensamiento maduro y responsable, con capacidad de
pensar y reflexionar‟. Por otra parte, estas capacidades extienden su alcance semántico
al acercamiento terminológico en quechua de Institución Pública y Participación
Política, cuando algunos designan al primer concepto como Kamachiq Wasi „Casa que
emite ordenanzas o mandatos, que ordena‟, también con Yanapay Wasi „Casa de Ayuda‟,
“Casa de Enseñanza”; y al segundo con Tantakuna yachayniyuqpura „Nos reunimos entre
quienes sabemos‟ (sin embargo, dado que el concepto de Institución Pública no existe
en la realidad quechua de estos lugares, habría que sugerir que estas designaciones en
quechua son únicamente acercamientos, intentos y esfuerzos de los y las
entrevistados/as por traducir al quechua terminología que represente el concepto
castellano de Institución Pública). En consecuencia, se podría sostener que para la
población del Valle Alto y Central, la capacidad de saber, de detentar conocimiento, de
poseer la capacidad de ayudar y de pensar de manera reflexiva, con madurez y
responsabilidad, constituyen valores ideales que condicionan el acceso a un cargo de un
dirigente o de una autoridad que representa al Estado.
- La capacidad de poder. Atiy en el sentido de „poder hacer algo, lo que se puede hacer‟
también se conecta con el concepto de derechos (juk atiy „un poder hacer algo‟),
deberes (atiyku „podemos‟) y kamachiy „ordenar, mandar‟. Si retomamos las cualidades
que los hablantes perfilan para una autoridad o institución pública, kamachiy sugiere que
la capacidad de poder realizar algo la posee una autoridad o una institución pública. Se
ha visto líneas más arriba que la capacidad de poder hacer algo, en tanto autoridad y de
adquirir deberes, corresponde, en la visión de los y las entrevistados de las regiones del
Valle Alto y Central de Cochabamba, a alguien que posee madurez de pensamiento y
de acción; por lo tanto, alguien que pertenece a una institución representa alguien que
puede impartir justicia (véase una mención de kamachiy „ordenar‟ en el Cuadro 3,
Conceptualización de Justicia, en Anexos).
- “Vivir, poder, hacer” como expresión indisoluble de los derechos y los deberes. “Vivir, poder,
hacer” son – al parecer- términos que conjuncionan de manera procesual el concepto
de derechos y de deberes, los cuales se perciben como algo indisociable. En este
sentido, se podría también afirmar que la vida se concibe como la adquisición de
habilidades de desarrollo para poder y para hacer algo. Algo similar acontece con el
mismo proceso que se utilizó para explicar la representación del concepto de derechos
cuando la capacidad de poder se repite en la enunciación de Munayniy, atiyniy, yachayniy
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„Mi querer, mi poder, mi saber‟; además de Yachayninchik „nuestro saber‟ y Atiyninchik
„nuestro poder‟. Cabe añadir, asimismo, que el saber se conecta con los derechos como
condición para el empoderamiento kallpachakuy (rasgo discursivo masculino) y la ayuda
recíproca yanapakunanchik (rasgo del discurso femenino).
- Visión de la vida. Kawsay, munakuy kawsayniykita „Vivir, amar la vida‟ como una manera de
conceptualizar los Derechos muestra que este valor se asocia fuertemente con la vida y
la alegría de vivir. Por otro lado, en relación a la manera como se conceptualizan los
deberes, una lectura aislada de esta enunciación podría conducir a percibir una visión
positiva de los derechos y una visión llena de pesares para los deberes. Sin embargo, las
enunciaciones del punto anterior muestran a ambos como un concepto indisociable de
la cultura quechua de las dos regiones de estudio.
- La alusión a la emoción como un rasgo cultural. Chiqniy, anchata phutikun, sunquy nanan,
mancharikuna, wañuyta rikuchichkanman „odio‟, „mucha preocupación‟, „duele mi corazón‟,
„susto‟, „miedo‟, „le estaría mostrando la muerte‟, muestran una visión emocionalmente
bastante fuerte de los conceptos de discriminación, deberes y violencia física en el
mundo quechua del Valle Alto y Valle Central de Cochabamba. Aunque el término
chiqniy „odiar‟, „odio‟, es mencionado por hombres y mujeres, la alusión a la emoción
parece ser parte constitutiva del mundo femenino cuando se refieren al concepto de
deberes y, sobre todo, al de violencia física provocada por el hombre a la mujer. Odio,
muerte y miedo (estos dos últimos como consecuencia de la amenaza o el ejercicio de
la violencia) expresan emociones bastante fuertes y se pueden deber a la condición de
vida de las mujeres.
Por otro lado, retomando el término de discriminación de manera específica, a partir
del habla de los y las entrevistadas/as, no se podría afirmar a ciencia cierta si el odio se
vincula con el odio racial porque las entrevistas no muestran casos de ejemplos
concretos, existen más bien casos ejemplificados de exclusión por parte del Estado con
el vocablo t‟aqay „separar‟, k‟uchunchay „arrinconar‟. En todo caso, términos como
“humillar” y Mana valechiwaykuchu „No nos hacen valer, „No nos dan valor‟, se vinculan
con casos de discriminación económica y quizá racial en instituciones públicas.
- El sentido de comunidad, reciprocidad, equidad y solidaridad con ausencia de parcialidades. Esta idea
va asociada a justicia (justicia para todos y para todas), así como a participación política
con khuchkachakuy „compartir de manera recíproca la parte de un todo en partes
proporcionales, solidaridad, equidad‟ (para este caso, se podría traducir como
„compartir responsabilidades los unos con los otros en partes equitativas‟). Por su
parte, la manera como se conceptualiza la participación política complementa esta idea
de vivir en comunidad y solidaridad como parte o miembros de esta unidad (la
comunidad, “el todo”), puesto que los términos utilizados explicitan el uso frecuente
15
del sufijo –kuna (marcador de plural, de colectividad) en wakichikuna, tantakuna; y del
sufijo marcador de reciprocidad –naku en yachachinakuna ñuqanchikpura „repartirse
responsabilidades en partes proporcionales‟. La reciprocidad también se explicita
lingüísticamente no solo para el plano laboral y material, sino también en la capacidad
de saber enseñar y aprender los unos de los otros yachachi-naku-na ñuqanchikpura
„enseñarnos mutuamente entre nosotros mismos‟ para un sumaq mask‟ay „buscar el
bien‟, con la condición de prepararse (wakichikuna) (esto implica adquirir y desarrollar
conocimiento). Todo ello, podría conducir al entendimiento mutuo desde la familia,
hasta los vecinos y el resto de la población, como requisito para lo que, en la coyuntura
política actual de Bolivia, se designa como allin kawsay „vivir bien‟. El uyarichikuy
también estaría jugando un rol importante para caracterizar la convivencia en
comunalidad, „hacerse escuchar‟ ampliado al hacer ejecutar algo que la justicia lo exige,
en particular, para el ámbito vivencial de las mujeres.
b) Al nivel de la estructuración discursiva
- La visión procesual de un conjunto como una suerte de patrón discursivo. Hombres y mujeres expresan
algunos conceptos como “participación política”, “derechos” y “deberes” en una estructura
discursiva de pasos consecutivos para mostrar una visión procesual del conjunto. Se podría
sostener que ello constituye una suerte de patrón explicativo conceptual para algunos términos
que no encuentran correlato específico en quechua, en especial en las mujeres (al menos, al
momento de la primera aproximación con las entrevistas).
El porqué de esta manera de estructurar el discurso no puede responderse con los datos de las
entrevistas, habría que observar este fenómeno en el proceso, durante el discurso que la
población meta produzca en la interacción social, además de llevar a cabo entrevistas
orientadas a dilucidar este aspecto. Por el momento, solo pueden adelantarse aproximaciones
hipotéticas como las siguientes: dificultad de expresar el concepto de vocablos mencionados en
un solo término por su inexistencia en la lengua quechua; por consiguiente, como un rasgo
propio a la lengua y cultura quechuas para ciertos conceptos. Al mismo tiempo, con estos
datos iniciales sería muy temprano afirmar que ello supone una visión parcelada de justicia por
parte de los quechuas, tampoco que conlleve un significado holístico.
- La dimensión de lo concreto y lo abstracto como construcción discursiva y diferenciación genérica. A lo largo
del documento, se ha observado que las mujeres, aparte de hacer referencia a la dimensión
emocional-afectiva más que los hombres, en relación a los ocho conceptos de cultura política,
construyen su discurso a partir de la descripción de hechos concretos (en particular si son
mujeres con escaso nivel de escolaridad y menor trayectoria como ocupantes de cargos
públicos de autoridad). La dimensión de lo abstracto es una tendencia de referencia discursiva
más vinculada al mundo masculino. El uso de metáforas para caracterizar un concepto (por
ejemplo, violencia física contra la mujer) constituye, asimismo, otro rasgo típico del discurso
femenino (aunque se dice que el quechua es una lengua que pone mucho énfasis en las
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metáforas y las analogías, este aspecto parece constituirse en un elemento más distintivo del
habla femenina).
Este tipo de construcción discursiva se debe probablemente al acceso diferenciado de
dominios: mayor acceso al dominio público para los hombres versus el dominio privado de las
mujeres. Quizá esta diferenciación sea bastante dicotómica, pues no muestra los diferentes
matices de acción emergentes y otros ya constituidos en las mujeres que han accedido a roles
de autoridad, incluso al interior de la familia. Habría que ver – durante el proceso de
implementación del proyecto- cómo se perciben estos roles en los diferentes actores sociales
en el plano de la práctica y la interacción social.
5. Recomendaciones generales para la elaboración de una propuesta
comunicacional con fines políticos
La elaboración de una propuesta comunicacional con fines políticos podría tomar en cuenta
recomendaciones como las siguientes:
A un nivel de correspondencia de términos quechuas con el castellano
De manera inicial, los correlatos quechuas a los ocho conceptos castellanos pueden ser los
siguientes:
- Atiyniyku „nuestro poder hacer‟ (E), atiyninchiq „nuestro poder hacer‟ (I) (Derechos)
- Ruwanasninchiq „nuestros deberes‟ (ámbito de los quehaceres domésticos para las
mujeres y quehaceres de trabajo fuera del hogar para los hombres); Junt‟ana
„cumplimiento de una obligación, de un deber‟ (sobre todo para designar el ámbito del
cumplimiento de las obligaciones y compromisos de las autoridades) (Deberes)
- Chiqniy „odio‟, „odiar‟, Chiqninakuy „odiarse unos a otros mutuamente (odiarse entre
personas de la misma comunidad, entre personas de diferentes comunidades, entre
miembros de una misma organización). T‟aqay „separar‟ (separar en el sentido de
discriminación y de exclusión, aunque este segundo significado aún no se percibe en el
discurso de los y las entrevistados/as, especialmente en las mujeres) (Discriminación).
Complementarios a este último término y con los mismos dos significados son:
karunchay „alejar‟ y k‟uchunchay „arrinconar‟.
- Chiqan ruway, „hacer lo correcto‟ (en estrecha vinculación con allinyachiy „arreglar,
solucionar‟ (Justicia)
- Warmi ch‟allpay „golpear o asesinar violentamente a la mujer‟ (Violencia física contra la
mujer)
- Kamachiq „Autoridad‟
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- Kamachiq Wasi „Casa que emite ordenanzas, mandatos‟ (designación provisional para
Institución Pública8)
- Qutuchakuy ruwanapaq „reunirse para hacer algo‟, khuskachakuy „compartir
responsabilidades unos con otros en forma proporcional o equitativa‟, „solidaridad‟
(Participación Política).
No obstante, conviene hacer notar que la validación de estos términos durante la
implementación del proyecto permitirá consolidar su uso o no, pues solo los usuarios pueden
legitimarlos según a cómo estos términos expresen su pensamiento y accionar.
Al nivel de la manera de estructurar el discurso
Cuando se trate de programas radiales, televisivos o de prensa escrita dirigidos a audiencias
femeninas, sería aconsejable recuperar la manera de estructuración discursiva de las mujeres
utilizando ejemplos de casos concretos y metáforas; también el hecho de tomar en cuenta una
alineación más afectiva, como una manera de llegar a abstracciones conceptuales referidas a la
cultura política. Ello no significa que se tratará a las mujeres con un sentido asistencialista, sino
tan solo como una manera de retomar y respetar algunas formas de estructuración u
organización discursiva de las mujeres quechuas. Sin duda, existen otros niveles de abstracción
comunes al discurso femenino y masculino, así como más específicos a ambos géneros; sin
embargo, esto aún no se observa a plenitud y con mucha claridad para todos los conceptos en
el ámbito de la referencia a términos que expresen cultura política.
Al nivel de los tópicos de diálogo
Si bien el Valle Alto y Central se caracterizan hoy en día por contar con un bilingüismo
quechua-castellano bastante elevado respecto a otras regiones más alejadas de los centros
urbanos, todavía existen tópicos de diálogo9 con los cuales las audiencias de estas regiones, en
particular, las mujeres, se sienten más cómodas hablando en quechua. Por ejemplo, es el caso
de los temas de justicia, discriminación (aunque aquí habría que establecer la distinción entre
discriminación y exclusión) y violencia. El tema de la equidad, aunque no fue un concepto que
había que elicitar10 en las entrevistas, también puede tratarse en quechua, una vez que los y las
entrevistados/as lo manifiestan en su discurso, tanto de manera subyacente como de manera
explícita.
No obstante, ello no significa que se establezcan circunscripciones lingüísticas y temáticas (los
tópicos de diálogo) entre el quechua y el castellano, pues ambas lenguas tienen sus propias
formas de expresar conceptos abstractos. De todos modos, se observó que un abordaje en
8 Designación provisional porque el término equivalente de Institución Pública, como tal, aún no existe en el
quechua; éste solo fue un intento de los y las entrevistados/as por traducir del castellano al quechua. Sin embargo,
se observa que la población entrevistada tiene idea de lo que representa una institución pública.
9 En lingüística, se usa comúnmente la terminología de “tópicos de habla” o “tópicos de conversación”. Aquí se utiliza la terminología de “tópicos de diálogo” por razones de acomodación al lenguaje de cultura política. 10 En el sentido de “hacer decir”.
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lengua quechua de temas como los mencionados más arriba podría ser más efectivo toda vez
que, una de las mujeres, que hablaba el castellano con bastante fluidez, persistía en utilizar el
castellano al comienzo de la entrevista, pero tuvo que cambiar de código (pasar del castellano
al quechua) cuando se dio cuenta de la necesidad de traducir y explicar conceptos de cultura
política.
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ANEXOS
Cuadro 1
Conceptualización de Derechos Humanos
Varones Mujeres
-Munayniyku „lo que queremos o deseamos‟ „nuestra voluntad‟ (E)11 ; munayniy „lo que quiero o deseo‟, „mi voluntad‟ -Imatachus munanchik „lo que queremos‟ , „nuestra voluntad‟(I) -Munasqanchikmanjina „de acuerdo con lo que nosotros queremos‟ (I). - Qhawasqanchikmanjina „de acuerdo a lo que nosotros lo consideremos o veamos conveniente‟ (I). -Juk atiy „lo que se puede hacer‟, „un poder hacer‟ -Imachus ruwayninchik „lo que hacemos o debemos hacer‟ (I). -Tal vez “justicia mañaspa” „solicitando justicia‟. -Pañanakuna „derechos‟ -Los cochabambinos somos quechuañoles porque somos mezcla, solo se diría “derechos”. -Yanapakunanchik „nuestra ayuda‟, (I) kallpachakunanchik „nuestra fuerza‟ (I), umachakuy „ingeniarse, hacer funcionar bien la cabeza‟ -Ñuqaykup derechuyku „nuestro derecho‟ (E) -Ñuqap partiy [tierra, dinero, etc.] „ésta es mi parte‟, Kay ñuqaypata „esto es mío‟.
-Munayninchik „lo que queremos‟, „nuestra voluntad‟ (I) -Munayniy „lo que quiero‟, „mi voluntad‟; atiyniy „lo que puedo‟, „mi poder‟; yachayniy „mi saber‟. -Atiy „poder‟; atiyniyuq „el o la que tiene poder‟ (E). -Kawsay, munakuy kawsayniykita „Vivir, amar tu vida‟. -Yachayninchik, atiyninchik „nuestro saber, nuestro poder‟ (I). -Yachay „saber‟ -Chiqanman apasunman „podríamos llevar por el buen camino‟ -Qhispikuy „ salvarse‟, „librarse‟; allin llakikuy „apenarse mucho‟, „preocuparse mucho‟. -Gustuy kanman ima ruwanaypaqpis „Sería mi voluntad libre para hacer cualquier cosa‟. -Sería como kamachiq „mandar‟, „mandato‟, „encargo‟ -Es para todos en general (hombres, mujeres).
Significado
-Nos llevan a una vida placentera y fructífera para desarrollar nuestra sociedad. -Es hacernos respetar de gente a gente. -Principalmente es la posibilidad de que se respete el ámbito de la opinión, de la libertad, de la interacción como seres humanos (instituciones públicas). Tener toda la libertad de establecer sus acciones y sus derechos sin que influya en otros derechos.
-Practicar las leyes. -Que todos seamos por igual, sin discriminación.
Fuente: Elaboración propia con base en datos proporcionados por el Proyecto “Cultura Política Quechua”.
11 (E). Esta abreviación se utiliza para marcar la terminación verbal de Exclusivo y de (I) para la terminación del Inclusivo. Estas terminaciones son propias de la conjugación verbal quechua para la primera persona plural. Por ejemplo, muna-y-ni-yku, donde la terminación –yku equivale a „nosotros y nosotras exclusivo‟ (que agrupa a algunos incluyendo al “yo”, pero que excluye a otros), y muna-y-ni-nkchik, donde la terminación –nchik marca el „nosotros y nosotras inclusivo‟ (que incluye a todos y a todas en general, sin apartar a nadie).
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Cuadro 2
Conceptualización de Deberes
Hombres Mujeres
-Ruwanay „mi deber‟, „lo que debo hacer‟; ruwananchik „nuestro deber‟ (inclusivo); ruwaykunas „obligaciones‟, „deberes‟; ruwanasniyku tiyan familiapi, sociedadpi „tenemos nuestras obligaciones en la familia, en la sociedad‟. -Acatana ruwanata „hay que acatar las obligaciones‟; imatachus ruwanchik „lo que hacemos‟ (I) -Imatachus ruwananchikta „lo que debemos hacer‟ (I) -Participanayku „nuestra obligación de participar‟ -Cumplinay „mi deber de cumplir‟; junt‟anay „mi deber de cumplir‟ -Junt’ana „cumplir‟, „pagar‟. -Es una palabra española. -No hay [en español]. El deber se maneja como una responsabilidad.
-Ruwanayku „nuestro deber‟ (E); ruwanasniy „mis deberes‟; ruwanay „mi deber‟; ruwaykunas/ruwayniy „los deberes‟/‟mi deber hacer‟; ruwanasniy „mis deberes‟. -Imachus ruwana/ imatachá ruwananchik „lo que hay que hacer‟/‟lo que debemos hacer‟ (E). -Kamachiy „mandar, ordenar‟ -Kasuna „obedecer‟, „lo que hay que obedecer‟ -Anchata phutikun, sunquy nanan „se preocupa mucho‟, „duele mi corazón‟. -Yo escuché decir con el mismo nombre de “deberes”. Ñuqanchik ruwanachikta „Nuestros deberes‟ (I). -Ima diapaqchus niwanku, chayta cumplinay tiyan „Debo cumplir para el día en que me dijeron‟. -Imataq cumplinanchik tiyan „Lo que debemos cumplir‟ (I). -Atiyku „podemos‟ (E)/ Nuestro trabajo/Lo que hacemos, significa hacer nuestra reunión, llevar adelante nuestra organización, preparar y llamar a la gente/El trabajar de verdad, el estar con la familia…, dedicarnos a la casa y a los hijos. -Puede ser yuyayniyuq „con pensamiento maduro y responsable‟, „con talento‟.
Significado
-Es como yunta, que van juntos los derechos y los deberes. -Quiere decir que cada persona tenemos una misión. -Significa que una persona que sea hombre o mujer, es como la obligación, cumplir haciendo algo. -Sería cumplir con normas, leyes, como personas. -Todos tenemos diferentes deberes; por ejemplo, mi esposa tiene que mantener limpia la casa, preparar los alimentos…; los hombres tienen que ver que no falte nada en casa… -Obligaciones en casa y como autoridad con todos los habitantes de este municipio. -…es llamar la atención a nuestros hijos. Nosotros también nos enojamos dentro de nuestra familia, discutimos; tenemos que entendernos cada uno de nosotros. -Dar cumplimiento, cumplir.
-Lavar, cocinar, etc. -Nuestra misión, lo que debemos hacer, cumplir con las tareas (cocinar, lavar…). -Hacer mis obligaciones en mi casa, proteger a mi familia, ayudar a mi municipio. -Hacer todo, atender al marido, a los hijos, cocinar, lavar; eso es deber. -Cumplir con las demandas que exigimos. -El hacer de las cosas. -Significa las cosas que tengo que cumplir, hacer, obligaciones. -Significa vivir, poder, hacer.
Fuente: Elaboración propia con base en datos proporcionados por el Proyecto “Cultura Política Quechua”.
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Cuadro 3
Conceptualización de Justicia
Varones Mujeres
-Allinchay „arreglar, corregir o solucionar‟; allinchana „lo que hay que arreglar‟; allin ruway „hacer bien‟. -Sut‟inchay „aclarar‟. -Sumaq ñanman churana „colocar en el buen camino‟. -Chiqan llamk‟ay/cabalta ruway/cabal ruway „trabajo correcto‟/hacer algo correcto‟/‟hacer lo cabal‟. -Kamachiq „autoridad‟; quejanaku „queja o presentación de demanda recíproca‟. -Recomendar, kamachiy „ordenar‟. -[Opuesto a] “jucha” „pecado‟. Para ir por un buen camino, que muestre un buen camino. Tenemos que arreglar siempre para ir por un camino recto. -Lamentablemente no he podido escuchar a ningún dirigente, a ningún ciudadano de Punata expresarse con la terminología quechua. -En nuestro lugar, la palabra “justicia” no existe.
-Allinyachinay „lo que debo corregir o arreglar‟ -Qhispichiy „hacer salvar‟. -Chiqan/chiqan puriy „recto, correcto/andar recto‟, „andar por el camino correcto‟. -Imatataq rispitachikusaq „lo que debo hacerme respetar‟. -Policiaman rinki, Defensoriaman yaykunki, Alcaldiaman ima, reclamo ruway munanki chayqa… „Vas a la policía, vas a la Defensoría, también a la Alcaldía si quieres hacer algún reclamo…‟ -Quejakamuchkayku, parte pasakamusaq „Nos vamos a quejar‟, „voy a pasar parte‟. -Demandamuchkayki Corregidorman „Voy a ir a demandarte al Corregidor‟. -Pleitakuchkan „Se está pleiteando‟ -Leyeskunata mask‟arikuna „Todos busquemos las leyes‟ -Yanapay „ayudar‟, „ayuda‟; uyarichikuna „hacerse escuchar‟. -Se conoce con el mismo nombre. -En quechua no hay la palabra “justicia”. Sería “hacer lo correcto”; tiene que hacerse lo justo.
Significado
-Debe ser recta. -Que nadie debe ser maltratado, igualdad de derechos y obligaciones sin peleas. -Cumplir con la ley, sin abusar ni haciéndose abusar. -Solucionar un problema sin parcializarse a ningún lado. -Que se respete todos los derechos humanos, ¿no?, sin discriminar a nadie. -Ley/Hacer algo legal. -Entendimiento, vivir como hermanos. -Hacernos respetar, hacernos cumplir; solucionar, sanar, proceso, demanda. -Dar a uno lo que en derecho le corresponde.
-Corregir, arreglar. -Voy a la justicia para hacer respetar mis derechos. -Ir a denunciar [a alguien] al Corregidor. -Acudir a la Casa de Justicia a pedir justicia de acuerdo a leyes, y la autoridad hace justicia. -Se refiere a la autoridad, al corregidor, al juzgado y a otras autoridades políticas que la administran; cada una de ellas tiene su rol y función de hacer castigar. Hay diferentes justicias. -Se refiere cuando hay daños en las chacras […]; tiene que haber justicia para el que hizo el daño y para el afectado. -Que se respete a todos, cualquiera sea su situación. La ley debe ser igual para todos. -Que se arreglen bien los problemas, sin parcializarse. -Es hacer caso (ir adonde un dirigente, un Corregidor o la policía, para que nos ayuden). -Allin ruwana, sumaq ruwana, kusa ruwana „Hacer bien, hacer muy bien‟, hacer bien‟. Significa no cometer errores, hacer las cosas de manera correcta.
Fuente: Elaboración propia con base en datos proporcionados por el Proyecto “Cultura Política Quechua”.
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Cuadro 4
Conceptualización de Discriminación
Varones Mujeres
-Juk laduman runata churan „pone a la gente a un lado‟ /Juk laduman churanchik chay runa masinchikta „ponemos a nuestros congéneres a un lado‟ (I) -T‟aqay „separar‟ -Separanakunchik „nos separamos de manera recíproca‟ (I), mana allintachu apanakunchik „no nos llevamos bien‟ (I). -Tanqarpariy „empujar de golpe haciendo a un lado‟ -Qhilla runa „hombre flojo‟ -Es humillar. -Es hacer llorar al hombre y a la mujer. -Sería pues chiqnikuy „odiar‟/Chiqninakuy „odiarse de manera recíproca‟ -Mana valechinakuy, menospreciay runata „No hacerse valer uno al otro, menospreciar a la gente‟. -Qhawanaku „miramiento‟ -Encontrarse de pena…, entonces, “no puede haber luz para ustedes”. Entonces, he ido por agua, no nos dan ni agua; ¿de dónde vamos a tomar agua? No nos dan ni agua, somos discriminados y odiados. Son “odiados” siempre. -Qhisachiy „relegar‟, „tener poco aprecio por alguien‟. -Munasqanmanjina mana junt‟akunchu „No se cumple de acuerdo con su voluntad‟
-Chiqninakuy, ñuqanchikpura chiqninakunchik „Odiarse de manera recíproca, nosotros mismos nos odiamos‟ (I). -Chiqniwanchik „nos odian‟, chiqnikuwan „me odia‟/Chiqnikuy „odiar‟ -Mana valechiwanchikchu „No nos valoran‟. -Karunchasqas „alejados‟. -Mana en cuenta churawanchikchu, bajuman churawanchik „No nos toman en cuenta, nos colocan por debajo‟. -Phiñanakuy „enojarse de manera mutua, recíproca‟ -Qhawanaku „miramiento‟/Mal qhawanakuchkanchik „nos estamos mironeando o criticando de mala manera‟ -No hay discriminación [al interior de nuestra propia organización], solo hay qhawanakitus „pequeños miramientos‟. -K‟uchunchay „arrinconar‟ -Chhuqunaku „mironearse‟, „vengarse‟.
Fuente: Elaboración propia con base en datos proporcionados por el Proyecto “Cultura Política Quechua”.
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Cuadro 5
Conceptualización de Violencia Física y Verbal contra la Mujer
Hombres Mujeres
Violencia física: -Jayt‟ay „patear‟, lak‟ay „golpear‟ -Warmi ch‟allpas „golpeadores o asesinos violentos de mujeres‟, qhari ch‟allpas „golpeadoras o asesinas violentas de los hombres‟ -Ch‟allpanakuna „pelearse furiosamente‟ -Maqanaku/maqanakus/maqanakuna „pelea‟/‟peleas‟/‟peleas‟ -Abusivo, abusiva -Turiaykuy, sumaq jap‟iytawan warmita a la fuerza abusanchik „Molestarle, abusar a la mujer agarrándola fuertemente‟. Violencia verbal: -Ch‟aqwaykunas „alborotos, bullas‟ -Ancha millay kanki „Eres muy asqueroso‟.
Violencia física: -Violencia física en quechua podemos decir: “Jaqay malta portakuchkan, mana allintachu purichkan” „Aquél está portándose mal, no está andando por buen camino‟, „está traicionando a su pareja‟. -Maqanaku „pelea‟, qhapariykuy „gritarle a alguien con alevosía‟ -Ancha maqan warmita, ancha sufrichin „Le pega mucho a la mujer, la hace sufrir mucho‟. -Warmi ch‟allpa „golpeador o asesino de mujeres‟/ -Wañuyta rikuchichkanman „le estaría mostrando la muerte‟, wañuyta ñawpaykuchichkanman „le estaría adelantando la muerte‟, wañu wañuyta jap‟ichichkanman „le estaría haciendo alcanzar con la muerte‟. Violencia verbal: -Chhika millay parlachkanki „Estás hablando un asco‟; chay chhika millay runa kasqa parlayninpi „es así de asqueroso en su forma de hablar‟ -Rimanakuy „reñirse mutuamente‟/qhaparichkan „está gritando‟, rimachkan „está regañando‟. -Puede ser mancharikuna „asustarse‟. (Puede surgir como efecto de la violencia física y/o verbal.)
Fuente: Elaboración propia con base en datos proporcionados por el Proyecto “Cultura Política Quechua”.
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Cuadro 6
Conceptualización de Autoridad
Hombres Mujeres
-Kamachiy „ordenar‟, „mandar‟/Kamachiq runa „autoridad‟, „persona que manda‟
-Kamachidor „que manda‟, k‟anka „extranjero‟, atiyniyuq runa „hombre con poder‟, jatun autoridad [Prefecto] „autoridad grande‟ -Yachachiq „maestro‟, „el que enseña‟ -Jatun runa yachayniyuq „gran hombre con sabiduría‟ -Tata (tal vez con mucho cariño, para algunos es igual a “padre, pero no es palabra correcta) […]. “Autoridad” debe ser lo mismo, “autoridad”. -Jilakus o solamente autoridad -Jilakata (en aymara). Hay otro más popular. -Jatun wiraqucha „gran señor‟/ Wiraqucha, k‟alitun yanapananpaq „señor, para que ayude a todos‟.
-Kamachiq „el que manda‟/Jatun kamachiq „autoridad grande‟, kamachiq runa „el que manda‟, „autoridad‟ -Jatun tata „Gran padre‟/ Jatun kamachiq „Gran autoridad‟ -Llamk‟aq runa, yachayniyuq „Hombre trabajador, con sabiduría‟ -Señor Alcalde, decirle que tenemos recursos y que trabaje bien.
Significado
-Significa ser líder. -Es una persona nombrada por la comunidad para que asigne tareas que hay en la comunidad. Todos tenemos una autoridad, nosotros también realizamos esos trabajos comunales. -Es responsabilidad con el pueblo, servir, satisfacer sus necesidades de las OTBs, las Juntas Vecinales; en síntesis, atender todas sus demandas. -Significa una persona de respeto, de conducta intachable, coraje, lleno de energía, que quiere que todo salga bien. Jatun runa yachayniyuk. -Imponer las atribuciones de la ley, hacer cumplir Policía: establecer el orden. -Servidor público. Hacer cumplir y servir. -Es la cabeza de la población y tiene que velar por toda la población.
-Una persona con más conocimiento y nos dirige hacia lo que debemos hacer. -Es aquella que hace respetar a la gente o la que tiene que hacer respetar a la gente para que encamine bien a la gente. Antes decían Jatun tata „gran padre‟. -Hacer cumplir derechos. -Es el primer jefe, la primera persona, el primer trabajador. -Cumplir con los mandatos, si [esa autoridad] no tiene esa intención, se debe ir nomás. -Salir adelante.
Fuente: Elaboración propia con base en datos proporcionados por el Proyecto “Cultura Política Quechua”.
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Cuadro 7
Conceptualización de Institución Pública
Hombres Mujeres
-Tukuypaq wasin „La casa de todos‟ -Allin chiqanman churay wasi (la institución policial) -Yanapay Wasi /Yanapana Wasi „Casa de Ayuda‟ -Yanapan „Ayuda‟ -Jatun kamachiq „Gran autoridad‟ -Jatun Wasi „Casa Grande‟, para el Municipio. Jatun Wasiman „A la Casa Grande‟; gobierno, Jatun Tataman „Al Gran Padre‟, diríamos a nivel nacional. -Debe ser Casa de Reuniones, Casa Pública. -Samay Wasi, „Casa de Descanso‟, ¿no? -Puede ser una Casa donde se Piensa, Casa de la Ciudad, Casa de Reuniones siempre sería. También puede ser Casa para Reclamarse [por participación popular]. -Casa de Enseñanza… Otro también: Casa para Reclamar.
-Allin Jatun… „Una gran…‟ -Llamk‟aqkuna gobiernowan „Los que trabajan con el gobierno‟. -Kamachiq Wasi „Casa de leyes, de mandatos‟ -Jatun Wasi „Casa Grande‟/Jatun Wasinchik, Municipiunchikpi Jatun Tantakuy Wasi „Nuestra Casa Grande‟, „Casa Grande de Reuniones en nuestro Municipio‟. -Tantakuna Wasi „Casa de Reuniones‟ -Juk wasi maypichus intiru runa tantakun, quijakamun, mañakamun „Una casa donde toda la gente se reúne, se queja, va a pedir o solicitar algo‟.
Fuente: Elaboración propia con base en datos proporcionados por el Proyecto “Cultura Política Quechua”.
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Cuadro 8
Conceptualización de Participación Política
Hombres Mujeres
-Yachachinakuna ñuqanchik pura „Enseñarnos mutuamente entre nosotros mismos‟. -Parlarikuna „Dialoguemos‟ -Política[pi] purip „el que camina en política‟, „político‟. -Sumaq mask‟ay „Buscar el bien‟, las instituciones quieren mejorar, buscan mejorar… -Campumanta participananku kasqa participanankupaq „Dicen que los del campo tiene que participar para que participen‟. -Chhapukuna „participemos de manera a sumergirnos hasta quedar totalmente empapados‟, „sopémonos‟, „entrometámonos‟ -Tantanakuyta ruwanapaq „Para hacer una reunión‟. -Tukuyninchik wakichikuna „Preparémonos o alistémonos todos‟ -Tukuy yachasunman, tukuy yachananchik tiyan „Todos podríamos saber, todos tenemos que aprender‟. -Qutuchakuy „reunirse‟, „agruparse‟; qutuchakuna „reunirse‟, „nos reuniremos‟
-Tantakuy „juntarse‟, „reunirse‟ /Será pues tantakuy participanapaq „juntarse para participar‟. -Tantanakuna yachayniyuqpura „Juntarse entre quienes saben‟. -Yachachiq jukkuna jukkunaman „Enseñar unos a los otros‟. -Jukwan jukwan parlariy „Hablar con uno y con otro‟. -Qayllaykuna „aproximarse‟ -Chay qutuchakuyman rina parlarinapaq „Ir a esa reunión o agrupación para dialogar‟. -Tukuynin tantakamunchik „Nos juntamos todos‟. -Participana „participemos‟; rina „vayamos‟, tantakakuna „reunámonos‟. -Participayku intirun autoridades aqllaypi „Todas las autoridades participamos en la elección‟. -Khuchkachakuy „participar compartiendo partes proporcionales‟ es en quechua, tantanakus es reunión, también puede ser qutuchakuna „agruparse‟. -Yuyay, atiy, ruway „pensar, poder, hacer‟. -No sabemos qué se dice en quechua, pero nosotros manejamos solo como “participación”; decimos: “Nuestra participación tenemos todos”.
Fuente: Elaboración propia con base en datos proporcionados por el Proyecto “Cultura Política Quechua”.
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